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Gala de fe en Río de Janeiro Santa de Misericordia

Madre Teresa: en el corazón del mundo

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P/8-9

Espíritu cristiano en las Olimpiadas

Etapa IV - Año CXXXIII - Tomo 137 - (4440) Costa Rica Domingo 21 de agosto 2016 - XXI del Tiempo Ordinario

Mensaje de la Conferencia Episcopal de Costa Rica

A manera de editorial P/12-13

El bien común como anhelo de nuestra sociedad

¢400

Informe del Estado de la Región

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Centroamérica en grave deuda ambiental

¿Vivimos una guerra de

religiones?El mundo está en

guerra, pero no es una guerra de religiones. Es una guerra por el

dinero, por los recursos, por la naturaleza y por el dominio de

unos sobre otros. Las religiones auténticas

quieren la paz.

Domingo 21 de agosto 2016 Eco Católico2

María Estela Monterrosa S.mmonterrosa@ecocatolico.org

Agosto, mes de la Familia, es una invitación de la Iglesia para reflexionar sobre la im-portancia de las familias en la sociedad y el papel de cada persona dentro de ellas. Este año con el lema “La familia, instrumento de la misericordia de Dios”.

En el marco del Año de la Misericordia, el Obispo de Cartago y presidente de la Co-misión Nacional de Familia de la Conferencia Episcopal, Mons. José Francisco Ulloa, destacó que lo más importan-

te dentro de una familia es el amor y el respeto.

“La familia es la base de la sociedad y el corazón de la Iglesia. La familia es antes que la sociedad porque la sociedad está conformada por familias. Por eso, es lo primero que debe atender el Estado, porque es donde se forman los ciuda-danos”, dijo.

Agregó que para la Iglesia, la familia también es de mu-cha importancia porque tiene origen en Dios. “La base de la familia es el matrimonio y éste está llamado por Dios a ser fe-cundo”, explicó. Por eso, la fa-milia es un aspecto fundamen-tal en la pastoral de la Iglesia.

De acuerdo con Mons. Ulloa, la característica de una familia es el amor entre sus miembros, “comenzando por los padres”, dijo. “La familia es una comunidad de amor, una comunidad de vida”.

Asimismo, destacó el rol de la familia como transmisora de la fe. “Es la primera evan-gelizada y debe convertirse en evangelizadora, por eso la lla-mamos Iglesia doméstica”.

Agregó que la familia es una escuela en todos los aspec-tos de la vida: de formación humana, social, espiritual. “Todo lo que no aprendamos de niños en la familia, no lo aprenderemos suficientemente fuera”.

Familia llamada a transmitir valores

Según el obispo, la socie-dad ha perdido una serie de valores. “La crisis del mundo actual es espiritual y se vive en la familia. Las familias han perdido valores espirituales. Han perdido unidad. Han per-dido su rol de trasmisoras de la fe”. Agregó que “al perder ese sentido fundamental de forma-dora de personas, no cumple su misión.”

En su opinión, los divor-cios y el hecho de que cada vez menos parejas opten por el sacramento del Matrimonio es muestra de que “la cultura de lo pasajero, use y bote”, ha alcanzado el matrimonio.

El prelado comentó que la Iglesia, a través de la Pastoral Familiar, está llamada a acom-pañar a los matrimonios y fa-milias de la comunidad cristia-na en las distintas situaciones, para ayudarles a cumplir su misión.

“Hay que acompañar a to-dos los grupos, a los matrimo-nios que están respondiendo con fidelidad para que se man-tengan unidos, a los que no es-tán cumpliendo plenamente, a los niños, a los jóvenes, a los divorciados vueltos a casar, a

los viudos y viudas”, co-mentó.

Familia: espacio

para vivir la misericordia

Mons. José Fran-cisco Ulloa afirmó que

la familia es una escuela de misericordia. “Es donde el ser humano tiene que aprender a ser misericordioso: aceptar al otro como es, ser capaz de to-lerar, perdonar, convivir y de amar. La familia se convierte así en un pozo de misericordia porque hay amor”.

Agregó que “la misericor-dia trae el perdón, compren-sión, cada uno aprende a refle-jarlo a los demás”.

Para el prelado, muchos de los problemas que enfrentan las familias hoy en día se de-ben a la falta de misericordia. “La misericordia es donde ten-go que tener la capacidad de aceptar al otro con sus defec-tos y con su historia”.

Mons. José Francisco Ulloa, Presidente de la Pastoral Familiar

“La familia es escuela de misericordia”

“Hay que acompañar a todos los grupos, a los matrimonios que están respondiendo con fidelidad para que se mantengan

unidos, a los que no están cumpliendo plenamente, a los

niños, a los jóvenes, a los divorciados vueltos a casar, a los viudos y

viudas”.Mons. José

Francisco UlloaObispo de Cartago

Actualidad

Domingo 21 de agosto 2016Eco Católico 5Domingo 21 de agosto 2016 Eco Católico4

Laura Ávila Chacónlavila@ecocatolico.org

En materia ambiental, Cen-troamérica muestra una situa-ción paradójica: posee una abundante riqueza natural, pero hace un uso insostenible en sus recursos y territorio.

Según el V Informe del Estado de la Región, con ello no se han propiciado mejores condiciones de vida para la población, por el contrario los patronos de consumo compro-meten la disponibilidad futura de los recursos.

Este uso genera impactos sociales y económicos, au-menta los riesgos y provoca crecientes conflictos que hacen cada vez más complicada la ta-rea de los Estados de gestionar el territorio y el patrimonio, en un marco de mayor desarrollo humano.

El tema energético es un ejemplo claro de esa parado-ja entre disponibilidad y uso insostenible de los recursos y que además acrecienta la deu-da ecológica. En tanto la huella de carbono (el territorio reque-rido para absorber las emisio-

nes de gases contaminantes) es el principal componente de la deuda ecológica centroameri-cana.

La situación evidencia que pese a la riqueza y el alto po-tencial con que cuenta la re-gión para producir energía con fuentes limpias y locales, la generación y el consumo están centrados en fuentes contami-nantes, en derivados de petró-leo y leña.

A pesar de que, se reportan esfuerzos en materia energé-tica, los logros son lentos y limitados y no hay cambios significativos, en especial por-que se trata de áreas difíciles de transformar, en un entorno marcado por el cortoplacismo en la definición de políticas públicas y el déficit de inver-sión en los países.

Agua es escaza

Una de las principales ten-siones que señala el Informe está entre la abundancia de recursos y el uso poco soste-nible, especialmente en cuanto al tema del agua, pues existe una oferta amplia y suficien-

te en la región, pero grandes porcentajes de población no tienen acceso a ella, especial-mente en zonas rurales.

En nuestro país, Guanacas-te es la región más afectada por el tema del agua de hecho un estudio del Instituto Meteo-rológico Nacional indica que Guanacaste podría ser un de-sierto dentro de unos 90 años.

En el ámbito forestal tam-bién se refleja una paradoja. Centroamerica posee una co-bertura boscosa mayor que la media mundial y latinoameri-cana, pero esta se reduce a un ritmo más acelerado, lo que compromete la disponibilidad

futura de este recurso y genera cambios de uso del suelo que tienen serveras implicaciones ambientales, entre ellas una merma en su biodiversidad.

La región posee el 12% de la diversidad biológica del planeta en un 2% del territorio mundial y tiene una cuarta par-te de su superficie protegida. Sin embargo, la presión hu-mana ha dejado su huella. Se estima que el Istmo ha perdido la mitad de su biodiversidad original y la cobertura forestal sigue bajando en todos los paí-ses, excepto en Costa Rica.

En su Encíclica Laudato Sí, el Papa Francisco denuncia que con “la pérdida de la biodi-versidad cada año desaparecen miles de especies vegetales y animales que ya no podremos conocer, que nuestros hijos ya no podrán ver, y son perdidas para siempre”.

El documento, indica que existe una auténtica deuda ecológica y llama a tomar ac-ciones frente a los dramas de tantas personas y poblaciones.

Señala “un cierto adorme-cimiento y una alegre irres-ponsabilidad. Además falta

una cultura adecuada y la dis-posición a cambiar de estilo de vida, producción y consumo , a la vez que urge crear un sis-tema normativo que asegure la protección de los ecosiste-mas”.

Para enfrentar estos desa-fíos, señala el Informe, es im-perativo que los actores socia-les, económicos, políticos y la sociedad en su conjunto, tomen conciencia sobre la magnitud y los impactos del deterioro ambiental que ha tenido la re-gión en las últimas décadas, a sabiendas de que las amenazas y los niveles de riesgo van en aumento y requieren acciones conjuntas, inmediatas y con visión de largo plazo.

De otro modo, en el futuro cercano el Istmo estaría ex-puesto a crecientes pérdidas y a situaciones que harían invia-bles actividades productivas y humanas en ciertos territorios y para ciertos grupos de po-blación. En tales condiciones, concluye, impulsar el creci-miento económico y mejorar los niveles de desarrollo resul-taría imposible.

V Informe del Estado de la Región

Centroamérica en grave deuda ambiental

Centroamérica enfrenta graves paradojas entre su riqueza natural y el uso insostenible que hace de ella.

Actualidad Actualidad

Gerardo Mora Panagmora@ecocatolico.org

“Toda amenaza para la familia es una amenaza para la propia sociedad”, decía el Papa Francisco en su vuelo de regreso de Filipinas a Roma, en enero de 2015. Allí habló de ideologías que son inserta-das a una sociedad por medio de los niños como una forma de “colonización”.

El Papa comentó el caso de una servidora pública que bus-có préstamos para construir es-cuelas para los pobres, hace 20 años. Ella recibía el dinero y a cambio debía introducir en el plan de estudios un libro sobre ideología de género. “Esta mu-jer necesitaba el dinero, pero esa era la condición. Esto es la colonización ideológica”, dijo.

En España, en julio, una nueva norma educativa apro-bada por el Parlamento de la región de Madrid, abrió un debate, ya que esta obliga a incluir contenidos sobre diver-sidad sexual. Activistas homo-sexuales y transexuales, pro-mueven también una iniciativa para que la fiscalía se pronun-cie sobre un eventual delito de incitación al odio por parte de los jerarcas católicos, quienes se oponen a la norma.

El Santo Padre describió en aquel vuelo: “cuando las con-diciones son impuestas por co-lonizadores imperiales, buscan hacer que las personas pierdan su propia identidad y hagan una uniformidad”.

Mundo “inculto”

En su reciente Visita a Po-lonia y la visita a la Jornada Mundial de la Juventud, el Papa se reunió con los obispos de esa nación y enfatizó contra esta corriente.

“Estamos viviendo un momento de aniquilación

del hombre como imagen de Dios”, aseveró el Papa, al ha-blar de la idolatría del dinero, del ataque que hay contra la creación, de la poca solidari-dad para con el hermano mi-grante, y otros ejemplos simi-lares.

“En Europa, América, América Latina, África, en algunos países de Asia, hay verdaderas colonizaciones ideológicas. Y una de estas -lo digo claramente con nombre y apellido- es el gender (término inglés para referir a género). Hoy a los niños en la escuela se enseña esto: que cada uno puede elegir el sexo. ¿Por qué enseñan esto? Porque los li-bros son los de las personas y de las instituciones que dan el dinero. Son las colonizaciones ideológicas, sostenidas tam-bién por países muy influyen-tes”.

Francisco recordó un diá-logo con el Papa Benedicto XVI, quien le decía: “Dios ha

creado al hombre y a la mujer; Dios ha creado al mundo así, así, y nosotros estamos hacien-do lo contrario. Dios nos dio un estado ‘inculto’ para que nosotros lo transformáramos en cultura; y después, con esta

cultura, hacemos cosas que nos devuelven al estado ‘in-culto’. Es la época del pecado contra Dios creador”.

Alerta

La abogada experta en de-recho de familia, Alexandra Loría, explicó que en Costa Rica ya esto se está implemen-tando a través de las guías de educación sexual en el Minis-terio de Educación Pública. Dice que el cuarto eje temáti-co del Programa de Educación para la Afectividad y Sexuali-dad Integral se refiere a géne-ro y comprende tres aspectos, que dictan: “El primero es la atribución de género, referido a lo imaginario y simbólico de lo que significa ser hombre o mujer.

El segundo, la identidad de género, que abarca el grado en que cada persona se identifica como masculina y femenina

y en tercer lugar se integra el rol de género, que se refiere a una serie de actitudes y con-ductas (calidez, ser para otros, lugar o espacio, apariencia fí-sica, objeto sexual, violencia, la imposibilidad de expresar cariño, anatomía reconocida y significada) que se conside-ran normales y apropiadas en una cultura para los individuos de determinado sexo. Se bus-ca una mayor comprensión y reeducación de aquellas con-ductas que hacen daño a las relaciones, buscando generar mayor equidad, justicia y sa-tisfacción para todas las per-sonas”.

Ante ello, Loría expresó: “me parece que la ideología de género va contra la propia na-turaleza del ser humano y de la aceptación de uno mismo y me parece muy bien que el Papa alerte a la población sobre lo que está pasando”.

¿Qué es gender?Dentro de la colonización

ideológica aparece el término gender, el cual refiere en in-glés a género. Se utiliza como una palabra que no define a la persona como hombre o mu-jer, sino como lo que quiera ser. O como una palabra neu-tral.

Muchas personas utilizan la palabra como sinónimo de sexo, por ejemplo, género masculino y género femeni-no, pero no debe ser utilizada así, dijo Alexandra Loría.

“Cuando se habla de sexo, se refiere a las diferencias biológicas entre el hombre y la mujer, determinado por los cromosomas XX en la mujer y XY en el varón. Estas bases biológicas intervienen pro-fundamente en el organismo, como se ve en las diferencias estructurales y funcionales del cerebro masculino y el fe-

menino. Cuando se habla de género, es otra cosa”, destacó.

Según indica, podríamos aceptar que género se utilice como la concepción que re-chaza el determinismo bio-lógico, según el cual todas las funciones y relaciones de los dos sexos están estable-cidas en un modelo único y estático. “En las funciones y roles que el ser humano des-empeña en la sociedad, no se determina por la biología. Así muchos trabajos que antes se consideraban para mujeres, lo pueden hacer hombres y otros trabajos que antes eran solo para hombres lo pueden hacer mujeres”.

Cuando surgió este con-cepto de género se “quiso poner de manifiesto que era injusto asignar a cada sexo funciones y roles sociales predeterminados y fijos, ba-sándose exclusivamente en el

hecho biológico de haber na-cido varón o mujer”.

No obstante, hoy la pala-bra género “se ha fanatizado para dar paso a la ideología de género. Así algunos auto-res han indicado, que el géne-ro no tiene ninguna relación con el sexo. Por ejemplo, para Judith Butler (filósofa estadounidense): el género es una construcción cultural; por consiguiente no es ni re-sultado causal del sexo ni tan aparentemente fijo como el sexo”.

Cuando se teoriza al respecto, se indica que la construcción del género es independiente del sexo, en consecuencia, dice que “hombre y masculino podrían significar tanto un cuerpo fe-menino como uno masculino; mujer y femenino, tanto un cuerpo masculino como uno femenino”.

Así han surgido diferentes “género”: heterosexual mas-culino, hererosexual femeni-no, homosexual masculino, homosexual femenino, etc. “Últimamente se habla de la pedofilia como una orienta-ción sexual”, comentó la li-cenciada.

También recordó el an-tecedente remoto de la ideo-logía de género en la que Si-mone de Beauvoir (filósofa francesa) dijo: “La mujer no nace, se hace”.

En palabras del Papa Emé-rito Benedicto XVI con “la ideología de género el hom-bre moderno pretende librar-se incluso de las exigencias de su propio cuerpo: se con-sidera un ser autónomo que se construye a sí mismo; una pura voluntad que se autocrea y se convierte en un dios para sí mismo”.

Francisco de frente contra colonización ideológicaEn el viaje a Polonia alertó de la época en que vivimos: la aniquilación del hombre como imagen de Dios.

“La pérdida de la biodiversidad cada

año desaparecen miles de especies vegetales y animales que ya no podremos conocer, que nuestros hijos ya no podrán ver, y son perdidas para

siempre”. Papa Francisco

Domingo 21 de agosto 2016 Eco Católico6

Gerardo Mora Panagmora@ecocatolico.org

¿Por qué es tan importante para Martín Valverde la familia al punto que se dedica a dar charlas con su esposa?

Lo tomamos no como una opción de emergencia sino que descubrimos que lo traíamos como familia. Mi mujer es sicóloga, yo sigo siendo su mejor paciente, ella trabaja con matri-monios en crisis. En algún momento hablamos de que mucho de lo que es-taba trabajando con las parejas podría-mos extenderlo más allá.

¿Cómo ha sido la respuesta?

No es magia, es una charla, no hace el milagro, pero la cantidad de parejas o matrimonios funcionales o disfuncionales que andan buscando qué hacer son muchísimos. Es una herramienta, se volvió, para sorpresa nuestra un “boom”, empezaron a soli-citarse tanto como los conciertos y me agrada mucho porque me regala viajar con mi esposa, hacemos el trabajo jun-tos, la gente lo disfruta, me desmitifi-ca, porque a la hora de las charlas el pato de la fiesta soy yo, digo, porque ella tiene que poner algún ejemplo.

¿Se habla desde la experiencia?

