eijo garay la luz divina en la gnoseologia luliana

8/6/2019 Eijo Garay La Luz Divina en La Gnoseologia Luliana

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LA LUZ DIVINA EN LA GNOSEOLOGIA LULIANA

Se objetani: --Pues lno exige Lulio la luz de la fe y de la graciade Dios para sus demostraciones racionales de los dogmas? tY no hadicho, reproduciendo literalmente el simil de las dos luces, de Abena-rabi, que la luz divina desciende a iluminar la mente humana para queentienda los misterios?

Responders a 10 segundo, porque 10 primero ha de ocuparnos mastiempo.

Repetidas veces ha alegado el Dr. Asin, como prueba de que Lulioes un imitador de Abenarabi, 0 de algun discipulo de este', que Lulioreproduce literalmente el simil de la luz recien apagada, que se enciende,si el humo de su pabilo llega a contacto con una luz encendid'a. Masdetenidamente me entretendre en ello en otro lugar', y quedara paten-te que ni hay reproduccion literal, ni siquiera dicen 1 0 mismo en elfondo ambos escritores; de modo que todo se reduce a coincidir en uti-lizar un rnismo fenomeno fisico para explicar cosas que, si no son to-talmente diversas, tampoco pasan de ser parecidas. Baste aqui dejarsentado que Abenarabi explica como la luz divina desciende a la mentehumana; mientras Lulio, sin ocuparse para nada de la luz divina, dicecomo la razon humana desciende y asciende. As! -dice Lulio- elentendimiento desciende a entender las dernostraciones que las criatu-ras dan de S I mismas, para que el entendirniento pueda entender aDios y sus obras; es decir , desciende, contra su natural apetito, parapoder ascender, que es 10 propio suyos'', Por 10 tanto, el texto, comotodo el contexto, se refiere a la capacidad de la mente humana paraentender a Dios, sin que haya ni leve alusi6n a la luz divina. Y aS1,esta objeci6n carece en absoluto de valor.

No as! la primera. En efecto, Lulio repite hasta la saciedad que


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154 FljO GARAYtianos sin la luz de la gracia, sin la luz de la fe. En esto si que exige,no ya tan solo admire, divina iluminacion. Y alguna vez 1 0 expresacon bellisimas frases, como en el siguiente pasaje, que no me resistoa copiar, y cuya profunda doctrina, tan poeticarnente expuesta , noatribuyo a la vida mistica, sino a la natural filosofia; es decir, a lasIuces con que la revelaei6n ha enriquecido los naturales conocimientoshumanos, para que al pasar el punto traseendente, mediante el cual lahumana inteligencia se eleva de las intelectualidades creadas a las in-creadas, partiendo de las criaturas, trascienda sohre ellas para conoceral Creador, Dic.e asi: Ilumino el amor el nublado que se interponeentre el amigo y e 1 Amado; y 1 0 puso tan luminoso y resplandecientecomo la luna en la noche, la estrella en el alba, el sol en el dia, y elentendimiento en la voluntad; y por aquel nublado tan resplandecientese hablan el amigo y el Amadoa".

Pero, adviertase bien, esa divina iluminacion 1.0) no intervieneen la funci6n cognoscitiva humana mas que cuando se trata de la inte-lecci6n de los divinos misterios; jarnas !a exige Lulio para la de lasverdades de orden puramente natural y su cientifica demostraci6n;2.) no cambia substancialmente la funcion psicol6gica humana, quese desenvue1ve segun su propia naturaleza, de suerte que el entendi-miento adquiere y propone esas demostraciones de los misterios segunsu natural entender, con el que entiende los entes inteligibles, pues nopuede entender contra su naturaleza de entender, como la potenciavisiva no puede ver contra su natura1eza de ver5; y 3.0) manifiesta-mente no se trata de ciencia ni de sabiduria infusas, puesto que nosolo los dedicados a1 aposto1ado de esas demostraciones han de sermuy entendidos en Teologia y Filosofias", sino tamhien el misrnoLulio confiesa que con largo tiempo y estudio ha trabajado en unode los Iibros de tales demostraciones"; y ademas, por 1a alteza y difi-cultad de los misterios, exige en quien se aplique a entenderIos quecon todas las fuerzas del entendimiento y del alma se de a ellox", yque sea ilustre por la nobleza del entendimiento, conocedor, por 1afilosofia, de los secretes de Ia naturaleza y muy docto en ciencias9


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diarlo; aunque desde Iuego ya se ve que hay que descartar toda ideade iluminisrno ixraqui.Procede primero reeoger y valorar las diversas frases que emplea

Lulio.Hay que dejar a un Iado ciertas expresiones que por vagas y ge-

nerales no pueden ofrecernos elementos de juicio; por ejemplo: Lafe es iluminacion del entendimientos"; Los santos hombres religiososy seglares... que por la sagrada doctrina son ilurninados... 11 ; A lavista sensual y a la Iuz intelectual es demostrable el gran error de losgentiles e idolatras, que estan en tinieblas, por las cuales van a perdu-rables penas, por faltarles 1aluz de Ia fe y del entendimiento, iluminadopor Aquel que es iluminacion de la verdad, de Quien los infieIes reci-ben beneficio en 1a presente vida; y aS1,como sea muy conveniente alos fieles eristianos beneficiados e iluminados por EI, que es fuente ylumbre de vida perdurable, que ayuden y acorran a sus semejantes,etc., etc.". Estas frases, que coinciden con Ia de Santo Tomas: Lalumbre de Ia fe hace ver las cosas que se creene", no revelan influen-cia aIguna en la demostracion racional de los misterios.

