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COMISIÓN DIOCESANAPARA LA PASTORAL LITÚRGICA

Moniciones y Oración Universal para las celebraciones dominicales y festivas

LA ASCENSIÓN DEL SEÑOR2 de junio

Monición de entradaBuenos días (tardes, noches) queridos hermanos en Cristo, la solemnidad de la Ascensión del Señor que celebramos este domingo, nos hace pensar en la totalidad de la misión salvadora del Señor, pues con su Encarnación se ha inaugurado nuestro camino al cielo, recordando que sólo Cristo ha podido abrirnos a la vida y a la felicidad de Dios. Él que es cabeza de la Iglesia, se ha adelantado para esperarnos en la morada eterna. Cantemos juntos para iniciar nuestra celebración.

Monición Primera Lectura Hch 1, 1-11Contemplar a Jesús subir al cielo, fue una de las experiencias que marcó la vida de sus discípulos, pues les fue prometido el Espíritu Santo para ser auténticos testigos del Resucitado.

Monición Segunda Lectura Heb 9, 24-28; 10, 19-23 (Lecc I p. 940)Con un lenguaje litúrgico, el siguiente texto bíblico nos muestra a Jesucristo como un gran sacerdote, que ha entrado en el Santuario del cielo para desde ahí santificar a quienes se acercan a Él.

Monición Evangelio Lc 24, 46-53Los discípulos son depositarios de un mensaje de salvación, que ha tenido como punto de partida a Jerusalén, sin embargo, la fuerza del Paráclito les hará llevar ese mensaje hasta los últimos confines. Aclamemos con alegría a nuestro Señor.

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ORACIÓN UNIVERSAL2 de junio

Sacerdote: Unidos a Jesucristo que está a la derecha del Padre para interceder por los hombres que Él ha redimido, oremos con confianza por nosotros y por toda la humanidad. Digamos con fe:Jesús glorificado, intercede por nosotros.

1. Para que la presencia de Jesucristo glorioso, presente en su Iglesia y en cada uno de sus miembros, se transparente en la vida de quienes tienen la tarea de apacentar al pueblo santo de Dios. Oremos.

2. Para que quienes tienen la misión de gobernar en la sociedad civil lo hagan sin falsear la verdad, demostrando que están para servir a la comunidad y buscar el bienestar de todos. Oremos.

3. Para que las familias cristianas, que en fiestas pascuales viven con alegría la Resurrección del Señor, demuestren al mundo su condición de seguidores del Evangelio y constructores del Reino de Dios en la tierra. Oremos.

4. Para que, quienes huyen de su patria a causa del hambre o de la guerra, experimenten la compasión de Dios, y en los cristianos católicos encuentren una ayuda fraterna y solidaria. Oremos.

5. Para que la celebración de la Eucaristía haga presente en la vida de quienes estamos celebrando a Cristo Resucitado, no solamente una experiencia espiritual profunda, sino la convicción de trabajar incansablemente por nuestra santificación desde las cosas ordinarias que realizamos. Oremos.

Sacerdote: Señor Jesucristo, al celebrar hoy la solemnidad de tu Ascensión al cielo, te pedimos que escuches nuestras oraciones y nos des el Espíritu Santo prometido, para que Él vivifique con sus dones nuestra fe y haga eficaz la tarea evangelizadora de tu Iglesia. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos..




DOMINGO DE PENTECOSTÉS9 de junio

MISA VESPERTINA DE LA VIGILIA

NOTA LITÚRGICO-PASTORAL: Pentecostés no es una fiesta de “arranque” o “principio”, sino de plenitud o conclusión de la Cincuentena Pascual. Por eso no conviene tomar elementos de la Vigilia Pascual sino seguir las indicaciones que oficialmente se nos sugieren en la Ordenación General de la Liturgia de las Horas (n. 71). Se sugieren dos formas de celebrarla:

a) Primera Forma, siguiendo lo que nos indica el MR Buena Prensa pp. 403-404 (BAC 400-401)

b) Segunda Forma: La celebración en la noche de un modo más extenso. La celebración se inicia como de costumbre y se aconseja tener el Rito de la bendición y aspersión del agua bendita (MR apéndice III p 1341). De lo contrario se hace como de ordinario con el Señor ten piedad.

En este subsidio proponemos la segunda forma: para celebración nocturna prolongada.

