sistematización escuela de ciudadanía integral bajo magdalena

Escuela de Ciudadanía Integral del

Fortaleciendo la Democracia

en la Región

Bajo Magdalena

Con el objeto de “Contribuir con el mejoramiento de

los procesos políticos, el ejercicio del control social,

la incidencia en las políticas públicas y a la

promoción de los derechos civiles, económicos,

sociales y culturales de la región del Bajo

Magdalena, a través de la implementación de la

Escuela de Formación Política”, la empresa de

Interconexión Eléctrica S.A. – ISA – y la Corporación

de Desarrollo y Paz del Bajo Magdalena – CDPBM –

suscribieron en mayo de 2011 el Convenio N°

4500037234 por un período de siete meses. Dicho

convenio, enmarcado en un eje de fortalecimiento

institucional, tuvo los siguientes alcances:

Constituida y puesta en marcha una Escuela de

Formación en Ciudadanía Política, Civil y Social a

los dirigentes sociales e institucionales de 10

municipios de intervención del proyecto (Pivijay,

Salamina, Plato, Tenerife, El Banco, Pijiño del

Carmen, E l Peñón, P in i l los , Mompox y

Magangué).

Realizados cinco foros electorales con candidatos

en el área de intervención del proyecto.

Estas acciones fueron realizadas entre junio y

diciembre de 2011.

Al convenio se le adicionó la cláusula No. 1 con el fin

de consolidar la Escuela de Ciudadanía Integral (ECI)

del Bajo Magdalena para los diez municipios

mencionados y para promover espacios de

incidencia en cada uno de los municipios a partir de

los aprendizajes ganados durante el proceso,

específicamente incidir en la elaboración de los

Planes Municipales de Desarrollo y en el

seguimiento al cumplimiento de los compromisos

establecidos en ellos.

Introducción.

Fortaleciendo la Democracia en la Región


Bajo Magdalena

2

Los resultados de esta adicional fueron la profundización

de los contenidos de la ECI (en temas como diseño del

POT, contratación con el Estado y Planeación

participativa del desarrollo), la réplica de dichos

contenidos y diez Planes de Desarrollo acompañados en

su formulación por actores sociales. En este sentido cabe

destacar que la mayoría de los actores que participaron

en la formulación de los planes fueron a su vez

participantes de la ECI que se ganaron un espacio en los

Consejos Territoriales de Planeación – CTP- , instancia

que tiene, entre otras responsabilidades, la formulación

participativa de dichos planes (el marco jurídico de los

CTP hunde sus raíces en la Constitución Política de

Colombia y en la Ley 134 de 1994).

Posteriormente se suscribió el CONVENIO ISA REGIÓN

N° 7200000411 t amb ién den t ro de l e j e de

fortalecimiento institucional, con los siguientes alcances

estratégicos:

“Establecer un proceso de formación en ciudadanía

integral con mínimo cien nuevos líderes de la región,

pertenecientes a organizaciones sociales de base

vinculadas a las dinámicas del PDP en los diez

municipios priorizados”.

“Desarrollar un nuevo módulo de la Escuela de

Ciudadanía en formación de ciclo de proyectos-

Identificación, formulación, Cogestión y Seguimiento-

dirigido especialmente a 30 organizaciones que

participaron de la formación de la 1ª cohorte de la ECI”.

“Diseñar e implementar participativamente con

mínimo 20 líderes de la Escuela de Ciudadanía Integral

Fase I de los municipios de Pivijay y Salamina, una

estrategia de participación comunitaria en la

elaboración de presupuestos participativos y procesos

de rendición publica de cuentas”.



Bajo Magdalena

3

Los resultados de esta segunda fase fueron 125 nuevos líderes formados, 44 organizaciones de base

comunitarias capacitadas (14 más de lo estimado, entre las cuales se cuentan 8 JAC) y seguimiento a los Planes

de Desarrollo en cada municipio.

Período de la experiencia: Años 2011 a 2013.

Campos de acción o áreas de trabajo.

Objetivos de la sistematización.

La sistematización está contemplada como actividad concreta en el segundo convenio suscrito entre ISA y la

CDPBM (actividades 1.6, 2.4 y 3.6), además se previó un informe de sistematización para el primer convenio. De

este compromiso surgen los objetivos que a continuación se definen:

Objetivo general.

Reconstruir, contextualizar, comprender e interpretar la experiencia de la Escuela de Ciudadanía Integral (ECI) y

la puesta en marcha de una plataforma social para la movilización de la ciudadanía en el marco de las acciones

públicas.

Objetivos específicos.

- Reconstruir la experiencia generada por los dos convenios suscritos entre la CDPBM e ISA, de la ECI del Bajo

Magdalena, identificando los elementos y herramientas fundamentales con los cuales se ha adelantado este

proceso.

- Interpretar desde la perspectiva de los diferentes actores de la experiencia de la ECI, el conjunto de rasgos

significativos que componen este proceso (nivel de incidencia logrado por los participantes).

- Identificar los elementos más importantes de la experiencia.

Proceso de formación de la Escuela de Ciudadanía Integral – ECI - del Bajo

Magdalena en cinco temáticas.

Organización de foros electorales

Profundización en las temáticas de la ECI

Conformación de veedurías ciudadanas

Formación en ciclo de proyectos

Conformación de comités de seguimiento a los Planes

Formación

Organización para

la incidencia



Bajo Magdalena

4

Referentes de la sistematización.

Los referentes de la sistematización se fundamentan en las siguientes preguntas:

¿Cuál es el contexto institucional y ciudadano en el que se realiza la ECI?

¿Cómo se concretiza la ECI en experiencias concretas de vida o de incidencia?

¿Cómo se logró pasar de la apuesta de la ECI como proyecto o iniciativa a una movilización social?

¿Se lograron o no los objetivos y resultados previstos en el proyecto? y ¿qué factores fueron determinantes para

el éxito o fracaso de la experiencia?

Metodología para el análisis y la sistematización.

Transformar experiencias en conocimientos constituye uno de los objetivos de toda sistematización, para ello

es preciso integrar las características propias del agenciamiento social con la formalidad de la documentación

científica. En este sentido fue preciso definir una metodología de trabajo para el presente trabajo de

sistematización que partió de los siguientes criterios:

- Los procesos sociales son inacabados, uno puede monitorear fases de un gran proceso y sobre ese monitoreo

reconstruir una experiencia y producir un documento; sin embargo, dado lo cambiante de los entornos y las

experiencias es mejor optar por hablar de actitudes personales y logros concretos en un período de tiempo (en

este caso tres años) que hablar de grandes transformaciones a largo plazo, a menos que haya un proceso muy

largo, lo cual no es nuestra situación.

- Se valoran las apreciaciones personales sobre el proceso tanto como los logros en la ejecución del proyecto,

en este sentido se conjugaron los datos de la implementación del convenio con testimonios de participantes.

En una evaluación podrían medirse algunos impactos que en una sistematización se toman como lecciones

aprendidas.

- El método usado es analítico pues se mira el proceso en sus diversas fases y componentes y también sintético

pues se conjugan esos componentes para ver el proceso en toda su dimensión.

- Se priorizaron los logros en la implementación del convenio en su esfera social; algunos aspectos

administrativos no fueron tenidos en cuenta, aunque se hizo alguna recomendación.