Igualmente nos son inservibles algunas frases que expresan Ilumi-nacion por influjo externo humano; como p.e.: Si vosotros, cristianos,teneis la luz de la verdad, que pueda arrojar de mi-corazon las tinie-blas, y si podeis iluminar mi entendimiento con la luz de la verdad, ossuplico que por piedad querais iluminarmea'".

Tampoco interesan para nuestro .estudio muchas frases en queluz e iluminacion no tienen alcance de Iluminacion divina, sino signi-ficado metaf6rico de orden puramente natural; par ejemplo: EntreIa verdad y la falsedad hay contrariedad; mas la verdad tiene concor-dancia con el ser y con Ia claridad, pero la falsedad, con Ia privacion,las tinieblas y el no ser, Y por eso Dios ordeno y quiso que la verdadtuviera lumbre y prerrogativa sobre la faisedad, que es contraria a laverdad ; y por tanto, si Dios no hubiese ordenado que Ia verdad se


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engrosar y embotar al hombre el ingenio, asi la potencia racional tienenaturaleza y propiedad de adiestrar al hombre e ilurninar su ingenioy su conocimientos ". Maniiiesta eosa es que el entendimiento iluminala voluntada", {(EI entendimientohumano ha sido elevado muy altopor Ia iluminaeion de la fe, la Sagrada Escritura y la filosofia 1 9.Las que nos interesan, son aquellas frases en que las expresionesluz de fe 0 gracia de Dios significan un influjo directo de Dios sobrenuestra inteligencia, ya sea que se prescinda de atribuirle earacter so-hrenatural, ya sea que se le de ese caracter; y por regia general entien-do en este segundo sentido la palabra gracia.Veamos algunas expresiones del primer tipo de esta clase, es deeirde influjo de Dios sin expresar sobrenaturalidad.

I) Entendimiento y Iuz de sabiduria convienen en entender; yfe e ignorancia convienen en creer ... ; y como Dios y mayoridad y per-feccion convienen entre 5 1 , y EI ha querido y ordenado en algunoshombres que el error sea destruido por la luz de Ia fe, mucho mas haquerido y ordenado que el error sea destruido por Ia luz del entendi-miento iluminado por Iuz de Ia Sabiduria Supremas-",2) Dios ha dado al hombre dos manes para que la una ayudea la otra; y ha dado al hombre dos luces, luz de fe y Iuz de entendi-miento; por 1 0 tanto, si el hombre no puede tener luz de entendirnien-to, tenga Iuz de Ie, y erea 10 que no puede entender?'.3) Como el cuerpo recibe perfecci6n por el alma, asi el enten-dimiento recibe del Supremo Bien perfeccion por la cual entiende 1 0

infinito mas alla de 1 0 finito que el alcanza ... como el cuerpo por loscinco sentidos particulares tiene sus virtudes mas nobles por razon delalma, y usa de las cosas corporales que estan fuera del cuerpo, asi elentendimiento iluminado por el Supremo Bien entiende mas alla de10 que por 51 mismo tiene, 0 sea, el Bien ininito en su bondad, gran-deza, eternidad, etc.; ... eI entendimiento, que es finito, dentro de 8 1mismo entiende al infinito por la luz y el auxilio que Ie presta el Bien


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el mayor y Supremo motor, mueve el entendimiento a entender losArticulos, que son para el mayores y mas nobles objetos de entendcrque cualesquiera otros objetosv",

5) Hemos sido dirigidos para acabar este libro por la divinaluz e iluminacion ".Y a continuacion veanse otras del segundo tipo:

6) Va a dar demostracion de los misterios mediante el auxiliode Aquel sin el eual nada bueno ereo haber sido hechox".7) Se propone demostrar los dogmas con el patrocinio y la

gracia del Altisimo26.8) El hombre, por la gracia de Dios, tiene posibilidad de eu-

tender los Articuloss-",9) El Arte y la doctrina con que en esta prueba e investigaci6nhemos de proceder, 10 tenemos del Arte demostrativa y del Arte com-

pendiosa de hallar la verdad; pero contando con la gracia y auxilio- d e Dios Nuestro Senor28.

10) EI alma tiene posibilidad de entender los Articulos, usan-do la luz del entendimiento iluminado por la luz de la gracia y pornecesarias demostraciones que significan al entendimiento aDios ysus obras; porque el alma que cree los Articulos, no los cree con otraluz sino con la que recibe de Dios, luz de su entendimiento, y con lasdemostraciones que las criaturas ofrecen al entendimiento, para quepueda entender aDios y sus obrasa",

11) De la luz de la fe que cree en la Trinidad, desciende in-fluencia al entendimiento para que sea iluminado con tal luz por lacual la Suprema Trinidad se demuestre por razones necesariass ".