Monición de entradaPentecostés es uno de los domingos más importantes del año, es el más importante después del de la Resurrección, conclusión de nuestro gran domingo anual que es la Cincuentena Pascua y cierra el ciclo Resurrección-Ascensión-Venida del Espíritu Santo. Es fiesta de la Iglesia, por eso como una sola familia, iniciemos cantando.

Monición General para la Liturgia de la Palabra: MR p. 406 (la dice el celebrante)

Monición Primera Lectura Gen 11, 1-9La pretensión del hombre por llegar a ser como Dios, ocasiona la confusión de lenguas, que luego solo el Espíritu será capaz de unificar en la fe.

Salmo a la primera lectura: Sal 32 (Lecc I, p. 629)R. Dichoso el pueblo escogido por Dios. Aleluya.




Monición Segunda Lectura Ex 19, 3-8. 16-20La maravillosa teofanía de la que es testigo el pueblo de Israel, nos demuestra el grado de predilección que el Señor tiene con su pueblo.

Salmo a la segunda lectura: Dan 3 (Lecc I, p. 7’92)R. Bendito seas, Señor, para siempre. Aleluya.

Monición Tercera Lectura Ez 37, 1-14El profeta, sirve como instrumento a la voz de Dios, y con esa voz es capaz de devolver la vida a lo que está muerto.

Salmo a la tercera lectura: Sal 106 (Lecc III, p. 914)R. Demos gracias al Señor, porque su misericordia es eterna. Aleluya.

Monición Cuarta Lectura Joel 3, 1-5El don de profecía, es una clara señal de la presencia del Señor en medio de su pueblo. Dejemos que el Espíritu nos lleve a anunciar la palabra de Dios.

Salmo a la cuarta lectura: Sal 103 (Lecc I, p. 968)R. Envía, Señor, tu Espíritu, a renovar la tierra. Aleluya.

Monición a la Epístola Rom 8, 22-27La acción del Espíritu Santo, es fuerte y poderosa en la vida de todo cristiano, pues le hace vivir en la esperanza cierta y al mismo tiempo intercediendo por todos.

Monición Evangelio Jn 7, 37-39 Jesús lanza una invitación para saciarnos de su Espíritu, que, al compararlo con una fuente de agua viva, hace alusión a una vida plena y satisfactoria de la mano de Dios. Aclamemos alegremente con el Aleluya.




ORACIÓN UNIVERSALMISA DE LA VIGILIA DE PENTECOSTÉS

Sacerdote: Oremos, hermanos, e invoquemos a Cristo, que, sentado a la diestra de Dios, ha recibido del Padre el Espíritu Santo prometido, y pidámosle que lo derrame sobre la Iglesia y sobre todo el mundo. Digamos con fe: Cristo Jesús, envíanos al Espíritu Santo

1. Oremos a Cristo, el buen pastor de la Iglesia, que nos mereció la efusión del Espíritu Santo, y pidámosle que sean iluminados por este mismo Espíritu el Papa Francisco, nuestro obispo Gustavo y todos los demás pastores de la Iglesia, a fin de que conduzcan su rebaño por las sendas de la salvación. Oremos.

2. Pidamos también al Señor resucitado que envió su Espíritu en forma de lenguas para destruir la división de Babel, que congregue en la unidad y conceda la paz a todos los pueblos y naciones del mundo. Oremos.

3. Supliquemos al vencedor de la muerte que envíe al Espíritu Consolador a los que sufren, para que encuentren fuerza y consuelo en la contemplación del misterio pascual, y les dé la firme esperanza de que están llamados a la resurrección y a la felicidad de su reino. Oremos.

4. Pidamos al Hijo de Dios, que desde el Padre nos ha enviado el Espíritu Santo, que este mismo Espíritu nos recuerde constantemente sus palabras y nos dé la fuerza que necesitamos para dar testimonio de él hasta los confines del mundo. Oremos.

5. Terminemos nuestra oración pidiendo al mismo Espíritu que resucitó a Cristo de entre los muertos, que permanezca en nosotros y nos disponga así para ser piedras vivas del templo eterno de Dios. Oremos.

Sacerdote: Escucha, Señor, las oraciones de tu pueblo y haz que quienes nos disponemos a clausurar, con la solemnidad de hoy las fiestas




pascuales, renovados y fortalecidos por tu Espíritu, vivamos continuamente la novedad pascual y lleguemos también a las fiestas de la Pascua eterna. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.