Para la recolección de la información se tuvieron en cuenta los mismos instrumentos para las dos fases y sus

correspondientes acciones, esto se justifica teniendo en cuenta que las dinámicas formativas, organización e

incidencia poseen un hilo conductor que se fortalece con la inclusión de actores similares en los tres escenarios

y un objetivo definido a largo plazo y desde el principio del proceso, es decir, se evidencia que las fases de la ECI

son complementarias y el sentido estratégico que se le dio desde el principio ha permitido que sea un

verdadero proceso y no una superposición de actividades cambiantes con el tiempo.



Bajo Magdalena

5

Los instrumentos utilizados para la recolección de información fueron los siguientes:

- Análisis documental: Se revisaron las memorias de talleres, informes de ejecución, actas suscritas (como la de

la conformación de las veedurías y acuerdos de intención), documentos de contexto preparados por el equipo

de la CDPBM y los documentos propios del convenio. La lectura comparando lo contemplado técnicamente y

lo que se ejecutó. Salvo la rendición pública de cuentas, las demás actividades fueron realizadas a cabalidad. En

algunos casos de superó la meta prevista (población beneficiaria).

- Entrevista de profundidad: Éstas entrevistas se realizaron personalmente siguiendo un cuestionario de

preguntas cerradas y se aplicaron de manera semiestructurada a los miembros del equipo humano de la

CDPBM que fueron facilitadores o directivos de la ECI. El mismo tipo de instrumento se aplicó a 8 participantes

en los diversos escenarios de la ECI.

- Entrevista telefónica: Este instrumento se aplicó a 5 participantes de la ECI y, a algunas personas que ya no

pertenecen al equipo humano de la CDPBM, pero facilitaron la ECI. El formato que se siguió fue similar a la de la

entrevista de profundidad.

Fueron entrevistadas en total 13 personas, lo que corresponde al 4,3% de una población de 300 participantes

de la ECI en sus fases I y II.

- Comparación de experiencias: Utilizando el principio periodístico de la contrastación de fuentes, se

compararon los testimonios de las personas entrevistadas con los informes de ejecución, actas y memorias

analizadas; además se compararon los testimonios entre sí para seleccionar los más representativos en cuanto

a su nivel de profundidad y para establecer una armonía o congruencia entre lo testimoniado.

Los participantes encuestados se seleccionaron de acuerdo con su participación activa en las distintas

actividades de la ECI (evidenciado en los listados de asistencia y referenciamiento de los facilitadores) y el

liderazgo o reconocimiento asumido durante esas actividades (referenciamiento de sus compañeros y

compañeras y evidencia documental presentada, tal como la suscripción de actas con la institucionalidad

pública o participación en los comités de seguimiento).

El producto de los datos e información recolectada tuvo como productos los testimonios y la hilación de la

presente sistematización.

La Escuela de Ciudadanía Integral del Bajo

Magdalena– ECI – es una iniciativa pensada y

apoyada por la empresa ISA y la Corporación de

Desarrollo y Paz del Bajo Magdalena – CDPBM –

para fortalecer los procesos de participación

ciudadana y a través de ellos la democracia en la

región del Bajo Magdalena. Es una Escuela porque

en ella se aprende, mediante los conceptos, el

diálogo de saberes y la práctica, a ejercer la

ciudadanía. No tiene muros ni infraestructura y se

implementa desde 2011 en diez municipios de esta

región: El Banco, Salamina, Pivijay, Plato, Tenerife y

Pijiño del Carmen en el departamento del

Magdalena y El Peñón, Pinillos, Mompox y

Magangué en el departamento de Bolívar.

Los par t i c ipantes de es te proceso son

principalmente hombres y mujeres pertenecientes

a organizaciones sociales de base, grupos como la

Defensa Civil o de gestión del riesgo, funcionarios

públicos, docentes y estudiantes de Instituciones

Educativas.

¿Qué es la Escuela deCiudadanía Integral del Bajo Magdalena?


“La ECI nos ha servido para ser conscientes de nuestros derechos y tener más sentido de pertenencia por nuestro municipio. Antes no sabíamos qué hacer cuando sentíamos que algo andaba mal, ahora conocemos los mecanismos de participación ciudadana y los aplicamos”.

¿Por qué Ciudadanía Integral?Porque la calidad de ciudadanos no se recibe con la

expedición de un documento que acredita como tal, sino

que se gana con el disfrute de un amplio espectro de

derechos y el cumplimiento responsable de los deberes.

Un ciudadano integral es aquél que se convierte en actor

social que conoce, participa e incide en los asuntos

públicos de acuerdo con la Constitución y la Ley.


Bajo Magdalena

6Ramiro Romo, Salamina



Bajo Magdalena

7

Según Oswaldo Oviedo, coordinador de la primera fase de le ECI, “la escuela se concibió y llegó a ser

un proceso de formación de ciudadanos integrales, capaces de reconocerse como sujetos de

derechos y de deberes, actores sociales y políticos; para ello se basó en la adaptación de un conjunto

de conceptos fundamentales y el desarrollo de competencias básicas, que sirvieron de herramientas

para cualificar la participación, el control y la incidencia”.

Para entender mejor este proceso, es preciso conocer los fines para los cuales se diseñó. En la tabla de

la siguiente página, a modo de evaluación sucinta, podemos apreciar si el logro formulado o pensado

se materializó después de tres años, las apreciaciones fueron hechas por Laureano Mendivil,

coordinador de procesos de la CDPBM:

¿Qué se esperaba de la ECI?



Bajo Magdalena

8

¿Qué se esperaba de la ECI?



Bajo Magdalena

9

Adicionalmente, la ECI promovió y animó la participación e incidencia de la sociedad bajomagdalenense en el

proceso electoral donde se disputaban las plazas para alcanzar la esfera del poder público local para el período

2012-2015, a través de la realización de foros con los candidatos a la alcaldía en seis municipios de la región.

Asimismo, se materializó uno de los objetivos perseguidos por la escuela con la conformación de las veedurías

ciudadanas en cada uno de los municipios favorecidos por la ECI, donde se incentivó la participación masiva de

la ciudadanía que acompañó el proceso de diseño y discusión de los Planes de Desarrollo Municipales 2012-

2015.

Por su parte, durante el año 2012 se avanzó significativamente en la formulación e implementación de la

segunda fase de la ECI. La CDPBM con el apoyo incondicional de ISA tuvo como propósito fundamental para

esta segunda fase, el afianzamiento del proceso de formación, a través de la profundización de los ejes

temáticos propuestos durante la primera fase, realizando un énfasis en el control social relacionado con las

herramientas de planeación territorial, tales como la formulación y seguimiento a los Planes de Desarrollo

Municipales 2012 -2015. Además, se abordó el eje de cultura del Bajo Magdalena como estrategia de

apropiación de las temáticas desarrolladas y como elemento fundamental para el arraigo y el fortalecimiento

de la identidad regional.

Por otro lado, entendiendo a la ECI no solo como una experiencia formativa se promovió la incidencia política

como herramienta clave de transformación municipal y regional. Lo anterior se realizó mediante espacios de

planeación con los integrantes de la ECI para construir la propuesta de desarrollo municipal, la cual

posteriormente se concertó con los actores claves del Plan de Desarrollo Municipal 2012 -2015. De igual

manera, se generaron las capacidades técnicas para que un grupo calificado de integrantes de la ECI en cada

municipio pudiera realizar los ejercicios coordinados de control social a través del seguimiento a los Planes de

Desarrollo.