12) No podemos alcanzar la verdad de los Articulos de la Fesin la lumbre de la gracia de 1 0 alto; por la cual Iumhre paso del creeral entenderv",

13) Para comprender las razones necesarias, es precise que elhombre ilumine su entendimiento con la luz de la fe, partiendo de la


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porque asi como Ia luz va delante para mostrar el camino, asi Ia fe vadelante del entendimiento. Si quieres, pues, tener entendimiento sutil,no seas incredulo; cree para que pueda tu entendimiento subir tanalto que entienda 10 que lafe ilumina=.15) Dios tiene infinita elevacicn sohre el entendimiento; peroasi como por la luz de la gracia la fe alcanza algunas verdades, asipor la rnisma Iuz puede el entendirniento alcanzar algunas verdadesdivinas",

16) Dice la fe: -Es imposible que el entendimiento sin suinstrumento se extienda mas alla de sus terminos; su instrurnento sonlos primeros principios, que no se extienden sino al sentido y a laimaginacion ; luego no puede alcanzar la divina Trinidad. Dice el en-tendimiento: -Eso yaldria si no se contase con el divino instrumento,o sea la Iuz de la gracia35.

He ahi casi todos los textos en que Lulio expresa la intervencionde Ia luz divina en nuestros conocimientos cientificos; prescindo delos que estan bien representados por algunos de los aducidos; no ereohaber dejado ninguno que ofrezca algim matiz de importancia.

De esos textos tenemos que deducir el pensamiento de Lulio yver 5i da a esa divina iluminacion el valor de elemento substantivo ala Iuncion natural cognoscitiva hurnana, 0 solo de perfeccion acciden-tal, unicamente necesaria como causa de que la inteleccion racionalalcance ohjetos superiores a sus fuerzas naturales.

Estudiernos, siquiera sea brevemente, los textos transcritos.En los pasajes I) y 2) expresa, como en muchos otros lugares,

la irreductihle contraposicion entre entender y creer; en igual sentidoIuz de fe a Iuz de entendimiento; son dos manos diversas, aunque rnu-tuamente se ayuden; tengase esto presente; pero adviertase que, si enestos textos llama luz de la gracia a la luz de entendimiento por eon-traposicion a la luz de la fe, en otros (veanse ]05 10) Y 15) IIama luzde la gracia tanto a la que se da para creer como a Ia que se da paraentender.

Por el texto 3) se ve que es luz que perfecciona la facultad racio-


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LA LUZ DlVINA EN LA 159modo discursivo humano. Cuando dice que el Bien supremo se haceobjeto del alma, no se refiere a visi6n alguna ontol6gica; creer 1 0 con-trario seria desconocer la doctrina de Lulio, que tantas veces rechazaque tengamos en esta vida vision inmediata de Dios; hacerse objeto delalma no quiere decir sino dar al alma conocimiento, por las verdadesde Ia fe, de como es Dios en si, es decir, infinite en bondad, grande-za, etc.; 1 0 cual, una vez sabido por Ia fe, estudia el entendimientotrascendiendo sobre si mismo.

En los textos 4) y 12) dice que esa Iuz es una mocion para pasarde Ia potencia a1 acto de-entender los misterios, y de creerlos a enten-derlos; en el texto 4) no expresa si esa mocion es de orden natural,como la que conduce a entender los objetos menores; pero en el 12)expresarnente la llama gracia de 10 alto, calificativo que interpreto en1 6 1 sentido de que es mocion sobrenatural. Desde luego es evidente que.se trata de un elemento ajeno y superior a la facultad cognoscitiva;aunque actue dentro de ella, porque el acto del motor en el rnovidoes el movimiento.

Los textos 5) y 6) nada nos explican, pero confirrnan que eseauxilio e iluminacion son elementos provenientes de afuera, excitantesQ coadyuvantes, pero no parte esencial de la funcion natural psicolo-gica. E1 numero 6), de par si, no indica gracia sobrenatural; pero porparecerme eco de aquellas pa1abras de S. Agustin illam vera gratiamDei sine qua nihil boni possumus facere:", que indudablernente sonde sobrenatural auxilio, las he incluido en el segundo grupo.

El mimero 7) es interesante, a pesar de su aparente insignifican-'Cia; porque si bien dice esas pa1abras a1 principia del libro, luego entodo e1 resto del mismo, a pesar de consagrarse a dernostrar por elArte 1a unidad y trinidad de Dios, la Encarnacion, etc., no vuelve amentar siquiera ni la 1uz ni 1a gracia de Dios; por e1 manejo del Arte10 prueha todo; unicamente en la Dist. VIII dice que para adquirireste conocimiento es necesario que e1 entendimiento humane tenga


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160 liIJO GARAYrnisterios como quien los entiende, 10 haee con la Iuz que recibe deDios, aunque el segundo necesite ademas percibir las dernostracio-nes que las criaturas ofrecen al entendimiento para que pueda enterr-der aDios y sus obras. Concurren, pues, a Ia forja de Ia dernostra-cion del misterio el raeiocinio elaborado sobre las realidades externas,y la luz de la gracia.

Esta luz de Ia gracia 10 mismo puede ser Iuz de la fe queluz del entender; es como un concepto generico que se salva en dosespecies; estas son las que no se confunden una con otra; cotejenselos textos I) y 2) con los 10) Y 15); en e l 15) dice que por la hrzde la gracia a1canza Ia Ie algunas verdades y -por la misrna luz puedeel entendimiento entenderlas.

