lis haley - cautivar a un dragon

8/11/2019 Lis Haley - Cautivar a Un Dragon

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Norah Devlin se vio obligada a huir de su casa en Virginia cuando se enterde que su padre pretenda casarla con su socio, un viejo degenerado, pero rico. Asque se refugi en Inglaterra ayudada por su ta aterna, lady !atterson, que lebusc trabajo coo doncella en casa del arqu"s de Devonshire.

#uando $arcus %reen&ood regres a Devonshire, se qued prendado de sunueva doncella de cabellos rojos y genio vivo. 'as alas lenguas decan que lordDragn, coo lo apodaban por sus costubres (salvajes), se haba enaorado.!ero el peligro acechaba a la bella Norah.

Ni el ancho ar que separaba abos continentes asegurara su proteccin.*#onseguira $arcus proteger lo que +s quera


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A mi querida sobrina, Rocouna pequea diosa que siempre veel lado bueno de las cosas.


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Captulo 1

Inglaterra, agosto de -/0

Norah Devlin orda una peque1a bri2na de hierba al tiepo quecanturreaba un breve fragento de la pie2a que haba odo eses antes, durante eltranscurso del baile que haban organi2ado los Devlin con otivo de la puesta delargo de $onique3 su querida y a1orada herana enor.

A pesar del tiepo transcurrido, a4n sonaba en su cabe2a aquellaiperecedera eloda, de d4ctiles copases y ontonas pautas, ipecableente

ejecutada por la orquesta. #err los ojos, iagin+ndose all3 en el agnfico salnde baile, iluinado por decenas de grandes ara1as de cristal.

5na ligera brisa agit sus cabellos, devolvi"ndola a la realidad. A aquelnuevo entorno, desabrigado y fero2, donde todo el undo epleaba su tiepo ensobrevivir. 6a no haba personas prestas a ofrecerle lo que deseara, ni en4s deplatos deliciosos, ni flores frescas sobre la esilla de su doritorio record Norah,suspirando profundaente ientras e7traa una de las inaculadas s+banas dealgodn del tosco cesto de ibre que descansaba a sus pies.

Acerc un poco la nari2 para aspirar el aroa a lipio que despeda el

tejido a4n ojado y sonri para sus adentros.Aquello era una victoria. 5na que la llenaba de orgullo, ya que para ella

significaba ucho +s que una siple pie2a de la colada. 5na ve2 +s se dijo quedeba darle las gracias a %eorgina, la joven doncella, por la ayuda que le habaprestado al abandonar por un rato sus obligaciones para ense1arle una cosa tansiple coo aquella. 8in su ayuda no habra sabido co deonios enjuagar lacolada en el caudaloso ro que atravesaba aquella propiedad, sin terinar aliso tiepo epapada hasta los huesos.

Norah no pudo evitar sonrer al recordar la cara que haba puesto la joven

uchacha al descubrir el desconociiento que ella posea respecto a aquella tarea.5n trabajo, que seg4n pareca, toda joven de su clase deba conocer y doinar a laperfeccin. 'a pobre %eorgina se haba rubori2ado tanto que las peque1as pecasque poblaban su redondo rostro parecieron encenderse a4n con +s fuer2a,provocando que su piel se tornara de un tono fero2ente anaranjado. !or uninstante, Norah se pregunt co reaccionara la uchacha si llegara a enterarsede su secreto. Desde luego era ejor no pensarlo. 8i la susceptible doncella lodescubriera, con toda seguridad le dara un sncope.


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Asi una peque1a pin2a de adera, suspir y estir su estili2ado cuerpotanto coo le fue posible.

Aunque ella, con su etro setenta y cinco, no poda considerarse una jovenpeque1a, se vio obligada a hacer un gran esfuer2o, que incluy incluso ponerse depuntillas para alcan2ar el cordel y atrapar la suave tela con las pin2as de adera.

(*#o diantres se las apa1ar+ %eorgina), se pregunt. Irgui la espalda yal2 su rostro al cielo, secando con el dorso de su ano las iperceptibles gotas desudor que coen2aban a poblar su frente. #onsciente de la aspere2a de su piel,e7tendi los dedos ante sus ojos para poder conteplarlos. #uando lo hi2o, dejcaer los hobros y e7hal un fuerte suspiro. Nunca antes haba tenido las anostan secas y castigadas. Norah frunci el delicado ce1o. 8i no hubiera visto aquellas

anos, blancas y tersas, hubiera jurado que aquello era totalente iposible. 8inebargo, no poda perder el tiepo en laentarse, eso, ade+s de no servirle paranada, la pona de uy al huor. 9ratando de no darle +s vueltas al asunto seproeti a s isa el no deorar +s tiepo la preparacin de alguno de losnuerosos ung:entos que ta $ariel le haba ense1ado a elaborar durante una desus espor+dicas visitas a Virginia. Aquella isa noche preparara uno deaquellos aravillosos b+lsaos y se lo aplicara con cuidado hasta que la ajada pielde sus anos recuperara por copleto el aspecto nveo y saludable que esesantes posea.

;Deberas ponerte la cofia ;dijo a su espalda una vo2 angustiosaentefailiar.

Norah dio un respingo.


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corriente la arrastr lejos ;e7plic, tratando de no andarse por las raas.#randall la observ en silencio. 8us ojos reflejaban un chocante brillo. 5n

brillo sobre el que ella no deseaba verse obligada a pensar.Norah se repiti una y otra ve2 que deba antener la cala. Dada ladelicada situacin en la que se encontraba, no poda peritirse el lujo de provocarun enfrentaiento con ese hobre, o con ninguna otra persona en aquella casa.

De pronto, "l e7tendi una ano y atrap uno de los brillantes bucles deella entre sus dedos. !or instinto, Norah trat de retroceder un paso, notando a suve2 co el color de sus ejillas se evaporaba y la sangre las abandonaba conceleridad.

#on los pies clavados en el sitio, Norah contuvo un instante la respiracin

en el interior de sus pulones, abriendo sus grandes y e7presivos ojos verdes aliso tiepo. Aquellas dos brillantes eseraldas, sitiadas por unas oscuras ydensas pesta1as, se clavaron sobre la +spera ano que sostena sus cabellos, sindar cr"dito a lo que ocurra.

*>u" deonios pretenda aquel hobre, se pregunt ientras carraspeabatratando de que el nudo que se haba adue1ado de su garganta se esfuara. 8inebargo, lo 4nico que consigui fue que aquella asfi7iante sensacin seacrecentara, su+ndole, ade+s, un fuerte y desagradable escalofro que invadisu cuerpo con la rapide2 de un rel+pago. Aquella brusca sacudida logr hacerla

palidecer coo a un cad+ver.;9u cabello es coo el issio fuego ;urur "l con vo2 ronca,

coo si acabase de hacer un asobroso descubriiento.5na sensacin de alara recorri su coluna vertebral y las rodillas

coen2aron a teblarle. 8in ebargo, trat de no ceder ante el teor que aquelhobre le causaba. Ni por un oento deba peritirse parecer desvalida oindefensa. No cuando su honor e integridad estaban en juego. 'o ir con frialdady trat de que su vo2 no vacilara.

;Adquirir" una cofia en cuanto acuda a la ciudad, se1or #randall ;

asegur ella, agarrando y retirando el echn de entre los dedos del hobre. 'abrillante hebra de cabello se desli2 sin que "l tratase de retenerlo. 'o que leprovoc a ella un inenso alivio. Al enos no tendra que pugnar para que lossoltara.

Norah aceler sus oviientos, se dio edia vuelta y reto nuevaentesu trabajo, fingiendo ignorar la presencia de #randall con la esperan2a de que "l searchara.

Aquella situacin coen2aba a serle insostenible. Desde el iso da quehaba entrado a trabajar en la casa del arqu"s de Devonshire, no haca +s de


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tres eses, se haba visto acosada por aquel aborrecible hobre? perseguida ahurtadillas por los pasillos y observada cuando crea estar a solas. #oo si el

espiarla de aquella clandestina anera provocara a aquel degenerado un ocultoplacer, pens Norah al tiepo que volva a suar otra pin2a a la larga fila queadornaba el cordel. #uando lo hi2o, no pudo evitar posar nuevaente la iradasobre sus +speras anos.

@l, a4n de pie junto a ella, pareci intuir sus pensaientos.;8abes perfectaente que solo tendras que solicit+relo, y no volveras a

reali2ar +s este tipo de trabajos. ;Norah sinti coo su nauseabundo aliento lero2aba el rostro;. 6o, particularente, opino que no son dignos de una joven tanbella y delicada coo t4 ;susurr "l, acerc+ndose +s de lo que a ella le hubiera

gustado.($aldito bastardoB), pens Norah apretando los dientes con fuer2a.


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u1eca, pero "l no ainor la presin de sus dedos. 9ras un instante que parecieterno, #randall ovi la ano que tena libre para obligarla a abrir el pu1o

cerrado, con sus rudos y 2afios dedos.


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;*9e parece gracioso ;rugi "l, atrap+ndola nuevaente por la u1ecapara 2arandearla a continuacin.

;No, se1or. No e parece en absoluto gracioso... ;dijo ella achicando losojos;. De hecho, tengo la conviccin de que el asunto es de lo +s grave ;concluy, sacudiendo su bra2o en"rgicaente hasta que consigui deshacerse de laano que lo apresaba. 8eguidaente se alej unos pasos que le peritieronrecuperar el valor y la habitual cautela de la que haca gala cuando se encontrabacerca de ese detestable hobre.

#randall estaba acostubrado a que en aquella casa sus deseos fueranacatados sin rechistar por todos y cada uno de sus epleados. #uando el arqu"sde Devonshire se encontraba ausente, haca y deshaca a su antojo. !or tanto, el

hecho de no lograr sus propsitos lo enfureca de anera iniaginable.;Deberas dejar de creer que puedes aspirar a +sB ;estall "l.


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arrojo del desafo.@l la acuchill con la irada y su rostro enrojeci por la clera. 8u e7presin

se endureci. 'uego, gir sobre sus talones reteniendo a duras penas un juraentoen el interior de su boca y coen2 a cainar con paso fire hacia la casa,abandonando por fin el lugar.

Norah peraneci invil en el iso sitio con los ojos clavados en suespalda. De alg4n odo necesitaba asegurarse de que se archaba, de que no seocultaba tras la ropa tendida para acecharla coo sola hacerlo por los corredores yrecovecos de la ansin. 9rag saliva al distinguir coo "l giraba su rostro sindetener sus pasos para lan2arle una dura y fra irada de advertencia. #uando#randall pareci centrarse nuevaente en el serpenteante sendero de tierra que

llevaba hasta el portn principal de %reenhouse, la joven cerr los parpados y sesinti relativaente aliviada, notando siult+neaente co el peso de su cuerpose aflojaba. #uando Norah volvi a abrir los ojos, "l ya haba desaparecido de lavista.