DOMINGO DE PENTECOSTÉS9 de junio

MISA DEL DÍA

Monición de entradaPentecostés es uno de los domingos más importantes del año, es el más importante después del de la Resurrección, conclusión de nuestro gran domingo anual que es la Cincuentena Pascua y cierra el ciclo Resurrección-Ascensión-Venida del Espíritu Santo. Es fiesta de la Iglesia, por eso como una sola familia, iniciemos cantando.

Monición Primera Lectura Hch 2, 1-11El impactante relato del momento en que el Espíritu desciende sobre la primera comunidad cristiana y los empuja a predicar la buena nueva de Jesús, es una invitación a no temer hablar de las maravillas de Dios.

Monición Segunda Lectura Rom 8, 8-17De una forma muy sugerente, el Apóstol nos da la clave para identificar si vivimos o no, según el Espíritu de Dios, que es capaz de transformar por completo nuestra vida.

Monición para la SecuenciaLa hermosa tradición de nuestra Iglesia, nos ha dejado en este antiguo himno, un testimonio de nuestra fe en la acción del Espíritu Santo. Participemos de pie, alternando con el lector.

Monición Evangelio Jn 14, 15-17. 23b-26Dos elementos sobresalen en las palabras de Jesús, la promesa que hace desde el amor que nos tiene y su natural consecuencia que es corresponder amando su palabra y su voluntad. Aclamemos alegres al Señor con el Aleluya.




ORACIÓN UNIVERSALMISA DEL DÍA

9 de junio

Sacerdote: Puesto que hemos recibido el Espíritu que nos hace decir "Padre", dirijámonos, hermanos, con sentimientos filiales al Señor, que nunca desoye las súplicas de quienes le invocan. A cada petición digamos con fe: Padre, en el nombre de Jesús, danos Espíritu Santo.

1. Para que Jesús, el Señor, que, exaltado a la diestra de Dios, ha recibido el Espíritu Santo prometido, lo envíe abundantemente sobre la Iglesia y que ésta pueda ser buena transmisora del Evangelio. Oremos.

2. Para que la luz del Espíritu Santo aleje las tinieblas de los hombres, los lleve al conocimiento de la verdad, convierta el odio en amor, los sufrimientos en alegría y las guerras en paz. Oremos.

3. Para que la fuerza del Espíritu Santo guíe por los caminos de la conversión a los que son víctimas de la debilidad humana, de los engaños de su propio espíritu o de los errores del mundo oremos.

4. Para que el Espíritu de sabiduría nos haga penetrar en los secretos de Dios, nos recuerde continuamente lo que Cristo dijo y fortalezca nuestra fe. Oremos.

5. Para que todos los que nos reunido en este lugar santo, conmemorando la venida del Espíritu Santo, nos comprometamos más a fondo en la construcción de una comunidad que llena de los dones de Dios, luche por ser una Iglesia en salida. Oremos.

Sacerdote: Que tu amor de Padre, Señor, Dios todopoderoso, escuche complacido las súplicas de tu pueblo, que, lleno de gozo, ha recibido ya, como primer don tuyo, el Espíritu Santo prometido, que contigo y tu Hijo vive y reina por los siglos de los siglos.




LA SANTÍSIMA TRINIDAD16 de junio

Monición de entradaSean todos bienvenidos a esta celebración eucarística. Uno de los misterios centrales de nuestra es el dogma de la Santísima Trinidad, un Dios Único e Indivisible en su divinidad y Trino en las personas. Dejemos que el amor de este Dios misericordioso nos envuelva para que por su acción salvífica experimentemos la gracia de llegar al cielo. Cantemos juntos para iniciar.

Monición Primera Lectura Prov 8, 22-31En el siguiente texto bíblico nos encontramos con la personificación de la sabiduría divina, figura de Cristo. Él es el Verbo encarnado en el que Dios verdaderamente se complace

Monición Segunda Lectura Rom 5, 1-5 Por Cristo hemos sido justificados y tenemos ya la paz de Dios, su amor está en nuestros corazones por el Espíritu Santo que se nos ha dado y ha hecho que sintamos en nosotros la cercanía del amor de Dios Padre.