Esa luz de la gracia es e] divino instrumento que en la demos-tracion de los misterios equivale a 10 que en el orden de las demasdemostraeiones son los primer os principios -texto mimero 16)_37.Ese divino instrumento llo es tan solo la luz del entender 0 10es tamhien la luz de la fe? Claramente se ve que 10 son las dos; por-que [a fe es, segun Lulio, iluminacion del entendimientov'"; no, cier-tamente para entender los misterios y poderIos dmostrar, pues paraeso se requiere la luz del entender, sino en eI mismo estrieto sentidoen que Santo Tomas deeia: la [uz de la fe haee ver las cosas que secreens "; y esa ilurninacion que da la fe es previa y necesaria para lademostracion, porque asi como Ia luz va delante para mostrar el ca-mino, asi Ia fe va delante del entendimiento -texto 14)-; la fe,pues, deseubre y muestra el objeto de la futura demostraci6n; da la basesegura de su posibilidad -m'imero 13)-; y de esa 1uz de 1a fe des-ciende influencia al entendimiento para que sea iluminado con 1a IUZdel entender -mimero II )-.

En resumen: Para entender y demostrar los misterios se necesitaque Dios auxilie e ilumine el entendimiento -numeros 1), 8), 9),10), 16)-; esta iluminacion consiste en un perfeceionamiento de lafacultad cognoscitiva humana que le permite tomar pOl' objeto de suestudio al ser infinitivo, a pesar de ser ella finita -3 )___:; es una mo-


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LA LUZ DlV1NA EN LA .. 161~13), 14)- mediante euya influencia se recibe -11)-. Es, pues,una Ilustracion sohrenatural, ya exeitante ya adyuvante, euya explica-cion hay que buscar no en tratado alguno filosofico de gnoseologia,sino en uno teoI6gieo De Gratia Christi, 1 0 mismo que la del lumenfidei.Vease a que queda reducido el pretendido iluminismo Iuliano: aque iguaI que exige la luz de Ia fe para creer los misterios, exige tam-bien Ia graeia de sobrenaturaI ilustracion para entenderlos. Mas funestoque el semipelagianismo, que ponia el initiuni fidei independiente dela gracia y anterior a ella, seria el racionalismo que admitiese Ia posi-hIe inteleccion de los misterios, aun supuesto el conocimiento de eIlospor los enunciados de fe, Sill sohrenatural ilustracion divina, Ese errorpreviene Lulio, y por eso insiste tanto en que es necesario el divinoauxilio de la gracia; como antes hahian insistido San Anselmo y SanAgustin, y con las rnismas palabras.Sacar por eso a Lulio de la teologia eatolica y clasificarlo en lade los ilurninados ixraquies, es pura e insostenihle arbitrariedad.Pero para aelarar mas atin el pensamiento Iuliano hagamonos dospreguntas y husquernos en las obras de Lulio Ia contestacion. ,

l,a) zQue influencia es esa -texto mimero ll)- que de laluz de la fe desciende para que el entendimiento sea ilurninado por Ialuz del entender?2. a) ZComo contribuye la fe a la inteleccion de los misterios?A la 1.a) encontrarnos respuesta en el mismo Iugar de donde hetornado el texto mimero 11); despues de aquellas palabras pasa Lulioa concretar y aelarar su pensamiento y hasta con curiosos detalles psi.cologicos nos explica en parte a que influencia se refiere. Recuerda 1 0que los judios dicen de su Talmud, 0 sea, que las semejanzas y ejem-plos que contiene, exaltan la inteligencia; y Iuego aiiade Lulio que as!tambien Ia mayor fe es causa de que mas Iacilmente sea iluminadoel entendimiento, pues por la mayor fe se fortifiea mas para entender,y cuanto mas entiende mas proporcionado esta para considerar el su-mo Bien por la inteligeneia, como la voluntad por la benevoleneia;


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m a s , dando una sutil nota psicologica, que no es al fin y aI cabo sinoaplieacion de su doctrina de los puntos trascendentes. La representa-cion de 10 sensible, hecha al entendimiento par Ia imaginative del ra-eional, es mas noble que Ia que haee Ia fantasia de los irracionales, ypm esa aquel puede, y estes no, imaginar Iorrnas artificiales; por esteejemplo se comprende que haya todavia un grado mayor de nobleza,eI eual supera a la imaginacion racional, y no se alcanza sino trascen-diendo sobre ella y contrariando las representaciones que, tomadas delos seres materiales 0 de los finites, ofrece Ia irnaginativa cuando elentendimiento discurre sobre seres espirituales 0 sobre el Ser infinite.Mientras mas se habitue el entendimiento en contrariar y rnortifiearas! Ia fantasia mas se educa y fortaleee para trascender sobre ella yejercitar su propia virtud intelectiva; ahara bien, la fe nos afirma ver-dades que repgnan a la imaginativa; al adherir el entendimiento aelIas, venciendo a esta, por la mortificacion que haee en si misrno enIa fantasia por la luz de Ia fe, adquiere tanto mayor merito cuantomayor es Ia mortificacion, y el entendimiento esta mas proporcionadopara salir de la fantasia y desnudarse de ella y exaltarse sobre ella, yabandonar el objeto del cual ha tornado la fantasia una falsa especie;y cuanto mas el entendimiento se exalta y se remonta sobre la fanta-sia y sobre Ia imaginativa, tanto mas fuerternente hace usa de su vir-tud operativa; por la eual virtud se dispone a entender al supremo Biencomo conviene ". As! influye la luz de Ia fe disponiendo al entendi-miento para reeibir la luz divina de la gracia de entender.- A Ia 2.a) pregunta ya da respuesta Lulio en los citados textos13) y 14); pero aducire otros pasajes. La fe contribuye a Ia intelecci6nde los misterios aportando de hecho el ohjeto, aunque solo conocidopor autoridad; y si se quiere, aun menos: suponiendo solo que es po-sible que sea verdad, aunque con suposicion positiva, no meramentedubitativa. Asi Lulio dice: Si quieres entender 10 que crees suponque es posible que sea verdad, pues si 10 supones tienes fe, ya que lasuposicion se haec por Ia fe, y por ella se eleva el entendirniento a