La experiencia de la ECI en el Bajo Magdalena se va configurando como un espacio de aprendizaje,

participación e incidencia ciudadana para el desarrollo y la paz de la región. Son más de 425 personas

pertenecientes a organizaciones sociales de base, redes, iglesias e instituciones públicas y privadas que

conforman este gran colectivo de líderes, que son una pieza fundamental en el fortalecimiento y

profundización de los valores democráticos en la región, más de 30 organizaciones que ahora están

capacitadas y acompañadas para la formulación de proyectos que permitan su sostenibilidad financiera y

operativa y más 9 comités de seguimiento a los planes de desarrollo que se encuentran activos.

Al respecto, cabe resaltar el testimonio de Eda Beatriz Saumeth: “La ECI ha sido de gran importancia al llegar al

municipio de Plato porque en ella se han generado lecciones como el fortalecimiento de aprendizajes de las

acciones con las que las comunidades pueden acceder a la participación en los diferentes estamentos del

Estado. Además, nos ha permitido la organización de los consejos juveniles, de la red de mujeres, de la

organización de los afro-descendientes, que no estaba legalmente constituida. Ella (la ECI) ha sido una gran

oportunidad para que la comunidad del municipio de Plato sea participante e incidente en el desarrollo del

municipio a través de un instrumento concreto como es el PMD”.

Fases de la ECI



Bajo Magdalena

10

Fase 1: Formación en temas de Ciudadanía Integral

Fase 1:

Fase 2:

2011

2012

2013

Profundización de contenidos para la participación de las

organizaciones sociales de base en la formulación y seguimiento

de los Planes Municipales de Desarrollo

Ampliación de cobertura con 100 nuevos líderes que reciben

formación en los mismos temas de la fase 1

Formación en ciclo de proyectos para 30 miembros de

organizaciones participantes en la fase 1

Piloto de rendición pública de cuentas y presupuesto participativo

(no realizado) en Salamina y Pivijay.

Durante 2007, con el apoyo de la Red PRODEPAZ y

ECOPETROL, se levantó un diagnóstico sobre

necesidades de formación en la región; este

diagnóstico perfiló los temas de la fase 1 de la ECI, con

énfasis en participación ciudadana, formulación de

proyectos y derechos humanos.

Para 2014 se prevé la continuación de la ECI a través de

instancias de participación denominadas Agendas

Democráticas con el apoyo de la Subvención directa del

Programa Nuevos Territorios de Paz (Unión Europea y DPS)

Entre lo administrativo y lo operativo

La ECI en números



Bajo Magdalena

11

jornadas de formación en cada uno de

los 10 municipios del Bajo Magdalena

en 5 temáticas distintas

horas de formación presencial por

municipio para un total de

horas de réplica por municipio durante

2011

foros electorales realizados durante

2011 en igual número de municipios

con una asistencia de al menos

personas en total

veedurías conformadas, una por

municipio

comités de seguimiento a los Planes de

Desarrollo Municipales conformados,

de los cuales 10 se encuentran activos

participantes en las fases 1 y 2 (2011 y

2012)

organizaciones participantes en la

formación en ciclo de proyectos

La planeación de cada proyecto o proceso es

la primera manera de controlar la ejecución

del mismo y la primera herramienta para el

alcance de los objetivos propuestos.

En el caso de la ECI se cumplió por completo

con el cronograma de trabajo de la primera

fase, esto debido a los siguientes factores:

- El conocimiento y posicionamiento del

Programa de Desarrollo y Paz (coordinado por

la CDPBM) en la región, lo cual generó

confianza entre los convocados y las

entidades acompañantes.

- La idoneidad y número de facilitadores

dispuestos para avanzar en las tareas

programadas.

- El alto nivel de motivación de los

participantes para cumplir con las sesiones,

tareas y réplicas.

Si bien la rigurosidad en los procedimientos

administrativos aseguran en parte la

transparencia y eficiencia en el manejo de los

recursos, desde lo operativo se hace necesario

pensar en acciones contingentes para que los

cronogramas de las actividades de la ECI se

alteren en su expresión mínima o no se

alteren, de modo que se pueda seguir

fortaleciendo la confianza ganada con los

participantes del proceso.

6

6

36

36

360

900

10

11

425

44

horas durante la fase 1 en 2011

¿Por qué nació la ECI?



Bajo Magdalena

12

Según Laureano Mendivil, coordinador de procesos

de la CDPBM, el propósito inicial de la ECI era generar

movilización social en torno a todos y cada uno de los

procesos que se promueven en el Programa de

Desarrollo y Paz, es decir, fortalecer el capital social a

través de la formación, la organización y la

generación de espacios de participación e incidencia

en torno a temas tan sensibles como el desarrollo

social y la paz en una región caracterizada por las

siguientes condiciones:

Desconocimiento de los derechos políticos y civiles

por parte de un gran porcentaje de sus habitantes;

esto repercute en una baja participación en el diseño

y ejecución de las políticas públicas.

Analfabetismo político en ciudadanos y ciudadanas.

Existe una carencia en la reflexión y el debate de

temas de interés sustantivo para una gestión política

responsable, sustentada en la ética y los valores

democráticos.

Escepticismo en el uso de los mecanismos de

participación ciudadana, lo que genera un bajo nivel

de empoderamiento y liderazgo comunitario.

Baja incidencia de las JAC y organizaciones civiles en

la formulación de las políticas públicas y un alto

grado de apatía por el ejercicio del control social por

parte de las comunidades locales.

Extensión y profundización del fenómeno de la

corrupción en las administraciones públicas, lo cual

crea desconfianza hacia los representantes de la

institucionalidad local.

Falta de comunicación entre la representación

política local y la comunidad representada, lo cual le

resta tanto legitimidad a las políticas y programas

públicos, como credibilidad al manejo de los

recursos; esto se manifiesta en una crisis de

gobernabilidad democrática en los municipios que

conforman la región del Bajo Magdalena.

Los mecanismos de control de la gestión pública,

tanto estatales como sociales, se encuentran

desbordados y sometidos a la agenda de los

gobiernos locales.



Bajo Magdalena

13

Durante 2007, con el apoyo de la Red PRODEPAZ y

ECOPETROL, se levantó un diagnóstico que consultó,

entre otras variables, sobre las necesidades de

formación en la región de cara al fortalecimiento de

procesos democráticos; el resultado de este

diagnóstico permitió perfilar los temas de la fase 1 de la

ECI; las demandas de formación se centraron en los

temas de participación ciudadana, formulación de

proyectos y derechos humanos.

Las Univers idades Santo Tomás y La Sa l le ,

acompañaron metodológica y operativamente este

diagnóstico, las líneas orientadoras estuvieron a cargo

de la CDPBM, quien también acompañó la parte

operativa y posteriormente analizó la información.

Las bases teóricas del diagnóstico y por consiguiente de

las líneas y contenidos de formación de la Escuela, son

las siguientes:

- El informe regional del Programa de las Naciones

Unidas - PNUD - para 2004: La democracia en América

Latina. este informe subraya la necesidad de pasar d e

una democracia meramente representativa a una

democracia participativa.

Así se concibió la ECI

- El diagnóstico enunciado anteriormente, en el cual

se tuvo en cuenta el diligenciamiento de la matriz de

necesidades y satisfactores de Manfred Max Neef.

-El resultado de la realización de las mesas

municipales de trabajo de 2009, apoyadas por el

PNUD, en las que se aprovechó la coyuntura

electoral a nivel de municipios y departamentos

para generar un debate sobre el presente y futuro

de la participación y el desarrollo en cada entidad

territorial.