El 25 de octubre cumplimos 30 años de casados. Y sí, el kilometraje cuenta. A veces piensan que porque

somos familia cristiana aquí no ha pasado nada y no es así, como decía Francisco, algún plato habrá volado, pero todos están bien, eso ayuda. Creo que todos los matrimonios son básica-mente sobrevivientes.

El Papa habla de colonización ideológica contra la familia en estos tiempos. ¿Por qué cree que la familia es el mejor tiro al blanco en esta época?

Porque la familia es el último pun-to pensante. Está mas que comproba-do que el colegio o la escuela les da algo a los niños, pero donde aprenden es en la casa, lo que ven, habiendo o no habiendo, aprenden lo que esté fal-tando o lo que esté sobrando. Hasta he llegado a pensar, en serio, ¿qué les hi-cimos? No me cabe duda, básicamente hay intereses económicos, eso siem-pre va a estar atrás, podremos echarle mucha crema al taco pero lo que hay atrás es plata, es gente que le interesa que los jóvenes no piensen, que las fa-milias se disgreguen, que las placentas se vendan porque son un negociazo, ve tu a saber. Y bueno, no podemos dejar que nos cocinen a fuego lento tenemos que responder, ni siquiera es ataque es defensa. Digo, quién nos iba a decir hace 30 años que teníamos que explicarle a un niño, “usted es niño”, y a una niña, “usted es niña”, sin que eso sea machista, sin que sea feminis-ta, digo es el plan A. Luego, cada uno decidirá lo que quiera. Tengo amigos

muy queridos homosexuales y nos lle-vamos muy bien, pero inclusive en el gremio homosexual o en el gremio no cristiano, tienen sus valores, hay mu-chos de ellos que dicen que no se trata, por ejemplo, de adoptar niños. Lo que toca en la base, es simplemente estar tu cierto de lo que crees, tu cierto de lo que son tus valores, la misión no ha cambiado y es anunciar a Jesucristo, podemos ponerle mil cremas, pero mira si quitas a Jesús, se nos cae todo. Mi intención es que cualquiera, el que sea, dentro o fuera de la Iglesia tenga su encontronazo con Jesús, y ahí se acomodan muchas cosas más de las que puedo explicar.

La mejor canción no sirve si no cambia un solo corazón... ¿Cuántos corazones ha cambiado con sus canciones?

En el cielo me avisan (ríe), ahori-ta no traigo ese dato, pero mientras el mío haya sido tocado funciona.

Hay una canción suya sobre los migrantes, es muy fuerte… ¿De qué color es la piel de Dios? Pues esto se lo pregunta en el tema.

Me encanta… es color misericor-dia. Jamás pensé, no estaba en mis planes, yo nací igual que tú en un país que recibe migración, pero la realidad de otros países, no me imaginé, tanto en España, la zona con africanos y no se diga Estados Unidos con todos los

migrantes hispanos. Trabajar codo a codo con ellos es interesantísimo, re-cibirlos, escuchar sus historias. Cuan-do la compuse fue porque había habla-do con casos que yo digo, “no puede ser que te haya pasado esto a ti para llegar a este país” y bueno me encan-ta, porque es una de mis favoritas, la quiero mucho, “La esperanza cami-nar”, y creo que los cristianos tenemos que tener esa frase de Jesús fuertísima en la cabeza, “era extranjero y me re-cibiste”, no sabíamos si eras terrorista o qué, el chiste es que el corazón tiene que estar abierto y punto.

¿Costa Rica como proyecto para quedarse a vivir aquí?

Dios dirá. Hay dos frases que dice el poeta Machado, “la patria es infan-cia” y “el hombre sabe donde nace pero no dónde va a morir”. El corazón sigue estando aquí, sigo cumpliendo muy humildemente el requisito de aquel presidente uruguayo que dijo en la cumbre iberoamericana, que donde hay un tico haya un pedazo de paz, me la sigo llevando.

Mis gorras dicen Costa Rica. Eso sí, cuando juega Costa Rica y México le voy a Brasil, no me ando compli-cando la vida mucho. Está en mi cora-zón… y disfruto mucho venir.

Habremos pocos ticos afuera, pero somos problemáticos, hacemos bas-tante lío, si no pregúntale al Madrid (ríe).

Por medio de charlas como “La fuerza del amor” y canciones que buscan cambiar el corazón, Martín Valverde visitó Costa Rica por última vez en este

año. Su mensaje sigue siendo el de llevar a Cristo en una época donde como él señala, toca defender a las

familias.

“Los matrimonios son sobrevivientes”

Foto G. Mora

Domingo 21 de agosto 2016Eco Católico 7Actualidad

Gerardo Mora Panagmora@ecocatolico.org

Usain Bolt ratificó el pasa-do 14 de agosto ser el hombre más rápido del mundo. Ganó medalla de oro en los Juegos Olímpicos en los 100 metros planos esta vez con un tiempo de 9,81, aunque posee desde 2009 el récord mundial de la competencia con 9,58.

Pero, así como su veloci-dad es elocuente, también lo es su devoción a la Medalla Milagrosa, que cuelga de su pecho de manera orgullosa, como cada medalla ganada en olimpiadas.

El segundo nombre del hombre más rápido es León, nombre de un Papa de los pri-meros siglos del cristianismo. Bolt es de familia católica, mi-noría en Jamaica, pero que de igual modo expresa cuando se persigna en cada competencia.

Como esta manifestación, muchas otras se han dado en los Juegos Olímpicos de Río 2016.

Fe en el agua

Katie Ledecky es una nada-dora católica de Estados Uni-dos que a sus cortos 19 años obtuvo su primera medalla de oro en las Olimpiadas de Río tras imponerse en la final de los 400 metros estilo libre con un tiempo de 3:56.46, estable-ciendo un nuevo récord del mundo.

Pero, su brillantez no queda ahí. Con 15 años, 4 meses y 10 días, se convirtió en la partici-pante más joven de los Estados Unidos en los Juegos Olímpi-cos de Londres 2012 donde también alcanzó el oro olímpi-co en los 800 metros libre.

Esto es solo parte de sus pergaminos deportivos. Mas, es su fe la que también resal-

ta. “Mi fe católica es muy im-portante para mí. Siempre lo ha sido y siempre lo será. Es parte de lo que soy y me sien-to cómoda al practicar mi fe. Me ayuda a poner las cosas en perspectiva”, dijo Ledecky en una entrevista a Catholic Stan-dard. Ella ora antes de cual-quier competencia, y según

dice el Ave María es “una her-mosa oración” y le da calma.

Otro ejemplo es su compa-triota, el triatlonista Joe Ma-loy, quien en un mensaje de Facebook dijo: “Mis profeso-res, entrenadores y compañe-ros de clase me enseñaron lo que significaba tener fe, traba-jar por ideales, y usar eso para

trabajar en hacer el mundo un poco mejor”.

Redes de esperanza

Otro ejemplo latino es el tenista argentino Juan Martín del Potro quien ganó plata en estas justas tras perder ante el británico Andy Murray. Del

Potro mejoró su bronce de Londres 2012, pero es digno de resaltar que en Río venció en primera ronda al número uno del mundo, el serbio No-vak Djokovic y no menos im-portante fue su triunfo ante el español Rafa Nadal.

“Voy a la iglesia en Argenti-na y trato de mantener el ritmo durante los torneos. A veces es difícil encontrar una iglesia, y luego está el problema de que la gente te sigue a todas partes. Pero trato de estar cerca de una cada vez que puedo”, son pa-labras del argentino, quien en una entrevista a The Telegraph dijo ser una persona muy ca-tólica.

“Estoy tratando de ser una buena persona cada día y hacer lo que mis padres me enseña-ron cuando era niño. Algunos atletas pueden cambiar porque no es fácil cuando te hiciste fa-moso muy rápido”, añadió.

Dentro de estos muchos testimonios, resaltamos tam-bién a Kerri Walsh, voleibo-lista católica estadounidense. Ella compite por quinta vez en unas Olimpiadas.

En una entrevista para la NBC la jugadora de voley pla-ya de 37 años dijo: “he nacido para tener bebés y jugar al vo-leibol (…) Me encantaría ga-nar una cuarta medalla de oro. Y también me encantaría tener un cuarto hijo”.

En un mensaje previo a las justas, el Papa Francisco había exhortado a los atletas, a al-canzar algo más que la gloria olímpica: les alentó a buscar “como premio no una meda-lla, sino algo más precioso: la realización de una civilización en la que reine la solidaridad, fundada en el reconocimiento de que todos somos miembros de una única familia humana, independientemente de las di-ferencias de cultura, color de piel o religión”.

Muchos atletas hacen gala de su fe en cada competencia de Río de Janeiro

Espíritu cristiano en las Olimpiadas

Usain Bolt es el hombre más rápido del planeta y cuelga muchas medallas de oro en Olimpiadas, pero también la Medalla Milagrosa.

Katie Ledecky reza el Ave María cada vez que va al agua. Ella es desde los 15 años una de las mejores nadadoras de la historia norteamericana.

Entrevista

Domingo 21 de agosto 2016Eco Católico 9Domingo 21 de agosto 2016 Eco Católico8

Danny Solano Gómezdsolano@ecocatolico.org

El domingo siguiente al asesinato del Padre Jacques Hamel, degollado por terroris-tas islamistas en Francia mien-tras celebraba una Eucaristía, un centenar de musulmanes asistió a la Catedral de Rouen durante la Misa en solidaridad con la Iglesia Católica.

Este gesto lo repitieron otros musulmanes que asistie-ron a templos católicos en toda Francia. El llamado fue hecho por el Consejo Francés de Cul-to Musulmán con el objetivo de mostrar unión y el rechazo común al terrorismo.

Además de este atentado del 26 de julio, reivindicado por la organización terroris-tas autodenominada Estado Islámico, han ocurrido otros hechos de profanación en tem-plos católicos, como los suce-didos hace unas semanas en San Zulian, en Italia.

Según relató el director del periódico Libero, Vittorio Feltri, un grupo de jóvenes, aparentemente vestidos como árabes, fingieron ser católicos, recibieron la comunión y acto

seguido vomitaron la hostia y blasfemaron contra Jesucristo.

En otra ocasión en San Zu-lian, según relata el propio pá-rroco Massimiliano D’Antiga, cuatro mujeres entraron en la iglesia con el rostro oculto por un velo se acercaron al cruci-fijo y escupieron sobre él, in-formó el sitio Web Religión en Libertad. También se han dado hechos de gente que llega a orar a Alá a ese templo cató-lico.

Asimismo, en la parroquia San Jeremías, también en Ita-lia, un joven magrebí se aba-lanzó sobre un crucifijo del Siglo XVIII de tal modo que este cayó y se rompió el brazo.

Papa: “No es una guerra de religiones”

Tras el atentado en Francia, el Papa Francisco fue interpe-lado y exclamó unas palabras que fueron difundida por los

medios de comunicación: “El mundo está en guerra (…) pero no es una guerra de reli-giones”.

“Quiero aclarar una cosa: cuando hablo de guerra, hablo en serio de eso pero no hablo de guerra de religión. Es una guerra por el dinero, por los recursos, por la naturaleza, por el dominio”, declaró el Papa a bordo del avión que lo llevó a Cracovia para participar de la Jornada Mundial de la Juven-tud, según informó ACI Pren-sa.

“Esta es la guerra. ¿Algu-no piensa en la guerra de reli-gión? No, todas las religiones quieren la paz. La guerra la quieren los otros. ¿Entendi-do?”, agregó.

El Sumo Pontífice también expresó que “desde hace un tiempo el mundo está en una guerra a pedazos”. “Tuvimos la de 1914 y luego la de 1939. En el mundo de ahora tenemos esta”, aclaró.

El Papa continuó: “Tal vez no es tan orgánica u organiza-da. Este santo sacerdote que ha muerto mientras ofrecía la ora-ción por toda la iglesia es uno, pero cuántos cristianos, cuán-tos inocentes, cuántos niños… Pensamos en Nigeria, pero eso

es en África, como si no le im-portara a ninguno”.

“No es verdad ni es justo que el Islam sea

terrorista”

Cuando le preguntaron a Francisco que por qué no ha-bla de violencia islámica a los atentados cometidos por ex-tremistas islámicos, respondió que no puede hablar de violen-cia islámica sin hablar de vio-lencia católica.

“No me gusta hablar de vio-lencia islámica, porque todos los días cuando leo los diarios, veo violencia, aquí en Italia, alguien que mata a la novia, otro que mata a la suegra. Y estos son católicos bautizados, son católicos violentos”.

“Si yo hablo de violencia islámica, debo hablar de vio-lencia católica y no, los islá-micos no todos son violentos, no todos los católicos son vio-lentos”, agregó el Santo Padre.

De acuerdo con las pala-bras del Vicario de Cristo en casi todas las religiones hay un pequeño grupo fundamen-talistas, “cuando el fundamen-talismo llega a matar, también se puede matar con la lengua

Gran Tema

–como dice el Apóstol Santia-go- y con el cuchillo.

“Creo que no es justo iden-tificar al islam con la violen-cia. No es justo ni es verdad. He tenido un diálogo largo con el gran imán de la universidad Al Azhar, Sé cómo piensan ellos, buscan la paz, el encuen-tro”, manifestó Francisco.

Choque de civilizaciones

Al politólogo y coordina-dor de formación política de la Fundación Konrad Aden-auer (KAS), Sergio Araya, se le pidió una opinión acerca de las palabras del Santo Padre y resaltó el tono conciliador ca-racterístico de él y congruente con su fe.

De acuerdo con Araya, Francisco tiene un conoci-miento amplio de la geopolíti-ca mundial y tiene claro de que no se trata de un conflicto es-trictamente de religiones, aun-que una organización como Estado Islámico lo promulgue de esa manera, pues –según opina- eso va más allá.

El politólogo cree que lo más acertado para definir lo que sucede en la actualidad es la teoría de la confrontación de civilizaciones.

En este caso, un choque entre la cultura occidental, enraizada en tradiciones ju-deocristianas, y otra que toma como referente al Islam, de una manera radical, que repu-dia muchas ideas implantadas en Occidente, las cuales se oponen a su visión de moral y costumbres.

La secularización de la que ha sido presa Occidente, la globalización, la injerencia de países occidentales como Es-tados Unidos, son parte de ese disgusto, pero Araya mencio-na que la tendencia que encar-na ISIS, más que crear un esta-do teocrático, busca implantar su perspectiva de civilización, que consideran única y correc-ta, y quienes no se adhieren deben ser suprimidos.

De hecho, esa organización extremista ha ejecutado mu-

sulmanes que no concuerdan con ellos y con lo que hacen.

“Ellos no se consideran asesinos -aunque nos parezcan brutales sus acciones- porque en nuestra cosmovisión es así, pero según su visión ellos es-tán cumpliendo con lo que se les solicita y cuestionan a otras ramas del islam por no hacer lo mismo”.

Araya menciona que en los inicios del cristianismo lamen-tablemente también se come-tieron atrocidades en nombre de Dios contra pueblos que fueron considerados paganos o se llevaron a cabo guerras como las Cruzadas, aun cuan-do estos actos van en contra de la fe cristiana y el mensaje de Cristo.

“La nuestra es una religión de paz”

En el Corán, se hace men-ción de Jesús y uno de los tí-tulos que se le dan es el de Príncipe de Paz. Es importante aclarar que este libro sagrado de los musulmanes tiene gran-des diferencias con el Evan-gelio (por ejemplo, Jesús no es considerado como Hijo de Dios).

En la cuenta de Facebook de la Comunidad Musulmana en Costa Rica se compartió un video con las palabras del Papa y el gesto solidario de los musulmanes en Francia de asistir a la Santa Eucaristía.

Eco Católico contactó con el Centro Cultural Musulmán, ubicado en Goicoechea, donde se ubica la Mezquita de Omar. Dos de sus representantes, Ro-berto Calderón y Vader Hal-chiekh, aclararon que la suya es una religión de paz.

Según Calderón, el islam desde sus inicios enseñó que había que proteger a los judíos y a los cristianos. Citó como ejemplo la Carta de Medina, donde Mahoma, profeta y fun-dador de esta religión, estable-ció una serie de leyes para la convivencia entre ciudadanos de diferentes credos.

“El profeta dijo que quien le haga daño a un judío o a un cristiano, el Día del Juicio yo lo declararé mi enemigo”, aseguró, y añadió que el islam pide no imponer la fe a otros.

Ambos consideran que efectivamente se utiliza la reli-gión para cuestiones políticas y económicas (por ejemplo, intereses petroleros). Creen además que quienes se dejan llevar por estos discursos es por su ignorancia sobre la fe o porque ven en ello una solu-ción a sus problemas sociales y económicos.

“El que no tiene misericor-dia no puede exigir misericor-

dia”, expuso Calderón. Por su parte, Halchiekh dice que tiene amigos cristianos y que nunca ha tenido problemas con nin-guno, incluso su esposa es católica y dice que nunca han reñido por cuestiones de fe.

Aseguran que personal-mente en el país han sido res-petados y no han sufrido dis-criminación por su religión. Aunque han escuchado de ca-sos particulares, en especial de mujeres por su vestimenta.

Los representantes del Centro Cultural Musulmán manifestaron que la comuni-dad musulmana en el país ron-da las 3000 personas.

Los representantes del Centro Cultural Musulmán expusieron que al igual que muchos toman citas del Corán para motivar una guerra santa (yihad), también se puede ex-traer frases de la Biblia para motivar discursos bélicos.