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LA LUZ D1V INA ElN LA .. 163esto algunos filosofos, que nada suponen de l~s verdades de Dios se-gun la fe, sino se atienen tan s610 a la que pueden alcanzar segun algu-nos significados naturales representados por la criatura; y asi muchasveces se engafian por el impedimento de la sensitiva y de la imagina-tiva": La fe mueve el entendirniento a entender; y bajo ese aspecto lafe y la inteleccion permanecen en un rnismo sujeto respecto de unmismo objeto, pero no simultaneamente, sino sucesivamente, Sicut incursu in quo movens et mobile sunt permanentes successive 44. Tu,fe, -pone en boca del entendimiento en otro lugar-- eres preparaciony disposicion par la cual yo soy dispuesto por Dios a cosas altas; por10 cual, en 10 que yo por ti supongo creyendo que 10 puedo alcanzarte conservo en habito ; y cuando entendiendo subo al escalon en quet u estas, t u creyendo subes a otro escalon mas alto sabre mi; porquecomo el aceite flota sobre el agua, asi til hahitas siempre sobre rni; yla razon de esto es que ti i tienes mas fuerza para suhir en todo ~upo-'niendo, porque no trahajas, que yo, que cuando subo entendiendo,.trabajo ".

La fe presentando en la altura las verda des superiores a las fuer-zas de la razon, excita estas y las empefia en alcanzar tales verdadesy en invocar a Dios para que le de gracia con que las pueda entender.Asl como un hombre que emplea la totalidad de sus fuerzas en levan-tar una carga, y las empeiia todas en poderla llevar, asi, Senor, porgracia vuestra, mi alma se da tan fuertemente a pensar dia y nocheen vuestras propiedades y atrihutos, que agota toda [a .fuerza de supensamiento y llega mas alia de los confines fuera de los cuales nobasta su poder. Vuestro servidor, Senor Dios, os ruega y os adora yos pide co ntodas sus fuerzas Ia merced de que extienda a sus confines,para que por esa dilataci6n y ensanchamiento de ellos crezca y mul-tiplique, su gloria y su virtudx". ; ,Que [uncion atribuye Lulio a la duzdel entender?

Hemos visto como explica Lulio la influencia de la luz de la feen la inteleccion de los misterios, Ahora bien,

a) ~que funci6n atribuye a esa gracia 0 auxilio de Dios que


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solo en la eterna beatitud padremas eonocer a Dios immediate; en estavida, sola mediate; es demastrable por medio de las cosas intelectuales.Cuanda el entendimiento discurre acerca de Dios teniendo como mediolas casas sensuales, esta mas cerca de la ignorancia que cuando entien-de sin media las casas sensuales (como cuando distingue 1 0 blanco de1 0 negro, y el todo y la parte); el entendimiento esta mas proximo ala duda cuando entiende cum medio que cuando entiende immediate,que esta lejos de toda duda; y asi, dice, si hay merito en creer por fetamhien 1 0 hay en entender con medio, y aun mas, pues mayor es-fuerzo ha de aplicar el entendimiento para entender los articulos quepara creerlos". Mientras el alma esta en via raciocina acerca de Dios;1 0 entiende mediante verbo concebido y formado de semejanzas deDios, de suerte que no alcanza a Dios pero alcanza sus sernejanzas'".Este raciocinio es el mismo natural humane, aunque la gracia 1 0 elevea alcance sohrenatural; ya antes hemos visto como Lulio dice que aldemostrar los misterios la inteligencia procede segun su natural en-tender, con el que entiende los entes inteligibles, pues no puede enten-der contra su naturaleza de entender, como la potencia visiva no puedever contra su naturaleza de ver49. Es 10 mismo que de la luz de la feenseiiaba la escolastica; asi decia Ubriee de Estrarburgo: Ia fe per-fecciona el natural entendimiento segun el modo que Ie es conna-tural50.

zQue hace, pues, la graeia del entender? Ya hemos visto al finaldel mimero anterior 1 0 que el alma, bajo la luz de la fe y ansiosa deentender, pide a Dios: que dilate y ensanche los confines de su poten-cia intelectiva; que aumente su capacidad; que fortifique sus alas pararernontarse a alturas mayores que las naturales. Lo mismo que antesnos dijo el texto niimero 3). Ese perfeccionamiento, agrandamiento yelevacion de la inteligencia es 10 que da la luz sobrenatural.