Monición Evangelio Jn 16, 12-15La misión del Espíritu de la verdad no es la de proponernos una nueva o diferente revelación. Su tarea es la de conducirnos a una más profunda comprensión del designio de salvación revelado en Cristo.




ORACIÓN UNIVERSAL16 DE JUNIO

Sacerdote: Oremos, hermanos, a Dios, Padre entrañable, que por Jesucristo nos ha revelado su amor y que escucha complacido los gemidos inefables con que el Espíritu intercede por nosotros. Dios Trinidad, escúchanos.

1. Para que Dios Padre, Creador todopoderoso del universo, lleve el mundo a su plenitud y haga nacer aquel cielo nuevo y aquella tierra nueva que nos ha prometido, en la que la humanidad entera encontrará la felicidad y podrá contemplar su rostro glorioso. Oremos.

2. Para que el Hijo Unigénito de Dios, que se hizo hombre y ha desposado a la Iglesia, infunda en ella un amor semejante al suyo, como corresponde a su condición y lo comunique a quienes sufren en su alma y en su cuerpo. Oremos.

3. Para que el Espíritu del Señor, que enriquece al mundo con sus dones, sea padre para los pobres, consuelo para los tristes, salud para los enfermos y fuerza para los decaídos. Oremos.

4. Para que nuestra comunidad parroquial con todos sus centros pastorales se esfuerce en vivir la armonía que brota de la comunión con el único Dios verdadero y que pueda contagiarlo a quienes viven con la vida fragmentada y lastimada por el pecado. Oremos.

5. Para que los que conocemos el misterio de la vida íntima de Dios, uno en tres personas, tengamos valentía para anunciarlo a quienes lo desconocen, a fin de que también ellos encuentren gozo y descanso en Dios, que se nos ha revelado como Padre, Hijo y Espíritu Santo. Oremos.

Sacerdote: Dios nuestro, Padre Bondadoso, tú que, por medio de Jesucristo, nos has justificado y en tu Espíritu Santo nos has santificado, escucha la oración de tu pueblo y haz que alcancemos el conocimiento de la verdad plena y te adoremos a ti, que eres amor, verdad y vida. Por Jesucristo nuestro Señor.




EL CUERPO Y LA SANGRE DE CRISTO20 de junio

Monición de entradaSean todos bienvenidos, celebramos hoy la solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo, que nos hace centrar la atención en la Eucaristía como sacramento en el que Jesús ha pensado dársenos como alimento para el camino de la vida, de esta manera, la eucaristía es la maravillosa celebración de amistad y de gracia en donde Jesucristo está presente, está con nosotros, en nuestra asamblea, en la Palabra que proclamamos, en el Pan y en el Vino consagrados, nosotros estamos aquí no sólo para recordarlo sino para vivirlo y hacerlo presente cada día juntos como Iglesia, como comunidad. Que sirva igualmente para nuestra preparación hacia el Congreso Eucarístico Nacional que celebraremos en septiembre próximo. Iniciemos cantando.

Monición Primera Lectura Gen 14, 18-20La figura de Melquisedec, evoca la figura de Jesucristo como sumo sacerdote, y en las ofrendas evocamos la Eucaristía.

Monición Segunda Lectura 1 Cor 11, 23-26 La fracción del Pan en las primeras comunidades cristianas, estaba llena de esperanza, pues participando de ella se anuncia la parusía del Señor.

Monición secuenciaLa Iglesia tiene un rico patrimonio poético, la secuencia de este día, es una muestra de ello. Pongámonos de pie para leer alternadamente este himno a la Eucaristía.

Monición Evangelio Lc 9, 11-17“Denles ustedes de comer”, son palabras que siguen resonando en la Iglesia y es una llamada del Señor a la fraternidad y a la solidaridad. La multiplicación de los panes, nos recuerda que, así como la Eucaristía no se acaba, tampoco se debe terminar nuestra ayuda a los demás. Aclamemos con alegría cantando el Aleluya.





Sacerdote: Antes de disponer la mesa del sacrificio y del banquete eucarístico, elevemos nuestras súplicas a Dios Padre, con la plena confianza de ser escuchados y unidos en un mismo sentir digamos:Por Jesús Eucaristía, escúchanos.

1. Para que los obispos y presbíteros, cuando presidan la Celebración Eucarística, vivan tan plenamente identificados con el Señor, que el pueblo vea en ellos la imagen viva de Cristo, de manera que juntos ovejas y pastores caminen hacia la patria eterna. Oremos.