Para especialistas del islam la yihad se refiere a una lucha interna de cada individuo y no a una guerra militar.

Incorrecto hablar de guerra

Monseñor Vittorino Girar-di, Obispo Emérito de Tilarán-Liberia, mencionó que el Papa con sus palabras plantea que las religiones en su globalidad proponen la paz, por eso es incorrecto hablar de guerra de religiones.

Por ejemplo, el budismo, el hinduismo, el cristianismo, e inclusive el islam proponen la paz. “Sin embargo, el ser humano puede usar la religión para justificar la guerra. Como dijo Marx, la clave de toda cultura es la religión, para co-nocer la cultura costarricense bastaría pensar en el 2 de agos-to por ejemplo, lo que significa para Costa Rica”.

El obispo declaró que “aun-que las religiones entre ellas chocan, el ser humano puede servirse de la religión para jus-tificar una guerra”.

Monseñor explicó que las guerras suelen buscar un fun-damento religioso para lograr su justificación.

Como ejemplos citó cuan-do Estados Unidos declaró la guerra contra el terrorismo y el Presidente George Bush in-vocó a Dios continuamente en su discurso. Históricamente, durante las cruzadas, muchos cristianos encontraron un mo-tivo religioso para hacer cam-pañas militares. Asimismo, se-ñaló que a pesar de las páginas que hablan de la fraternidad entre cristianos, judíos y mu-sulmanes, lamentablemente “hay páginas del Corán donde un musulmán puede encontrar razones para impulsar la gue-rra santa”.

Gran Tema

“Quiero aclarar una cosa: cuando hablo de guerra, hablo en serio de eso pero no hablo de guerra de religión. Es una guerra por el dinero, por los recursos, por la naturaleza,

por el dominio”.Papa Francisco

¿Vivimos una guerra de religiones?

El mundo está en guerra, pero no es una guerra de religiones. Es una guerra por el dinero, por los recursos, por la naturaleza y por el dominio de unos sobre otros. Las religiones auténticas quieren la paz.

Domingo 21 de agosto 2016 Eco Católico10 Domingo 21 de agosto 2016Eco Católico 11

María Estela Monterrosa S.mmonterrosa@ecocatolico.org

Unas 27 personas, cuyos restos no fueron reclamados en la Morgue Judicial, recibieron cristiana sepul-tura el martes 9 de agosto.

La comunidad de San Joaquín de Flores, convocada por el Pbro. Sixto Varela Santamaría, cura pá-rroco, participó en el funeral que se realizó en la misma Morgue, como expresión de misericordia.

De acuerdo con el Pbro. Vare-la, los cuerpos son de personas que murieron en condiciones difíciles, accidentes u homicidios, y que las familias nos los recogieron. Tam-bién podría haber algunos extran-jeros cuyas familias no se pudieron contactar.

Por su parte, el Doctor Jorge Pé-rez Aguilar, jefe de la Morgue Judi-cial, comentó que “en total se ente-rraron doce cadáveres y un conjunto de aproximadamente veintisiete ca-sos constituidos por cinco fetos y veintidós por restos óseos”.

El Padre Sixto indicó que para los fieles el acto fue muy significa-tivo en el Año de la Misericordia: “Así lo entendió la comunidad pa-rroquial que nos acompañó en gran cantidad, en los cinco años que ten-go aquí es a la que más personas han asistido, hubo coro y demás. Fue muy emotiva. Lo hicimos ver como obra de caridad a la que es-tamos todos llamados a practicar”.

Agregó que motivó a los presen-tes a ver el acto de amor que esto representaba, “poder acompañar a personas que no conocemos, ni sabemos sus nombres, ni las con-diciones en que fallecieron; como comunidad cristiana estamos sien-do solidarios y a la vez pidiéndo-le a Dios que cuando nos toque a nosotros presentarnos, que alguien también tenga misericordia con no-sotros y nos dé cristiana sepultura”.

El sacerdote resaltó que “son personas por las que nadie ha llo-rado, que nadie ha preguntado y por las que nadie rezaba. Invité a los fieles a que en este año que po-demos ganar indulgencia plenaria,

quien lo tenga a bien, la ofreciera por alguna de estas personas que sepultamos”.

Humanizar una labor

Varela destacó la caridad de los funcionarios. “Sería muy fácil solo dar la orden de que saquen los cuerpos y se acabó. Pero todos los médicos y el personal están com-prometidos con hacer el acto de ca-ridad. Ahora incluso se invita a la comunidad, antes era más privado”, comentó.

En este sentido, el Dr. Jorge Pé-rez explicó que el acto litúrgico ha

sido una tradición de la Sección de Patología Forense que conlleva un concepto de humanización de la labor forense.

“Nos permite hacer ver y consi-derar que trabajamos con seres hu-manos. Aunque algunos de ellos no pudieran ser identificados o darles un nombre y apellido, no dejan de ser personas y mucho menos seres humanos. Como es la norma en nuestro país todo cuerpo que va a ser inhumado, requiere de un ritual bajo la luz de una u otra creencia religiosa; convocamos a participar a la Iglesia Católica como religión oficial del país”, afirmó.

Además, dijo, “cumple un obje-tivo operativo como parte de la pro-yección del quehacer de la Sección de Patología Forense a la sociedad costarricense”.

El Dr. Pérez detalló que antes de sepultar los cuerpos se sigue un procedimiento: se hace una publica-ción en un medio de comunicación masivo escrito, con la procedencia de cada cuerpo y si está identifica-do con los nombres respectivos. Se da un tiempo y luego se coordina el funeral.

El tiempo de permanencia de un cuerpo en la morgue depende del momento del ingreso y de la rea-lización de los entierros, ya que se efectúan tres o cuatro veces al año.

Sepultan cuerpos no reclamados en Morgue Judicial

Rostros de misericordia

Laura Ávila Chacónlavila@ecocatolico.org

No hay persona en el mun-do que no conozca a la Madre Teresa de Calcuta. Su inne-gable labor la llevó a ganarse el corazón de ricos, pobres y celebridades mundiales. No hubo nadie que no la quisiera ayudar en el bienestar de los más desposeídos del Pueblo de Dios.

Trabajo entre leprosos, per-sonas con sida, huérfanos, mu-jeres y hombres, que hoy guar-dan en su corazón el recuerdo de una mujer que dio su vida por los preferidos del Señor.

Su nombre de nacimiento es Agnes Gonxha Bojaxhiu. Nació en Skopje, actual Ma-cedonia en 1910 y falleció en Calcuta en 1997.

Esta religiosa albanesa na-cionalizada Hindú, fue premio Nobel de la Paz en 1979. Para cuando falleció, la Congrega-ción de la Caridad contaba ya con más de quinientos centros de atención en un centenar de países .

La orden que fundó tiene como objetivo ayudar a los más pobres de los pobres. Esto le valió erigirse en un ejemplo inspirador, generoso, de abne-gación y de entrega a los de-más.

Familia católica

Nació en el seno de una fa-milia católica albanesa. Pero fue la religiosidad de su madre que despertó en Agnes, la vo-cación de misionera a los doce años.

Siendo aún una niña ingre-so en la Congregación Ma-riana de las Hijas de María, donde inició su misión con los necesitados.

Conmovida por las cróni-cas de un misionero cristiano en Bengala, a los dieciocho años abandonó para siempre su ciudad natal y viajó has-

ta Dublín para profesar en la Congregación de Nuestra Se-ñora de Loreto.

Como quería ser misione-ra en la India, embarcó hacia Bengala, donde cursó estudios de magisterio y eligió el nom-bre de Teresa para profesar.

Apenas hechos los votos pasó a Calcuta, la ciudad con la que habría de identificar su vida y su vocación de entrega a los más necesitados.

Durante casi veinte años ejerció como maestra en la St. Mary’s High School de Cal-cuta. Sin embargo, la profun-da impresión que le causó la miseria que observaba en las calles de la ciudad la movió a solicitar a Pío XII la licencia para abandonar la orden y en-tregarse por completo a la cau-sa de los menesterosos.

Enérgica y decidida en sus propósitos, Teresa de Calcuta pronunció por entonces el que sería el principio fundamen-tal de su mensaje y de su ac-ción: “Quiero llevar el amor de Dios a los pobres más pobres; quiero demostrarles que Dios ama el mundo y que les ama a ellos”.

En 1948, poco después de proclamada la independencia de la India, obtuvo la autoriza-ción de Roma para dedicarse al apostolado en favor de los pobres. Mientras estudiaba

enfermería con las Hermanas Misioneras Médicas de Pat-na, Teresa de Calcuta abrió su primer centro de acogida de niños. En 1950, año en que adoptó también la nacionali-dad india, fundó la congrega-ción de las Misioneras de la Caridad, cuyo pleno reconoci-miento encontraría numerosos obstáculos antes de que Pablo VI lo hiciera efectivo en 1965.

Al tiempo que su congrega-ción, cuyas integrantes debían sumar a los votos tradiciona-les el de dedicarse totalmente a los necesitados, abría cen-tros en diversas ciudades del mundo, ella atendía a miles de desheredados y moribundos sin importarle a qué religión pertenecían: “Para nosotras no tiene la menor importancia la fe que profesan las personas a las que prestamos asistencia. Nuestro criterio de ayuda no son las creencias, sino la nece-sidad. Jamás permitimos que alguien se aleje de nosotras sin sentirse mejor y más feliz, pues hay en el mundo otra po-breza peor que la material: el desprecio que los marginados reciben de la sociedad, que es la más insoportable de las po-brezas” explicaba en ese mo-mento.

En concordancia con esta palabras, Teresa de Calcuta convirtió en el premio de una rifa un coche descapotable que

le dio el Papa Pablo VI duran-te su visita a la India en 1964 (regalo a su vez de la comuni-dad católica) y destinó los fon-dos recaudados a la creación de una leprosería en Bengala; posteriormente convencería al Papa Juan Pablo II de abrir un albergue para indigentes en el mismo Vaticano.

Amiga de San Juan Pablo II

Consciente del respeto que inspiraba, el Papa Juan Pablo II la designó en 1982 para me-diar en el conflicto del Líbano, si bien su intervención se vio dificultada por la compleji-dad de los intereses políticos y geoestratégicos del área. Desde posiciones que algunos sectores de opinión considera-ron excesivamente conserva-doras, participó vivamente en el debate sobre las cuestiones más cruciales de su tiempo, a las que no fue nunca ajena. Así, en mayo de 1983, durante el Primer Encuentro Interna-cional de Defensa de la Vida, defendió con vehemencia la doctrina de la Iglesia, concep-tiva, antiabortista y contraria al divorcio.

En 1986 recibió la visita de Juan Pablo II en la Nirmal Hi-dray o Casa del Corazón Puro, fundada por ella y más cono-cida en Calcuta como la Casa

del Moribundo. En el curso de los años siguientes, aunque mantuvo su mismo dinamismo en la lucha para paliar el do-lor ajeno, su salud comenzó a declinar y su corazón a de-bilitarse. En 1989 fue inter-venida quirúrgicamente para implantarle un marcapasos, y en 1993, tras ser objeto de otras intervenciones, contra-jo la malaria en Nueva Delhi, enfermedad que se complicó con sus dolencias cardíacas y pulmonares.

Finalmente, tras superar varias crisis, cedió su puesto de superiora a sor Nirmala, una hindú convertida al cristia-nismo. Pocos días después de celebrar sus 87 años ingresó en la unidad de cuidados intensi-vos del asilo de Woodlands, en Calcuta, donde falleció. Miles de personas de todo el mun-do se congregaron en la India para despedir a la Santa de los Pobres.

Seis años después de su muerte, en octubre de 2003, y coincidiendo con la celebra-ción del 25º aniversario del pontificado de Juan Pablo II, la Madre Teresa de Calcuta fue beatificada en una multi-tudinaria misa a la que acudie-ron fieles de todas partes del mundo. A finales de 2015, el Papa Francisco aprobó su ca-nonización; el 4 de setiembre de 2016.

Madre Teresa: en el corazón del mundo

Para los fieles el acto fue muy significativo en el Año de la Misericordia. Fotos: Parroquia San Joaquín de Flores

El Padre Sixto Eduardo Varela presidió el funeral.

Santa de la Misericordia

Obra de Misericordia, Parroquia de San Joaquín de Flores

Domingo 21 de agosto 2016Eco Católico 13Domingo 21 de agosto 2016 Eco Católico12

A manera de editorialMensaje de la Conferencia Episcopal de Costa Rica

El bien común como anhelo de nuestra sociedad

Los obispos de la Conferen-cia Episcopal de Costa Rica, con un permanente espíritu de servicio hacia el Pueblo

de Dios y a nuestra Nación, celebra-mos la 112° Asamblea Plenaria, empe-ñados en seguir mostrando a todos el rostro misericordioso de Dios a través de un mayor compromiso evangeliza-dor.

En este contexto, nosotros Pasto-res, teniendo como centro de nues-tra misión el presentar el misterio de Cristo, germen de paz y de realización personal y social, hemos reflexiona-do, entre otros temas, tanto la com-pleja situación social de Costa Rica y de sus instituciones, como el modo de presencia de la Iglesia en nuestra sociedad. No nos compete aportar soluciones técnicas, pero tenemos la obligación de desarrollar nuestra mi-sión en los diversos campos en que los hombres y mujeres realizan sus acti-vidades.1

Una sociedad en cambio

Constatamos los cambios experi-mentados en nuestra sociedad, parti-cularmente, el creciente pluralismo, en los campos político, económico, cultural, religioso y social.

Tal complejidad no es en sí misma perjudicial, pero representa grandes retos en la medida en que todos habi-tamos una casa común y dependemos unos de otros.

Hay legítimos fines particulares, pero también existen intereses comu-nes. A estos últimos se le denominan “bien común”, aspiración para que el bienestar alcance a todas las personas que habitan en una sociedad.2

Si este anhelo desaparece del ho-rizonte de los diversos actores socia-les, irremediablemente, la sociedad se fragmenta, dándose el caldo de cultivo ideal para el surgimiento de la

violencia, renunciando al bien común y anulando el sentido de solidaridad, que implica la responsabilidad de to-dos por todos3. Este escenario, ya se vislumbra y atropella todo interés en la construcción de un proyecto País.

En efecto, la interdependencia exi-ge de todos los ciudadanos la supera-ción de egoísmos, la renuncia a toda imposición injusta y unilateral, y la evolución de la mutua desconfianza hacia la colaboración y el consenso.

Un Estado Solidario

Durante el Siglo XX, la sociedad costarricense se configuró, precisa-mente, a partir de los valores de la solidaridad y de la búsqueda del bien común, inspirados en la Doctrina So-cial de la Iglesia. Se alcanzaron logros importantes en el ámbito social, sobre todo en la educación, salud, vivienda,

seguridad y legislación protectora de los derechos humanos, permitiendo conformar una sociedad menos des-igual. En los últimos tiempos, un ace-lerado cambio cultural, debido a diná-micas sociales, políticas, económicas e ideológicas, tanto al interior del país como por influencia internacional, ha ido en detrimento del sentido de soli-daridad y de la búsqueda del bien de todos los habitantes de Costa Rica.

Deterioro social

Es innegable la creciente y peli-grosa violencia que aflora en el país, como expresión de esa ausencia de cohesión solidaria. Hay puntos críti-cos que lo ponen de manifiesto, entre ellos, el transporte público, en relación a quiénes y cómo prestan el servicio, y su regulación por parte del Estado. Vinculado a este hecho, está la para-lizada infraestructura vial, cuya insu-ficiencia acaba lesionando también el bien común.

Otros aspectos críticos son, ade-más, la inseguridad ciudadana ligada, en gran medida, a una cultura cada vez más violenta y a la penetración del narconegocio. El abordaje del tema de la delincuencia, nos lleva a pensar en la grave crisis del sistema carcelario en nuestro país.

En cuanto al desarrollo social, la grave crisis fiscal ya no es una “bom-ba de tiempo” pues sus efectos tienen altos costos, sobre todo, en el campo de las políticas sociales. Asimismo, el mundo del trabajo, principalmen-te, el abordaje del empleo público, así como las persistentes altas tasas de desempleo y empleo informal, y el estancamiento de las cifras de pobre-za, la extrema pobreza y la creciente desigualdad, son expresiones de un modelo económico centrado en el mercado y en la generación de lucro privado, que perdió de vista la resolu-ción de estos últimos gravísimos pro-blemas humanos. En consecuencia, las familias sufren y ven menoscaba-dos sus derechos fundamentales ante la incapacidad de soluciones de movi-lidad y promoción humana.

No podemos soslayar el alto de-terioro ambiental generado desde la actividad productiva y desde la inso-lidaridad en los hábitos cotidianos de

una gran parte de la población, que también, exige un necesario esfuerzo por educarnos en una matriz cultural, social y ambiental cimentada en la solidaridad y la subsidiariedad, como nos ha invitado el Papa Francisco en su encíclica “Laudato si”.

Se asoman, en la actual coyuntura, otros problemas como la creciente mi-gración de tránsito, que nos reta a ac-tuar, como es nuestra tradición, como una nación respetuosa de los derechos humanos y defensora de las personas en situación de vulnerabilidad. Es ur-gente que nuestro país intensifique el esfuerzo para que las naciones de la región y los organismos interguberna-mentales asuman una política regional humanitaria, por un lado, pero también represiva en cuanto a las poderosas re-des de tráfico ilícito de migrantes.