!or fin a solas, e7tendi su bra2o y apoy el peso de su cuerpo sobre uno delos postes que sostenan la colada, respirando al iso tiepo con dificultad. !orun oento haba teido que sus piernas le fallaran, que sus rodillas sedoblaran y que caera al suelo ante aquella alia1a ruin e inoral. Faj losparpados y agradeci secretaente al cielo por que aquello no hubiese sucedido.

Despu"s, dej escapar un hondo suspiro de alivio e introdujo la s+bananuevaente en el cesto.

;8olo un par de eses +s... ;se dijo a s isa en vo2 baja antes de asirla canasta y encainarse de nuevo hacia el caudaloso ro.

'a suave brua del aanecer, que haba reinado cuando la doncella y ellahaban enjuagado la colada por priera ve2, ya se haba disipado por copleto,dando paso a los resplandecientes rayos del sol que la for2aban a entornar los ojos,ientras una cruel quea2n le aguijoneaba sin piedad el rostro. Norah rebas losverdes pastos donde un par de vacas pacan libreente y enfil el pintoresco

caino que con sus sinuosas curvas pareca jugar a confundir al viajante. $ientrascainaba no pudo evitar que a su ente acudieran las palabras que #esar#randall haba e7presado respecto a su ta. Aunque le hubiera gustado hacerlo, nohaba entido al responder a la cuestin, ya que era cierto que tapoco alcan2abaa coprender por qu" ta $ariel se haba decidido a recoendarla en una casa dela que su propietario, el arqu"s de Devonshire, go2aba de una +s que dudosareputacin de libertino y ujeriego. 5na escabrosa popularidad de la que inclusoella, en su lejana Nortea"rica, haba odo hablar en alguna que otra ocasin. A4nrecordaba una de aquellas conversaciones ;'ord Dragn lo haba llaado el


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se1or 8tuart;, un notable banquero que sola frecuentar los bailes y cenas que sufailia, los Devlin, ofrecan con bastante asiduidad.

8eg4n el gordo y charlat+n se1or 8tuart, ade+s de por su ala reputacin,el arqu"s de Devonshire era de sobra conocido por su car+cter duro e indiferente.$uchas jvenes daas, alentadas por sus failias, haban tratado de (echarle ella2o). !ero "l, lejos de resignarse a ser el objeto de las atenciones de una daa, sehaba ostrado del todo reacio a la e7altacin del roanticiso y al atrionio.8obre todo, a este 4ltio, pens Norah, repasando entalente lo poco que habaodo sobre aquel caballero.

9odava recordaba el relato de co una joven se1orita haba tratado deengatusarle con una h+bil artia1a, encerr+ndose junto a "l en su alcoba. #uando

abos fueron sorprendidos, ella haba dado por sentado que su failia lo obligaraa desposarse. !ero dado que aquella alcoba era la que ocupaba el propio lord%reen&ood, y este haba aditido en incontables ocasiones ser un consuadolibertino, tan solo consigui que su virtud y el honor de su failia se viesenaltaente coproetidos.


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en"rgicaente hasta que logr que todo rastro de ancha o suciedaddesapareciese.

Absorta en sus pensaientos, dio un respingo cuando advirti un ligerochasquido a sus espaldas. %ir apresuradaente el rostro por encia del hobroy contuvo la respiracin dejando que sus ojos escudri1aran nerviosos el lugar.Norah pesta1e al ver a un peque1o p+jaro picoteando en el interior de un viejotronco cado en el suelo, cubierto por un vetusto usgo. 8olt el aire que habaretenido en sus pulones y suspir aliviada.

;$enuda tontaB ;se reprendi a s isa. 8e estir y trat dedesentuecer los 4sculos de su espalda.

Debera relajarse. 8eguraente, en esos oentos, el sinverg:en2a de

#esar #randall estara espantosaente enredado con los uchos preparativos queoriginaba el ininente regreso del arqu"s al hogar.


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escalofro. A pesar de todo, se oblig a over los pies, uno tras otro,introduci"ndose lentaente en el agua ientras rogaba en silencio para que aquel

ro tuviese la escasa profundidad que pareca poseer. Agradeci que la corriente nofuera deasiado aniosa aquel da, sobre todo, cuando por fin alcan2 su objetivosin que e7istiera el enor peligro de ser arrastrada por las aguas.


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Captulo 2

'ord %reen&ood, arqu"s de Devonshire, galopaba sobre su onturadejando que la suave y c+lida brisa estival golpeara dcilente su rostro, agitandoa su ve2 su larga y brillante cabellera negra.

Aunque en un principio haba previsto su regreso a %reenhouse para elviernes, el poco afortunado encuentro que haba antenido con su dulce y afableproetida, Ivette Feauont, en !ars, haba precipitado su regreso.

$arcus contrajo la andbula al recordar co haba sorprendido a la jovenen el invernadero que posea la herosa villa de los Feauont en una situacin untanto coproetida junto a Hean'uc, el joven y lo2ano jardinero contratado por la

failia tan solo unas pocas seanas antes.#uando se vio descubierta, ella haba estallado en sollo2os y balbuceos,

culpando de su inapropiado coportaiento al pobre uchacho, el cual se liita irarla con los ojos abiertos coo platos por la sorpresa que le produjo or a labella y virginal Ivette alegar haber sido presa de alg4n tipo de encantaiento+gico y poderoso, epleado por el joven.

!or supuesto, $arcus haba roto el coproiso de inediato.;!ero, se1or... ;le haba iplorado !ierre Feauont, padre de la

uchacha, al tiepo que trataba de seguir los r+pidos pasos del arqu"s.


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aquella joven insulsa y necia. @l era suficienteente rico para poder elegir unadaa apropiada de entre la flor y nata de la aristocracia inglesa. 6 aunque por

desgracia tabi"n era sobradaente conocido por sus iebros, posea suficientedinero coo para coprar el afecto de aquella que a "l se le antojara.Al diablo con la joven se1orita FeauontB, se dijo a s iso, endureciendo

a4n +s la andbula. 6 al diablo con las ujeresB @l estaba uy bien cooestaba3 rico, soltero y, seg4n decan las alas lenguas, disoluto.

'os profundos jadeos del caballo llaaron su atencin. u" podra haberle ocurrido


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Desde luego era una joven bonita. No deasiado voluptuosa, de acuerdo,pero s que tena un cierto aire seductor que costaba definir.

9ras vacilar un segundo, trastrabill y se dej caer sentado junto a ella,inspeccion+ndola a continuacin con deteniiento.Aquella e7quisita ropa interior solo poda pertenecer a una daa, y no a

una capesina, coo haba conjeturado en un principio. 8us labios se curvaron enuna sonrisa al conteplar la densa y larga cabellera que se desparraaba sobre elsuelo en grandes bucles. A $arcus le sorprendi el chocante contraste que lasuperficie del pasto ejerca sobre aquel intenso granate.


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;*>u" ;'o ir desconcertada antes de clavar sus ojos en el brillante arode oro que penda del lbulo de su oreja i2quierda.

!or un instante a "l le pareci que la uchacha tena la intencin de deciralgo, pero en ve2 de eso, dio un brinco y sali corriendo. @l se levant tratando dedetenerla, pero la joven sorte su poderoso cuerpo h+bilente.

Norah se adentraba cada ve2 +s en el bosque, que se haca +s tupido yoscuro por oentos. 9ena que hacer verdaderos esfuer2os para no e7traviarse,tratando de eori2ar cada +rbol y cada piedra con la que se cru2aba, ientrassenta co las peque1as raitas que descansaban esparcidas por el suelo sequebraban bajo sus pies descal2os. 8u cora2n pareca querer escap+rsele delpecho.


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@l, intuyendo sus pensaientos, se apresur a decir.;Deje de teblar coo un cervatillo herido, no pretendo causarle ning4n

da1o. ;*6 co s" que no iente;*9engo pinta de ser un hobre sin palabra;$+s bien tiene pinta de ser un pirata. ;Norah dej que las palabras

surgieran de su boca de anera espont+nea. Abri los ojos y pesta1e, asobradade haberse atrevido a decir seejante barbaridad.

$arcus no pudo evitar que de su pecho eergiera una fuerte y profundarisotada. Ha+s le haban dicho nada parecido, pero lo cierto era que podacoprender perfectaente el porqu" de su desconfian2a. #on aquella incipiente

barba de dos das, los ropajes polvorientos tras el largo caino, y el arete de oroque e7hiba siepre en su oreja, poda iaginarse el espantoso aspecto que ofrecaen aquellos oentos.

;*6 si lo fuera ;le pregunt "l.


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Norah sinti coo si con aquel siple gesto hubiese acariciado su piel. Node una anera convencional, sino peligrosa y desconcertanteente sensual. Aquel

pensaiento la turb. Not coo le ardan las ejillas y un ine7plicable calor sedesli2 por su vientre. 5n calor que nada tena que ver con el hecho de quetranscurriera ya el es de agosto. No, fue una sensacin ucho +s placentera?coo un cosquilleo.


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8in el enor esfuer2o, $arcus, inclinado sobre su silla, la i2, ignorando susprotestas.

Norah no daba cr"dito a lo que ocurra. Aquel hobre la instal delante de"l, rode+ndola con uno de sus fuertes bra2os, y a4n as, anejaba la ontura con elotro con una asobrosa destre2a. Aquello era huillante. 8e negaba a seracarreada coo si fuese un chiquillo. $aldito fuera el car+cter de los hobresB#rean tener el derecho de decidir lo que una ujer necesitaba en cada oento.9rat de apartar el fuerte bra2o que la rodeaba por los hobros, pero solo logrque "l la sujetara con +s fuer2a, deostr+ndole que no podra huir.

'an2 un suspiro de frustracin y se resign ante la deterinacin de "l,sabiendo que si consegua llevarla hasta %reenhouse, no tardara un segundo en

descubrir que no era +s que una siple sirvienta. 9o aire y se acood ejoren la silla.

5n gru1ido son a su espalda.;!or todos los santos, ujerB Deje de overse asB ;refunfu1 $arcus.;*!or qu" ;8e encogi de hobros.;!orque si continua haci"ndolo, cabe la posibilidad de que e ponga

cari1oso, onada.Norah decidi que lo ejor era peranecer invil y antener la boca

cerrada. 8in ebargo, tuvo que hacer verdaderos esfuer2os para no chillar cuando

"l la atrajo hacia su cuerpo, acood+ndola ejor contra su torso.Fuen DiosB 8e hallaban tan cerca que poda sentir el calor que eanaba de

su piel.5n intenso estreeciiento le recorri la coluna vertebral.No, no y noB Deba relajarse, se dijo a s isa, tratando de respirar con

noralidad. A enos que quisiera que todo se fuera al traste, deba antener lacabe2a en su sitio y pensar en co hallar una anera de escapar de toda aquellaenrevesada situacin. #err los parpados e inspir una profunda bocanada de aire.5n instante despu"s, descubri que con aquel gesto solo haba logrado paladear el

aroa treendaente asculino, a usgo y tierra ojada, que "l despeda.*#o diantres poda estar deseando saborearlo +s de cerca *Acaso

haba perdido el juicio Apart r+pidaente ese pensaiento, casi obsceno, de suente, sin coprender qu" deonios le ocurra. 8eejante coportaiento no erapropio de una daa. De hecho, no deseaba especular a qu" clase de ujer seraconfore.