2. Para que las autoridades civiles procuren el bienestar de los ciudadanos y garanticen la libertad religiosa, en vistas a ser una sociedad donde los valores éticos sean vividos y respetados por todos. Oremos.

3. Para que pronto llegue el día en que todos los cristianos celebremos la Eucaristía en la unidad de una sola Iglesia, y todos los hombres ofrezcan el único sacrificio que nos salva. Oremos.

4. Para que nuestra parroquia, se vea fortalecida por la celebración digna de la Eucaristía y que cada miembro de nuestra comunidad la viva de forma profunda para renovarse interiormente. Oremos.

5. Para que el Señor aumente nuestra fe y acreciente nuestro amor, a fin de que adoremos, en espíritu y en verdad a Cristo realmente presente en el sacramento de la Eucaristía. Oremos.

Sacerdote: Escucha Padre la oración de tu familia, reunida para celebrar el sacramento pascual del Cuerpo y la Sangre de tu Hijo y derrama sobre ella la abundancia de tu Espíritu, para vivir en continua alabanza y acción de gracias. Por Jesucristo nuestro Señor.




XII DOMINGO ORDINARIO23 de junio

NOTA LITÚRGICO-PASTORAL: Las misas de la tarde del domingo 23, son ya de las Primeras Vísperas de la Solemnidad de la Natividad de San Juan Bautista.

Monición de entradaBienvenidos a nuestra Parroquia de N., (Capilla de N.,) para participar de la Eucaristía dominical. Abramos nuestro corazón para que, escuchando la palabra de Dios, nos sintamos fortalecidos para seguir con los retos que nos presenta la vida. No olvidemos que el Señor nos llama a abrazar su causa. Cantemos juntos para recibir la procesión de entrada.

Monición Primera Lectura Zac 12, 10-11El Señor, llama constantemente a su pueblo a la purificación interior para llevar una vida de santidad en su presencia, este texto nos recuerda la necesidad de renovarse en la fidelidad y el retorno a una fe auténtica.

Monición Segunda Lectura Gal 3, 26-29Dos elementos sobresalen en la siguiente perícopa: la dignidad bautismal y el revestirse de Cristo, ambos nos indican la fortaleza que proviene de la fe y que nos integra al nuevo pueblo de Dios.

Monición Evangelio Lc 9, 18-24Ante la pregunta que lanza Jesús a sus discípulos, la respuesta de Pedro, parece dar un salto de lo popular e inmediato a una respuesta de fe madura. Por eso, para el discípulo, no basta haber conocido al Señor, hay que recorrer el camino con Él. Aclamemos de pie al Señor.





Sacerdote: Padre nuestro, Tú conoces nuestras necesidades, pero quieres que te pidamos en el nombre de tu Hijo que sufrió, murió y resucitó por nuestra salvación. Por eso, con confianza te pedimos que atiendas las plegarias de tu pueblo. Decimos con fe:Que la Cruz de Cristo, sea nuestra fortaleza

1. Por nuestro Papa, los Obispos, Sacerdotes y Diáconos, para que sean ejemplo de Cristo doliente, y con su testimonio de entrega generosa contribuyan a mostrar que la Iglesia es servidora de todos. Oremos.

2. Por los gobernantes, especialmente en nuestra Patria México, para que no fomenten las divisiones de clases y partidos, antes bien, construyan la unidad y fraternidad entre los pueblos. Oremos.

3. Por todos los que trabajan en algún servicio o apostolado en nuestra comunidad parroquial, para que busquen juntos los caminos de la unidad que el Señor desea para la Iglesia, y de esta manera demuestren que están revestidos de Cristo. Oremos.

4. Por los adolescentes que se preparan para su Confirmación, para que valoren el bautismo que han recibido y se esfuercen con sinceridad para responder con valentía a Cristo que los llama a ser soldados suyos. Oremos.

5. Por todos nosotros, reunidos en torno al altar, para que permanezcamos firmes a pesar de los ataques y luchas contra el pecado, y así fortalecidos experimentemos la fuerza que proviene de la cruz del Señor. Oremos.

Sacerdote: Padre, recibe las plegarias de tu comunidad; bendice sus esfuerzos y concédele superar las fuerzas que procuran la división y el deterioro de la fraternidad. Por Jesucristo nuestro Señor.