De frente a este panorama descri-to, la lógica político-partidaria se ha mostrado insuficiente y hasta expre-sión del desconcierto provocado por la búsqueda de intereses particulares, al margen y, a veces, en contra del inte-rés colectivo. Paralelamente, nos pre-ocupa las constantes protestas masivas promovidas por movimientos sociales que quieren corregir los lineamientos políticos y jurídicos que no represen-ten sus ideas.

Debemos, sin mezquindad, reco-nocer cómo, particularmente, diversos sectores ciudadanos promueven loa-bles iniciativas en aras de un diálogo nacional, que lleve a grandes acuerdos que garanticen el bien común.

Necesidad del diálogo efectivo

La Iglesia Católica, abierta a un espíritu ecuménico y en unidad a una gran cantidad de conciudadanos, hombres y mujeres de buena voluntad, quiere hacer un llamado a los diver-sos actores sociales, particularmente, a quienes tienen la legitimidad polí-tica y el reconocimiento social, para construir la paz, buscando las vías del diálogo nacional, la superación de los conflictos y la unión del pueblo costa-rricense en torno a un proyecto común que nos permita retomar la senda de la solidaridad.

Desde esta convicción, y en el con-texto del Año de la Misericordia, ele-vamos nuestra súplica al Señor para que la Iglesia “sea un recinto de ver-dad y de amor, de libertad, de justicia y de paz, para que todos encuentren en ella un motivo para seguir esperan-do.”4

En primera instancia, motivar al pueblo católico, para estimular la pre-sencia coherente y comprometida de los fieles en la vida pública y social, de igual modo, expresamos nuestra per-manente disponibilidad de servicio al país, para construir una sociedad en la que brille la justicia social, la fraterni-dad y la solidaridad, con la confianza puesta en el Señor, quien nos alienta, pues la esperanza cristiana no defrau-da, antes bien, supera toda pasividad o indiferencia.5

Nos ponemos, una vez más, bajo la maternal protección de la Santísima Virgen María, “Nuestra Señora de los Ángeles”, a quien, con amor filial, he-mos venerado en los últimos días, para

que, por su intercesión, el pueblo cató-lico y todos los hombres y mujeres de buena voluntad, demos pasos firmes para promover las profundas transfor-maciones sociales que requiere nues-tra querida Costa Rica

Dado en San José, a los 12 días del mes de agosto del 2016.

Monseñor Óscar Fernández Guillén

Obispo de PuntarenasPresidente de la Conferencia

Episcopal de Costa Rica

Monseñor José Rafael Quirós Quirós

Arzobispo de San JoséVice-Presidente de la Conferencia

Episcopal

Monseñor Ángel Sancasimiro Fernández

Obispo de AlajuelaSecretario General de la Conferencia Episcopal

Monseñor José ManuelGarita Herrera

Obispo de Ciudad QuesadaTesorero de la Conferencia

Episcopal

Monseñor Javier Román AriasObispo de Limón

Monseñor José FranciscoUlloa Rojas

Obispo de Cartago

Fray Gabriel EnriqueMontero Umaña

Obispo de San Isidro de El General

Monseñor Manuel Eugenio Salazar Mora

Obispo de Tilarán-Liberia

1 Cf. Sollicitudo Rei Socialis # 412 Cf. Gaudium et spes #26

3 Cf. Sollicitudo Rei Socialis # 394 Plegaria Eucarística VI B

5 Cf. Rom 4

OpiniónOpinión

Teniendo como centro de nuestra misión el presentar el misterio de Cristo, germen de paz

y de realización personal y social, hemos reflexionado, entre otros temas, tanto la compleja situación social de Costa Rica

y de sus instituciones, como el modo de presencia de la Iglesia en nuestra sociedad.

La Iglesia Católica, abierta a un espíritu ecuménico y en unidad a una gran cantidad

de conciudadanos, hombres y mujeres de buena voluntad, quiere hacer un llamado a los diversos actores sociales,

particularmente, a quienes tienen la legitimidad política y el reconocimiento social, para construir la paz, buscando las vías del diálogo nacional, la superación de los conflictos y la unión del pueblo costarricense en torno a un proyecto

común que nos permita retomar la senda de la solidaridad.

Domingo 21 de agosto 2016Eco Católico 15Domingo 21 de agosto 2016 Eco Católico14 Opinión Opinión

Pbro. Alberto Casals

En el año 1994 salió publi-cada en la prensa nacional una carta pública a los candidatos a la presidencia de la República, avalada por más de cincuen-ta destacadas firmas, que era como un llamado al contenido de la educación escolar, consi-derado mucho más importante que el pedagogismo y la meto-dología que, vacíos de valores, no valen nada.

Y es que el mundo actual, tan pluralista, va de mal en peor, pues se halla falto de orientaciones éticas seguras. Cada vez está más oscura la distinción entre el mal y el bien en los medios actuales de comunicación social. A causa del cambio de valores de nues-tra sociedad y ante las presio-nes mundiales a que estamos sometidos, muchas personas han perdido los criterios más elementales de juicio moral -se ha perdido la confronta-ción a la ética y a la moral-, antes presentes incluso entre personas analfabetas, y se han quedado vacíos los horizontes morales. Por eso considero que la pedagogía y la metodo-logía escolar necesitan urgen-temente estar respaldadas por verdaderos valores humanos, cívicos y sociales.

Recuperación de valores universales

Adquiere en estos momen-tos una vigencia extraordina-ria la pregunta de aquel joven rico, que recordaba San Juan Pablo II en la Encíclica “Veri-tatis Splendor”: Maestro, ¿Qué he de hacer de bueno para con-seguir la vida eterna?.

Parece que ese muchacho joven busca una verdad en la cual fundar su libertad de de-cisión. Pero esto nos lleva a sospechar que su libertad, que debe ejercitar, no es tan abso-luta como piensa mucha gente de nuestra época, que quiere

fundamentar la libertad sobre sí misma. Es que la libertad no se basta a sí misma, necesita un norte, una guía, como una luz que muestre los auténticos valores de la vida. La pregunta del muchacho no era –mucho menos- una renuncia a la li-bertad ya que acude al maestro para después tomar su decisión personal, libre y responsable. Por eso las escuelas, sean es-tatales o sean privadas, deben aportar valores a sus alumnos, verdades éticas, civiles, mo-rales, y a su vez educar en el ejercicio de la libertad a los alumnos, para que piensen, maduren y aprendan a tomar decisiones en su vida, con la luz de los valores.

Hay una grave responsa-bilidad social, insoslayable, de volver a despertar la con-ciencia de las verdades mo-rales esenciales como el fun-damento ético necesario para fomentar una sociedad digna del hombre. Donde quiera que haya confusión entre el bien y el mal es imposible construir el orden moral –cfr. Veritatis Splendor, n. 93-.

La verdadera ley es luz para la libertad

Pero entonces ¿qué es y qué no es la libertad?. Distin-gamos: no habrá moral, como no hay para las piedras, para las plantas, para los animales.

La libertad es un signo emi-nente de la imagen de Dios en el hombre, que nos hace casi dioses –si fuera absoluta, como pretenden algunos, ya no seríamos criaturas, seríamos Dios-, es un don muy especí-fico del hombre: “quiso Dios dejar al hombre en manos de su propia decisión” –cfr. Ecle-siastico, 15, 14-. Y entonces la ley, la verdadera ley, no se presenta ante el hombre como una limitación de su libertad, sino todo lo contrario, como una luz, una manifestación de la sabiduría, de la verdad, una experiencia de bondad y soli-citud del Legislador hacia el hombre. Por esto tantas veces la correcta emisión de una ley en la sociedad civil va prece-dida de unas consideraciones

que tratan de convencernos, en nuestra libertad, para que de-cidamos acogerla dócilmente. La verdadera ley nunca es tira-nía –no puede ser impuesta por fuerzas oscuras- y va unida a una promesa implícita o explí-cita de vida. Quien la cumple camina por la senda de la vida.

La gran tradición ética de la moral nos enseña que la ley natural no es más que la luz de la inteligencia infundida en nosotros por Dios. Gracias a ella conocemos, en nuestra libertad, lo que se debe hacer y lo que se debe evitar -cfr. Splendor Veritatis, n. 12-.

No pretendamos, pues, crear una cultura sin ley, sin le-yes fundamentales y sin leyes específicas, porque se acabaría nuestra libertad y quedaríamos inmersos en un pozo profundo de oscuridad, sin horizontes porque luchar en la vida. Es por esto que Juan Pablo II in-sistía en que es posible, e in-cluso necesario, considerar las normas morales por su conte-nido como imprescindibles y que no admiten ninguna ex-cepción.

La verdad moral pone un esplendor propio, está enco-mendada a la libertad. En la época moderna actual se ha perdido la clara vinculación entre la verdad moral y la li-bertad correspondiente. No hay en toda la humanidad una doctrina superior a la expresa-da con el título del esplendor de la verdad. Nadie encontra-rá aunque recorra los rinco-nes más orientales de nuestro planeta, doctrina más rica de contenido que esa que repro-duce la misma sabiduría divina como un don de Dios Padre a sus hijos los hombres. Esto es lo que necesita la nueva educa-ción escolar para el tercer mi-lenio: contenidos morales que sustenten los contenidos inte-lectuales, culturales y tecnoló-gicos de nuestra democracia, y sin necesidad de recurrir a pre-siones económicas, militares y totalitaristas.

Libertad y moral para el tercer milenioHay una grave responsabilidad social, insoslayable, de volver a despertar la conciencia de las verdades morales esenciales

como el fundamento ético necesario para fomentar una sociedad digna del hombre.

Todas las mujeres han reci-bido de Dios la capacidad de ser madres. Este es un regalo que las mujeres y, solamente ellas, tienen por su misma na-turaleza, aunque sabemos que no todas llegan a dar a luz hi-jos, por razones particulares, ya de índole físico o por deci-sión personal. Lo cierto es que en la maternidad está presente Dios, que es la fuente de toda vida y amor que se proyecta hacia nosotros con esa fuerza, que hace posible que todas las cosas alcancen su ser.

La madre siempre suscita especiales sentimientos en to-das las personas, son muchos los versos que se han escrito sobre el tema. Y, las expresio-nes son muy variadas, pero, qué importante es que no deje-mos pasar la fecha, 15 de agos-to, sin antes, reconocer como creyentes que la presencia del amor materno de la Santísima Virgen María, Madre Jesu-cristo y Madre nuestra, quien al aceptar ser nuestra madre quiere llevarnos a todos hasta donde ella con su Hijo se en-cuentran. María asunta al cie-lo, estimula en el creyente el deseo ferviente de caminar en todo momento, hacia situacio-nes de vida mejores, que ele-ven su dignidad como persona y como hijo de Dios.

De ahí que, en medio de la “cultura del descarte”, vea-mos especialmente a la mujer como hija de Dios y como aquella que en igual dignidad con el varón, aporta con su vida y vocación materna, a la construcción de una sociedad que se mueva por la ternura y acogida de toda vida, tanto la naciente como la que está por extinguirse. Por lo que tanto el Estado como la sociedad, han de esforzarse por brindar especial protección a la mater-nidad, para que esta se ejerza en las mejores condiciones espirituales y materiales. No

se tiene que hacer distinción entre la maternidad deseada y planeada, y la que se da por alguna otra circunstancia, por-que toda maternidad conlleva una vida por proteger y amar.

Ciertamente, hace falta educar en el valor de la mater-nidad para que esta sea reali-zada en el ambiente propicio de un matrimonio estable. Donde reine el respeto, la ayu-da mutua, la comprensión y el auténtico amor, por lo que la educación ha de encaminarse a mirar la vida y la propia sexua-lidad en el ámbito de la dig-nidad personal, que excluye cualquier visión utilitaria del cuerpo de la mujer. El amor personal, conlleva a mirar la vida en proyección de futuro, como realización plena, lo que se logra mediante una espiri-tualidad que eleve, antes que degradar la imagen femenina.

“La maternidad conlleva una comunión especial con el misterio de la vida que madura en el seno de la mujer. La ma-dre admira este misterio y con intuición singular “compren-de” lo que lleva en su interior. A la luz de este “principio” la madre acepta y ama al hijo que lleva en su seno como una per-sona.”1 Esta bella experiencia no será posible si no, por una espiritualidad que mire la to-

talidad del ser humano como proyecto de Dios, experiencia de la cual ha de participar el varón, por cuanto no hay ma-ternidad sin paternidad, de ahí la importancia de la estabili-dad de la unión entre los pa-dres de aquella nueva vida.

No puedo dejar de destacar el ejercicio del amor maternal, de tantas mujeres que sin ha-ber dado a luz, han aceptado como parte de su vida a hijos que han adoptado afectiva o legalmente, por quienes han entregado su vida, como lo hace cualquier madre biológi-ca. No son pocas las hermanas que se han dedicado amorosa-mente a sus hermanos meno-res, o a familiares cercanos, o aquellas que cuidan niños en albergues o los aceptan en sus propias casas. Tantas reli-giosas que en nuestro país se dedican a cuidar niños aban-donados, muchos de ellos dis-capacitados, a quienes con su amor han devuelto la sonrisa.

Pido al Señor derrame abundantes bendiciones sobre todas estas madres, que lu-chan todos los días y siguen manifestando con valentía y fortaleza que su misión no es inútil, que no ha pasado de moda, visibilizando así el amor materno de Dios.

1 Juan Pablo II, Mulieris dignigatem, 18

El don de la maternidad

En diálogoMonseñor José Rafael QuirósArzobispo de San José

Pbro. Luis-Fernando Valdés lfvaldes@gmail.com

Se filtra un comentario del Pontífice hecho a puerta cerrada. Francisco mostró su desacuerdo en que se ense-ñe a los niños a escoger su sexo. ¿Por qué hace esta de-claración un Papa que se ha mostrado abierto hacia las personas homosexuales?

El periódico italiano “La Stampa” publicó que duran-te su encuentro en Cracovia con los obispos polacos el 27 de julio pasado, el Papa afirmó que “en Europa, en América Latina, en África y en algunos países de Asia, hay verdaderas colonizacio-nes ideológicas; y una de éstas, lo digo claramente con ‘nombre y apellido’, es la teoría de género”.

Francisco señaló que “hoy a los niños se les en-seña esto en la escuela: que cada quien puede elegir el sexo. ¿Y por qué enseñan esto? Porque los libros son los de las personas y de las instituciones que te dan el dinero; son las colonizacio-nes ideológicas, apoyadas también por países muy in-fluyentes y esto es terrible”.

No es la primera vez que el Pontífice emplea esta ex-presión. Durante su viaje apostólico a Flilipinas, el 19 de enero del año pasa-do, Francisco en un acto con familias explicó a qué se re-fería. “¿Por qué digo colo-nización ideológica? Porque toman, toman la necesidad de un pueblo o la oportuni-dad de entrar y hacerse fuer-tes, (con libros de texto) para niños. Pero esto no es una novedad. Lo mismo hicieron las dictaduras del siglo pasa-do.

Allí recordó que, durante el Sínodo de 2014, los obis-pos africanos denunciaron una “colonización ideológi-ca” de su continente. Dijeron que algunos organismos in-ternacionales condicionaban

ayudas a cambio de cam-bios en legislaciones sobre el control de la población o matrimonio entre personas homosexuales.

En la práctica, en los paí-ses de América Latina y de África se ha dado una ten-dencia a aprobar leyes e ini-ciativas para el pueblo pero sin el pueblo, impulsadas por una minoría que regula y pretende cambiar la concep-ción de matrimonio.

De regreso a Roma de aquel viaje a Filipinas, el Papa explicó que ese nue-vo colonialismo es destruc-tivo. “Una persona entra con una idea que no tiene nada que ver con la nación. Y ellos colonizan al pueblo con una idea que cambia, o quiere cambiar, una men-talidad o una estructura”. Y añadió: “Lo mismo fue hecho por las dictaduras del último siglo. Ellos entra-ron con su propia doctrina”. “Pero cuánto sufrimiento. Los pueblos no deben perder su libertad”, constató.

Ahí mismo subrayó que “cuando las condiciones son impuestas por colonizado-res imperiales, buscan hacer que las personas pierdan su propia identidad y hagan una uniformidad”.

¿Por qué hizo Francisco esta declaración? Evidente-mente no es un gesto contra las personas homosexuales. Es más bien una denuncia contra una ideología -la teo-ría del género-, que se quiere imponer a fuerza en los paí-ses pobres.

Se trata de una declara-ción valiente, que desafía a gobiernos e instituciones in-ternacionales, para defender a las familias y a la libertad de los pueblos de una nueva forma de colonización: la in-vasión ideológica.

www.columnafeyrazon.blogspot.com

Colonización ideológica

Domingo 21 de agosto 2016Eco Católico 17Domingo 21 de agosto 2016 Eco Católico16

El texto de primer nivel de catequesis “Conocemos a Jesús”, está diseñado en

función de los niños de 6 y 7 años de edad, tomando en consideración sus diversas características. Pues, para la mayoría de ellos, esta edad representa un período de tranquilidad donde se desarrollan en forma más plena las diversas habilidades y talentos que poseen. Además, también es una etapa en donde el misterio de Dios llega a ellos como algo que se “presiente” y que es fortalecido por la formación que han recibido en sus hogares.