Leanse los capitulos 171 y 172 del Libro de Contemplaciaa enDios y se vera como todo 1 0 que se emplea en el conocirniento de lascosas sobrenaturales son las facultades naturalea, aunque partiendo de


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--clice- buscar y saber las cosas que estan fuera de la naturaleza yno van por curso natural, debe necesariamente mover su pensamientoy su irnaginacion y su entendimiento y su cogitacion y su memoria ysu voluntad de las cosas naturales, y con las facultades y sentidos delalma tratar de las cosas que estan fuera de los limites de la naturaleza.Porque si yo no apartase los sentidos y facultades de mi alma de lascosas sensuales naturales, y las subiese a las cosas intelectuales no na-turales, ya no podria mi alma buscar las casas que estan fuera de losterrninos de la naturaleza; porque las cosas sensuales naturales embar-gan el alma del hombre para buscar aquellas otras. Empero as! comopor un lado el alma es embargada par las cosas sensuales, asi por otrolado es dirigida por ellas>}51.

En el Cap. 168 de la misma Ohm habia explicado la natural [i-rnitacion de la inteligencia humana, cuyos confines son elasticos y di-latahles, ya con medios humanos (el empefiado estudio, la meditaci6n,etc.}, ya con la gracia de Dios.

b) No he encontrado en las obras de Lulio mas pormenores psi-cologicos de la accion de 1a gracia iluminativa; 1 0 cual no es decirque no los haya; pero ciertamente seran aplicables a ella, como efectorninimo, los que da Lulio acerca de la ilustracion de los angeles alos hombres, advirtiendo, como :lrepetidas veces dice, igual que San-to Tomas y los escolasticos de todos los tiempos, que la accion ange-lica no puede penetrar en las reconditas intimidades del alma, a las


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mentos fisiologicos, modificase 1a funci6n imaginativa y pOl' ende laintelectual; y por esa influencia del angel va llevado el entendimientode objeto en objeto, y es excitado con fuerza y eficacia para en tenderalgo que ni entendia ni procuraba entender.

Ensefia Lulio en eso 1 0 rnismo que Santo Tomas, que tambien admite dos modos de iluminacion angelica en los hombres, aunque haytomistas que al explicar al Maestro dan de lado uno de ellos, es itsaber al de accion directs del espiritu sohre el alma. Como los ange-les inferiores son iluminados por los superiores, as! los hombres, queson inferiores a los angeles, son ilurninados por ello. Y despues deexplicar esta iluminacion 1.0) por confortacien del entendimiento in-ferior, y 2.0) pOl' presentacion de semejanzas sensibles, termina: Ysegun estas dos cosas se considera la ilurninacion con que e l hombrees iluminado pOl' el angeh>5.l. En esa explicacionse acercaba mas Lulioa Santo Tomas que a San Buenaventura, segun el cual los angeles nadapueden hacer ni influir en la parte superior de la razon (la que miraa : Dios}, pero S I en la inferior (Ia que esta vuelta hacia las criaturas},Ia cualiluminan a modo de lengua que se expresa vivazrnente; yesto, no ya influyendo inmediate en el entendimiento, ni siquiera sugi-.riendole immediate, sino mediante Ia virtud de la fantasia; es decir,el angel ilumina al hombre obrando sabre la poreion inferior de larazon por una cierta locuci6n espirituaIy 'excitaci6~ de los fantas-mas".

Por via de ejemplo imperfecto he .aducido esta ilustracion ange-liea, que no puede ser nunca sobrenatural de par si, ni obrar inmedia-tamente en nuestros actos vitales intelectuales; perornos da un atisbode como puede entenderse en la doctrina de Lulio aquella. accion de[a gracia, ya por medio de especies imaginativas que se traduzean enespecies impresas, ya por divina exeitacion y aun infusion de especiesintelectuales, en que se convierte 10 que Lulio llama moci6n de la po-ten cia al acto de entender y perfeccionamiento y elevaci6n de la inte-ligencia. De todos mod os, el analisis del influjo psicologico de esadivina iluminacion, dogmaticamente cristiana, por Ia eual Dios habla


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LA LUZ VlVINA EN LA., 167que ver ni con los delirios de los gnosticos ni con las engreidas pre-tensiones de los ixraquies, no se ha de buscar sino en los tratadosDe Gratia Christi de la Teologia Catoliea.c) No produce ciencia .infusa, pero si ciencia que -dice Lu-lio- esde grande utilidad para 1a infusa,

Que la ciencia de la demostracion de los misterios es adquirida,10 hemos visto ya en textos de Lulio; y no solo adquirida, sino muytrabajosa y difieil, que requiere grande capacidad y estudio, muchoernpefio y esfuerzo y salida preparacion Iilosofica. Pero exigiendoLulio para ella la luz sobrenatural, no 5 6 1 0 la externa de las proposi-crones de fe, sino tambien 1a interna que intrinsecamente mueva yeleve el alma a entender por sobre el alcance natural de sus facultades,no podia menos de tenerla por sobrenatural,