NATIVIDAD DE SAN JUAN BAUTISTA24 de Junio

(Misa Vespertina de la vigilia)Monición de EntradaJuan, llamado el Bautista, hijo de Zacarías e Isabel, es el precursor de Jesucristo, y en esta misma misión pone su vida entera, llena de austeridad, de penitencia y de celo por las almas. Hoy la Iglesia, nos invita a honrarlo por el papel de primera importancia que realizó para la llegada del Mesías.

Monición para todas las lecturasLos caminos de Dios, siempre son inescrutables para el ser humano, por eso, desde siempre, el Señor, había elegido a Juan para la enorme tarea que vino a realizar en este mundo: anunciar la inminente llegada del Ungido de Dios. Dejemos ahora que nuestro corazón y nuestro espíritu se nutran con la Palabra que será proclamada para todos nosotros. Prestemos reverente atención.

(Misa del Día)Monición de EntradaJuan, llamado el Bautista, hijo de Zacarías e Isabel, es el precursor de Jesucristo, y en esta misma misión pone su vida entera, llena de austeridad, de penitencia y de celo por las almas. Hoy la Iglesia, nos invita a honrarlo por el papel de primera importancia que realizó para la llegada del Mesías. Juntos cantemos para recibir al presidente de nuestra celebración.

Monición Primera lectura Is 49, 1-6Por medio de una vibrante profecía, podemos comprender un poco más lo que significó y sigue significando la figura del Bautista, pues la elección de Dios, es para hacer de él un signo de la salvación universal que el Señor quiere.

Monición Segunda lectura Hch 13, 22-26Lo que Juan Bautista realizó como mero signo, en Jesucristo se da como realidad. Su misma predicación iba dirigida a recibir al verdadero Mesías y éste lugar, él nunca lo usurpó.

Monición Evangelio Lc 1, 57-66. 80El nacimiento de Juan, es ya clara muestra de lo que Dios le tenía deparado, en este niño se descubre la mano de Dios y por tanto la misión que ejecutó con plena libertad y fortaleza. Aclamemos alegremente cantando el Aleluya.

Oración Universal




24 de Junio (para ambas misas)

Sacerdote: Confiados plenamente en el Señor, que ha querido dejarnos en la figura de Juan Bautista, un claro ejemplo de servidor libre, desinteresado y generoso en la entrega de su vida, elevemos nuestra oración para que por su intercesión seamos atendidos. Respondamos juntos:“Por intercesión de San Juan Bautista, escúchanos Señor”.

1. Por los ministros de la Iglesia que han consagrado su vida al Señor, y por todos los pueblos que adoran al Dios verdadero, para que el ejemplo del Bautista les lleve a anunciar a Jesucristo vivo. Oremos.

2. Por los gobernantes de las naciones y especialmente de nuestro País, para que, con santo temor de Dios, trabajen por la paz y no olviden a los más perseguidos y desfavorecidos de la sociedad, realizando su servicio con un auténtico desinterés personal. Oremos.

3. Por los que son víctimas de la debilidad humana, del espíritu de odio o de envidia, por aquellos que sufren a causa de su fe o de su condición social, para que encuentren en Dios su consuelo y en nosotros unos discípulos al estilo del Bautista. Oremos.

4. Por todos los que trabajan en la Pastoral Profética: evangelizadores, catequistas, misioneros, apologistas, para que, a ejemplo del Bautista, no teman anunciar a Jesucristo y denunciar lo que se opone al Reino de Dios. Oremos.

5. Por todos nosotros reunidos en este lugar sagrado, para que no desfallezcamos en el servicio a Dios y a nuestros hermanos y contribuyamos de esta manera a que Jesucristo sea conocido, amado y seguido por muchos más. Oremos.

Sacerdote: Señor Jesucristo, no permitas que, mientras anunciamos a los demás la alegre novedad de tu Evangelio, nos acobardemos ante la cruz, representada por persecuciones, sufrimientos, agresiones o incomprensiones, sino que estemos dispuestos a dar la vida por ti. Que vives y reinas por los siglos de los siglos.




EL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS28 de junio

NOTA LITÚRGICO-PASTORAL: Las misas matutina y vespertina, serán ambas de la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús. Por tanto, no hay primeras vísperas de la Solemnidad de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo.