Con la catequesis de primer nivel empieza la iniciación a los sacramentos de la Reconciliación (segundo nivel) y de la Eucaristía (tercer nivel). Sin embargo, tanto los catequistas como las familias deben estar conscientes de que los signos sacramentales, si bien

marcan de manera importante el crecimiento del cristiano, son “momentos” significativos que conforman el gran camino de maduración en la fe de los niños y, por ende, el inicio de un caminar a lo largo de su vida.

En primer nivel, los niños descubren el amor del Padre en la creación y en las personas; dan los primeros pasos para conocer a Jesús, escucharlo y responderle y, además, se descubren como parte del plan de Dios de unir a todos los seres humanos en una gran familia animada por la acción del Espíritu Santo.

Animamos pues, a padres de familia, catequistas y sacerdotes a incentivar la catequesis infantil y así seguir el ejemplo de María quien, no poniéndole condiciones a Dios, estuvo siempre dispuesta a colaborar con Él y decirle “sí” en todo momento.

Conocemos a Jesús

La alegría de catequizarCentro Nacional de Catequesis

La alegría de catequizarCentro Nacional de Catequesis

cenacat @cenacat cenacatcostarica www.cenacat.orgCentro Nacionalde Catequesis

Esta semana te proponemos un reto: cuenta las camisetas, los pantalones,

los zapatos, las tennis, toda la ropa que encuentres en el armario y pregúntate si toda ella es necesaria, asegúrate también

de observar si usas toda la ropa que encontraste. Luego, selecciona la ropa

que esté en buen estado y dónala a tu parroquia o algún lugar de beneficencia.

Estrategias pedagógicasObras de misericordia corporales

Vistamos a quien lo necesita

2. Vestir al desnudo

Camino de fe

Recorta la muñeca y la ropa que aparecen en la imagen. Luego, diviértete vistiéndola

y cambiándole la ropa.

¿Cuánta ropa y zapatos tienes en el armario?

En la casa, desde niños, nos enseñan a cuidar la ropa y a estar bien presentados para ocasiones especiales. Sin embargo,

la pobreza, desastres naturales y otras situaciones, hacen que no todas las personas cuenten con este derecho y, nosotros como cristianos, estamos llamados a poner a disposición lo necesario para que ninguno de nuestros hermanos pase frío por no tener que vestir.

Tristemente, son muchas las ocasiones en las que se dona lo que sobra o lo que está en mal estado y, para hacer una obra de caridad real, debemos dar de lo mejor que tenemos. Recordemos que, “cada uno aporte lo que en conciencia se ha propuesto, no de mala gana

ni a la fuerza, porque Dios ama al que da con alegría” (2 Cor 9, 7)

Por eso, seamos buenos cristianos y asistamos a quienes más lo necesitan, dando siempre lo mejor de nosotros por aquellos hermanos que tienen frío o necesidades del cuerpo y el alma. Siempre podemos aportar un granito de arena.

Primer nivel de Catequesis

Domingo 21 de agosto 2016Eco Católico 19Domingo 21 de agosto 2016 Eco Católico18

Durante este Jubileo, sería una buena cosa que, al pasar por la Puerta Santa, la Puerta de la Misericordia, los pere-grinos recordaran el episodio del Evangelio, sucedido en la puerta de Naím.

Cuando Jesús vio a la ma-dre en lágrimas, ¡ella entró en su corazón! A la Puerta San-ta cada uno llega llevando la propia vida, con sus alegrías y sus sufrimientos, los proyectos y los fracasos, las dudas y los temores, para presentarlas a la misericordia del Señor.

Estemos seguros que, ante la Puerta Santa, el Señor se acerca para encontrar a cada uno de nosotros, para llevar y ofrecer su poderosa palabra consoladora: “¡No llores!”.

Ésta es la Puerta del en-cuentro entre el dolor de la humanidad y la compasión de Dios. Y pensemos en esto: un encuentro entre el dolor de la humanidad y la compasión de Dios.

Cruzando el umbral noso-tros realizamos nuestra pere-grinación hacia la misericor-dia de Dios que, como al joven muerto, repite a todos: “Yo te lo ordeno, levántate”.

A cada uno de nosotros: “levántate”. Dios nos quiere de pie. Nos ha creado para estar de pie: por esto, la compasión de Jesús lleva a aquel gesto de la curación, a curarnos… Y la palabra clave es: “Levántate”.

Ponte de pie, como te ha creado Dios”. De pie… “Pero padre, nosotros caemos mu-

chas veces”. “Adelante, le-vántate”. Esta es la palabra de Jesús, siempre. Al cruzar la Puerta Santa, tratemos de sentir en nuestro corazón esta palabra: “Levántate”.

La palabra poderosa de Je-sús puede levantarnos y obrar también en nosotros el paso de la muerte a la vida. Su Palabra nos hace revivir, dona espe-ranza, consuela los corazones cansados, abre a una visión del mundo y de la vida que va más allá del sufrimiento y de la muerte. ¡En la Puerta Santa está esculpido para cada uno el inagotable tesoro de la miseri-cordia de Dios!

Por esto, acercándonos a la Puerta Santa de la Misericor-dia, cada uno sabe de acercarse a la puerta del corazón mise-ricordioso de Jesús: es Él de

hecho la verdadera Puerta que conduce a la salvación y nos restituye a una vida nueva.

La misericordia, sea en Jesús sea en nosotros, es un camino que parte del cora-zón para llegar a las manos… ¿Qué cosa significa esto? Jesús te mira, te cura con su miseri-cordia, te dice: “Levántate”, y ti corazón es renovado. Pero esto del camino del corazón a las manos… “Eh, si, ¿Y ahora qué hago yo? Con el corazón nuevo, con el corazón sanado por Jesús realizo las obras de misericordia con las manos, y trato de ayudar, de sanar a mu-chos que tienen necesidad”.

La misericordia es un ca-mino que parte del corazón y llega a las manos, es decir, a las obras de misericordia. Gra-cias.

Emmanuel G. Quirós ChavarríaIV de Formando Pastores al Estilo de Jesús

Si en nuestra vida hemos encontrado problemas, situa-ciones difíciles, debilidad o pecado, puede que nuestras propias fuerzas no basten para seguir adelante. ¿Qué hacer? ¿A quién acudir cuando en-contramos que los demás no prestan alguna atención o son indiferentes?

El Pueblo de Israel pasó por situación de sufrimiento y dolor; no obstante, Dios en la Sagrada Escritura, cuando recuerda, actúa con misericor-dia primereando, como diría el Papa Francisco, es decir, to-

mando la iniciativa en ir hacia su Pueblo necesitado.

El cántico de Zacarías o Benedictus (Lc 1, 68-79) –nombre por su traducción al latín- se enmarca en este acor-darse de Dios, cuando el padre de Juan el Bautista entona este himno.

Como lo hizo con el Pue-blo de Israel, Dios actúa hacia nosotros con bondad y ternura, entrando en nuestra historia, en las realidades difíciles de cada día. Así lo recuerda Za-carías porque dirigió la mirada e hizo la redención de su pue-blo, y entonó el cuerno de la salvación para nosotros (Lc 1, 68-69); más aún, dirigir la mi-rada puede traducirse también

desde el griego como visitar a alguien que está enfermo, por lo que Dios nos mira con mi-sericordia, se compadece de nuestras situaciones de mise-ria y no queda indiferente, sino que Dios visita para liberarnos (cf. Buen Samaritano: Lc 10, 25-37).

El Señor recuerda, reali-zando la redención por su mi-sericordia y bondad, y no deja de cumplir sus promesas que se realizan en Jesús de Naza-ret, el amanecer que nace de lo alto (Lc 1, 78), que nos libra de los enemigos para no tener miedos y nos permite servirle en santidad y justicia.

Es Jesús, el Señor, anuncia-do por aquel que será llamado

profeta del Altísimo (Lc 1, 76), quien brilla en la oscuridad de nuestras realidades difíciles y nos da la gracia de andar por el camino de la paz, de aque-lla que sólo Él puede dar. ¡Qué amanecer del nuevo día, que ha brillado para nosotros, para anunciar a los pobres la Buena Nueva, para proclamar la libe-ración a los cautivos y la vista a los ciegos, para dar libertad a los oprimidos y proclamar un año de gracia del Señor (Lc 4, 18-19)! ¡Qué gran misericor-dia tiene Dios con nosotros, su Pueblo que, por el perdón de los pecados hace fiesta por los que aceptan volver al abrazo del Padre! (cf. Padre miseri-cordioso: Lc 15, 11-32).

¡No temamos a abrirnos al amor del Señor! Sólo espera de nuestra parte que confiemos en su misericordia, manifesta-da en Jesús, y que le responda-mos con un amor profundo a Él, con la ayuda de su Espíritu, pues quedan perdonados nues-tros numerosos pecados, por-que hemos mostrado mucho amor (cf. Lc 7, 47).

Tal vez nos cuesta decirle alguna palabra al Señor que nos manifiesta su ternura y su gracia, digámosle como Pedro: Aléjate de mí, Señor, que soy pecador; que la respuesta más segura que nos dirá Jesús será: No temas, desde ahora serás pescador de hombres (Lc 5, 8. 10).

Dios nos ha creado para estar de pieCatequesis en audiencia general, miércoles 10 de agosto, 2016

El Benedictus y la misericordia

Habla el Papa

Opinión

P. Víctor Hugo Munguía Castrovmunguia@tamuga.com

No sé si informar o no ha-cerlo es parte de la libertad de prensa. No sé si cargar las tintas en lo negativo de una institución y disimular hasta el exceso sus cosas buenas es cosa normal en ética periodís-tica. No sé si ignorar aconte-cimientos grandes o darles una cobertura mezquina es cosa normal en las lides periodís-ticas. Como no conozco los intríngulis de la profesión no-bilísima de los periodistas, es que me atrevo a subrayar lo siguiente:

La Iglesia Católica está compuesta por muchos peca-dores, de los cuales el prime-ro soy yo, pero también está compuesta de la heroicidad de las madres y padres de fa-milia, de la nobleza de niños y jóvenes que se dedican sólo a los valores del estudio o del trabajo, de la generosidad de los ancianos que siguen pres-tando servicios aunque estén jubilados. Además está com-puesta de la inmensa cantidad de grupos que rezan, evange-lizan, ayudan a los hermanos más necesitados y tienen claro que el único que puede ver en lo escondido de sus corazones es Dios. También está com-puesta la Iglesia de Obispos, Sacerdotes, Diáconos y Con-sagrados que prestan servicios generosos, a veces heroicos, a lo largo del territorio de nues-tra república. A veces parece en algún periódico que la Igle-sia es sólo pederastia, dineros mal manejados e hipocresía de la más barata. Los que vivimos dentro de la Iglesia y la servi-mos tenemos una experiencia de virtudes, bondades y santi-dades ocultas que no nos per-miten reconocer en la Iglesia en esas páginas sesgadas de algún periódico. ¿Será que lo bueno no vende ni es noticia para la prensa comercial?

En estos últimos días la Jornada Mundial de la Juven-tud hizo aparecer a la Iglesia ofreciéndole al mundo lo me-

jor de ella, es decir, de Cristo, para que podamos vivir de ma-nera más humana. La Romería hacia Cartago hizo aparecer que lo más lindo de la Iglesia (la Santísima Virgen María) pertenece al ADN de los ticos. Las peregrinaciones de grupos y diócesis a Cartago hacían brillar que el Pueblo de Dios peregrino (la Iglesia) no es un grupo moribundo de meno-páusicos espirituales que sólo saben cantar “Corazón Santo” y “Satanás, no podrás”. Las celebraciones de la Sagrada Eucaristía en parroquias y fi-liales, pues no reunirán al cien-to por ciento de los católicos pero reúnen una gran cantidad de “iniciados” en las cosas de la fe, para quienes cumplir el precepto dominical cedió el sitio al encanto del mejor en-cuentro con Cristo y para quie-nes no comulgar el Cuerpo y la Sangre de Cristo es como desperdiciar un domingo. Las gentes que buscan a los Sacer-dotes para confesión, para con-sejería y para “escucha” (quizá el ministerio más urgente hoy por hoy) son tantas que no nos parece percibir el Sacramen-to de la Reconciliación como un Sacramento en crisis (cosa evidente en otros lares) sino como una necesidad inmensa de la misericordia de Dios y de la acogida cariñosa dentro de la Iglesia. La Iglesia aparece

en la realidad viva, radiante y llena de esperanzas.

La Iglesia no tiene interés en poder político. Si incursio-na en temas políticos es por la defensa de valores como la vida, la familia, el matrimo-nio o por valores éticos que si no se cultivan pueden ha-cer que la sociedad se vuelva en contra de ella misma. Es falso pensar que nuestros le-gisladores están pendientes de la palabra de la Iglesia para legislar; si así fuera, muchas “novedades modernas” jamás habrían encontrado sitio en las discusiones de la Asamblea Legislativa. La Iglesia no vive de los impuestos que cobra el Estado a los ticos. Los que pi-den “estado laico ya” no tienen idea de la financiación de las obras de Iglesia. Si a alguno le molesta que la ley permita entregar los impuestos de una empresa para la manutención y restauración de Iglesias y otros monumentos, sepa que el patrimonio arquitectónico del país está compuesto por mu-chos monumentos religiosos que fueron construidos con el trabajo de las señoras que en los turnos parroquiales logra-ron juntar los dineros con su trabajo ingrato, generoso y a veces poco valorado. Un país que se respete jamás puede de-jar perder su patrimonio arqui-tectónico.

Nunca he podido asimilar que la mayor concentración que jamás haya existido en Costa Rica, a saber, la “Mar-cha de la Familia” que fue pa-cífica, alegre, muy numerosa, ordenada y culminada en la oración de la Santa Misa en el Parque de La Sabana haya sido informada con una escueta, mezquina e insignificante nota periodística, como si en San José no hubiera pasado nada.

Alguien se atrevió a decir, por un problema intra-eclesial, que tenía a los “Obispos de rodillas” (usó un adjetivo que no puede reproducirse), como si la función periodística fue-ra poner de rodillas a alguien, denigrar personas o subrayar hasta el hastío los problemas. ¿Es que existe alguien que ten-ga autoridad moral para lanzar la primera piedra?

Si algo negativo sucedido en la Iglesia merece una co-bertura rayana en la exagera-ción, el mínimo que podría-mos esperar es que lo positivo que sucede en ella tenga al me-nos una cobertura semejante.

Si trabajar en un periódico es obedecer lineamientos que no tienen objetividad e infor-mar conforme a intereses crea-dos, costaría mucho percibir la nobleza de esta profesión. Por dicha tenemos conocimiento y hasta relación de amistad con excelentes periodistas que bus-can la verdad con sinceridad y tratan de ejercer su profesión apegándose escrupulosamente a las normas deontológicas de su servicio a los demás.

A todos los que ejercen la nobilísima profesión del pe-riodismo nos encantaría recor-darles que todo trabajo huma-no tiene dignidad suma y por ende el periodismo, que tiene la maravillosa grandeza de formar conciencias e intelec-tos para que los ciudadanos de a pie podamos leer los aconte-cimientos con un mínimum de ojo crítico.

Nos encantaría recordarles que sus raíces cristianas (de alguna manera las tenemos

todos) los convierten en Evan-gelizadores (sic), es decir, en testigos alegres de la buena noticia por excelencia que es la persona de Cristo, el más comprometido con la verdad y el que dio por la humanidad lo mejor de sí mismo, su vida como acto de amor que des-truyó por sus raíces el mal en todas sus formas.

Nos encantaría recordarles que el Dios que nos presentó Jesucristo, su Padre y nuestro Padre, es compasivo, miseri-cordioso, lento a la ira y rico en amor y quiere que imitemos esas cualidades en nuestras re-laciones con los demás: “sean misericordiosos como miseri-cordioso es su Padre que está en los cielos”.

Nos encantaría recordarles que la búsqueda de la verdad “ aunque esté en un tacho de basura” (Jacques Maritain), aunque se busque sin saber que lleva a Dios (Edith Stein) es una tarea que en toda pro-fesión ennoblece y más en la profesión que informa y for-ma.

Nos encantaría en fin re-cordarle a todos los periodistas que amar al prójimo y dejarse amar por él es lo decisivo en la vida y que el amor y la verdad no riñen pues al “atardecer de la vida nos examinarán del amor” (San Juan de la Cruz).

Madre Teresa de Calcuta decía a los periodistas en un papelito que leí por ahí: “write something good”. Y la verdad es buena,, la búsqueda de la objetivad es mejor y expresar-la con amor es lo más excelen-te.

Dicen que si San Pablo fuera de nuestro tiempo quizá hubiera escogido la profesión de periodista para llegarle a más gente con la novedad de Cristo. Si esto fuera así, no nos imaginamos al maestro que interpretó de manera insigne el acontecimiento-Cristo bus-cando sólo lo malo y haciendo caso omiso de las bellezas que la gracia de Dios sigue prodi-gando en su Iglesia.

Nota para un periódico de cuyo nombre no quiero acordarme

Opinión

Domingo 21 de agosto 2016Eco Católico 21Domingo 21 de agosto 2016 Eco Católico20 Sagradas Escrituras

Pbro. Mario Montes M.Animación bíblica CENACAT

La universalidad de la sal-vación es uno de los elemen-tos más significativos de la teología de San Lucas, al que hemos estado escuchando en su Evangelio cada domingo. También porque al lado de su maestro San Pablo, él supo abrirse a los paganos y a todos “los hombres que ama el Se-ñor” (ver Lc 2,14), como can-taban los ángeles en Belén. Se puede decir que el núcleo te-mático, de la liturgia de la pa-labra de Dios en este domingo, está expresado en el verso 29, dentro del texto del Evangelio de hoy (Lc 13, 22-30): “Y ven-drán muchos de Oriente y de Occidente, del Norte y del Sur, a ocupar su lugar en el banque-te del Reino de Dios”.