No la atrihuye, como fruto a los dones de Entendimiento 0 deSabiduria, de suerte que sea alguno de estos el que de esa penetracionaguda que adiestra al teologo en el estudio de los misterios hasta hallarargumentos demostrativos y razones necesarias, Si 10 entendiese asi,10 diria; y no 10 dice; yo al menos no 10 he encontrado. Y a esa razon,que tiene bastante mas que de puramente negativa, por 10 extrafio queresultaria que tratando tanto de esa ciencia y de esos dones no losrelacionase entre si, debe sumarse una razon positiva. En su obra Deaequalitate potentiarum, etc. dice que Ia vision beatifica tiene su rudi-mental comienzo en esta vida terrena, no solo por la fe sino por inte-Ieccion de los misterios, y esto mediante la VIRTUD de L a Sabiduria,a la que llama ignota porque no se la cuenta en el numero de las virtu-des teologales, y por Ia cual con la luz de la divina gracia el enten-dirniento creado alcanza sobre sus fuerzas y su naturaleza en esta vidaigualmente aDios y su operacion ad intra, j Una virtud teologal queno seria para todos los fieles, sino privilegio exclusive de los selectosingenios, que a fuerza de preparacion cientifica natural y empefiadoestudio alcanzasen las razones necesarias de los misterios! Extrafia yaun, en el sentido etimologico de la palahra , extravagante doctrina,que no vacilo en Ilamar atrevida, pero que nos aclara el pensamiento


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168 FlJO, GARAYCiencia adquirida que profundiza, entiende y demuestra pOl' igua]

las verdades reveladas que 5uperan el alcance de la humana inteligen-cia y aquellas otras tarnhien reveladas que caen dentro de las fronte-ras de la natural filosofia; pOI' eso Lulio dice, al final del Libro IV deDemostraciones: Acabado esta este lihro de la Encarnacion del Hijode Dios; la cual hemos demostrado y significado pOI' razones y pOl'principios necesarios; y si hi niegas esto, prueba y demuestra que 105angeles existen, y que hay otra vida, y demuestra que este mundo escreado; y cuan fuertes y necesarias razones podras dar en favor detodo eso, tan fuertes y necesarias las puedes dar, pOl' las razones quehay en este libro, para. significar la Encarnacion de Nuestro Senor Je-sucristov'".

zLa tiene Lulio pOI' natural 0 pOI' sohrenatural? Hay que distin-guir entre cada uno de los actos de ella, y el h:ihito engendrado pOl'la repeticion de estos act os, al que en el lenguaje vulgar cuadra mejorel nombre de ciencia. .

Segun Lulio la razon entiende y Clemuestra verdades que de parsi exceden del natural entender; las entiende, pOl' tanto, sobrenatural-mente, es decir en virtud de un principia efectivo sohrenatural quemueve, eleva y perfecciona la potencia cognoscitiva. POI' ser sobrena-turales tanto el objeto como el principio activo (Ia potencia elevadaporia gracia ) , es acto sobrenatural, ""in que deje de ser acto vital d ehumano raciocinio, realizado poria potencia cognoscitiva a la que e1principio sobrenamral (ya sea habito infuse ya mere auxilio de gra-cia actual) informa y habilita para la operacion superior a su ea- '","pacidad.Profundizando mas .aun en el analisis, sabe preguntar si Ia evi-:dencia que esencialmente acompafia a esc acto de entender y demos-trarun misterio mediante la luz de la gracia, se pierde al cesar Iaactuacion de esa gracia. Si no se pierde, tiene que ser evidencia mera-mente natural, independiente en su ser de aquIIa, y 'hasta compatible


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170 FIJO GARAYClplO motor y e1evador que la perfecciona para que realice el acto; ypor 10 tanto, en el orden natural, no en el sobrenatural; porque, repito ,no se modifica, adiestra y habitua por razon de la sobrenaturalidadde los aetos, sino por razon de Ia vitalidad de los mismos.

Ese habito adquirido es, pues, natural; pero no basta para quela potencia ejecute actos como los que 1 0 engendraron, ni puede sus-tituir a Ia graeia en cuanto principia eficiente; ni siquiera para repetir naturalmente aetas del' mismo orden, si, como queda dicho, estesson sohrenatura1es. ','Ese habito dara facilidad de discurso y de memo-ria, pero no elevacion para alcanzar objeto sobrenatural. En el casode esta eiencia demostrativa que pretends Lulio , facilitara la visionintelectiva baja la accion de la gracia; ayudara bajo la rnisma accion,a en tender otros misterios; y por .el, cuando la gracianoactue, 1a me-moria ofrecera solo una vaga e inconcreta luminosidad, como recuerdode la anterior evidencia; y as! se dara el caso que dice Lulio de vol-ver a1 acto la fe que. porIa demostracionhabia quedado en potencia ..;utilizando los conocidos simbolos Iulianos, diriamos que-Ia razon habraperdido el escalon ganado y 1 0 volvera a"ocupar la fe; habra descen-dido ef agua y vuelto el aeeite al anterior nivej,, ".