Los anteriores insumos y experiencias permitieron

estructurar un proceso formativo llamado Escuela

(porque se aprende) de Ciudadanía (porque es

fundamental el ejercicio de ésta para fortalecer la

democracia) integral (porque tiene en cuenta todo

el espectro de derechos) del Bajo Magdalena, de

cara a oportunidades de participación para los más

pobres.

Las nuevas demandas format ivas de los

participantes y su inquietud por profundizar en los

temas iniciales es lo que permitió pensar en varias

fases.



Bajo Magdalena

14

Politeia es la Escuela de Liderazgo de la Región del

Magdalena Centro, un espacio de formación para la

participación ciudadana y la incidencia política, una

escuela en la que líderes y lideresas se han formado

en temas como territorio, Estado, planeación

participativa y control social, para ejercer su derecho

y su deber de participación en las decisiones de lo

público. Debido a la amplia experiencia de Politeia,

miembros del Programa de Desarrollo y Paz del Bajo

Magdalena la escogieron como referente para su

propia Escuela y desarrollaron una inducción con los

facilitadores y participantes de aquella. Según Jair

Pereira, facilitador de la ECI y participante en la

inducción, esta experiencia sirvió de referente en el

Bajo Magdalena, especialmente la manera en que esa

Escuela logró ganarse la confianza de los actores

sociales en torno al proceso de formación lo cual se

tradujo en un diálogo entre y al interior de las

organizaciones participantes y la réplica del

conocimiento producto del compromiso individual y

colectivo.

Según Oswaldo Oviedo, coordinador de la primera

fase de la ECI, Politeia y la ECI se parecen en la forma

Politeia, la experiencia compartida

en que se conciben y sus fundamentos teóricos

son similares, ambas experiencias tienen líneas

temáticas como como Estado, derechos humanos

y participación ciudadana y los diagnósticos que

les dieron vida reflejaron una necesidad similar de

la sociedad civil de formarse en temas que son

fundamentales, pero que se desconocían.

En estos momentos, comenta Laureano Mendivil,

la ECI puede servir a su vez como referente para

otros procesos dentro del Bajo magdalena y en

otras regiones del país básicamente por la

capacidad de movilización social que ha

generado y que puede generar en los 10

municipios donde se ha implementado: la

constitución de 10 veedurías ciudadanas, la

realización de 6 foros electorales en igual número

de municipios, la participación de Instituciones

Educativas, órganos de control y funcionarios de

gobiernos locales en los procesos de formación,

entre otros. De hecho, la actual alcaldesa de Pijiño

del Carmen y el alcalde de Salamina fueron

participantes de la ECI, así como algunos

concejales de Mompox, Plato y Tenerife.

¿Se logró el propósito inicial de la ECI?



Bajo Magdalena

15

Más allá de los datos numéricos que evidencian su

ejecución (ver página 4: La ECI en números), los

logros de la primera fase se evidencian en los

siguientes términos:

Si bien las instancias de participación generadas

por la ECI, veedurías ciudadanas y comités de

seguimiento a planes de desarrollo municipal

existen en su gran mayoría (sólo un comité no está

activo), la operatividad de los mismos se ha visto

mermada por la falta de apoyo de las entidades

locales. Esto implica que el logro es de ejecución,

pero hace falta que transcurra un tiempo para

medir el verdadero impacto del mismo y esto

depende, en parte de dos factores: la incidencia y la

voluntad de sus miembros.

Dado que la participación es un derecho de

ampliación exponencial, es decir, cada día surgen

nuevas maneras de participar y las exigencias se

vuelven más sofisticadas, los integrantes de esas

instancias, si no están en constante formación,

tienden a rezagarse. Esto implica que la CDPBM u

otras entidades u organizaciones puedan apoyar

un proceso constante de formación en diversos

ámbitos.

Existen espacios de movilización que han surgido

por iniciativa propia de los participantes de la ECI, tal

es el caso de una veeduría para vigilar y hacer

seguimiento a acciones contempladas dentro del

Plan de Desarrollo Municipal de Plato, Magdalena,

en relación con los derechos de los niños y las niñas.

En esta iniciativa participan niños, niñas, jóvenes y

adultos. El abanderado del proceso es Fredy

Ricaurte. Por su parte, en El Banco, Magdalena,

algunos de los participantes de la ECI hacen parte de

la veeduría de un proyecto de construcción de obras

civiles para la mitigación del impacto del río en el

casco urbano y junto con una JAC participan además

en la ejecución de las obras; sin embargo, por su

condición de juez y parte, deben definir si vigilan o

ejecutan el proyecto.

Según Laureano Mendivil, hay que reforzar ahora la

generación de espacios para que los actores sociales

participen e incidan en la vida pública, de modo que

los logros en la parte formativa se traduzcan en logros

en la parte operativa.



Bajo Magdalena

16

Dado que la ECI se desarrolla en el marco del Programa

de Desarrollo y Paz, que busca la construcción de una

paz estable y duradera, se ha entendido que gracias al

apoyo de ISA, dicho proyecto se ha llevado a cabo; sin

embargo, al ser ISA uno de los socios fundadores y

aliados del Programa, la ECI se concibió desde sus

inicios como un proceso social más que como un

proyecto de duración limitada, en la concreción de la

escuela como proceso es fundamental el impulso de

los mismos pobladores y pobladoras, al respecto

Giovanni Parra, participante de la ECI en Mompox,

comenta: “Sabemos que los proyectos necesitan

dinero para realizarse y que ese dinero es limitado, por

eso nosotros desde el principio decidimos que los

recursos del convenio eran para impulsar un proceso

social que en definitiva depende de nosotros los que

habitamos y queremos esta región, en nosotros está la

responsabilidad de formarnos, participar e incidir”.

¿Se entiende la ECI como un proyecto de limitada duración o como un proceso regional ciudadano?

En este sentido, para 2014 y 2015, en el marco del

Programa Nuevos territorios de Paz, se ha concebido

un componente de fortalecimiento de la democracia

que tiene como objetivo fortalecer en actores sociales

de la región del Bajo Magdalena las capacidades

organizacionales a través de la formación en cultura

democrática, gestión de proyectos y prácticas de

participación comunitaria, para ello se busca

implementar una estrategia de diálogos y agendas

democráticas entre organizaciones, redes sociales,

institucionalidad publica y sector privado que

dinamice y fortalezca la gobernanza a nivel local en el

marco de una nueva cultura política en la región. Las

agendas democráticas buscan apalancar lo logrado

con la ECI.



Bajo Magdalena

17

La ECI en relación con el Programa Nuevos Territorios de Paz

En el marco del Programa Nuevos Territorios de

Paz ( suscrito entre el Departamento para la

Prosperidad Social, la CDPBM y la Unión Europea),

se realizó un seguimiento a la inclusión e

implementación de la Ley 1448 de 2011 o Ley de

Víctimas y Restitución de Tierras en los Planes de

Desarrollo de los municipios priorizados (El

Peñón, Pinillos, Mompox y Magangué en el

departamento de Bolívar y El Banco, Pijiño del

Carmen, Sabanas de San Ángel, Plato, Tenerife,

Salamina y Pivijay en el departamento del

Magdalena). El seguimiento se hizo a través de

reuniones con funcionarios de las distintas

alcaldías, revisión de informes de auditorías y con

integrantes de los comités de seguimiento en

cada localidad.