“Traerán a todos sus hermanos…” (Is 66,18-21)

Esta esperanza de que to-dos son llamados a la salva-ción, está preparada en la úl-tima página del libro, que hoy escuchamos en la primera lec-tura. Su autor, un profeta anó-nimo posterior al destierro de Babilonia y al que se le llama Trito- Isaías o Tercer Isaías, re-acciona contra aquellos judíos “contaminados” de integris-

mo, es decir, que se sentían los únicos con derecho a salvarse o a formar parte del “único” pueblo elegido por Dios. Por eso, este profeta lanza un lla-mado o un mensaje de hori-zontes universalistas. El centro de su anuncio se encuentra en el verbo “reunir” (v.18), que primero se había aplicado al conjunto de los judíos, que vi-vían fuera de su tierra (la lla-mada “diáspora”), y que ahora proclama una esperanza para toda la humanidad.

Ahora bien, Jesús en sus enseñanzas, no contradice la enseñanza universal de la sal-vación, anunciada por el pro-feta. Más bien, había venido a este mundo para que todos se pudieran salvar. Como lo he-mos visto en estos domingos, en su largo camino hacia Jeru-salén, él constantemente habla a los discípulos y el pueblo del tema de la salvación, del seguimiento, de no confiarse en las riquezas, de su deseo de cumplir la misión salvadora que el Padre le había confiado y de hacer que esa salvación pueda llegar a todos los seres humanos, con la imagen de un gran fuego, alimentado por el Espíritu (ver Evangelio del do-mingo anterior).

Contra quienes pensaban que la salvación era tan solo para el pueblo de Israel, Jesús insiste en un tema central del Evangelio de San Lucas: “Y

vendrán muchos de Oriente y de Occidente, del Norte y del Sur, a ocupar su lugar en el banquete del Reino de Dios”. Todo un argumento para hacer enojar a los judíos de su tiem-po, cerrados y exclusivistas. Si bien es cierto afirma que “hay que pasar por la puerta estre-cha”, es decir, por el compro-miso y el esfuerzo personal para acceder al Reino, siempre queda abierta la posibilidad de ese Reino de Dios para todos.

Vayamos al texto. La lla-mada “puerta estrecha” no es la entrada a un camino (como podemos ver Mt 7,13-14), sino un acceso directo al lugar de la salvación. Allí se entra “con agonía” (como se dice literalmente en griego, v. 24), es decir, con un gran esfuerzo moral.

Luego, con una parábola, Jesús indica lo que va a suce-der cuando termine el tiempo final, en el cual ya no habrá “puerta estrecha”, sino “puerta cerrada” (vv.25-29). Fuera del lugar de la salvación se que-dan todos aquellos que cono-cieron la misión de Jesús pero no aceptaron sus enseñanzas. Éstos le hacen una protesta al dueño de la casa para que les abra, pero la respuesta repeti-da dos veces es contundente: “no sé de dónde son ustedes” (o “no sé de qué parte están”). No importa que hayan sido misioneros o que hayan reali-

zado curaciones, éstos se que-darán fuera, pues al no tomar en serio la Palabra de Jesús, tampoco pusieron en práctica la voluntad de Dios que era la de conformar su vida con la de Jesús. Más bien, por el contra-rio, se convirtieron en “agen-tes de injusticia” (literalmente: “obreros de iniquidad”).

Los que caminaron como discípulos y evangelizado-res, pero no clasificaron para la meta, se ven todavía más humillados al ser testigos de lo que sucede dentro (vv. 28-29): en la comunión definitiva con Dios (“mesa del Reino”), se encuentran sus antepasa-dos judíos y los paganos (los que vienen de los cuatro pun-tos cardinales), mientras que ellos, los que tuvieron la mejor oportunidad con Jesús, se que-dan “por fuera”. La enseñanza de la parábola resuena como un último llamado: “Hay últi-mos que serán primeros y hay primeros que serán últimos” (v.30).

Jesús da un giro a la pre-gunta planteada: “Señor, ¿es verdad que son pocos los que se salvan?” (v.23), pasando de lo cuantitativo a lo cualita-tivo. Aplicado a nuestra vida, lo importante no es estar ins-critos en una Iglesia, llenarnos la boca con palabras cristianas, alegar nuestras propias tradi-ciones o la práctica rigurosa de los mandamientos… Lo

importante es el compromiso y el esfuerzo personal en la bús-queda del Reino de Dios. De forma que el problema no es saber cuántos se van a salvar, sino esforzarse por alcanzar la salvación.

En la segunda lectura de hoy, tomada de la Carta a los Hebreos (Heb 12,5-7.11-13), su autor insiste ahora en la ne-cesidad de la perseverancia en los momentos difíciles. La di-ficultad y la prueba pueden ser para los creyentes, una señal, no de rechazo, sino del amor por parte de Dios. Es la lec-ción necesaria, que demuestra que somos sus hijos. Por eso, el autor termina diciendo: “Por eso, que recobren su vigor las manos que desfallecen y las rodillas que flaquean… para que el renco no caiga, sino que se cure... (vv. 12-13).

Preguntémonos en este día: ¿Se sigue repitiendo, en otros términos, la pregunta inicial hecha a Jesús? ¿Cuáles movi-mientos o grupos, promueven la idea de que sólo existen unos cuantos elegidos para la salvación? ¿Qué implican las imágenes simbólicas de la “puerta estrecha” y la “puerta cerrada”? ¿Qué se les exige, de forma especial, a quienes se han comprometido con Jesús? ¿Se llega a la meta, simple-mente por el hecho de haber trabajado por Jesús? ¿Qué más se requiere para salvarse?

La puerta estrechaLo importante es el compromiso y el esfuerzo personal en la búsqueda del Reino

de Dios. De forma que el problema no es saber cuántos se van a salvar, sino esforzarse por alcanzar la salvación.

Lectio divina

Hoy el tema de la exigencia se mezcla con el de la uni-versalidad de la salvación. Resulta que hay algo claro

y es que no hay seguridades y uno solo es el camino: el seguimiento en serio.

Nada ocurre de bueno si solo se escu-cha a Jesús. Sin una real conversión al Evangelio nos quedamos a la puerta del banquete del Reino. O se llega a

la praxis o no tendremos parte en el premio. ¡Es sencillo y claro el Señor!

¿Cuántos se salvarán? Parece que a Jesús el número no lo desvela para nada. La idea de la “puerta estrecha” muestra que la idea no cuántos sino qué tan bien responde cada uno y se exige. No importa si son muchos o pocos, lo esencial es que el creyente esté a la altura y que no pacte con la mediocridad, el miedo y en el nefas-

to proceder de aplaudir lo que sea que caiga en la categoría de realidad anti-evangélica.

La manera de vacunarse contra el ser excluidos del Reino es la siguiente: no rechazar la llamada de Jesús. Una lla-mada, ¿a qué? Pues a un seguimiento en serio, maduro y notorio.

Es un mensaje clave para todos: o tra-ducimos en praxis lo que creemos o nos resignamos a aceptar que horas de rodillas o bien, largas celebracio-nes con precisión rubricista o hasta vigilias largas de rezos interminables de nada servirán si no se manifiesta en nuestra vida cotidiana y con un gran peso de convicción, cada página del Evangelio del Señor.

Oración inicial

Para poder leer tu Escritura y gus-tarla, sentirla arder como un fuego dentro de mi, te suplicamos, oh Padre: danos tu Espíritu. Y Tú, María, Madre de la contemplación, que has conser-vado por tanto tiempo en el corazón las palabras los acontecimientos y los gestos de Jesús, concédenos contem-plar la Palabra, escucharla, y dejarla penetrar en el corazón.

El Texto:

† Lectura del santo Evangelio se-gún San Lucas

En aquel tiempo, Jesús iba ense-ñando por ciudades y pueblos, mien-tras se encaminaba a Jerusalén. Al-guien le preguntó: “Señor, ¿es verdad que son pocos los que se salvan?”

Jesús le respondió: “Esfuércense por entrar por la puerta, que es angos-ta, pues yo les aseguro que muchos tratarán de entrar y no podrán. Cuan-do el dueño de la casa se levante de la mesa y cierre la puerta, ustedes se quedarán afuera y se pondrán a tocar la puerta, diciendo: ‘¡Señor, ábrenos!’ Pero él les responderá: ‘No sé quiénes son ustedes’.

Entonces le dirán con insistencia: ‘Hemos comido y bebido contigo y tú has enseñado en nuestras plazas’. Pero él replicará: ‘Yo les aseguro que no sé quiénes son ustedes. Apártense de mí, todos ustedes los que hacen el mal’.

Entonces llorarán ustedes y se deses-perarán, cuando vean a Abraham, a Isaac, a Jacob y a todos los profetas en el Reino de Dios, y ustedes se vean echados fuera.

Vendrán muchos del oriente y del poniente, del norte y del sur, y parti-ciparán en el banquete del Reino de Dios. Pues los que ahora son los úl-timos, serán los primeros; y los que ahora son los primeros, serán los úl-timos”.

Palabra del Señor.

Un momento de silencio:

Para ponernos en “religiosa escu-cha” de la voz de Dios es necesario un clima de silencio, de calma interior. Es necesario crear en el propio cora-zón un rincón tranquilo en el que po-der tener un contacto con Dios.

Algunas preguntas

1. ¿Te empeñas en construir rela-ciones libres y maduras o estás

replegado sobre ti mismo? ¿Estás convencido de que la salvación se te es dada mediante la dimensión relacional de comunión con Dios y con los otros?.

2. ¿Hacia dónde y hacia qué cosa orientas tu vida? ¿Qué uso haces de tu libertad? ¿Sabes acoger la invitación de Dios a ser correspon-sable de tu salvación o te abando-nas a la dispersión-perdición?

3. ¿Sientes el deseo de pertenecer a aquella “escuadra infinita que des-de oriente a occidente se sentarán a la mesa del reino de Dios”?

Oración final

Oh Señor, haz que sintamos la vi-veza de tu Palabra que hemos escu-chado; corta, te rogamos, los nudos de nuestra incerteza, los lazos, de nues-tros “sí” y “pero” que nos impiden entrar en la salvación por la puerta es-trecha. Concédenos acoger sin miedo, sin muchas dudas, la palabra de Dios que nos invita al deber y al trabajo de la vida de fe: Oh Señor, haz que tu Pa-labra escuchada en este domingo, día del Señor, nos libere de las falsas se-guridades sobre la salvación y nos dé gozo, nos refuerce, nos purifique y nos salve. Y tú, María, modelo de escucha y de silencio, ayúdanos a vivir, autén-ticos, de entender que todo lo que es difícil se convertirá en fácil, lo que es obscuro se hará luminoso en la fuerza de la Palabra.

¡Señor, ábrenos!

Oracióninicial

LecturaBíblica

Algunaspreguntas

Momento de silencio

Oraciónfinal

Lecturas para hoy: Is 66, 18-21/ Sal 116/ Heb 12, 5-7. 11-13/ 13, 22-30• Ciclo C • XXI Tiempo Ordinario Liturgia Horas: I del salterio.

El proceder maduro cristiano.Comentario al Evangelio

Domingo 21 de agosto 2016Eco Católico 23Domingo 21 de agosto 2016 Eco Católico22

Gerardo Mora Panagmora@ecocatolico.org

Hace pocos días en la misa dominical el Evangelio nos decía: “donde está su tesoro, ahí estará su corazón”. Dos jó-venes responden al Evangelio aunque sea poco comprendido para la sociedad. La elección que han madurado en los últi-mos años, desde el 3 de agosto pasado marcó un antes y un después en sus vidas.

Yancy Salas Elizondo de 26 años de edad, oriunda de Pérez Zeledón y, María Jesús Sana-bria de 25, oriunda de Cartago, ingresaron al Postulantado de las Hermanas Combonianas en México, no por sus fuerzas, sino porque están confiadas a la voluntad de Dios. Yancy es trabajadora social y está a punto de terminar la carrera de turismo. María Jesús es inge-niera en salud ocupacional.

Presentamos un extracto del pensamiento y el sentir de cada una, respecto a la misión, tras conversar con Eco Católi-co. Ellas nos cuentan cuál es su tesoro.

Yancy: “Esto es más fuerte que yo”

“Siempre me llamó la aten-ción la misión, no fue algo que surgió de la noche a la maña-na. Este proceso con las Her-manas lo inicié hace tres años y comencé a enamorarme po-quito a poco del carisma. Nun-ca pensé en ir a África, o salir, pensaba siempre en evangeli-zar a los que desconocían.

Ahora que estaba terminan-do los estudios, la gente me de-cía que terminara, me faltaba un semestre, pero decido irme este año por algo mayor. Esto es más fuerte que yo. Comen-

cé con este proyecto que Dios me plantea, él está primero.

Mi mamá toma muy bien mi decisión, siempre ha sido muy espiritual. Tengo un her-mano mayor y dos hermanas menores, ellas me dicen que me apoyan si esto me hace fe-liz. Mi papá no está de acuer-do, pero entiende que es mi vida, no me puede retener.

En la decisión hay momen-tos de dudas, de miedos, se encuentran un montón de sen-timientos, pero siempre surge la seguridad de querer irse, de que es la voluntad de Dios, no lo hago por mis fuerzas.

Nos han dicho que no nos hagamos expectativas. Que lo que viene es diferente. No voy a esperar nada, voy a ir ca-minando, que sea Dios quien vaya guiando mis pasos.

Dios puso esa semillita en nuestro corazón, no por nues-tras capacidades. Es porque Dios ha puesto su mirada y quiere que lo sigamos hoy.

Como jóvenes pienso que lo que hay que hacer es ani-marse, arriesgar, muchas veces

nos quedamos en cosas que no valen la pena. Algo que hice fue cuestionarme, a veces uno se deja influenciar por cual-quier cosa. Debemos darnos cuenta de la realidad y arries-garnos. Hay que dejarse ir por la fe.

Lo más difícil de todo es dejar a mi mamá. Siempre ha sido mi apoyo, me ha costado desprenderme, saber que si le pasa algo no puedo hacer nada, pero, también es confiar en el Señor, ella va a estar bien. La relación con mis hermanas es muy unida, dejarlas me cues-ta, con una prima somos como hermanas, inseparables.

Dios es mi todo. Es el que me llena, el que me da pleni-tud, me da vida, el que me re-gala todo lo que tengo, el que sin importar mi condición de pecadora me ama y me da de todo, es difícil poder explicar a otra persona lo que una sien-te. Él me llena plenamente, me hace vivir día con día, es el que nos tiene aquí. A Dios le digo, sin usted no puedo hacer nada, no vivo. Es algo muy grande que uno no puede explicar”.

María Jesús: “cuando renuncio a todo, surge la

paz”

“Nunca fui de estar meti-da en grupos de la Iglesia. Es hasta que una amiga me in-vita hace tres años a estar en un grupo del Perpetuo Soco-rro. Ahí ayudábamos en horas santas o en ir casa por casa a evangelizar. Eso me encantó y era algo que quería hacer siempre, ya no solo los fines de semana.

Tengo mi casa, mi carro, tenía un buen salario… y em-pecé a ver si esto de la misión era un capricho o algo que vie-ne de Dios. Se me dio la opor-tunidad de hacer una experien-cia de misión en México, y ese verme vulnerable, dependien-te de la voluntad de Dios me dio a entender lo que quiero. Como ingeniera me iba bien, pero cuando renuncio a todo eso, surge una paz interior.

Soy la mayor en mi fami-lia, tengo un hermano y una hermana. Ellos no quieren esto para mí, les duele, pero si me hace feliz me dicen que vaya

adelante. Mi mamá está súper contenta, dice que ya era hora. Mi papá, es totalmente opues-to, él estaba orgulloso de lo que era, pero igualmente sabe que es mi vida y tomo decisio-nes como adulta.

Como seres humanos nues-tra naturaleza es razonarlo todo y eso lleva a las dudas y al miedo. Pero prefiero correr el riesgo de ir y no quedarme pensando que no lo hice, sa-biendo que Dios me invita y que esto es lo que me llama a caminar por ahora.

Aquí estamos no porque las Hermanas quieren que nos ha-gamos religiosas. La Hermana Verónica Vásquez (formadora) es quien nos ayuda para que descubramos el camino que Dios quiere para nosotras y en esa libertad de escoger poder ir creciendo.

San Daniel Comboni es un hombre increíble, desde el principio me cautivó cómo ve el mundo de manera distinta, desde los ojos de Jesús.

Me gusta tomar las pala-bras del Papa, cuando habla de desacomodarnos. Vivimos una cultura de comodidad y el Papa nos llama a salir de eso, nadar contra corriente, ahí es donde los jóvenes nos confrontamos. Solo así podemos darle sentido a nuestra vida.

Para mí lo difícil no es lo material, eso queda en segun-do plano, es la vivencia de la familia, la que siempre está ahí, es desprenderse de uno mismo, pero Dios tiene todo en sus manos.