Monición de entradaBienvenidos hermanos a esta celebración del amor de Dios. El Señor, nos abre su corazón para confirmar su alianza con nosotros, para ser nuestro modelo de vida y para demostrarnos su misericordioso amor. Llenos de dicha en Cristo quien nos ha abierto el corazón del Padre, iniciemos nuestra celebración de acción de gracias.

Monición Primera Lectura Ez 34, 11-16La esperanza de ver de nuevo al pueblo disperso, reunido bajo la guía del Señor, hizo que Israel mantuviera su fe en Dios y asociara la figura del pastor.

Monición Segunda Lectura Rom 5, 5-11El Espíritu Santo, habita en el corazón de los creyentes y les hace vivir en la gratitud, por el inmerecido regalo del sacrificio de Cristo que sin merecerlo ha dado su vida por nosotros.

Monición Evangelio Lc 15, 3-7La siguiente parábola, es una buena expresión de la misericordia de Dios, que no desea la muerte del pecador, sino su conversión. El acercamiento de Jesús a los pecadores es un reflejo de esta actitud de Dios. Aclamemos al Señor de pie.





Sacerdote: Confiando plenamente en el Señor que nos ama inmerecidamente, supliquemos que nuestras oraciones sean atendidas con prontitud. Digamos con fe:Acoge en tu corazón, Señor, nuestra oración.

1. Abre tu corazón, Señor, a tu Iglesia, para que como esposa inmaculada permanezca fiel a ti y renueve su amor a tus mandatos. Oremos.

2. Acoge en tu corazón a nuestro país, para que no cese de dar gracias por las maravillas con las que lo bendices y para que no cese de sembrar la esperanza del Evangelio. Oremos.

3. En tu infinito amor, abraza a los que has llamado a tu servicio. Bendice a los sacerdotes, concédeles el don de la fidelidad y celo en tu servicio para que en todos resplandezca tu santidad. Oremos.

4. Que tu corazón manso y humilde sea el sustento de nuestros hermanos enfermos, el vínculo de unión en nuestros hogares, la esperanza de los que buscan empleo, la confianza de los que nos acogemos a tu providencia. Oremos.

5. Sagrado Corazón de Jesús, fortalece a nuestra comunidad parroquial, para que fiel al magisterio y atenta a tu Palabra abra las puertas a todos al amor inmenso que derramas para todos. Oremos.

Sacerdote: Señor bondadoso que conoces lo que mas necesitamos, te pedimos que dirijas tu mirada bondadosa sobre este pueblo tuyo y le concedas lo que ha solicitado con fe. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.




SANTOS PEDRO Y PABLO, APÓSTOLES29 de junio

NOTA LITÚRGICO-PASTORAL: Las misas matutina y vespertina, serán ambas de la Solemnidad de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo. Por tanto, no hay primeras vísperas del Domingo.

Monición de entradaCelebramos hoy la Solemnidad de san Pedro y san Pablo, Apóstoles, elegidos por Cristo para ser columnas de la Iglesia y heraldos del Evangelio de Dios. Dos personas ordinarias transformadas en personas extraordinarias por la gracia de Dios. Que los ejemplos de fe y santidad de estos hermanos nuestros y el testimonio de su vida entregada por Cristo y por proclamar su Palabra, nos animen a dar nuevos pasos adelante en nuestra vida cristiana de cada día.

Monición Primera Lectura Hch 12, 1-11La vida de los testigos de Cristo, refleja la de su Maestro. Por eso en la aprehensión de Pedro, descubrimos una similitud con Jesús. Se nos enseña igualmente que cuando la iglesia perseguida ora como Jesús, es asistida por su Señor.

Monición Segunda Lectura 2 Tim 4, 6-8. 17-18El ofrecimiento del Apóstol Pablo como una libación, viene a ser el signo de su entrega total a las personas a quienes ha servido. Cuando se ama, no hay medida.

Monición Evangelio Mt 16, 13-19La profesión de fe de Pedro, como portavoz de los Doce, sobre la mesianidad de Jesús y la promesa del primado que Jesús le hace, demuestra que cuando se ha asumido la misión, hay identificación con el Maestro. Cantemos alegremente el Aleluya.