Además se aplicó una encuesta para determinar si

existen y operan las instancias de participación

que determina dicha Ley. El resultado encontrado

es que, en 10 de los 11 municipios tenidos en

cuenta están instalados los comités de justicia

transicional – CJT -, están establecidas las Mesas

de víctimas y existen planes de acción territorial;

sin embargo, las organizaciones de víctimas no

están ejecutando proyectos con recursos

públicos o de cooperación internacional y los CJT

pues no cuentan con los recursos necesarios para

su funcionamiento.

La CDPBM, por su parte, capacitó a los miembros

de los comités para realizar el seguimiento y

resalta la voluntad e interés de los mismos para

dinamizar esta instancia de participación.

Adicionalmente, diseñó una estrategia de

generación de espacios de confianza para la

integración con grupos y comunidades víctimas de

desplazamiento, espacios en los que participaron

también las Defensorías de cada departamento y

municipio y las Personerías.

Se resalta que las resoluciones 388 de mayo 10 de

2013 y 588 de junio 13 de 2013, expedidas por la

Unidad de Atención y Reparación Integral a las

Víctimas, adoptan un protocolo de participación

efectiva de víctimas del conflicto armado en el que se

tienen en cuenta consideraciones que ya se habían

implementado en la estrategia de generación de

espacios de confianza en el Bajo Magdalena.

El anterior seguimiento, según Laureano Mendivil,

coordinador de procesos de la CDPBM, tuvo como

antecedente el ejercicio de vigilancia que hicieran los

miembros de las veedurías ciudadanas creadas

durante la primera fase de la ECI a algunos proyectos

contemplados en los planes municipales de

desarrollo. “Ya teníamos a las personas capacitadas y

a los funcionarios sensibilizados gracias a la ECI, por

eso entrar a evidenciar el estado en que se

encontraba la aplicación de la Ley fue un proceso

mucho más expedito, ahora lo que buscamos es

seguir apalancando el seguimiento a los planes con

el componente de fortalecimiento de capacidades

locales (gestión de redes y fortalecimiento

organizacional) del Programa Nuevos Territorios de

Paz, que es un instrumento de cooperación

financiado con recursos del DPS y la Unión Europea y

con las acciones propias de la ECI durante 2014,

especialmente en lo que se refiere a los diálogos y

agendas democráticas”.



Bajo Magdalena

18

Ramiro Romo es uno de los participantes más

activos de la ECI en Salamina, Magdalena, él

cuenta cómo este proceso lo ha llevado a

involucrarse en la promoción de los derechos de

las víctimas en el marco de la Ley 1448 de junio de

2011 y en la veeduría de su municipio, su

experiencia nos ayuda a entender la tensión entre

teoría y práctica en un proceso como la ECI:

“A través de a ECI pudimos darnos cuenta de la

verdaderamente importante que es hacer

veeduría de las gestiones del alcalde y el plan de

desarrollo, antes sólo veíamos pasar las cosas;

entendimos que vigilar los recursos del Estado es

necesar io y ayuda a la eficiencia de la

administración pública, además la Constitución

nos respalda.

Al principio fue difícil porque ni las entidades ni las

personas estaban acostumbradas a hacer veeduría

y creían que era una manera de hacer oposición al

alcalde o que queríamos conseguir plata de la

¿Qué puede impulsar o impedir pasar de la teoría a la práctica?

alcaldía, pero cuando vieron que nuestras

peticiones estaban fundamentadas en la Ley y

que estábamos formados en diversos temas y

conformados ante la Personería, las cosas fueron

cambiando. Comenzamos presentando

derechos de petición bien estructurados sobre la

ejecución presupuestal en 2012 y 2013 y para

que el alcalde rindiera cuentas de su gestión y así

fuimos adquiriendo la información necesaria,

antes las solicitudes eran informales a través de

cartas o verbalmente y casi nunca eran

respondidas.

Nos ayudó mucho el hecho de conformar la

veeduría pues de otra manera no hubiéramos

podido alcanzar cierto reconocimiento, vivimos

en un país de instituciones y hay que aprovechar

eso, no es lo mismo ir a título personal a solicitar

información o exigir algunas cosas que ir como

parte de una instancia amparada por la Ley y con

un cúmulo de conocimientos encima. Para pasar

de la teoría a la práct ica creo que la



Bajo Magdalena

19

conformación de la veeduría fue

fundamental, claro, ésta no sirve de

nada si la gente no ejerce sus

funciones y deberes o no conoce

sus derechos.

Pero no quería quedarme sólo

como veedor, quise aprovechar los

conocimientos impartidos en el

módulo de derechos humanos y las

expectativas que generó la promulgación de la Ley 1448 de

junio de 2011 o Ley de víctimas y restitución de tierras para

hacer algo por las muchas víctimas, muchas de ellas

desamparadas y desconocedoras de sus derechos, que hay en

Salamina. Es así como nació la Organización de Víctimas de

Salamina – ORVISA -, yo soy el representante legal y la oficina

queda en mi casa, a veces me toca hacer de sicólogo

escuchando a la gente, pero la mayoría de las veces los

orientamos sobre la ruta que deben seguir para exigir sus

derechos y la manera de hacerlo.

Creo que en la ECI la idea es meter a nuevas personas para ir

posicionándose poco a poco, de modo que estas personas

adquieran mayor sentido de pertenencia por su municipio. La

CDPBM puede seguir apoyándonos en las gestiones que desde

la veeduría estamos haciendo; aunque ya nos apoyó enviando

dos comunicados a la alcaldía en los que les pedía ampliar

algunos conceptos y una contrapartida para un proyecto que

beneficiaría a 50 familias y aunque el alcalde ha mostrado

buena tónica, la alcaldía aún no los responde. Todo esto hace

parte del proceso ya que los entes públicos desconocen

muchas veces los deberes contraídos en el tema de la

participación ciudadana.

Por último quisiera decir que me preocupa que en la zona rural

el desconocimiento de los deberes y derechos es muy grande,

por eso es importante Llevar conformar veedurías en la zona

rural o vincular a los de la zona rural a los procesos de la ECI.

Ramiro Romo

En el convenio suscrito entre ISA

y la CDPBM y como parte de la

primera fase de la ECI, se previó la

realización de cinco foros en

igual número de municipios (El

Banco, Mompox, Magangué,

Plato y Pivijay), los cuales se

realizaron; sin embargo, los

participantes de la ECI en Pijiño

del Carmen, motivados por el

éxito de este ejercicio de la

democracia, organizaron por

iniciativa y con recursos propios

un foro para escuchar las

propuestas de los candidatos a la

a lca ld ía de ese munic ip io

magdalenense, la CDPBM prestó

a c o m p a ñ a m i e n t o a d i c h a

iniciativa. En total fueron 6 foros

en la región.

Los participantes de la ECI son los

q u e m a y o r i t a r i a m e n t e

conforman los comités de

seguimiento a los Planes de

Desarrollo Municipal y los que

han mostrado su disposición

para conformar y de hecho

c o n f o r m a n e n a l g u n o s

m u n i c i p i o s l o s C o m i t é s

Territoriales de Planeación. Se

destaca que son los miembros

mejor cualificados de dichas

instancias.

Adicionalmente:



Bajo Magdalena

20

En todo proceso social que implique mejorar las

condiciones de vida o en este caso, de participación de

las personas y comunidades y que tenga públicos

restringidos o específicos, se generan inconformismos

en los procesos de convocatorias porque las personas

que no pueden participar de los mismos pueden llegar

a sentirse excluidos. En la convocatoria y participación

en la ECI sucedió algo parecido.