Dios es mi razón de ser, él está en todo. Cuando una co-mienza a ver a Dios en todo, la vida toma un significado to-talmente diferente, es mi razón de vivir.

Su tesoro es Dios

Yancy y María Jesús viajaron el 3 de agosto a México. Inician el proceso de Postulantado el 22 de este mes. Foto G. Mora.

¿Qué hace a dos jóvenes profesionales con éxito en sus trabajos y estudios, dejar todo: su comodidad, su familia y su país por la misión?

Iglesia hoyTus dudas

Hay que reconocerlo, esti-mado Don Rodolfo, el impul-so a superarnos nos viene del mismo acto creador de Dios, que nos hizo a su imagen y semejanza (Gen 1,26) y que nos bendijo: “crezcan, multi-plíquense, dominen la tierra”. El ser humano, pues, está lla-mado a superarse. Lo recuerda el Concilio Vaticano II cuando a firma que el progreso corres-ponde a la voluntad de Dios y que es signo del Reino.

Sin embargo, ¿cuál progre-so? El Beato Pablo VI, en su famosa encíclica Populorum Progressio, el Progreso de los Pueblos (1957), nos insistía en que éste debe ser de todos los hombres y de todo el hombre, es decir, debe ser progreso in-tegral.

No podemos, pues, pensar en un progreso en el que pocos tengan demasiado y muchos, muchísimos, tengan demasia-do poco. Además, el progreso no debe en lo absoluto ser en-tendido sólo en su aspecto de tener cada vez más, sino en el sentido de “pasar de una vida

menos humana a una vida más humana” (Pablo VI). Y la vida es más humana cuando no se sacrifican valores humanos, como son: la dignidad de la persona, la familia, la sana convivencia, la ayuda a los que tienen menos, la dimen-sión religiosa, etc., etc., al de-vastador ídolo del Tener.

Comprendemos que no es nada fácil resistir hoy en día a la carrera hacia el tener más y más, hacia el consumismo y el despilfarro; inclusive hu-millando a los que no pueden concederse lujos. Sin embar-go, hay que tener el ánimo, la valentía de detenerse para re-flexionar y así poner orden en todo lo que nos proponemos. ¿A qué serviría ganar todo el mundo y luego perder el alma? Repetía San Ignacio de Loyo-la, haciendo suya esta afirma-ción de Jesús al brillante joven estudiante Francisco Javier.

En cualquier caso, hay que tener constantemente presen-te la afirmación de Jesús: “no cabe servir a Dios y al dinero”, a la que hace eco lo que escri-bía San Pablo a los Corintios: “la codicia es idolatría”.

¿Cómo superarnos sin caer en la ambición desmedida?

“Estimado Monseñor: hoy en día en que las personas hablan tanto de superación y del tener, a veces sin importar lo que se tenga que hacer para lograr dicho fin, se valora a las personas por lo que tienen. En pro de ese tener, se trabaja largas jornadas descuidando al mismo Dios y a la Familia. ¿Cómo se puede mantener ese sano equilibrio entre el superarse y la gula material o ambición desmedida llena de vanidad, por lo cual no se es feliz con lo que se tiene? Eso la gente lo llama superarse y no ser conformista. ¿Nos enseña la Iglesia algo al respecto? Recuerdo al Pobrecillo de Asís y cómo, al dejarlo todo, él halla el “todo” en Dios mismo. Gracias, Monseñor, Dios le guíe y guarde siempre, y María sea su consuelo”.

Rodolfo Umaña V - Alajuela

Monseñor Vittorino Girardi S.Obispo emérito de Tilarán-Liberia

¡Mereces una respuesta!Correo electrónico: vitgir@gmail.com Fax: 2257-6536

Hay que tener el ánimo y la valentía de detenerse para reflexionar y así poner orden en todo lo que nos proponemos.

Domingo 21 de agosto 2016 Eco Católico24

Danny Solano Gómezdsolano@ecocatolico.org

En estos días se llevó a cabo en el Seminario Nacional Nuestra Señora de los Ángeles la Semana de Reflexión Teo-lógica, cuyo tema central para esta ocasión fue El Rostro de la Misericordia.

Durante los días 8, 9 y10 de agosto, los seminaristas re-cibieron la visita de diferentes expositores para profundizar en el mensaje del Evangelio y la labor sacerdotal en concor-dancia con el Amor del Padre.

El último día de reflexión, el Padre José Esteban Castro Leiva compartió con los se-minaristas su testimonio de vida sacerdotal, de su etapa en el seminario y cómo se dio cuenta de que no se trataba de lo que él planeaba para su cre-cimiento personal, sino de lo que Dios quería para él.

Aunque tenía muy buenas notas y participaba activamen-te de las diferentes activida-des, en ese tiempo era un joven que “vivía un seminario de una manera muy externa, muy en mis méritos”, como él mismo

describió. “Vivía una soberbia espiritual”, dijo.

Llegó entonces un día, en que se enfrentó a una prueba y sintió miedo de fallar, de “no tener madera suficiente para ser sacerdote”.

“Me escandalice mucho de mí mismo. Aquel seminarista que figuraba y aquellos deseos de comerse el mundo, con una pequeña tentación -que se le presentaba y en la que ni si-quiera cayó- me di cuenta de que no daba la talla. Esto fue muy duro para mí”, dijo el Pa-dre a los seminaristas.

Fue entonces cuando deci-dió pedir un tiempo fuera del Seminario. Retomó sus estu-dios universitarios y hasta es-tuvo cerca del matrimonio.

Casualmente, por esa épo-ca aceptó un puesto como pro-fesor de filosofía en Ciudad Neily, solo tenía que buscar un lugar dónde quedarse. Un amigo le recomendó pedirle posada unas noches al cura párroco de Santa Marta, Arís-tides Ceciliano, mientras se acomodaba.

En esa parroquia conoció al Padre Arístides como cura y como persona. “Me encon-tré con un sacerdote de carne y hueso, con sus luchas, con pruebas difíciles”.

Esta experiencia lo marcó y en esa casa, en esa comuni-dad, descubrió que antes vivía una vocación en sus propios términos y no en los del Señor. “Había hecho de mi vocación mi proyecto y no el proyecto de Dios, que es increíblemente más maravilloso de lo que yo hubiera imaginado”, comentó.

“Había tenido un tropiezo, del que yo no había sido capaz de perdonarme, cuando al Se-ñor no le faltaba perdón para mí. Eso me movió el piso pro-fundamente”.

De pronto aquella voz a la que “había puesto un muro seguía allí”. “Pude ver que

el Señor no me exigía tanto, como me exigía yo”. Después de cinco años fuera, volvió al Seminario y se ordenó presbí-tero.

Confiesa que si no hubiera pasado por aquella experien-cia quizá no hubiera sido un sacerdote capaz de superar las pruebas que se le han presen-tado. “Mi ministerio es el sello

que tengo en mi vida de que Dios me ama como soy, no me rechaza, a pesar de mis peca-dos”.

“Así he vivido la misericor-dia, como un ministerio que el Señor me ha dado, no por mis méritos, por ser bueno o dar la talla, me lo ha dado porque me ha amado, porque ha perdona-do mis pecados”, concluyó.

Seminaristas de todas las diócesis participaron en la actividad. Foto D. Solano.

Padre José Esteban Castro Leiva: “Vivía una soberbia espiritual”

Sacerdote comparte testimonio con seminaristas

El Padre José Esteban ac-tualmente sirve en la Parro-quia Inmaculada Concep-ción de María, en Zapote. Foto D. Solano.

Provechosa Semana de Reflexión Teológica del Seminario Nacional

“Nos gusta escuchar a otros”

El testimonio de vida siem-pre ha motivado a todos no-sotros, nos gusta escuchar a otros, encontramos pautas

que dan fuerzas para seguir en el camino. Aunque cada vocación particular, cada historia sirve para el bien de la comunidad. Muchas veces creemos que los pro-tagonistas somos nosotros y al fin y al cabo, somos

instrumentos de la obra de misericordia del Señor.

Astry Délary - seminarista

“Me llegó al corazón”

El testimonio me tocó mu-cho el corazón, yo también como el padre he llegado incluso a creer que Dios siente asco de mí, pero

cuando uno se pone a ver que, en medio de tanta

fragilidad que uno pueda tener, Dios lo ama, uno se enamora de Cristo y no

queda otra cosa más que seguirle. Uno por sí solo no puede hacer nada, pero con la ayuda de Él uno puede

salir adelante.Ernesto Mora Prado,

seminarista

Iglesia hoy

El amor del PadreEl primer día el padre

Ronald Fallas Barboza ex-puso el tópico: Dios, Padre, evangelizador de la Mise-ricordia. En la charla habló sobre cómo el Padre muestra su amor a través del misterio del Dios encarnado, Jesucris-to, que muestra la plenitud de Su Amor. El presbítero se refirió a como la sociedad actual no entiende el poder de Dios, porque reduce el poder al tener o poseer bie-nes materiales, mientras que Dios es poderoso en cuanto se muestra amoroso, miseri-cordioso.

En la segunda parte de la charla, Pbro. Ronald Fallas mencionó la necesidad de entender al Hijo, Jesucristo, para entender a Dios Padre. Dios se revela a través del Hijo y se comunica con los creyentes a través de la pala-bra y la manifestación de su Espíritu.

Entendido lo anterior, la Iglesia tiene la misión de anunciar la misericordia de Dios, “corazón palpitante del Evangelio”, por cuyo medio debe alcanzar la mente y el corazón de toda persona.

Domingo 21 de agosto 2016Eco Católico 27Domingo 21 de agosto 2016 Eco Católico26 Iglesia hoy Iglesia hoy

Laura Ávila Chacónlavila@ecocatolico.org

Conscientes de que que-dan pocos recursos naturales a nuestra disposición, la parro-

quia Nuestra Señora del Pilar en Tres Ríos ha implementa-do proyectos de protección al medio ambiente entre los que destacan limpieza de ríos, re-

ciclaje y campañas de refores-tación.

Su más reciente iniciativa fue “Tres Ríos peregrina Ver-de”, la cual le valió obtener la Bandera Azul Ecológica, con lo que se convierte en líder nacional y hasta mundial en su tipo en prtección a la naturale-za.

Este proyecto consistió en recolectar residuos en ese cantón durante los días de ro-mería, con motivo de la cele-bración de Nuestra Señora de los Ángeles. En esta actividad participaron 520 voluntarios y se recogió más de una tonelada de residuos.

Para Roberto Fonseca miembro activo de la comuni-dad, la bandera azul significa mucho: “Se logró trabajar en bienestar del planeta y en un solo esfuerzo participaron to-das las fuerzas vivas de la co-munidad”, dijo.

Parafraseando al Papa Francisco, Fonseca explicó: “Debemos garantizar la pro-tección de la casa que com-

partimos, porque es un crimen contra la naturaleza y es un crimen contra Dios”.

Datos de la WWF (Fondo Mundial para la Vida Silves-tre, por sus siglas en inglés) indican que el 8 de agosto pa-sado fue el día del sobregiro ecológico, es decir, que hemos gastado todos los recuersos que teníamos disponibles para el año completo.

“Debemos sobrevivir echando mano a nuestra línea de crédito, que en el caso de la Tierra, son las reservas que de-beríamos dejar para las próxi-mas generaciones”, asegura la ONG.

Según los ecologistas, son necesarios “1,5 planetas” para producir los recursos ecoló-gicos renovables necesarios para sustentar la huella actual de la humanidad. Las proyec-ciones de población, energía y alimentos moderadas sugieren que se requerirá la biocapa-cidad de tres planetas mucho antes de mediados de siglo, lo cual en la práctica puede llegar a ser inviable”.

Laura Ávila Chacónlavila@ecocatolico.org

La Parroquia de San Luis de Tolosa, se prepa-ra para celebrar sus fiestas patronales, con motivo de la iniciación de la evange-lización en 1575. Para ello han organizado una serie de actividades:

Sabado 20 de agosto5:20 p.m Santo Rosario6:00 p.m. Santa Eucaristía, ejercicio de las 40 horas presidida por el sacerdote Luis Alberto Herrera.

Domingo 21 de agosto6:00 a.m. Santa Eucaristía10:00 a.m. Solemne Euca-ristía presidida por Monse-ñor José Rafael Quirós11:00 a.m. Desfile y bendi-ción de Carretas4:00 p.m. Santa Eucaristía5:20 p.m. Santo Rosario6:00 p.m. Santa Eucaristía

Lunes 22 de agosto5:20 Santo Rosario6:00 p.m. Santo Ejercicio de las 40 horas presidida por el Pbro Gerardo Alonso Azofeifa

Danny Solano Gómez

dsolano@ecocatolico.org

La semana pasada estuvo en el país el Secretario Ejecuti-vo del Departamento de Cultu-ra y Educación del CELAM, el Pbro. Óscar Lozano Ríos, con el fin de discutir sobre el tema de Educación Religiosa en el país, entre otros.

El CELAM es el Consejo Episcopal Latinoamericano,

el cual agrupa a los obispos de la Iglesia Católica de Lati-noamérica y el Caribe, en un espacio de discusión entre las Conferencias Episcopales de los diferentes países.

El sacerdote se reunió en diferentes ocasiones con los Obispos de la Conferencia Episcopal, miembros de la Comisión de Educación Reli-giosa y profesores de centros educativos católicos, así como docentes de Religión.

El Padre Lozano comentó que Costa Rica tiene facili-dades para el desarrollo de la educación religiosa como na-ción, además de su fuerte tra-dición católica y sensibilidad a lo espiritual.

“He encontrado delega-ciones de Pastoral Educativa dinámicas, trabajando fuerte-mente en el acompañamiento de los profesores. Hay desa-fíos grandes pero hay una di-námica interesante”, comentó.

Única en el mundo con bandera azul ecológica

Sacerdote profundizó en el tema de Educación Religiosa

Parroquia de Tres Ríos lidera protección ambiental

Secretario de Cultura y Educación del CELAM visitó el país

La parroquia promueve acciones como ésta: la limpieza del río Tiribí. Foto L. Avila.

Pbro. Óscar Lozano Ríos. Foto D. Solano.

Redacción y agencia ACI

La Pontificia Comisión para América Latina (CAL) anunció la realización de una gran celebración continental del Jubileo de la Misericordia del 27 al 30 de agosto en Bo-gotá, Colombia.

La celebración es convoca-da y organizada conjuntamen-te por la Pontificia Comisión para América Latina (CAL) y el Consejo Episcopal Latino-americano (CELAM), en con-

tacto y colaboración con los episcopados de Estados Uni-dos y Canadá.

Hasta el momento ya hay inscritos 15 cardenales y más de 120 obispos. Se espera ade-más la participación de recto-res de santuarios nacionales marianos, superiores religio-sos, dirigentes de movimientos eclesiales, entre otros. Repre-sentando a nuestro país esta-rán presentes Monseñor José Rafael Quirós, Arzobispo de San José y Monseñor Javier Román, Obispo de Limón.

El evento estará presidido por el Cardenal Marc Ouellet, Presidente de la CAL; y por el Cardenal Rubén Salazar, Ar-zobispo de Bogotá y Presiden-te del CELAM.

Se espera un importante video mensaje del Papa Fran-cisco para la inauguración del evento.

En esta celebración habrá una liturgia penitencial y con-fesiones al comienzo; además de cuatro conferencias y diver-sos grupos de trabajo.

La primera lleva como títu-lo “Este es el gran tiempo de la misericordia” y estará a cargo del Arzobispo Rino Fisichella, Presidente del Consejo Ponti-ficio para la Nueva Evangeli-zación, a quien el Santo Padre encomendó todo lo relativo al Jubileo.

La segunda conferencia, sobre “La Iglesia, sacramento de misericordia”, estará a car-go del Cardenal Marc Ouellet.

La tercera conferencia, a cargo del Padre Eduardo Chávez, canónigo de la Basíli-ca de Nuestra Señora de Gua-

dalupe, máximo experto sobre la Virgen del Tepeyac, se titu-la “La santidad en tiempos de Francisco”.

Una jornada entera será dedicada a las Obras de Mi-sericordia en el continente americano como el “Hogar de Cristo” en Chile, las “Fazen-das da Esperanza” en Brasil, el “Proyecto Raquel”, entre otros. Además, todos los par-ticipantes se organizarán por grupos que visitarán diversas obras de misericordia en las periferias de Bogotá.

La última conferencia se titula “La Misericordia como alma de una cultura del en-cuentro, del perdón y de la re-conciliación en el continente americano”, que será presen-tado por Mons. Luis Augusto Castro Quiroga, Presidente de la Conferencia Episcopal Co-lombiana, y Mons. José Hora-cio Gómez, Arzobispo de Los Ángeles (Estados Unidos).

La celebración americana del Jubileo de la Misericor-dia concluirá con un “Rosario continental por la paz”, segui-do de la Santa Eucaristía pre-sidida por el Cardenal Rubén Salazar Gómez.

Se realizará en Colombia del 27 al 30 de agosto

Obispos ticos a Jubileode la Misericordia de América

Tilarán y Puntarenas en semana teológicaLaura Ávila Chacónlavila@ecocatolico.org

Las diócesis de Tilarán-Liberia y Puntarenas se prepa-ran para su Semana Teológica, una actividad formativa para el clero que se realiza cada año.

En el caso de los guanacas-tecos se efectuará en el Centro Pastoral de Tilarán del 22 al 26 de agosto. Los porteños esta-rán en la Casa Pastoral de las hermanas Clarisas en Moravia del 22 al 24 del mismo mes.