Norah tuvo la sensacin de que el estago se le encoga, le daba tresvueltas de capana y epeque1eca al iso tiepo cuando "l apro7i su bocapara preguntarle su nobre.


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Deasiado cerca de su odo. Fueno, deasiado cerca de cualquier parte desu cuerpo, tei ella apretando los labios.


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espalda.#uando llegaron a su destino, Norah apenas pudo soportarlo un segundo

+s. 8in aguardar a que "l detuviese por copleto a su caballo, se desli2 de lasilla de ontar de un salto y se apresur a tocar con los pies el suelo, teiendo uninstante despu"s por la integridad de sus tobillos.

;$aldita seaB *=a perdido el juicio ;$arcus abri los ojos de par en par.;Ch, vaosB ;resopl ella;. 9an solo ha sido un salto.;*5n salto !odra haberse roto una piernaB;No e7agere ;repuso ella ientras se diriga al lugar donde se hallaban

sus ropas. 'as recogi antes de ordenarle con el ce1o fruncido;3 Vu"lvaseB;*Insin4a usted acaso que corro el peligro de ver algo que no haya visto

ya ;pregunt "l, envolvi"ndola con una intensa y descarada irada.;No sea ajadero y vu"lvaseB ;insisti ella.$arcus decidi obedecer.;Dgae... ;coen2 a decir "l. 'an2 una irada al cesto de ropa que

pareca estar olvidado a un lado de la orilla y arrug el ce1o;. *>u" se suponeque haca usted aqu sola

;*#ree que preciso copa1a para dare un ba1o;8, cuando lo hace en un ro y no en la seguridad de una ba1era.;VayaB *Acaso es ahora es un delito ;resopl ella con desd"n ientras

sus dedos se afanaban en cerrar con rapide2 los peque1os botones de su vestido.;No creo haber dicho seejante cosa, sin ebargo, debe reconocer que no

es, digaos, apropiado. 8obre todo para la esposa de un caballero coo lord%reen&ood ;respondi "l, esfor2+ndose para que no le teblara la vo2 debido ala risa que coen2 escapar de sus labios.

No hubo respuesta.


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%eorgina rebusc bajo su cofia y e7trajo uno de los alfileres que sujetabansus cabellos.

;8er+ ejor que te pongas esto. ;u" tal estoy ;le pregunt a la doncella al tiepo que se alisaba lafalda con una ano.

;*Deseas or la verdad, o una entira piadosa


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roper haciendo ocasionalente alg4n grotesco ruido con su garganta, coo sifuera a cantar o algo parecido para avisar de su cercana.

Aquello era lo que +s e7asperaba a Norah3 la prepotencia de la que hacagala.;Veo que hoy reina un huor e7celente en esta casa ;coent el hobre

con sarcaso, deteni"ndose a la altura de las uchachas.Norah levant el rostro y sus ojos se toparon con la enojada y penetrante

irada de "l. DiantresB


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apuesto desconocido, logrando huir ientras el pobrecillo peraneca hablandosolo. #asi se senta culpable de haberlo hecho quedar coo un onuental

botarate. Aunque solo un poco, claro. 9ens las coisuras de los labios y evit queuna sonrisa se instalara en ellos.Euera, el repiqueteo de los cascos de un caballo, atrajo inediataente su

atencin, provocando que sus pensaientos quedasen apartados en alg4nrecndito rincn de su cabe2a.


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Norah parpade.


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notando a su ve2 coo la sangre le hua del rostro.;6 con esto se confiran is palabras *No es as, se1orita Devlin ;

pregunt lord %reen&ood con una e2cla de chan2a e irona a partes iguales.


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que se encontraba dividida en varias 2onas3 unas destinadas al trabajo? otrasreservadas al descanso del personal.

Norah abra y cerraba tarros, llenaba cestillos con galletas y despu"s loscolocaba en el prier lugar que se le ocurra, tratando de aparentar hallarseatareada.

;*Nada !or DiosB ;buf la doncella;. Arranc la aguja de tu peloBNorah le lan2 una r+pida irada, tragando saliva al iso tiepo.;9odos los caballeros lo hacen... ;dijo sin resultar convincente para nadie.

#osa bastante lgica, pues ni tan siquiera result serlo para s isa.;No digas bobadasB Nadie hace eso.


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peque1a hoga2a de pan que to del interior de un cestillo.Norah la atrap en el aire y despu"s la ordi.

;9e recuerdo que yo tengo veintitr"s, soy cuatro a1os ayor que t4.=a2e caso, s" de lo que hablo3 esas cosas no ocurren ;le dijo, abandonando eltrapo sobre uno de los estantes de la vieja alacena de caoba;. Ade+s, *qui"n hadicho que los enlaces con la alta sociedad sean siepre felices ;'evant undedo;. 8in obviar que son iposibles.

;*No lo son ;pregunt %eorgina sin conviccin, sent+ndose de un saltitosobre la esa que divida la inensa cocina en dos.

;No, no lo son. 'a verdad es que casi nunca ;'a vo2 de Norah tebl alrecordar.

;!areces saber ucho sobre el tea ;respondi %eorgina, ordiendootra hoga2a de pan que e7trajo de la isa canastilla.

Norah apoy abas anos en el tablero y a1adi3;8" lo suficiente.Abas uchachas dieron un brinco al iso tiepo cuando la se1ora

=ayes irrupi en la habitacin, haciendo que %eorgina descendiese de suiprovisado asiento y las dos tratasen de recoponer su iagen en la edida delo posible.

$olly =ayes les lan2 una irada con el rabillo del ojo que las hi2o

enudecer de inediato. 'a ujer prestaba sus servicios en %reenhouse cooaa de llaves desde haca +s de veinticinco a1os. 8u pelo canoso, que sieprellevaba recogido en un estirado o1o y que cubra con una oscura cofia, era laguinda que le faltaba al pastel para hacerla parecer la bruja de cierto cuento queNorah haba ledo tiepo atr+s. 8u aspecto descarnado y sus huesudos dedoscasaban a la perfeccin con su seblante serio y foral. 9odo ello erainensaente adecuado para la tarea que le haba sido encoendada. 8inebargo, Norah no poda dejar de intuir que debajo de toda aquella fachada,severa e ipasible, ocultaba la personalidad de una ujer sensible y copasiva.

9al ve2 aquella ipresin se debiese al odo que trataba a los epleados. #iertoque anejaba las labores del personal con pu1o de acero, no obstante, se cuidabade prestar la atencin debida a todas y cada una de las quejas u observaciones queestos le anifestaban.

;*Dnde te habas etido 9e he buscado por todas partes, uchacha ;ledijo a Norah antes de apro7iarse a ella para ponerle en las anos una peque1acesta con jabones, dos grandes lien2os de algodn y un cepillo de cerdas suaves.

'a joven oje el contenido del canasto sin coprender que significabaaquello.


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;'ord %reen&ood est+ esperando a que le subas esto ;la infor $olly.Norah lan2 una fuga2 irada a %eorgina, notando coo el seblante de

esta pareca haber perdido todo su lo2ano color.;!ero... ;coen2 a decir;, lord %reen&ood estar+ en la tina...;As es, querida ;respondi la se1ora =ayes sin dar deasiada

iportancia a aquel hecho.


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nadie pareci or su llaada.Aguard un oento, antes golpear de nuevo con +s fuer2a. #uando

finalente la vo2 del arqu"s respondi al otro lado, asi el poo fireente ytras inspirar hondo dos veces, lo gir sobre s iso, entr y cerr tras ella.Norah, decidida a seguir el consejo del aa de llaves, clav la irada al

frente y cain hasta la chienea para a continuacin e7tender los gruesos pa1osde algodn sobre el div+n que descansaba ante ella, evitando irar hacia el recododonde se encontraba el hobre disfrutando del ba1o.

Aquel aposento era tan inusitado coo lo era su e7traordinario propietario.


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;Deje de hacer eso ;protest ella con vo2 ronca sin poder apartar lairada de aquella fuerte espalda.

;*>u" deje de hacer qu" ;pregunt "l con una uestra de falsaingenuidad.;


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tratando de que su cuerpo y su cabe2a recuperaran la e7traviada noralidad.8enta un e7tra1o nudo en el estago, que le era casi iposible controlar. 9rat

de aprisionar dos bocanadas +s de aire en el interior de sus pulones. De prontoel repetitivo eco de las capanadas del reloj inund los aplios y solitarioscorredores de la ansin, advirti"ndole del retraso al que se e7pondra de noponerse en archa de inediato.

Norah atrap el bajo de su falda con los dedos y baj las escaleras de dos endos, corriendo a toda prisa hacia la biblioteca. 8i se retrasaba, el se1or #randallinsistira en saber dnde haba estado etida durante todo ese tiepo, y ella notena intencin de dar a aquel hobre ning4n tipo de e7plicacin que no se ci1eraestrictaente a su trabajo.

De pronto arrug el ce1o.*Desde cu+ndo restregar la espalda del patrn se haba convertido en una

de sus obligaciones Fuen DiosB


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#randall abandon la copa sobre la repisa de la chienea y gir su rostropara clavar nuevaente los ojos en ella.

;*8abes por qu" est+s aqu ;pregunt.Norah arrug el ce1o ante aquella obviedad.;!resuo que desea dare una reprienda.;As es, se1orita Devlin. ;'a ir ce1udo;. #reo que coo ayuda de

c+ara del arqu"s es i deber el advertirle de que est+ usted uy cerca de serdespedida.

8in poder reediarlo, sus ojos se abrieron de golpe. 8i perda aquel epleoestaba perdida. 9endra que trasladarse a otro lugar. Algo que deba evitar a todacosta, ya que en esos oentos no le convena llaar deasiado la atencin. 6

haba pocas cosas que la llaasen +s que el despido de una doncella, que a buenseguro se convertira en la tertulia de la hora del t".

=asta el oento todo le haba salido de aravilla para e7ponerse ahora aque el hobre contratado por su padre diera con ella. No cuando con seguridad laobligaran a regresar a Virginia, a su casa, y a un funesto destino que no deseabarecordar.

A Dios gracias, tras aquellos arcaicos uros no corra ning4n peligro. Alenos ninguno que procediera del e7terior. 6a que seg4n le haba coentado%eorgina, en aquella casa rara ve2 se celebraba baile, cena o aconteciiento

alguno.8uspir con resignacin.;'o laento, se1or #randall ;coen2 a decir con evidente tensin;.