Si bien la convocatoria para la participación en la

primera fase se hizo con medios y criterios definidos y la

participación debía ceñirse a un número máximo de 30

personas por municipio, en diez municipios que hacen

parte del área de influencia del Programa de Desarrollo

y Paz del Bajo Magdalena – PDPBM - y esta información

fue concertada entre ISA y la CDPBM y divulgada por

medios institucionales, muchas personas preguntaban

con razón por qué a su organización o municipio no

pudo participar en la ECI.

En cuanto a la cobertura geográfica, cabe aclarar que de

los 32 municipios que cobija el PDPBM, 10 han sido

priorizados de acuerdo con su ubicación, condiciones

socioeconómicas e incidencia del conflicto armado de

modo que puedan ser más eficientes y eficaces los

Los participantes y la convocatoria.

recursos y las acciones contempladas en los

distintos instrumentos de cooperación del

Programa. En este sentido, la ECI se implementó en

esos 10 municipios, los cuales ya hemos

mencionado (ver página 2).

Por su parte, las organizaciones convocadas para

participar del proceso fueron seleccionadas con

base en 3 criterios:

La calidad y nivel de su respuesta a las

convocatorias, procesos y dinámicas anteriores

que había propiciado el PDPBM en cada

municipio

Que vinieran participando en el proceso de

fortalecimiento organizacional jalonado por la

Red PRODEPAZ y

Los resultados de la aplicación del ICO o Índice

de Capacidad Organizacional (un puntaje más

bajo en dicho índice denotaba una mayor

necesidad de fortalecimiento y por tanto una

mayor posibilidad de ser tenida en cuenta).



Bajo Magdalena

21

Por último, se llevó a cabo una convocatoria abierta con

ayuda de las parroquias, Juntas de Acción Comunal,

Alcaldías y Medios de Comunicación para participar en

la ECI; igualmente se enviaron cartas a entidades o

grupos como comités cívicos, Personerías, Defensa

Civil, entre otras, en las que se invitaba a postular

personas para participar. El resultado fue la anuencia de

un diverso grupo de personas y organizaciones que se

detallan a continuación (30 personas en promedio por

municipio):

El Banco: Artesanas, JAC, Madres comunitarias, Jóvenes

afro-descendientes, Grupo parroquial, Comité Pro-

dragado del Río Magdalena, Defensa Civil.

Pijiño del Carmen: Organizaciones productivas,

Asociaciones Comunitarias, JAC, Defensa Civil y Madres

Comunitarias.

Plato: JAC, Organizaciones productivas, Alianza

estratégica educativa Luis Carlos Galán - María Alfaro

de Ospino, ANUC, Cooperativas, ICBF, Consejo

Municipal de Juventud, Proyecto Banda Municipal.

Tenerife: Asociaciones Comunitarias e Instituciones

Educativas.

Pivijay: Red de mujeres, Asociaciones Comunitarias

e Instituciones Educativas.

Salamina: Red de mujeres, Artesanos, Secretaría

municipal de salud, Asociación de campesinos y de

pescadores , Asoc iac iones Comuni ta r i as ,

Coordinador del CLOPAD, Asociac ión de

pescadores y Personera municipal.

El Peñón: Alcaldía Municipal, Biblioteca Municipal,

JAC, Asociaciones Comunitarias, Concejo Municipal,

Clubes Pre-Juveniles.

Pinillos: JAC, Artesanos, Asociaciones Comunitarias,

Mujeres ciudadanas, Organizaciones productivas y

docentes.

Magangué: Red de Mujeres, Fundación Horizonte

verde, Organizaciones productivas Grupo Juvenil

R.C, Asociaciones Comunitarias, Institución

educativa, JAC.

Mompox : Pa s to ra l Soc i a l , A soc i a c iones

Comunitarias, Pastoral de la Salud, Grupo de

mujeres rurales, Alcaldía de Santa Ana, Fundación

Servir, Concejal de Santa Ana, Secretaría municipal

de Agricultura, docentes, Comunidad de Santa Ana.



Bajo Magdalena

22

Adicionalmente se utilizaron otros medios directos

como las reuniones informativas a las qu asistieron en

promedio 45 personas por municipio (Miembros de

organizaciones sociales, particulares, funcionarios

públicos, docentes, estudiantes de IE, miembros de

defensa civil y de oficinas de gestión de riesgo,

personeros municipales, etc.)

Para la segunda fase participaron de 15 a 20 personas

por municipio.

¿Se presentaron reclamos o inconformismos con

algunas personas u organizaciones por no haber

tenido un cupo en la ECI o por los criterios para la

selección de los participantes?

A l i n i c io de l p roceso no se p resen ta ron

inconformismos con la convocatoria, pero a partir del

tercer taller algunas personas que no estaban

participando de los talleres comenzaron a señalar que

hizo falta una divulgación más amplia de la

información hacia toda la base social de cada

municipio, de modo que muchas más personas se

vieran beneficiadas. Por esta razón, las réplicas que se

tenían previstas para el final de las seis sesiones

comenzaron a implementarse a partir del cuarto

taller.

Temas de las sesiones formativasFase 1. Ciudadanía Integral (jornadas de seis horas):

Jornada No. 1: Ciudadanía Integral y

Estado.

Jornada No. 2: Participación Ciudadana,

planeación participativa y Planes de

Desarrollo.

Jornada No. 3: Control Social, Planes de

Desarrollo y Presupuesto Municipal.

Jornada No. 4: Control Social, Planes de

Desarrollo y Presupuesto Municipal.

Jornada No. 5: Derechos Humanos.

Jornada No. 6: Cultura del Bajo Magdalena

Fase 2. Ciclo de proyectos (jornadas de seis horas):

Jornada No. 1: Identificación y formulación

Jornada No. 2: Cogestión y seguimiento de

proyectos

Jornada No. 3: Monitoreo y evaluación de

proyectos



Bajo Magdalena

23

Por impulsar esta iniciativa

de la veeduría juvenil, la

alcaldía de Plato ganó en

diciembre de 2012 un

r e c o n o c i m i e n t o d e

Colombia Líder (iniciativa

de la sociedad civil y el

sector privado que realiza

un seguimiento a las

acciones sectoriales y

soc ia les , exa l tando y

vis ibi l izando la buena

gestión de los gobernantes

locales). El concurso en el

que participó la alcaldía fue

Construyendo sueños para

la inclusión de los niños,

n iñas , adolescentes y

jóvenes en los planes de

desarrollo.

Actualmente, aunque la

veeduría infantil no está

activa, las dos juveniles

siguen trabajando por la

comunidad, de la mano de

e n t i d a d e s c o m o e l

Hospital, la Alcaldía y el

Ministerio de la Protección

Social.

El reconocimiento que recibió la Alcaldía por la

inclusión de los niños, niñas, adolescentes y jóvenes en el plan de desarrollo de Plato

también es para la veeduría, pues de ella proviene la

iniciativa; sin embargo, lo más satisfactorio es ver que la administración municipal

se apropió de esta propuesta ciudadana.