En ambas semanas destaca un tema en común: el análisis

del diaconado permanente. El diaconado es el primer grado del sacramento del orden. Pue-de ser conferido a hombres ca-sados luego de un proceso de discernimiento y formación. En nuestro país las diócesis de Tilarán y San José son las que con mayor fuerza han desarro-llado la experiencia.

Otro tema en reflexión por parte del clero de Puntarenas será el del uso de los medios de comunicación social y re-des sociales.

En el encuentro se celebra-rán Eucaristías y habrán mo-mentos de oración, para forta-lecer la dimensión espiritual.

Entre los ponentes destacan los sacerdotes Daniel Blanco, Eduardo Ramírez, Eduardo Abarca, Miguel García, Ras-chid Vargas, Glenm Gómez y Monseñor Manuel Eugenio Salazar.

En Aserrí

A celebrar a San Luis de

Tolosa

Domingo 21 de agosto 2016Eco Católico 29Domingo 21 de agosto 2016 Eco Católico28 Iglesia hoy

Danny Solano Gómezdsolano@ecocatolico.org

Calienta el clásico de curas que se celebrará este lunes 22 de agosto, a las 7:00 p.m. en el Estadio Juan Gobán de Li-món, en el cual se enfrentarán las Águilas Verdes contra las Águilas Negras.

Este será el primer partido que disputarán estas dos es-cuadras compuestas por sacer-dotes de la Diócesis de Limón (Águilas Verdes) y por el cle-

ro de la Arquidiócesis de San José (Águilas Negras).

El objetivo de este encuen-tro es recaudar fondos para la remodelación de la Capilla Nuestra Señora de los Ánge-les en Los Corales de Limón y para la Diócesis de Limón.

Tras año y medio de retiro de las canchas, el Obispo de Limón y capitán de las Águilas Verdes, Mons. Javier Román, espera volver para disputar un encuentro reñido y muy boni-to.

Monseñor expresó que este partido es una bella oportuni-

dad para que el clero compar-ta. Mencionó además que se han estado preparando física-mente para estar al cien por ciento. “Más que jugar fútbol, vamos a correr detrás de una bola”, bromeó.

Duelo pendiente

Walter Cordero, organiza-dor de la actividad, contó que este partido estaba pendiente desde antes de la Ordenación Episcopal de Mons. Román, quien fuera jugador insigne de las Águilas Negras y que aho-

ra se enfrentará a su ex equipo, por lo cual se ha generado mu-cha expectativa.

“A muchos padres les gusta jugar, y algunos son muy bue-nos. Pero a veces se les com-plica participar porque tienen muchas ocupaciones y hay eventualidades, todo puede pasar, un funeral por ejemplo, por esa razón a veces se invita a laicos y a sacerdotes de otras diócesis”.

Por su parte, el Obispo de Cartago, Mons. José Francis-co Ulloa, también lanzó un reto, por lo que se espera que próximamente se conforme un cuadro con el clero cartaginés para un próximo encuentro, según informó Mons. Román.

Laura Ávila Chacónlavila@ecocatolico.org

Los obispos del país, atravesaron la Puerta San-ta peregrinando al San-tuario Nacional de Santo Cristo de Esquipulas, en Alajuelita el miércoles 10 de agosto.

Esto con la intención de dejarse abrazar por la misericordia de Jesús e implorar para ellos la gracia de la indulgencia plenaria en este Año de la Misericordia.

La visita se dio en el contexto de la segunda Asamblea Anual Ordina-ria efectuada en el Semi-nario Nacional de Nuestra Señora de los Ángeles en Paso Ancho en la cual se abordaron temas sobre el rumbo de la Iglesia Ca-tólica y nacional del país. Esto se dio del 8 al 12 agosto.

Partido de fútbol el próximo 22 de agosto en Limón

Calienta el clásico de sacerdotesObispos

atraviesan Puerta Santa en Alajuelita

Monseñor Javier Román (segundo de pie de izquierda a derecha) se enfrentará a su ex equipo, las Águilas Negras. Foto L. Avila.

Las entradas para este encuentro que promete emociones y muchísima diversión tienen un valor de 2000 colones. Se pueden adquirir en las oficinas de cada Parroquia limonense, o en el estadio el día del evento. También habrá venta de comidas.

Iglesia hoy

Gerardo Mora Panagmora@ecocatolico.org

Monaguillos que lleven al Señor Jesús en sus corazo-nes: este debe ser el reflejo de los servidores del altar, expli-có Monseñor José Francisco Ulloa, Obispo de Cartago, quien presidió la Eucaristía el sábado 13 de agosto, en la Ba-sílica de los Ángeles, durante el Jubileo de los Monaguillos

en el marco del Año Santo de la Misericordia.

Varias actividades por la mañana y una peregrinación alrededor de la plazoleta para dirigirse a la Puerta Santa, marcaron la mañana de ese día para niños que llegaron de las cinco vicarías que conforman la diócesis cartaginesa.

Monseñor Ulloa comen-tó la importancia de este Año

Santo y reflexionó en su homi-lía sobre diferentes momentos de alegría y tristeza que se pre-sentan en nuestras vidas.

Destacó que por medio del servicio, los monaguillos ma-nifiestan su alegría y están cer-ca del Señor y cerca de María que es motivo de alegría. El prelado también recordó a San Tarsicio como modelo de los monaguillos.

“Nosotros debemos tener siempre a nuestro Señor en el corazón y estar alegres. Y si estamos en el Señor hacemos el bien y compartimos esto con los demás”, expresó Mons. Ulloa.

Como servidores del altar que están junto al Señor, desta-có que “entre los monaguillos no puede haber bullying (aco-so escolar), están llamados a

ser ejemplo, a ser testigos del amor y la misericordia”.

Los niños deben ser expre-sión del amor de Dios prime-ramente en sus casas, con sus compañeros monaguillos, en las escuelas, refirió el obispo.

“Deben saber perdonar al hermanito que les hizo una trastada”, dijo Monseñor Ulloa, en una homilía en que se acercó a los niños.

Gerardo Mora Panagmora@ecocatolico.org

El próximo domingo 4 de setiembre la juventud tie-ne una cita con el llamado de Dios, pues ese día, se realizará el II Día Vocacional de la Ju-ventud.

La idea además es que las diferentes manifestaciones re-ligiosas puedan tener un stand, en el cual los jóvenes puedan conocer sus carismas.

El Colegio Claretiano, ubicado al costado norte del

templo de Mercedes Norte, en Heredia, será la sede de este encuentro, que iniciará a las 8:30 a.m.

Asimismo, a las 9 a.m. ha-brá Santa Misa que será presi-dida por Mons. Ángel San Ca-simiro Fernández, obispo de la diócesis de Alajuela.

Este día se estará vendien-do a los asistentes una pulsera que será a la vez la entrada al Día Vocacional, la cual tiene un costo de 500 colones y dirá “Amar hasta que duela”. Esta frase es de la Madre Teresa de Calcuta, quien justo en este día

será canonizada por el Papa Francisco en El Vaticano.

Según informó la Hermana María del Rosario Carvajal, Misionera Clarisa, dentro del Día Vocacional se dará un ho-menaje a la Madre Teresa.

Además, habrá activida-des deportivas y zumba. Para alimentación, estará abierta al público la soda del colegio.

Los stands, que se expon-drán después de la Eucaristía, estarán colocados en un área abierta.

La Diócesis de Cartago celebró su jubileo

Colegio Claretiano, 4 de setiembre

“Entre los monaguillos no puede haber bullying”

II Día Vocacional de la Juventud

Monseñor Ulloa animó a los niños a mostrar alegría por medio del servicio que brindan. Foto: G. Mora.

Los monaguillos peregrinaron para ingresar por la Puerta Santa. Foto: G. Mora.

El año anterior fue la primera vez que se llevó a cabo el Día Vocacional de la Juventud. Foto: G. Mora.

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Créditos

Domingo 21 de agosto 2016Eco Católico 31Domingo 21 de agosto 2016 Eco Católico30

CIUDAD DEL VATICANO - El carde-nal Secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, presidió la 36va. Ten-dópolis de los Jóvenes, un inmenso campamento con centenares de asis-tentes de Italia, Colombia y Vene-zuela, en el que pidió para este últi-mo país que “prevalezca en todos el sentido del bien común, la justicia, la solidaridad y el amor”.

El encuentro juvenil en tiendas de campaña, que contó con la bendición del Papa Francisco y se desarrolló en cercanías del Santuario de San Ga-briel, en la provincia de Téramo, al pie del macizo del Gran Sasso en la cordillera de los Apeninos.

Durante la homilía, Parolin recor-dó los tiempos en los que fue nuncio en Venezuela, según informó Radio Vaticana.

“Sabemos que Venezuela se debate en pesadísimas dificultades sociales, políticas y económicas, que están cau-sando enormes sufrimientos” a la po-blación, dijo el cardenal.

Invitó además a rezar por los vene-zolanos y para que “los protagonistas de la vida pública y los componentes de la sociedad sean sabios y valientes para hallar soluciones pacíficas a la presente crisis y prevalezca en todos el sentido del bien común, la justicia, la solidaridad y el amor”.

Luego, exhortó a los jóvenes a se-guir el ejemplo de San Gabriel de la Dolorosa, como se conoce al santo italiano del Siglo XIX, el pasionista

Francesco Possenti (1838-1862), al que actualmente se venera en el mo-nasterio cercano a la reunión.

Parolin destacó que Possenti “con-fió y escuchó el llamado del Señor. Lo hizo entrando en la Escuela de San Pablo de la Cruz, eligiendo compartir su espiritualidad, marcada por vivir con fidelidad hacia el Evangelio, y para anunciar la potencia salvadora de la Cruz a todos sus hermanos”.

“San Gabriel con su existencia hizo tangible en qué grado la Pasión de Cristo es en verdad la fuerza que sostiene a la Iglesia y el camino de todo hombre”, agregó el Secretario de Estado.

“Descubrió que la contemplación de la Pasión es el mejor modo de com-prender hasta que punto el Señor ama a sus criaturas.

Ninguno podrá jamás dudar que aquel corazón atravesado sobre la cruz se transformó para nosotros en un manantial de vida. De aquella he-rida llega hasta nosotros la misericor-dia”, concluyó Parolin.(ANSA).

Cardenal Parolin pide orar por Venezuela Seguridad en ocasión

del AngelusCIUDAD DEL VATICANO- Se-veros controles de seguridad fueron instituidos en toda la zona que circunda la plaza San Pedro, en ocasión del Angelus del Papa Francisco.

Los fieles que se dirigían ha-cia la plaza fueron sometidos a dobles controles: primero fuera de la plaza, pasando a través de las barreras colocadas por la po-licía y los carabineros, que ins-peccionaban los contenidos de bolsos y mochilas.

En el momento de ingresar a la plaza, todos debían pasar por el detector de metales. (ANSA).

Situación en Aleppo sigue complicadaBEIRUT- La situación en Aleppo “aparece más calma” pero los combates y bombardeos no cesan y se escuchan explosiones. Lo dijo el Padre Ibrahim al Sabagh, párroco de la iglesia de San Francisco, “El agua corriente -agregó- volvió, pero funciona durante una hora, luego se va, después vuelve por 10 minutos, y esto desmoraliza aun más a la gente que está ansiosa. La luz en cambio no existe”. (ANSA).

Evangelizaría desde la cárcelCUERNAVACA- En medio de las acusaciones por presunta injerencia políti-ca, por recibir en la Catedral a manifestantes críticos al gobernador del estado Morelos, Graco Ramírez, el Obispo de Cuernavaca, Mons. Ramón Castro Castro, aseguró que no teme la cárcel y que desde ahí podría evangelizar.“Si voy a la cárcel no hay problema, desde ahí haré trabajo de evangelización”. “Estamos esperando la notificación, y quiero agradecer a la Barra de Aboga-dos de Cuernavaca, que me ha dado su solidaridad para entrar en mi defensa”, añadió. (ACI).

ENCUENTRO DE VIDA Y PAZ

CON EL ANIMADOR DE VIDA LIC. JUAN JOSE VARGAS FALLAS TODOS LOS PRIMEROS DOMINGOS DE MES

AUDITORIO DE LA CONFERENCIA EPISCOPAL DE LAS 8 AM HASTA LAS 12MD

SANTA EUCARISTIA, CONFESIONES Y PREDICACION.Ven alabar, adorar y orar por sanación interior, en compañía de María

Santísima, gocemos del gran amor que nos tiene Nuestro Divino Salvador Jesús.

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Invita Asociación Misionera Club de Paz

Monseñor José Rafael Quirós, Arzobispo de San José, el clero arquidiocesano y el Eco Católico comunican con gozo la Pascua de la señora

Carmen Moraga MoreraMadre del Pbro. Mario Montes Moraga, activo colaborador de este

semanario. Su funeral se realizó el domingo 14 de agosto en la Parroquia San Antonio de Padua, en Escazú.

CIUDAD DEL VATICANO - El Papa Francisco afirmó que la Iglesia “no necesita burócratas y funcionarios di-ligentes, sino misioneros apasionados, animados de coraje, ardor y proximi-dad, y capaces de conmoverse y de-tenerse ante las incomodidades y las pobrezas materiales y espirituales”.

Este fue el mensaje lanzado por el Pontífice durante el Angelus domini-cal desde la ventana de su estudio en vísperas del Ferragosto (el feriado tra-dicional en Italia del 15 de agosto).

En “el cumplimiento de su misión en el mundo, la Iglesia -es decir to-dos nosotros- necesita de la ayuda del Espíritu Santo para no dejarse frenar por el miedo y por el cálculo, para no acostumbrarse a caminar dentro de confines seguros”, dijo

“Estas dos actitudes llevan a la Iglesia a ser una Iglesia funcional que no corre nunca ningún riesgo”, prosi-guió.

“En cambio, el coraje apostóli-co que el Espíritu Santo enciende en nosotros como un fuego nos ayuda a superar los muros y las barreras, nos vuelve creativos y nos estimula a po-nernos en movimiento para caminar

también por rutas inexploradas o incó-modas, ofreciendo esperanza a los que encontramos”, completó.

“Más que nunca hoy -insistió- hay necesidad de sacerdotes, de consagra-dos y de fieles laicos con la mirada atenta del apóstol, para conmoverse y detenerse frente a las incomodidades y a las pobrezas materiales y espiritua-les, caracterizando así el camino de la evangelización y de la misión con el ritmo sanador de la proximidad”

“Es el fuego del Espíritu Santo que nos empuja a estar cerca de los que su-fren”, enfatizó Francisco. (ANSA).

RIO DE JANEIRO - “Mi droga es Je-sús”, respondió la etíope Almaz Aya-na tras quedarse con el primer oro en el debut del atletismo en Río 2016 al ganar los 10.000 metros con nuevo ré-cord mundial: 29’17”45.

“Antes que nada le agradezco a Dios, porque me dio todo, también su bendición. Mi doping es Jesús, ade-más de que trabajo y me entreno mu-chísimo”, aseveró Ayana.

“Haber registrado el récord mun-dial es fantástico, así como lo fue haber corrido junto a quien precedió, Tirunesh Dibaba, quien me transmitió coraje y energía para no desperdiciar esta oportunidad”, resaltó Ayana.

La etíope aludía a su compatriota Dibaba, quien se quedó con el bronce tras haber ganado esta competencia en Pekín 2008 y Londres 2012.(ANSA).

CIUDAD DEL VATICANO - El Papa Francisco instó a ser solidarios al evo-car a San Maximiliano Kolbe, cuya fiesta se recordó el 14 de agosto

Antes de la oración mariana, el Papa habló del Espíritu Santo como “fuego divino que calienta los corazo-nes y nos ayuda a ser solidarios con las alegrías y los sufrimientos de nues-tros hermanos”.

Para lo cual, pidió que “nos sos-tenga en nuestro camino el ejemplo de San Maximiliano Kolbe, mártir de la caridad, cuya fiesta tiene lugar hoy: él nos enseña a vivir el fuego de amor por Dios y por el prójimo”.

Kolbe era un franciscano pola-co que fue asesinado en el campo de concentración de Auschwitz, a los 47 años, cuando pidió ser reemplazado por un padre de familia que iba a ser ejecutado. (ANSA).

ROMA - El Papa Francisco almorzó en la Casa Santa Marta con un grupo de 21 refugiados sirios que viven en Roma, actualmente hospedados por la Comunidad de Sant’Egidio.

Se trata de familias que llegaron a Italia tras la visita del Papa Jorge Ber-goglio a la isla griega de Lesbos.

El primer grupo de refugiados via-jó con el vuelo del Papa el 16 de abril y el segundo llegó a mediados de ju-nio. Lo afirmó en una declaración el director de la sala de prensa de la San-ta Sede, Greg Burke.

“Tanto los adultos como los niños, explicó Burke, tuvieron la posibilidad de hablar con el Pontífice desde el inicio de su vida en Italia. Los niños le regalaron al Papa una colección de sus dibujos y Francisco les obsequió juguetes”.

Junto al Papa Francisco y sus huéspedes sirios, estaban presentes el sustituto de la Secretaría de Esta-do monseñor Angelo Becciu; Andrea Riccardi, fundador de la Comunidad de Sant’Egidio junto con otros miem-bros de la comunidad. (ANSA).

No se necesitan burócratas “sino coraje y pasión”

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