!ero proeto sujetar i lengua en el futuro.;6 un cuernoB ;apunt "l con sarcaso, antes de a1adir;3 *#rees que soy

est4pido, uchachau"...;*>ue si crees que soy un botarate

;NoB ;e7cla Norah al tiepo que echaba un vista2o hacia la puertacerrada;. 'e aseguro, se1or #randall, que ja+s he credo tal cosa. 8i e da unaoportunidad, le proeto que tratar" de antener las foras. 8" coportare yantener la boca cerrada y...

;No estoy tan seguro... ;la interrupi, y a continuacin dej que unasorda pausa flotara en el aire. Inerso en aquel dilatado y deliberado silencio,#randall se sirvi otra copa de brandy, agitando el dorado lquido antes de llevarlolentaente a los labios.

Norah coen2aba a sentirse desesperada.


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;8e lo suplico se1or #randall, yo...;94B ;ascull #randall entre dientes;. 'o 4nico que has hecho desde

que llegaste a esta casa, es... ;se detuvo, agitando despu"s la cabe2a;. !or elaor de DiosB $e est+s haciendo perder la corduraBNorah lo ir confundida sin saber co deba reaccionar ante seejante

declaracin.;6o no hago tal cosaB ;aleg ella en su defensa.;>u" deonios sabr+s t4B ;la contradijo "l, estrellando la copa de cristal

en el interior de la chienea apagada.


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anos en el fro y arole1o revestiiento de la chienea.9odava areada, advirti el fro brillo del ati2ador y no lo pens dos veces3

lo aferr apresuradaente y gir su cuerpo, al2ando al iso tiepo aquellaiprovisada ara sobre sus hobros con la intencin de asestarle a #randall unbuen golpe de ser necesario.

!arali2ada de iedo, Norah se detuvo y baj lentaente los bra2os. 'ecostaba creer lo que conteplaban sus atnitos ojos3 el arqu"s de Devonshire,con el rostro descopuesto por la furia, aferraba por el cuello a #randall ientraseste 4ltio teblaba coo una hoja oto1al arrojada al viento.

A4n con el pelo ojado y a edio vestir, %reen&ood lo retena aplastadocontra uno de los paneles de nogal que revesta la pared de la estancia. $arcus,

cubierto tan solo por unos cal2ones de lana y sus botas, apenas haba tenidotiepo de abotonarse la caisa. Norah clav la irada en aquel fuerte torso ytrag saliva antes de coprender lo que realente estaba a punto de ocurrir3 sinada ni nadie lo ipeda, ese icono de virilidad, del que ella no poda apartar losojos, partira en dos el cuello de aquella libidinosa sanguijuela.

;#o te atrevesB ;rugi $arcus;


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copleto, al tiepo que la acuchillaba con la irada.Norah desencaj la andbula y lo ir pasada sin poder creer lo que oa.

Aquel hobre era realente detestable, un aldito autcrata que trataba a lasujeres coo si fuesen tan solo despojos.


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#egado por la furia, $arcus traspas el ubral de la puerta, arrastr+ndoloconsigo y provocando a su ve2 que los de+s iebros del servicio se echaran

r+pidaente a un lado para evitar trope2ar con abos.A pesar de hallarse en clara desventaja fsica, #randall coen2 a lan2aranota2os a ciegas tratando de soltarse. 5n ataque que el arqu"s no pareca nisiquiera notar.

;$aldito desequilibradoB ;bra $arcus. Dio una fuerte patada alportn principal y lo arroj fuera de un solo epelln.

#randall trastabill y cay sentado sobre el duro suelo repleto de guijarros,levant+ndose entre juraentos un segundo despu"s.

;9e equivocas en una cosa, #randall, t4 ya ni siquiera eres un criado, ahora

no eres +s que una aldita y sucia rata de cloaca ;estall $arcus con violencia.'a brusquedad y rapide2 con la que lo sac de la casa haba dejado a todos

atnitos, de anera que tan solo pudieron liitarse a observar en silencio sinatreverse a intervenir o ediar para tratar de calar los +nios.


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que te encontr" junto a i ayuda de c+ara ;dijo "l, clavando la irada en elsonrojado rostro de ella.

;*#o puede decir algo seejante 6o no he tenido la culpa de lo que haocurridoB;#ierto, no la has tenido ;aditi "l;. 8olo digo que desde que te

cono2co, que no es deasiado tiepo, te coportas de una anera poco co4n,e7poni"ndote al riesgo de una fora desedida.

Norah e7hal un suspiro.;!ues agradecera que ilord e indicara la ejor fora de evitar ese

peligro al que se refiere en una casa donde acostubran a citarte a solas en labiblioteca o a obligarte a frotar la espalda del patrn ;puntuali2 ella de anera

orda2.;Dios santoB No soy ning4n s+tiroB ;io "l.;No es eso lo que he odo. De hecho, he odo tantas cosas sobre ilord que

e resulta increble que a4n no haya saltado sobre para tratar de llevare a sudepravado lecho ;coent ella con perspicacia al tiepo que observaba el apliodesgarrn en su vestido.

'a repentina carcajada de $arcus atrajo la atencin de ella, que recul unpaso cuando "l e7tendi la ano para situarle la tela rasgada nuevaente sobre elhobro.

Norah contuvo la respiracin, clavando la irada en "l.;*


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Norah sinti una oleada de calor por todo el cuerpo. 8us dedos sedebilitaron, dejando caer accidentalente su copa y derraando el contenido

sobre la herosa alfobra.;'+stia, era un buen brandy ;susurr "l sin apartar los ojos de los deella.


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;*!ero qu" deonios est+ diciendo;#reo que he hablado lo suficienteente claro3 s" que lo deseas. !uedo

notarlo en la fora en que e iras.


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debes saber que cose habitualente 4nicaente para daas.Norah sinti un atisbo de p+nico y, sin ebargo, no pudo evitar que su

irada posara en el coien2o de la usculatura que se distingua bajo la caisaabierta.;6o... ;9rag saliva y se esfor2 en apartar los ojos de aquel cuerpo. !or

supuesto que distingua el trabajo de le couturier, coo solan llaar al sastre. *6qui"n no lo hara Aquel odisto solo aceptaba reali2ar un traje de caballerocuando se trataba de un conocido o alguien con cierta relevancia. 'os trajes quecosa para su padre eran bastante siilares al que "l llevaba puesto en aqueloento;.


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Captulo 4

Aquella seana pareca haber transcurrido considerableente +sdespacio que las anteriores.

Durante los cinco das posteriores a su encuentro en la biblioteca con lord%reen&ood, Norah se suergi en la rutina de su trabajo3 por el da lipiaba,fregaba, enceraba los suelos y enjuagaba la cuantiosa colada, y por las nochespreparaba en la cocina, junto a %eorgina, poadas hidratantes para la piel, hechasa base de iel y distintas frutas.

Norah no poda evitar que una sonrisa aflorara en su rostro cuando ladoncella abra la boca sorprendida, al coprobar los r+pidos resultados que

producan aquellos aravillosos ung:entos, que incluso la se1ora =ayes les habasolicitado para ella isa. 5no de esos ilagros en tarro, los haba llaado.

De aquel odo haba pasado el lunes, luego el artes y as sucesivaentehasta llegar al viernes, su da de descanso.

Durante todo aquel tiepo haba evitado con notable "7ito a lord%reen&ood que, afortunadaente para ella, fue reclaado con urgencia en una delas uchas plantaciones de cereales que posea cerca de la Abada de Eountains.

'os negocios del arqu"s abarcaban un aplio abanico de posibilidades3desde los trigos que se cultivaban en Inglaterra, a la hoja de tabaco que su flota de

barcos trasportaba desde el nuevo undo al resto de


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que aquella a1ana %eorgina sera la que lipiara la colada en su lugar. 8e tapla boca con la ano, tratando de repriir un grito y corri todo lo r+pido que sus

pies se lo peritieron. ecordaba perfectaente el pavor que le produca a la jovendoncella caer al agua, ya que no saba nadar.#uando lleg a la orilla se detuvo en seco con la respiracin entrecortada.

$ir a un lado y al otro, y, aunque no distingui el cesto de ropa por ningunaparte, saba que no poda estar del todo segura de que aquella canasta no hubiesecado al agua junto a la doncella.

8in detenerse a pensarlo dos veces, coen2 a abrir r+pidaente lospeque1os botoncillos de n+car que cerraban la parte superior de su ligero vestidode algodn a2ul.

Apenas haba conseguido separar tres botones, cuando ante ella eergi delagua un hobre.

Norah se qued petrificada en el sitio, coprendiendo que el +s niooviiento por su parte alertara a lord %reen&ood de su presencia all.


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;No, pero, pero... yo... ;balbuce ella y se dio la vuelta r+pidaente,d+ndole la espalda.

;*5n arrebato de virtud ;i "l ientras se pona los pantalones quedescansaban sobre una roca cercana. 9ras colocarse sus botas de ontar, seapro7i a la uchacha, que continuaba invil, evitando irarlo.

;!or DiosB 9ienes veintitr"s a1os, *recuerdas ;se burl, apro7iando suboca al odo de ella.

Norah dio un treendo brinc y gir el rostro para irarlo. #uando lo hi2o,trastabill y trope2 fuerteente con el duro torso desnudo de "l. $arcus laenvolvi entre sus bra2os para evitar que cayese y ella retuvo abruptaente larespiracin.

;No cre que fueras de las que se arrojan a los bra2os de un hobre a lapriera ocasin que se les presenta ;se burl "l con vo2 ronca, sintiendo el rocede sus suaves pechos a trav"s de la tela del vestido.

Norah apoy abas anos sobre su torso y le propin un fuerte epelln,consiguiendo que la liberara.

;$aldito cretinoB *Acaso cree que voy a tolerar que...Norah no pudo terinar la frase. $arcus se precipit, literalente, sobre

sus labios, ipidi"ndoselo. 'uego despla2 su fuerte ano tras la nuca de ella,enredando sus fuertes dedos entre sus cabellos, haciendo que aquel contacto fuese

a4n +s intenso.


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abruptaente de "l. No poda dejar de respirar agitadaente al tiepo que sussenos suban y bajaban de fora descontrolada. 8enta coo le ardan las ejillas,

consuidas por un sofocante calor.;Debo regresar a la casa. ;8e oblig a decir.;'o que deberas, se1orita Devlin, es confesar ese secreto que tanto te

obstinas en ocultar.;No s" a lo que se refiere. ;9rat de cainar, pero "l se lo ipidi

obstaculi2+ndole el paso y sujet+ndola por el bra2o;. 9engo ucho trabajo, se1or;insisti Norah.

;*#rees que no s" que hoy es tu da libre;8u"ltee el bra2oB

;*>ui"n te regal ese perfue ;la interrog.;*>u" ;Norah arrug el ce1o. Aquel hobre deba de haber perdido

totalente el juicio.;6a e has odoB uiero decir justaente eso3 que


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no volver+s a verlo.;No puede usted iponere tal cosa, ilordB ;i ella con nerviosiso.