Fredy Ricaurte



Bajo Magdalena

24

La ECI, como se ha dicho, tiene su fundamento teórico

en el informe del PNUD para América Latina en 2004

titulado La democracia en América Latina, hacia una

democracia de ciudadanas y ciudadanos y en el

concepto de desarrollo a escala humana de Manfred

Max Neef; a partir del diagnóstico de 2007 y de las

mesas de trabajo y de la misma experiencia de trabajo

con comunidades y organizaciones, el equipo humano

de la CDPBM definió una estructura para las sesiones,

jornadas o talleres de la ECI, la estructura es la siguiente:

Oración y saludo: En casi todos los espacios públicos los

habitantes del Bajo Magdalena exigen que se inicien las

actividades con una oración, independientemente de la

confesión religiosa y de acuerdo con la matriz de

necesidades y satisfactores aplicada por la CDPBM, la

dimensión espiritual es tan importante para las

personas como lo es la familia. En ese sentido, el saludo

espontáneo y oficial a los participantes es un medidor

de la calidad humana del facilitador y una manera de

iniciar bien la jornada.

Dinámicas: Estas actividades fueron muy bien evaluadas

por los participantes pues ayudaron a la integración de

todos y todas, especialmente de los más tímidos, a

Estructura de los talleres o sesiones.

parte de que, en palabras de uno de ellos, “los

ayudaba a entrar en calor”.

Revisión de tareas asignadas y conceptos vistos en

la sesión anterior: Según Oswaldo Oviedo es una

manera de introducir la temática del día

correspondiente y de hilarla con los temas vistos,

de modo que exista coherencia y armonía entre las

distintas temáticas; además la revisión de tareas

ayuda a retroalimentar el nivel de compromiso de

los participantes y a identificar los escollos que se

presentan a la hora de aplicar conceptos o

relacionar lo teórico con lo práctico. Esta revisión

no da lugar a una calificación cuantitativa a estilo

de una escuela tradicional, sino que enfatiza en el

nivel de comprensión de los conceptos, dando

lugar a que los participantes sean quienes

califiquen el nivel de comprensión de sus

compañeros.

Tratamiento del tema principal a través de diálogo

de saberes: Se exponía el tema previsto para la

sesión tratando de hilar conceptos académicos con

casos cotidianos y con fundamentos jurídicos o

académicos. “Si se presentaba alguna duda o



Bajo Magdalena

25

inquietud que el facilitador no pudiese resolver, éste

debía manifestarlo y comprometerse con los

participantes a resolver la duda en la próxima sesión,

esto generaba confianza porque se admitía que uno no

se las sabe todas y que hay interés porque las cosas

queden claras, rara vez alguno de los participantes,

dada su formación, podía resolver las dudas que el

facilitador no lograba resolver”, comenta Oviedo.

El diálogo de saberes implica que el facilitador suscite

una conversación sobre temas de interés general que

tienen aplicabilidad en el ámbito público y sobre los

cuales todos tienen algo que aportar dada su

experiencia de trabajo comunitar io o como

funcionarios públicos. “El tiempo se pasaba volando,

todos teníamos algo que decir y aprendíamos mucho,

las opiniones se respetaban, pero se tenían que

fundamentar, no se admitía que uno se creyera más que

otro”, comenta Alberto Chávez, uno de los participantes

de El Banco.

Trabajo grupal y socialización: Para profundizar los

temas vistos se asignaban trabajos grupales con base

en preguntas prob lemas , genera lmente se

Estructura de los talleres o sesiones.

complementaba con recursos como cartografía

social, dramatizaciones y expresiones de la cultura

local. Este tipo de actividades reforzaban el

liderazgo, el reconocimiento y las habilidades

comunitativas.

Asignación de tareas concretas y réplicas: De

acuerdo con los temas vistos y con la situación de

cada municipio, se asignaban tareas que luego se

revisarían en sesiones posteriores, una de las tareas

podía ser diagnosticar o documentar una

problemática en el tema de derechos humanos.

Para dar fe del cumplimiento del compromiso de

replicar, los facilitadores concertaron con los

participantes el sitio y la población de las réplicas y

realizaron visitas sin avisar a los grupos

beneficiarios de esta actividad; además los

participantes debían sustentar su trabajo con

registro fotográfico o audiovisual y de asistencia.

“Aunque no todos se comprometían con las

réplicas, se llegó a aproximadamente a 100

personas más entre todos los municipios”,

comenta Jair Pereira.



Bajo Magdalena

26

El principal recurso de la ECI son sus miembros, es decir,

coordinadores, líderes, participantes y facilitadores, en

eso concuerdan todos y todas; por parte de la CDPBM

se asignaron facilitadores profesionales de diversas

disciplinas: una socióloga, un sacerdote, un contador y

una economista ambos con experiencia en trabajo

comunitario, un comunicador social especialista en

derechos humanos, un economista experto en

proyectos, un sicólogo con especialización en

desarrollo social y maestría en el mismo campo y un

politólogo con maestría en derechos humanos. Este

equipo de trabajo coordinadamente en el diseño

metodológico y de cada módulo: compilación y

selección de contenidos, actividades complementarias

y de clase, estructura de cada taller, definición de

objetivos y alcances de cada sesión, etc. “Antes de ir a

campo ya nosotros habíamos hecho la ECI entre

nosotros”, afirma Oswaldo Oviedo.

El comunicador fue el encargado de diseñar los

módulos que se entregaron al finalizar el proceso

formativo, el cual fue clausurado con una modesta

ceremonia de graduación. “No podemos negar que

esperábamos una clausura con bombos y platillos

Los recursos y la convivencia.

porque para nosotros era algo grande, pero

bueno, esto continúa y sé que más importante que

el diploma y el refrigerio son los conocimientos

que adquirimos”, manifiesta un participante de

Pinillos.

Entre los demás recursos con los que se contó para

el desarrollo de las actividades se encuentran

video beam, salones (provistos principalmente por

las iglesias y alcaldías), tableros, marcadores, papel

Bonn, hojas de block. “En 2011 tuvimos suficiente

material para trabajar, pero en 2012 y 2013 hizo

falta apoyo de material didáctico”, comenta Jair

Pereira.

Para facilitar la convivencia se definieron

concertadamente unas normas, las cuales se

oficializaron a través de un acta firmada por los

participantes de cada municipio, entre los

compromisos pactados y respetados a cabalidad

se encuentran:

- Alzar la mano para pedir la palabra

- Respetar la postura política, religiosa o

ideológica de cada persona (los participantes



Bajo Magdalena

27

consultados, 20 en total, manifestaron, que prácticamente no hubo debates en torno a ideologías pues el

énfasis de las discusiones se puso en el desarrollo de la sociedad y no en las opiniones particulares)

- Apagar o colocar en vibrador el celular y contestar la llamada a menos que fuera estrictamente necesario

- Comprometerse a participar activamente en la ECI y no ir sólo para “calentar banca”

- Mantener en orden y aseo el lugar, cuidando de los recursos

- Aprovechar el tiempo

- Mantenerse hasta el final del proceso

- No quedarse con dudas, preguntar.

Para empoderar aún más a los participantes, fortalecer

las habilidades y el liderazgo de algunos de ellos y ellas

y dinamizar los procesos de la ECI en cada municipio, de

entre los participantes se escogieron facilitadores

locales que tenían entre otras las siguientes funciones:

Reforzar/animar la participación en los talleres

Coadyuvar en la parte logística (coordinar refrigerios y

almuerzos, el sitio, etc.)

Servir de puente frente a las inquietudes del grupo en

cada municipio

Apoyar la gestión a nivel local y

Apoyar las réplicas

“Con los líderes se mantenía una comunicación fluida y

ellos se encargaban de divulgar información entre los

demás participantes, con las diversas actividades que

tenemos en la CDPBM era casi imposible mantener una

comunicación fluida con todos y cada uno de los

participantes, había que esperar a que se desarrollaran

las sesiones y el facilitador nos ayudaba mucho con

eso”, manifiesta Jair Pereira.