Sacerdote: Invocando la intercesión de los santos Apóstoles Pedro y Pablo, maestros en la fe y columnas de la Iglesia, elevemos nuestra súplica a Dios Padre Omnipotente. A cada petición diremos: ¡Escúchanos, Padre!

1. Por la santa Iglesia de Dios, la Esposa del Cordero. Para que confiese con valentía y gozo la fe en el Señor y sea para todos los hombres faro luminoso que orienta en las tempestades de la vida. Oremos.

2. Por nuestro Papa Francisco, el sucesor del Apóstol Pedro. Para que sea sostenido y fortalecido en su misión de guiar a los discípulos de Cristo en la verdad de la fe. Oremos.

3. Por todas las naciones de la tierra. Para que los corazones de los hombres se conviertan al bien y al perdón y los pueblos desgarrados por las guerras fratricidas y por el terrorismo conozcan un tiempo de justicia y de paz. Oremos.

4. Por nuestra comunidad católica que peregrina en estas tierras, para que como los Apóstoles Pedro y Pablo, llegue a identificarse con su Señor y viva su misión con alegría. Oremos.

5. Por nosotros aquí reunidos y por nuestra familia. Para que conservemos la fe que nos enseñaron Pedro y Pablo, y la sepamos transmitir a las nuevas generaciones con fidelidad. Oremos.

Sacerdote: Padre Santo, por intercesión de los santos Pedro y Pablo, concédenos estar abiertos a tu Evangelio, para que no haya sombra, por más densa que sea, que pueda oscurecer en nosotros la luz de Cristo. Que vive y reina por los siglos de los siglos.




XIII DOMINGO ORDINARIO30 de junio

Monición de entradaBienvenidos a nuestra Eucaristía dominical, la Palabra que será proclamada, nos recordará que seguir a Cristo es una gran alegría, que nos une en un solo cuerpo y en un solo espíritu. Por eso, celebremos llenos de gozo y de esperanza dando gracias a Dios y participando activamente en esta celebración. Entonemos el canto de entrada.

Monición Primera Lectura 1 Re 19, 16. 19-21La llamada que experimenta Eliseo para continuar la misión profética de Elías, le impulsa a hacer una renuncia a sus padres y a su clan. Es consciente que esta llamada le llevará por caminos que el Señor le señalará.

Monición Segunda Lectura Gal 5, 1. 13-18 La libertad cristiana es una libertad para amar. No puede ser un pretexto para el egoísmo y la inmoralidad. Por eso el Apóstol exhorta al servicio mutuo como signo de ese amor trascendente.

Monición Evangelio Lc 9, 51-62Al decidir ir a Jerusalén, Jesús se encamina a un destino de rechazo, de sufrimiento y muerte y quien desee seguirlo debe aceptar la inseguridad que supone el camino del Maestro, hay que tener una mirada amplia y no titubear. Cantemos alegremente la aclamación.





Sacerdote: Elevemos a Cristo nuestra súplica, Él que nos ha llamado a seguirle en medio del mundo y ser testigos de su resurrección, para ir construyendo el Reino de Dios. Respondamos juntos:Señor Jesús, haznos mensajeros de tu Reino.

1. Por la Iglesia santa de Dios, para que, superando la tentación a acomodarse a este mundo pasajero, siga los pasos de su Maestro y anuncie con valentía el Evangelio. Oremos.

2. Por quienes tienen en sus manos el gobierno de nuestro País, de nuestro Estado y nuestro municipio, para que, no se dejen arrastrar por el desorden egoísta del mundo, sino más bien, busquen el progreso de la sociedad. Oremos.

3. Por todos los que sufren esclavitud, opresión, violencia y toda clase de vejaciones, para que encuentren en la Iglesia la libertad que les falta y puedan integrarse en la sociedad como auténticos discípulos de Cristo. Oremos.

4. Por los jóvenes de nuestra comunidad parroquial, muchachos y muchachas, para que descubran que la libertad y la felicidad se encuentran en la respuesta que den a Jesucristo, según la vocación a la que han sido llamados. Oremos.

5. Por todos los que estamos aquí reunidos, para escuchemos la llamada de Dios, y encontremos los medios adecuados para discernirla y seguirla con decisión y firmeza de ánimo. Oremos.

Sacerdote: Escucha, Señor, a tu pueblo, pues en ti ha puesto su esperanza y confía plenamente que sus peticiones serán atendidas. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.


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