;!uedo y acabo de hacerlo. ;Al2 una ceja.Norah cru2 los bra2os ante la cueva de sus senos de una fora casi infantil.;!ues yo ao a ese hobre. ;$inti;. As que veo difcil lograr lo que

usted e pide.;9ranquila, preciosa... ;8e burl el arqu"s. 8e apro7i a ella y le dio un

fuerte y r+pido beso en los labios, antes de eprender el caino de vuelta a casa.;*9ranquila;*epites siepre las palabras coo una cacat4a ;buf "l;. A partir de

ahora ser" yo quien caliente tu fro lecho, preciosa.


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saga2ente.;6a te dije que no hay tal cosa.


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Captulo 5

;#on esto no te servira ni una jarra de i peor cerve2a. ;


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barra al tiepo que serva un par de jarras de cerve2a.;


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;*#u+ndo partios ;respondi #randall con vo2 pastosa al tiepo queHohn colocaba una jarra llena, nuevaente ante "l.


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Captulo 6

;*!uede detenerse all, se1or 8cott ;Norah se1al con su dedo unpeque1o negocio a un lado de la cal2ada. 8u escaparate, repleto de telas y la2os deinfinidad de g"neros y colores, era treendaente llaativo.

;!arece un lugar uy fino, *no te parece ;coent el hobre, al2andouna de sus cejas al tiepo que detena el carruaje justo donde ella se lo habaindicado.

;As es, pero necesito con urgencia una cofia nueva y da la casualidad deque este es el 4nico sitio en todo 'ondres donde las venden ya confeccionadas.!roeto que tan solo tardar" unos inutos, se1or 8cott.

;9arda el tiepo que precises, jovencita, yo a4n tengo que hacer un par derecados +s para la casa del arqu"s. 'a se1ora =ayes e pidi que coprara unpar de sacos de harina, sal y sebo para dar lustre ;arrug el ce1o;. Aunque estoycopletaente seguro de que eso 4ltio lo copr" la seana pasada...

Al or aquello, Norah no pudo evitar que sus ejillas ardieran yenrojecieran s4bitaente.


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arrugas de su falda con una ano y cru2 la puerta de Adelaidas, un peque1o ylujoso estableciiento, sobradaente conocido por las diestras anos de su

propietaria a la hora de confeccionar las prendas y vestidos +s soberbios yelegantes de 'ondres.


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palabras.


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agradeciiento.;*Deseas algo +s ;pregunt la ujer, ientras terinaba de envolver

la prenda con un suave pliego de papel. A Norah le pareci que la vo2 de adaeAdelaida se haba tornado suaente afable.;!uede llaarla se1oritaB ;a1adi lady !atterson, provocando que los

asobrados ojos de las presentes se clavasen en Norah, logrando que la jovennotase que su cuerpo epeque1eca por oentos.

$adae Adelaida desencaj la andbula y ir alady !atterson,desconcertada.

;'a se1orita es i querida sobrina, adae. 6 coo tal deseo que usted latrate.


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increble lo h+bil que era para ser tan joven.'a 8e1orita #o7 sonri e hi2o una cort"s reverencia antes de abandonar el

taller junto a su doncella.'ady !atterson no se sorprendi del cauteloso coportaiento del quehaba hecho alarde la joven. 8aba que nadie en su sano juicio se arriesgara aolestarla o incoodarla.


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Norah sonri al or aquellas palabras de los labios de una ujer tan elegantey educada coo su ta. 'uego, la ir ce1uda.

;*6 co piensas evitar que i padre averig:e donde e encuentro;'o habra hecho de todos odos, de haber partido de Virginiainediataente despu"s de ti. =aber aguardado all un tiepo, ha evitado que tupadre sospechara nada respecto a nuestro plan ;dijo lady !atterson antes de queadae Adelaida irrupiera nuevaente en la tienda.

'a ujer acarreaba en sus anos una decena de uestras3 telas de sedaestapada, encajes, y g"nero liso de algodn. 9ras desli2ar la cinta "trica quellevaba apoyada tras el cuello, inici la tarea de toar edidas a la joven Norah.

;VayaB !osee usted una cintura diinuta, se1orita !atterson ;observ

adae Adelaida, anotando una cifra en un peque1o cuadernillo. Norah abri laboca para indicarle el error que coeta al confundirla con una !atterson. 8inebargo,lady !atterson, se apresur a responder por ella3

;Aun as, deseo que confeccione para i sobrina varios de esos c"lebrescors"s suyos, adae. 9engo entendido que son una e7quisite2 ;apunt lady!atterson, lan2+ndole a Norah una irada que le indic lo que podra beneficiarlasaquello.

A ella no le cost deasiado coprender el significado de aquel gesto. 8i lacrean descendiente del difunto arido de su ta, y no de su propia sangre, correra

enos riesgo de ser descubierta.;!or supuesto, iladyB ;respondi la ujer con evidente orgullo al

tiepo que e7traa un enore too de una de las estanteras y lo habra sobre elostrador para que adirasen los bellos bocetos de sus afaados dise1os;. 8olotienen que indicare el estilo que desean, y en pocos das tendr+n confeccionadotodo lo necesario.

#on la valiosa ayuda de su ta y su e7quisito gusto, Norah eligicuidadosaente los odelos que +s le favoreceran y el g"nero en que sereali2aran los isos3 encajes, terciopelos y sedas estapadas.

8e hallaba tan enfrascada en aquel aravilloso pasatiepo que olvid porcopleto que el se1or Anderson pasara a recogerla hasta el iso instante queeste detuvo el carruaje donde haban acordado un rato antes.

Norah apart los ojos de los e7traordinarios bocetos para conteplar alhobre a trav"s del escaparate, y dej caer los bra2os a abos lados de su cuerpocuando vio que Anderson e7traa del bolsillo de su chaleco un peque1o reloj y loojeaba con nerviosiso.

;Debera regresar a %reenhouse, ta ;susurr Norah.;9onterasB ;respondi lady !atterson. Irgui la espalda y gir con gracia


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sobre sus talones para encainarse despu"s hacia la puerta.


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pudo evitar que se le iluinase el rostro.;9ratar" de tenerlo todo a punto el pr7io lunes, ilady ;respondi.

'ady !atterson ofreci su bra2o a Norah, pero esta lo recha2 alegandohallarse algo ejor. !ero si bien no senta la isa sensacin de p+nico que lehaba encogido el cora2n al principio, a4n le teblaban las piernas.

Eueran cuales fueran las ra2ones, se senta coo si le hubiese pasado unacarreta por encia.


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;6 die... *ese sofocante calor tuyo tiene nobreNorah abri la boca y dej caer la andbula ante la perspicacia de su ta.

;*>u" nobre se supone que debera tener;$arcus %reen&ood, por ejeplo... ;respondi la ujer, encogiendo uninstante sus hobros. 'uego sonri con picarda.

Norah no poda creer lo que su ta le estaba diciendo. *Acaso era trasparentepara todo 'ondres

;*6 por qu" $arcus *!or qu" no Iv+n o 9iothy;!orque, querida, no hay dos hobres coo $arcus %reen&ood.;6a...B ;la ir entre las pesta1as;*6 por qu" no te casas t4 con "l ;

resopl Norah entre dientes.

;!ues porque e sobran unos veinte a1os y e faltan energas. !or eso ;respondi la ujer con tono elanclico.

Norah entorn los ojos, fulin+ndola con la irada.;9a $ariel...;*8;*


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Captulo 7


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;8, Hane. Dile que lo recibir" en quince inutos. 6 ll"vale ientras tantouna infusin caliente, tal ve2 as ese ogro se tranquilice.

5na ve2 se hubo archado la joven doncella, lady !atterson lan2 unainquisitiva irada hacia Norah.;*Debo saber algo que a4n no e hayas contado ;indag.;*Algo *Algo sobre qu" ;pregunt Norah, sintiendo coo le ardan las

ejillas.;Algo sobre por qu" cierto arqu"s aporrea i puerta al da siguiente de

archarte t4 de su casa.;No digas tonteras, ta $arielB


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la puerta cerrada, sintiendo infinidad de sentiientos, tan dispares cooincopatibles3 por un lado tena la necesidad de abandonar aquel doritorio y

correr escaleras abajo para tratar de averiguar el otivo de la irrupcin de lord%reen&ood all, y por otro deseaba encerrarse en aquel doritorio y peranecerall hasta que aquel hobre desapareciera de la casa y de su ente.

Norah intuy que aquello 4ltio iba a ser treendaente coplicado, porno decir iposible. 8e llev una ano a la boca e introdujo la punta del dedondice entre los labios, ordiendo despu"s su u1a.

Fuen Dios, aquello s que era e7asperanteB


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Norah al2 su rostro cuando lady !atterson traspas la puerta. 'a ujer,con un gr+cil oviiento de sus caderas, se sent junto a ella.

;Hane, por favor, tr+ee una ta2a de t" ;pidi a la uchacha.


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le produca un escalofro. 8obre todo al recordar por qu" se hallaba bajo laproteccin de su ta en 'ondres. A4n le pareca iposible que su padre se hubiera

dado por vencido despu"s que tan solo tres eses, aunque, por fortuna, pareca seras.;*>u" piensas ;pregunt lady !atterson cuando advirti coo Norah

dejaba su plato a un lado.;$e preguntaba co piensas presentare a esos vecinos tuyos.;!ues con un baile, por supuesto. *#o si no ;8e encogi de hobros

su ta.;*5n baile ;Norah abri la boca.;'a seana pr7ia sera el oento perfecto, dado que adae

Adelaida ya tendr+ preparado todo lo necesario.Norah se hundi en el respaldo de su asiento y lan2 un prolongado

soplido.8u ta la observ con deteniiento antes de a1adir3;'o que no s" es qu" vaos a hacer con tu aspecto.;*$i aspecto *>u" deonios le ocurre a i aspecto'ady !atterson le lan2 una inquisitiva irada antes de responderle.;


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principal estaba custodiado por dos grandes alas que se al2aban de foraajestuosa a abos lados. Desde aquella distancia poda atisbar perfectaente los

enores conductos dobles, y perfectaente alineados, que sacaban al e7terior elhuo de los hogares.Norah se apart a un lado cuando a tan solo un par de etros de ella desfil

un peque1o carroato cargado de fanales y otros enseres que se suponannecesarios para el baile de aquella noche.

9a $ariel, haciendo gala de su reputacin de agnfica anfitriona,pretenda iluinar los jardines tanto coo fuera posible, ya que el aconteciientose e7tendera hasta el e7terior de la propia ansin. As era lady !atterson cuandoofreca una cena o baile3 recargada y espl"ndida? aunque paradjicaente, ja+s

rebasaba el sentido de la elegancia y lo estrictaente correcto.u" te ocurreNorah elev sus ojos y ir a su ta, que se encontraba en el rellano de la

escalera ir+ndola con preocupacin.;No... no es nada ;respondi, llev+ndose una de las anos a su frente

entuecida y cerrando los parpados al iso tiepo.