En resumen: en esta pretendida ciencia de Ia demos~racion de losrnisterios, los aetas deben ser sobrenaturales; natural' el habito adqui-rido; la potencia vital y su accion, la inteligencia humana y su naturaldiseurso; e1 principia eficiente, la gracia del entender, ya actual, yahabitual por esa sofiada virtud teologal de 1a Sabiduria.

No infunde, pues, segun Lulie ciencia la gracia del entender;solamente da la elevacion y perfeccion de la facultad cognoscitivapara adquirirla; pero esta ciencia sobrenaturalmente adquirida es, se-gun el mismo, utilisima para tener ciencia infusa. En 5U obra De losXIV Articulos de la Fe, despues de haber dicho en el prologo quehemos de empeiiarnos de todo corazon en inquirir razones necesariascon que demostrarlas dice en el ultimo parrafo de la ohra, bajo elepigrafe De fine hujus libri: Por gracia y auxilio de nuestro altisimo,glorioso y omnipot.ente Senor Dios acabase este libra de los Articulos


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en el Arte; no puede, pues, ni acreditarlo de iluminista ni ser negadopar catolioo alguno.

Y mas clara y abiertamente aun se express en otro lugar, dondeenumera dace modes, par via de ejemplo, de usar las figuras de suArte, el 5. de los cuales es contemplar; describe la aplicaci6n delArte a Ia alta vida de oracion y termina con estas palabras: pOT estemodo brotan de 1 0 intima del corazon dulces suspires que dan dulzurade Iagrimas a los ojos, y se aumenta la fecundidad de la virtud y de-vooion, mientras la contemplacion dura; y asi se da y se prepara paraser recibida la ciencia in/usa par gracia del mismo Dios, a los que dis-curren rernemorando y entendiendo acerca de Dios y sus dignidades,las virtudes, la verdad y la falsedad63.

Este mismo efeeto de la contemplacion pOT su Arte, es decir, lapreparacion para dones sobrenaturales, 1 0 espera de sus demostracio-nes de los misterios divines. No otra co "a quiere decir con las pala-bras este libro contiene en 5 1 rnuchisima utilidad para conocer y amara Dios Senor Omnipotente por ciencia infusa.

Es indudable, y 1 0 contrario esta condenado en Ia proposicion 34de Bayo64, que hay que distinguir entre arnar aDios naturalmente, esdecir, como autor de 10 creado, y amarlo como conocido par la reve-lacion y autor de la gracia; no es 10 mismo amarlo como fin proper-cionado a nuestra naturaleza que como fin que no s610 la colma sinotamhien la excede infinitamente; pues bien, que este amor de Dios encuanto fuente de vida y bienes sobrenaturales eche mas hondas raicesen la mente, can intensificacion de su fuerza estimativa 0 apreciativa,mediante Ia inteleccion racional de los misterios, y por ende con inten-sificacion tambien de su valor afectivo mediante la asidua y piadosameditacion, ~quien 1 0 dudara? ~Y quien negara que el aumento deese amor y su enardecimiento por el arraigo en la inteligeneia y en elcorazon es disposicion exceIente para atraer Iuces sobrenaturales gratuitas y Ia ooncesion de ciencia infusa?

De hecho , Lulio clama una y cien veces en sus escritos, sabreto do en e] Libra de Contemplacion; pidiendo a Dios que le otorgue Iuz


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Iada, sino tambien que la gracia divina conforte, eleve y sobrenatu-ralice la facultad cognoscitiva Tengase por erronea su doctrina, sise juzga que ni aun con esa especial asistencia de la gracia sobrenatu-ral puede el entendimiento humane encontrar razones rigurosamentenecesarias en la demostracion de los mas altos misterios; digase, sise quiere, que los argumentos que ofrece no concluyen, y que bajo lacapa de seductora fuerza dialectica se oculta la falacia; 0 bien, nie-guese que sean razones apodicticas, y llameseles razones suasorias,pOl' el estilo de muchas usadas por otros teologos con menores preten-siones que Lulio; el mismo ha dicho que en eso no tiene inconvenien-te; y en este caso, tengasele por exagerado en la expresion, y no porerrado en la doctrina; pero 10 que no se puede con razon y con justiciaes acusarlo ni de racionalista ni de sernirracionalista, cuando tan rna-nifiestamente expresa la necesidad de la gracia iluminativa sobrena-tural para la demostracion de los misterios,Pues todavia menos acorde con la razon y la justicia es tachar deiluminismo ixraqui una doctrina que si admite la ciencia infusa e,;puramente en el misrno sentido en que la admiten, y no pueden menosde admitirla, todos los teologos catolicos; y si ensefia la dernostrabi-lidad de los mas altos misterios, la da como fruto de la propia razonhumana, de su estudio y discurso, de su empefio y esfuerzo, de la felizconjuncion del ingenio sutil con rica y solida forrnacion cientifica, ra-ciocinando segtin el humane modo de entender, aunque previa la ilus-tracion extern a e interna de la fe y bajo la indispensable accion de lagracia que dilata la potencia cognoscitiva humana hasta eI alcance delobjeto sobrenatural,

GComo ver en esta doctrina ni sornbra siquiera del extatico ilu-minismo de los ixrraquies?

+ LEOPOtOO FIJO GARAYObispo-Patrtarca de Madrtd-Atcale

eijo garay la luz divina en la gnoseologia luliana

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