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'ady !atterson descendi los pelda1os apresuradaente y cuando llegjunto a ella la abra2. #onoca deasiado bien a su sobrina para no entender lo

que significaba ese (nada).;Aqu no va a encontrarte nadie, te lo proeto ;le dijo tratando detranquili2arla, aunque saba que si estaba de Dios el que Fasil Devlin la hallara, niella ni nadie podran hacer nada por ipedirlo.


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$edia hora despu"s, suergida en el interior de la tina que alguien habadispuesto en el boudoir, junto a la ventana.


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seejante cosa de boca del arqu"s.*Acaso aquel peligroso hobre la haba hecho perder el juicio, se pregunt

suergi"ndose un poco +s en la tina y sintiendo al iso tiepo que el calor yel rubor se hacan con el resto de su cuerpo.;*8abe, se1orita ;coen2 a decir Hane;. =e odo que Ada Qipling

vendr+ esta noche al baile.;*Ada Qipling ;Norah arrug el suave ce1o, pregunt+ndose qu"

iportancia poda tener aquel nobre.;8, se1orita.


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Dios santoB, se dijo Norah con las ejillas encendidas. *Acaso haba un clubprivado donde las doncellas y de+s epleados del hogar se reunan para

intercabiar chises sobre sus patrones, pens al tiepo que sala de la tina paradirigirse al boudoir, decorado en tonos celestes. 5na ve2 all, se sent en el div+n ycoen2 a secar el resto de su cuerpo.

;


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Captulo 9

Norah Devlin pas junto al piano @rardKRL de adera de palisandro yatraves despu"s la enore puerta de dos hojas que daba acceso al suntuoso salnde baile. Al2 sus ojos, bellos y fascinados, observando las iperecederas paredesrecargadas y decoradas con ultitud de tallas doradas al aceite que se e7tendanhasta el cielo raso para e7tinguirse all.


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todos is invitados. ;i de anera encantadora al tiepo que abra su abanicode encaje color burdeos y lo agitaba ante su rostro.

Norah advirti el ligero teblor en el labio superior de la ujer. 'uego,eleganteente, lady =arte inclin su cabe2a y con una for2ada sonrisa se e7cusantes de girar sobre sus talones, aferr+ndose al instante del bra2o de uno de loscaballeros que pasaba casualente junto a ella.

;>uerido se1or #o7B ;e7cla la ujer;. Debe usted contare co leha ido a su preciosa hija. 8eg4n he odo, el se1or #ourtney le ha hecho unaaravillosa proposicin.


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@l contrajo el ce1o y sonri antes de preguntar3;*No va usted a presentarnos a su bella acopa1ante

'ady !atterson asi suaveente a Norah por el codo y la invit aadelantarse unos pasos.;#o noB se1or Qipling, esta es i sobrina, la se1orita !atterson.;u"deonios haca nuevaente el arqu"s en ellos

;*'e apetece bailar;*Disculpe ;ir a Qipling.


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Hohann 8trauss, iprescindible en cualquier baile, pero al iso tiepo algoanticuada.


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ano con rapide2, desli2+ndola tras la espalda de ella para atraerla despu"s +scerca de su propio torso. A continuacin coen2 a cainar epuj+ndola

h+bilente hacia el lugar +s recndito y sobro del jardn. Norah se vio for2adaa retroceder adherida a su atl"tico cuerpo, tratando al iso tiepo de notrope2ar con sus pies o con los de su asaltante. 8us piernas se ovieron en sentidocontrario hasta que not sobre la desnuda piel de sus oplatos el fro contacto dela pared que le ipeda continuar reculando. 5na ve2 consigui atraparla entreaquel uro y su propio cuerpo, $arcus a1adi3

;No tena ni la enor idea de que fueses pariente de lady !atterson.Norah not coo el calor inund s4bitaente su rostro hasta el punto de

que sus odos pitaron, record+ndole la huillante farsa que se haba visto obligada

a representar durante eses. No le e7tra1aba lo +s nio que tras lo sucedido"l se sintiera furioso con ella. !ero no haba tenido otra eleccin.

;No creo que i parentesco con ella sea en absoluto de su incubencia,ilord.

;!ues seg4n lo veo yo, creo que s que lo es. 6 ju2go ade+s que e debesuna, sobre todo despu"s de quitarte de encia a ese al nacido de #randall.

Norah trag saliva al or ese nobre.;!ues se lo agrade2co, ilord. Aunque dudo que vaya a recibir nada +s

de i persona por haberse coportado coo se supone que cualquier caballero

habra hecho de encontrarse en seejante situacin ;respondi ella con unprofundo suspiro.

Aquellas palabras le provocaron a $arcus un s4bito ataque de risa.#ualquier otra daa hubiese coen2ado a chillar copletaente despavorida alverse alejada del resto de los invitados y asaltada de aquel odo. 8in ebargo, ellapareca no intiidarse con facilidad. Aquella inslita anera de actuar lo incitabaa descubrir hasta qu" e7treo deba llevar a aquella joven para traspasar losine7pugnables uros que haba construido a su alrededor y tras los que parecaescudarse con bastante "7ito. 8e apro7i cerniendo su poderoso cuerpo sobre el

de ella, haciendo que Norah contuviese un segundo la respiracin y lan2ara uninstante despu"s un geido ahogado, cuando sinti la posesiva presin de la bocadel arqu"s sobre la suya.

8in saber co ni por qu", abri sus rojos labios ante aquella invasin,periti"ndole e7plorar con su +vida lengua su interior. 8inti coo su pulso seaceleraba y aldijo por un oento el aldito e incodo cors", que parecaipedirle respirar con noralidad. 8u sangre pareca hervir en el interior de susvenas y ese chocante calor no tard en e7tenderse por el resto de su cuerpohaci"ndola creer que de un oento a otro se desayara. 8in ebargo, aquel


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desfalleciiento ja+s lleg, tan solo el deseo y el arrebato de locura peranecanjunto a ella ordiendo su ala. Aquel beso se hi2o +s profundo, +s intenso,

puede que incluso carente de inhibiciones. 8e dej llevar, al2 sus bra2os y rode elfuerte cuello de "l al tiepo que una pun2ada apreiante se haca due1a de suvientre.

$arcus apart repentinaente su boca y la ir e7tra1ado. A Norah le fueiposible descifrar si era enojo, furia o conocin lo que reflejaban los ojos delarqu"s de Devonshire.

;VeteB ;le orden "l con vo2 ronca.Norah se qued petrificada. 'a sangre se hel en sus venas s4bitaente y el

calor que antes se haba adue1ado de su cuerpo coen2 a evaporarse tan r+pido

coo haba aparecido. Abri la boca para protestar. !ero $arcus, lejos deescucharla, la interrupi ech+ndose a un lado para que a ella le fuera posibleoverse f+cilente sin trope2ar con "l. 'uego insisti3

;=e dicho que te vayas. $aldita seaB


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besos que h+bilente posaba cerca de sus coisuras.!or alguna ra2n, con aquella joven todo era distinto. 'o haca sentirse

fren"tico, tierno e incluso furioso, pens lan2ando al iso tiepo un juraento.ecapacit un oento sobre co lady !atterson, coincidiendo con "lhaca no +s de cuatro eses, durante una de sus uchas visitas a la ciudad de8an Erancisco, le haba solicitado que adquiriera teporalente los servicios de lajoven coo doncella en %reenhouse, ya que, seg4n ella, deba viajar a Virginia, porlo que se ausentara de 'ondres por un tiepo indeterinado. @l desech la ideade preguntar a la daa sobre sus otivos para evitar llevarla consigo en aquelviaje. 'ady !atterson era una de las pocas daas londinenses que realente lesipati2aban y no dese iportunarla con una serie de cuestiones que podran

resultar ser de ndole personal. As pues, escribi en cuanto le fue posible a su, poraquel entonces ayuda de c+ara, el se1or #esar #randall, infor+ndole de queaditiera a la joven en cuanto esta llegara.

Apret la andbula y clav su irada en el fondo del oscuro jardn alrecordar co lo haba encontrado tubado sobre ella. 8i "l no hubiera estadojusto en aquel oento en la habitacin colindante a la biblioteca....

!refera no pensarlo. 8us dedos asieron con fuer2a el pasaanos de labalaustrada y sinti coo una angustiosa pun2ada aguijoneaba su estago. Allestaba de nuevo ese inadisible reconcoe.


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ella quien lo haba buscado y tentado a propsito, pens al tiepo que girabasobre sus talones, abandonando el jardn y dirigi"ndose al interior de la casa.

$arcus arrug el ce1o al advertir coo el hijo bastardo de su padre, AdaQipling, estaba coo de costubre rodeado de daas y uchachas con ejillasarreboladas. Qipling haba obtenido el reconociiento por parte de Gallace%reen&ood coo su hijo. 6 a pesar de lo ucho que haba insistido el padre de$arcus en que adoptase tabi"n su apellido, este se haba negado categricaentea ello. Aun as, Gallace lo incluy en su testaento, design+ndole un buen pelli2code su fortuna, junto con la agnfica posesin llaada FacJdo&n, denoinada aspor la caracterstica pendiente que la rodeaba.

'ord %reen&ood apart la irada de su edio herano para desli2arla a

continuacin a su alrededor, escudri1ando el saln con sus profundos ojos a2ules.Cbviando las claraente asculinas, una centena de cabe2as feeninas con

herosos tocados repletos de coloridas pluas se ovan de un lado para otroinundando el lugar. !ero ninguna de ellas posea el llaativo color encarnado que"l estaba buscando.

Eue entonces cuando su atencin se pos en las puertas abiertas que dabanal interior de la ansin. Inediataente despu"s decidi encainarse hacia ellas,abri"ndose paso entre los invitados.


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Norah, enfrascada en recordar todas y cada una de las notas y acordes que

contena aquella intrincada pie2a de #hopin, apenas not la presencia de $arcusen la biblioteca. #uando "l abandon el lugar que ocupaba junto a la puerta y seapro7i a ella, esta al2 sus ojos y al advertir la sobra que se avecinaba seincorpor de un salto alej+ndose del piano.

'a e7igua lu2 del candelabro que ella haba posado sobre la cubierta delpiano, alubro el severo e inescrutable seblante de "l.

Norah sinti coo su respiracin se tornaba inconstante al tiepo que notcoo la sangre abandonaba su rostro. 9rag saliva sin apartar los ojos de "l y dioun ligero rodeo en torno al piano para tratar de archarse de all.

$arcus se ovi +gilente y la atrap por abos bra2os antes de queconsiguiera alcan2ar la puerta cerrada.

;*Acaso pretende iportunare adonde quiera que vaya ;le espet ella,agitando al iso tiepo sus hobros sin lograr deshacerse de sus fuertes anos.

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4nico que le pareca racional era el hecho de que deseaba +s. *#u+nto No estabasegura, pero su cuerpo pareca estar dispuesto a averiguarlo.

@l tir con suavidad de su vestido hacia abajo, dejando que este cayera a suspies.


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convirtieran en un delirante frenes. u"deonios significaba aquello 8e pregunt apretando la andbula. #rea que contocarla una sola ve2, el encantaiento al que ella lo soeta se evaporara y no al

contrario. 8e incorpor y se dirigi a uno de los espejos tratando de adecentarse loscabellos.

Norah le lan2 una irada con el rabillo del ojo.


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!or el aor de DiosB *>ui"n te has credo que eres para entrar aqu y seducirede esta anera

;!ues no es que t4 no hayas participadoB ;rugi "l, apoyando al tiepouna de sus fuertes anos en la pared, junto al espejo.;No lo niego... ;coen2 a decir;. !ero a diferencia de ti, yo s" lo que

quiero. ;Desvi los ojos del espejo para posarlos en "l, antes de a1adir;3 6 noquiero volver a verte ja+s.

@l apret la andbula sintiendo que una estocada ortal atravesabacerteraente su torso. Aun as, no os over ni un solo dedo cuando Norah dioedia vuelta y se dirigi a la puerta y sali dando un porta2o.

Norah se detuvo un segundo en el corredor, tratando de respirar. 8u

cora2n pareca querer escap+rsele de su pecho y su pulso no era que digaosucho +s tranquilo. 8acudi su cabe2a, luchando contra las l+grias quepugnaban por escapar de sus ojos, y coen2 a cainar hacia el saln.

*Notara su ta el cabio operado en ella, se pregunt. No tena ni la enoridea si aquello era posible, pero de lo que no le caba la enor duda era de lainteligencia que posea la daa.

;$aldito bastardoB ;ascull entre dientes antes de atravesar las puertasdel saln de baile.


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;8i proete llaare Ada ;dijo "l, reparando al instante en la siluetade $arcus, que apoyado en el ubral de la puerta cercana al @rard, los iraba con

cara de pocos aigos y con la andbula copletaente copriida.;9rato hechoB ;aditi ella, e7tendiendo su ano.Ada la asi suaveente y bes deliberadaente el interior de su u1eca,

sonriendo al coprobar coo el seblante de su herano se haca +s hosco yseco. Despu"s de tanto tiepo, el destino le haba puesto en las anos el araperfecta para poder reali2ar lo que llevaba a1os deseando3 vengarse de su edioherano.

KRL 8"bastien @rard, prier fabricante franc"s de pianos a gran escala,creando la fira de pianos que lleva su apellido.

KSL 'a Elor de 9abacos cubanos de !artag+s apareci en el registro de losnobres de arcas en -S/.


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Captulo 10

$arcus haba pasado los tres peores das que recordaba en sus treinta y dosa1os de vida.

De haber sabido que yacer tres noches atr+s junto a Norah !atterson le iba aprovocar aquel aldito desasosiego, no se habra acercado a enos de treintaJiletros a 'aJehouse. Desde entonces, sus das estaban saturados de la iagende su cuerpo desnudo, su piel aterciopelada y las ntias caricias que aboshaban copartido en la penubra de la biblioteca.


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deliberada pausa que se dilat hasta que pudo observar el parpadeo ipaciente deella;. 8eg4n tengo entendido, hace unas seanas un coronel llaado uiso saber Norah con ipaciencia.

'as noticias del nuevo undo le interesaban particularente.;$ucho. 8eg4n parece se trata de un grasiento lquido que puede sustituir

el aceite de las l+paras y resultar+ +s econico que las odernas l+paras degas. !or lo visto ese coronel ha hallado una especie de enore ebalsesubterr+neo.

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;=a2lo pasar, Hane ;despu"s susurr;3 9engo curiosidad por saber queosca le ha picado a su herano.

;$edio herano... ;aclar "l, arranc+ndole a ella una sonrisa.;!uede usted llaarlo coo desee.;8e e ocurre una cosa... ;susurr Qipling.


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con iles de diinutas florecillas verdes. 8e levant de su asiento antes de seriitada por "l y dio un peque1o paso hacia $arcus.

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asiento.

$arcus alcan2 el vestbulo al cabo de pocos segundos. uerido herano... ;coen2 a decir Ada;. 'o 4nico que e hara

feli2 en esta vida sera ver coo uerdes el polvo ;le confes.$arcus gir su rostro para irarlo.;De verdad que no te entiendo. *9anto odiabas a nuestro padre;9anto coo para no soportar a nadie que ostente el apellido %reen&ood

;le sonri aargaente.;!ues, suerte. ;8e puso el sobrero y coen2 a descender por las

escaleras, antes de a1adir;3 'a vas a necesitar.;Fueno, seg4n parece tapoco e va tan al.$arcus se detuvo en el 4ltio pelda1o de piedra que daba al jardn. %ir y

le dijo3;*>u" deonios tratas de decire;!ues que para variar soy yo quien tiene algo que t4 deseas. ;'o ir

desafiante.

$arcus ascendi de dos en dos los pelda1os que los separaban y enfrent suduro rostro con el de su herano.

;#udate de no ponerte en i caino, Qipling. !orque puede que terineolvidando el triste la2o que nos une. ;%olpe con la punta de su fusta el ala de susobrero, echando este 4ltio un iletro hacia atr+s, antes de decir entredientes;3


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Captulo 11

Norah tuvo especial cuidado de que sus pies no trope2aran con algunas delas aderas sueltas del viejo ebarcadero, aunque iba con +s cuidado con lasque aun sin parecerlo estaban podridas y dispuestas a quebrarse bajo sus pies en eloento +s inesperado. #uando alcan2 su lite, se agarr la falda y se sentcru2ando las piernas bajo su vestido de seda verde. 'uego observ con atencin losdestellos anaranjados del ocaso que se reflejaban en las quietas aguas del lago.

Aquella arcaica platafora de adera que se hallaba en tierras de su ta y seusaba de fora ocasional para recibir la harina que trasportaban los r4sticos botesdel se1or HacJson desde el olino que se ubicaba al otro lado del lago, haba

pasado a forar parte habitual de sus tardes porque desde all aquel oento delda se ostraba incluso +s fascinante que desde cualquier otro lugar.

Norah disfrut del instante.


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serlo. !refera que con el tiepo la terinasen considerando una solterona antesque poner de anifiesto su desli2 con el arqu"s de Devonshire, decidi,

ocultando el rostro con abas anos.*#o poda haber sucubido ante aquel hobre


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;*As que te pare2co un hobre ipresionante ;repiti sus palabras.;No sea usted presuntuosoB ;prorrupi, evitando trope2ar con la

adera rota con la que aparenteente "l lo haba hecho;. No ha respondido a ipregunta.;'ady !atterson se encarg de inforare ;confes "l, resoplando y

al2ando sus asculinas cejas;. No s" por qu" debera sorprenderte. 9e sugieroque dejes de disiular conigo.

;*Disiular ;pregunt desconcertada.;9e aseguro que no soy ning4n botarate. 8" lo que t4 y tu ta est+is

aquinando ;le dijo al tiepo que cerna su cuerpo sobre el de ella.Norah abri los ojos y sinti coo un odioso e inesperado calor invada su

rostro. *Acaso "l haba descubierto su secreto 6 si as era... *'o usara parae7torsionarla

8u ente se inund de todo tipo de preguntas? algunas coherentes y otrasno.


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nuevaente "l se lo ipidi, asi"ndola por el bra2o. u" se apuesta ;ascull Norah a escasos centetros de su rostro.

;5sted isa... ;e7hal cansadaente;. Discutir" con Ada Qiplingeste tea. #oo coprender+ es i deber coo herano ayor ponerlo sobreaviso.

;VayaB Huega usted uy fuerte, lord %reen&ood. !ues d"jee decirle quesu desinteresada advertencia le llegar+ un poco tarde. ;#ru2 nuevaente losbra2os sobre su pecho;. !orque "l ya lo sabe ;inti.

$arcus enudeci. 'an2 un fuerte bufido por la nari2 y a continuacinropi a rer.

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sus supuestos efectos


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;*94 crees ;8us labios se curvaron en una gloriosa sonrisa.;Veo que finalente ha encontrado usted a i sobrina... ;indic lady

!atterson en el instante que entr en la sala, interrupiendo aquel e7asperanteoento.Norah desvi la irada hacia la copa que retena entre los dedos,

agradeciendo que su ta hubiese hecho acto de presencia. !or alg4n otivo nopudo evitar preguntarse si "l se haba burlado de ella, o si por el contrario aquelolor era verdaderaente perceptible.


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;*>u" deonios quieres decir con eso de que no vais a casaros ;hablfinalente lady !atterson.

;#reo que est+ suficienteente claro, ta. 'ord %reen&ood e lo hapedido y debe haber entendido al i respuesta ;e7plic irando a este 4ltio.@l inclin su cabe2a entornando los ojos al iso tiepo.;!ues no veo por qu" no ;opin lady !atterson.;!ues porque ya estoy coproetida, ta ;suspir Norah, teiendo

llevar aquella farsa hasta un punto sin retorno.;*8 ;pregunt pasada;. *#on qui"n


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=aba tenido bastante con Fasil Devlin para ahora soportar tabi"n aquello.


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Captulo 12

$arcus descabalg, entreg su ontura al +s joven de los heranos$atheson y atraves un oento despu"s la puerta del vestbulo.


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aquel a1o sus negocios quedasen severaente perjudicados.!or un oento especul sobre la idea de que aquello fuera tan solo un

juego del destino. 5no en que a "l le corresponda pagar por la vida disoluta yvaca que haba llevado hasta ese oento, cavil, clavando sus ojos sobre laultitud de bosquejos que decoraban las paredes tapi2adas en el iso oentoque tocaban la puerta suaveente con los nudillos.

$olly =ayes con su acostubrada y sobria vestienta, entr en lahabitacin.

;'a correspondencia, ilord ;lo infor, depositando los sobres en ele7treo de la esa.

@l llen sus pulones antes de decir3

;#reo que e ocupar" de eso a1ana ;le indic al aa de llaves.9ras desearle las buenas noches, $olly =ayes abandon el despacho

dej+ndolo nuevaente a solas con aquel inacabable papeleo.$arcus se levanto de la butaca y desabroch los botones forrados de su

chaleco al tiepo que se encainaba hacia la ventana. All, lan2 una profundae7halacin, clavando los ojos en el oscuro anto de la noche. Aunque lo hubieradeseado, le habra sido tan iposible ojear aquellas cartas coo lo haba sidoe7ainar los libros de cuentas. 9al y coo "l lo vea solo le quedaba una opcin3conseguir a esa ujer coo fuese.

!as los dedos por su brillante y espeso cabello negro. !or lo poco quesaba, el herano del difunto esposo de lady !atterson se haba visto obligado ae7iliarse a !ars tras un controvertido atrionio que le supuso la p"rdida de unbuen pelli2co de su heredad, junto a su ttulo. #on tales credenciales, no costaradeasiado hallar a aquel hobre, dado que los cotilleos no eran doinio e7clusivode las gentes de 'ondres. !osibleente, el padre de Norah la estara buscando portoda Erancia, ignorando su aut"ntico paradero. Despu"s de seejante b4squedaagradecera cualquier inforacin respecto a su fugitiva hija, especul $arcusentornando los ojos. *Huego sucio 8in duda. !ero reatadaente efica2. 5na ve2

al tanto de su indiscrecin, su progenitor la obligara a contraer atrionio con "lcuanto antes y ni todos los Ada Qipling del undo podran evitarlo. 8e dijo elarqu"s, escudri1ando la oscuridad a trav"s de los ventanales, ientras unaladina sonrisa se haca con su boca.

Norah aaneci el prier da de septiebre con un insufrible dolor decabe2a. 'a noche anterior haba reaccionado irrefle7ivaente. 'o saba. 6 ahora,con la llegada del nuevo da, era plenaente consciente del alcance de su


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ipulsivo y pernicioso coportaiento. Ccult los ojos con una ano al tiepoque presenta coo una nube de desastre se cerna sobre su cabe2a. Hade y clav

la irada en el techo. No poda dejarse vencer por aquello. No poda y no lo hara,se dijo con un suspiro. 8e incorpor y se dispuso a coen2ar la a1ana coo sinada hubiera ocurrido, suponiendo que tratar de tranquili2arse era lo +sproductivo en aquellos oentos. #on seguridad, tras un vigori2ante ba1o lovera todo +s claro, se dijo.

!ero eda hora despu"s, envuelta en un grueso pa1o de lino, coprendique el ba1o no era la solucin. Norah saba que Ada Qipling, coo era yahabitual, se presentara en 'aJehouse de un oento a otro, y entonces no tendra+s reedio que hacerle partcipe del lo en que haba etido a abos.

Hane se afan en cerrarle los peque1os y argentados botoncillos queatravesaban la espalda del vaporoso vestido, copuesto por un ajustado corpi1o yuna falda larga con vuelo, que se frunca en la cintura. $adae Adelaida, uyacertadaente, haba decidido reali2arlo en nans4KOL de color crudo, con peque1osestapados de tea floral y le haba a1adido coo copleento una apliala2ada verde que envolva y ajustaba su talle. 'a anga, cada y ribeteada enbatista de algodn, se una a la hobrera con adornos de pasaanerasaterciopelados. Norah entenda perfectaente por qu" su ta senta aquellapredileccin por la costurera, ignorando los dise1os de otros odistos +s

populares.Hane le pein el largo cabello rojo, separ+ndolo en dos partes copletaente

iguales, que procur cubriesen sus peque1as orejas. 'uego, con el resto, for unrodete de gran taa1o en la parte baja de su cabe2a, dejando escapar algunosechones que enarcaron su bello rostro.

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;Fueno, lo cierto es que gracias a , abos lo teneos ;suspir ella conabatiiento.

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'ady !atterson entr en la sala haciendo que abos se levantaranapresuradaente de sus asientos. 'a daa hi2o un gesto con su ano para que los

dos se relajasen antes de decir3;Fuenos das ;los salud;. 8e1or Qipling, deseara hablar con usted, sino tiene inconveniente.

;


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;*9eneos botas ;pregunt ella pasando la vista alrededor.;8e las conseguir" en solo cinco inutos ;proeti el uchacho,

otorgando un par de golpecitos en el loo de o+ntico,antes de salir del establopara ir a buscarlas.#uando volvi con ellas, Norah coprob que apenas haban sido

utili2adas y que por fortuna eran casi de su talla. 8e las puso, se incorpor y seapro7i despu"s al caballo. o+ntico retrocedi un paso, relinchando inclusoantes de que ella pudiera asir las riendas.

;*


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del anial sobre su pierna derecha. 9ras caer, el nervioso corcel se pusonuevaente en pie, haci"ndola teer a4n +s por su vida. 'a uchacha trat de

overse fuera de su radio de accin, pero el dolor de su pie la hi2o gritar denuevo. Despu"s, todo a su alrededor pareci desvanecerse, sui"ndola en la +sabsoluta oscuridad.

KOL 9ela de algodn, blanca, de color o bordada, superior al lien2o, peroinferior a la batista. 5sada por las ujeres para blusas, vestidos de verano, ropainterior, etc.

KUL Asientos, cuya fora, perite a una persona sentarse frente a otra.


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Captulo 13

u" deonios ha pasado

%eorgina apart las sabanas a un lado y retir los pa1os que envolvan sutobillo.

;!or lo visto tu caballo cay sobre tu pie.Norah contuvo el aliento al recordarlo.;*


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uy inflaado.%eorgina aplic una cataplasa de patata, acelga y harina de trigo coo le

haba indicado el doctor Fenning que hiciera y despu"s volvi a cubrir lahincha2n.;Al enos tiene ejor aspecto que cuando te trajo aqu, ilord.uieres decir que fue lord %reen&ood quien e encontr;No iporta que e lo agrade2cas ;recostado sobre el dintel de la puerta,

$arcus la observaba con gesto tranquilo e iperturbable. #uando sus iradas seencontraron, ella estuvo segura de que no e7ista en el undo un hobre +sirresistibleente perturbador.

Norah se aclar la garganta al tiepo que la doncella se incorporaba yabandonaba el doritorio.

;Veo que te relacionas de aravilla con el servicio ;se burl el arqu"s.;Clvida que fui parte de "l, ilord.;>uerida, vaos a casarnos. *No crees que deberas coen2ar a tuteare

;sugiri "l.


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$arcus gir sobre sus talones s4bitaente y se dirigi hacia ella, atrapandobruscaente su boca.

Norah dej de sentir el dolor de su articulacin. #asi crey que esta habasanado ilagrosaente. 6a tan solo lo senta a "l, jugando con su boca, con sulengua. Not coo una de sus fuertes anos cubra su seno, percibiendo coo elcalor de la piel de sus dedos traspasaba su fino caisn. 5na ola de calor lainvadi cuando las anos de "l coen2aron a desatarle el fino cordn que cerrabael cuello del caisn.


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i herano.;De ser as, nada hace suponer que saliera usted victorioso.

;*


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una segunda oportunidad. 5nas palabras gentiles y ro+nticas, eso era todo lo queella hubiera deseado escuchar. No obstante, las palabras de "l solo haban

conseguido trastocarla, haci"ndole desear una pronta recuperacin para poder huirdel lado de ese hobre en cuanto le fuera posible.(*!orque en aquel oento no haba otra ejor $aldito cretinoB). *#o

poda haber sido tan est4pida al pensar que el deseo que "l ostraba hacia ella eraalgo +s que carnal 8e senta coo una grandsia tonta. 5na ajadera quehaba credo que su aor era reciproco. #err los parpados lan2ando a su ve2 unjuraento. 6a haba jugado bastante con ella, se dijo, proeti"ndose que a partirde entonces la cosa iba a ser uy distinta. $arcus iba a pagar por todos suspecados para con las ujeres. !ero sobre todo, iba a pagar por haberle destro2ado

el cora2n.


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Captulo 14

Respetado marqus de Devonshire%

"e siento realmente consternado tras recibir en mi casa la misiva que el mensa&ero,enviado por su persona, deposit' en mis manos en su nombre.

Tanto mi esposa como yo mismo nos sentimos tremendamente abochornados por elescandaloso comportamiento de nuestra queridsima hi&a (elne. )in duda le ataer*conocer el hecho de que tras su constante e insubordinada conducta, su madre y yoresolvimos recluirla durante un tiempo en un coleio para seoritas cercano al ch+teau de(hantilly, de donde, por lo que usted relata en su carta, se ha !uado. Roamos acuda a

ars cuanto antes para ponernos en persona al corriente de sus prop'sitos para connuestra hi&a.-uelvo a reiterar mi pro!undo malestar por el comportamiento de (eln,

aradeciendo que obre de la manera que se esperara lo hiciera un caballero de su estatussocial de manera prudente y discreta al mismo tiempo.

"is respetos y pro!undo aradecimiento,

Dare atterson

$arcus pleg con suo cuidado la carta que el se1or Anderson le habaentregado aquella isa a1ana, durante el aluer2o. A continuacin, laintrodujo en el interior del bolsillo de su chaqueta de lana gris dando a su ve2 porsentado que la joven que ocupaba en aquellos oentos sus aposentos y que sehaba negado a verlo durante las tres 4ltias seanas le haba vuelto a entirrespecto a su verdadera identidad.

Al2 el cuello de su chaqueta, encogiendo al iso tiepo los hobros

hacia delante. Cctubre en 'ondres era de todo e7cepto c+lido, pens ientrascainaba por el sendero que conduca a su propiedad. 5na ve2 alcan2 a ver lasuntuosa fachada de ladrillo rojo, elev el fuerte entn, clavando despu"s lairada en la priera ventana de la segunda planta, su doritorio. !or un brevesegundo, trat de sacarse de la ente la iagen de ella sobre su lecho con tan soloun blanco caisn que para epeorar las cosas sola desli2arse sobre la nvea pielde su hobro. Apret los pu1os. #asi tena la sensacin de haber tocado aquellapiel.

'a priera ve2 que la vio junto al ro supo que ella sera un problea.


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!osea algo, no alcan2aba a saber el qu", que le deca que no se pareca a las daasque "l haba conocido con anterioridad. No fue tan solo el hecho de hallarla

tubada sobre la hierba, casi desnuda. Aquella certe2a le sobrevino cuando lajoven abri pere2osaente los ojos, ostr+ndole aquel brillo auda2 que nadabasuergido en un oc"ano de color verde. Eue entonces cuando entendi que ella eracopletaente distinta? rebelde, intr"pida y teeraria. Aunque para su desgracia,ahora saba que era igualente terca.

#rea, no, estaba convencido, de que ella le corresponda del iso odo.Notaba coo su piel se inflaaba bajo sus caricias y coo reaccionaba su cuerpoal contacto de sus labios. !ero *por qu" se obstinaba en negarlo, renegando a suve2 de "l $arcus siepre haba credo conocer a las ujeres. !ero cuanto +s

tiepo pasaba con aquella, +s progresaba en "l la seguridad de que no era as.Norah... #elne !atterson... ni siquiera saba co llaarla. Aun despu"s de

haber copartido un ntio interludio, ella continuaba siendo para "l todo unisterio. *!or qu" deonios huira de aquel internado para uchachas *8abralady !atterson que cobijaba bajo su techo a su sobrina prfuga 6 si era as... *>u"ra2ones tendra una daa coo ella para haberlo hecho Deasiadas preguntas yescasas respuestas. espuestas que obtendra cuand

lis haley - cautivar a un dragon

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