Si bien los facilitadores cumplieron con su compromiso

y gozaban del reconocimiento del resto del grupo, en

algunos casos se presentaron vestigios de cacicazgos o

liderazgos no positivos, en estos casos los facilitadores

se creían privilegiados por mantener la información

que de primera mano se les enviaba desde la CDPBM o

generaban una mala interrelación con los demás

Los líderes o facilitadores locales.compañeros; en algunos casos eran unos

participantes los que sentían celos por no ser ellos

los facilitadores; conscientes de estas situaciones,

los miembros del equipo de trabajo de la CDPBM

trataban de dirimir los conflictos abiertamente para

que todo quedara claro.

Por otra parte, cuando se trataba de miembros de

organizaciones éstos casi siempre llamaban

directamente a los facilitadores de la CDPBM o se

dirigieron a la sede de ésta en Magangué para

consultar sobre casos específicos sobre sus

organizaciones; aunque no era una responsabilidad

estricta de la ECI, los contadores, economistas y

otros profesionales atendían sus solicitudes, las

cuales versaban principalmente sobre la necesidad

de constituirse jurídicamente. La CDPBM brindó

apoyo a las organizaciones que no estaban

constituidas legalmente y se lograron constituir

alrededor de 10.



Bajo Magdalena

28

En Plato las veedurías marcan el paso de la participación ciudadana.

Fredy Ricaurte Saumeth es un joven líder de Plato,

Magdalena, su vocación social le viene de familia,

su madre, de hecho, es la presidenta de la Mesa de

Víctimas de este municipio ribereño. Fredy

participó en las seis sesiones de formación,

abanderó la organización del foro electoral e

impulsó la conformación de la veeduría

ciudadana y el comité de seguimiento al plan de

desarrollo de Plato, todas éstas, actividades de la

ECI.

Él cuenta que la formación recibida en la Escuela le

sirvió para fundamentar aún más el trabajo que ya

venía adelantando como líder cívico en su

localidad: “A través de la veeduría que

conformamos comenzamos a participar de lleno

en los Consejos de Política Social y las reuniones

para la formulación del Plan de Desarrollo,

aumentamos la realización de actividades de

promoción social como la celebración del Niño y

de la Niña, celebraciones de actos de la Iglesia,

campañas de prevención de embarazos y del VIH

y campañas contra el consumo de sustancias

sicoactivas y de licor”.

Los participantes de la ECI conformaron no una,

sino tres veedurías, dos juveniles (una de ellas

para vigilar el sector salud) y una infantil. Una de

las veedurías juveniles logró formar a 23 niños,

niñas, adolescentes y jóvenes en sus derechos y

deberes y las normas y leyes que los cobijan. Los

n i ñ o s y n i ñ a s f u e r o n e s c o g i d o s p o r

recomendación de docentes de ciencias sociales

de las Inst i tuc iones Educat ivas y los

adolescentes y jóvenes a través de una

convocatoria que se hizo por los medios locales

de comunicación. La capacitación duró 4 meses

y fue impartida por la alcaldía. Esta misma

entidad cooperó con algunos recursos

financieros.

Pero quizás lo más importante en cuanto a

participación ciudadana es el impulso y

participación en el diseño de la política pública

municipal de primera infancia y la incidencia

para la inclusión y priorización de actividades a

favor de la infancia y la juventud en el plan de

desarrollo además de lograr que el Concejo

e x p i d i e r a u n a c u e r d o q u e d e fi n e l a

participación de las veedurías en los Consejos

de Política Social.



Bajo Magdalena

29

En el CONVENIO ISA REGIÓN N°7200000411 se contempló un proceso de capacitación en ciclo de proyectos

dirigido a 30 organizaciones de base comunitaria de la región del Bajo Magdalena que hubieran participado de

la primera fase de la ECI. Este ejercicio buscaba la dotación de capacidades a actores sociales en materia de

formulación de proyectos y está enmarcado en las acciones de refuerzo de capacidades organizacionales que

se viene apoyando desde los inicios de la CDPBM. Este proceso de refuerzo de capacidades partió de la

aplicación del Índice de Capacidades Organizacionales (ICO), continuó con la caracterización organizacional y

finalizó con la construcción participativa de treinta planes de fortalecimiento organizacional.

A continuación se representa gráficamente el proceso en mención:

Las organizaciones también se fortalecen.

Identificación

de actores

Aplicación y analisis del

Indice de Capacidades

Organizacionales (ICO)

Caracterización de

Organizaciones y

redes socialesConstrucción

participativa de Planes

de Fortalecimiento

Organizacional

Formación en Ciclo de

Proyectos bajo el

enfoque de Marco

Lógico

El proceso de formación ciclo de proyectos se abordó desde una perspectiva metodológica de acción -

participación. Es decir, desde la movilización, la participación y el diálogo social e institucional alrededor del

tema.



Bajo Magdalena

30

Sin lugar a dudas, un proceso de formación en ciclo de proyecto para

organizaciones de base comunitaria, representa una herramienta

técnica y estratégica alternativa, que contribuye al refuerzo de

capacidades organizacionales. El proceso de formación adelantado

por la Corporación de Desarrollo y Paz del Bajo Magdalena con el

apoyo de ISA S.A, parte de la complementariedad del proceso de

implementación de la estrategia de fortalecimiento organizacional,

esto es:

- Aplicación y análisis cuantitativos y cualitativos del

Índice de Capacidad de las Organizaciones

- Caracterización de organizaciones y redes

- Construcción participativa de los planes de

fortalecimiento organizacional

La ruta de trabajo metodológica y operativa del proceso en formación

en ciclo de proyectos partió del concepto definido desde la primera

mitad de la década de los 80 en el mundo universitario, en los centros

de investigación académica independientes y en las ONGs en nuestro

país, a partir de este primer momento logra extenderse ampliamente

por casi todo el tejido social, pasando a constituir hoy en día una

práctica común en organizaciones e instituciones de diverso tipo. Este

concepto determina que las intervenciones sociales y la

sostenibilidad de los procesos sociales en cuanto a su eficiencia y

eficacia requieren de instrumentos que permitan planear, operar,

monitorear y evaluar las apuestas por el desarrollo; estos

instrumentos son los proyectos.

Para Laureano Mendivil el recurso fundamental de todo proyecto en

la CDPBM son los actores de la base social porque:

- Conocen los problemas y necesidades directamente, están en

contacto diario y directo con la realidad.

- Pueden tener incidencia real en los procesos en tanto que son

actores propositivos, activos y relacionados (redes).

- Constituyen una fuente de innovación o renovación respecto de

las acciones necesarias o deseables.

- Movilizan recursos de tipo social, económicos, materiales y otros

Constituyen referentes clave en interacción y diálogo con las

autoridades o decisores locales



Bajo Magdalena

31

El Punto de Partida de la formación en ciclo de proyectos.

El proceso formativo en ciclo de proyectos, según consta en las memorias consultadas, partió de concebir la

elaboración de proyectos como una metodología que busca establecer un ordenamiento lógico de los pasos

necesarios a seguir para concretar de la manera más eficaz posible determinados objetivos. Eso va en relación

como lo manifestado por Adalberto Carmona, participante de este proceso: “Sabemos que la elaboración de

proyectos no es un fin en sí misma, es un instrumento que nos aproxima pero que no nos puede asegurar que

lograremos el éxito. Aprendimos que la formulación nos permite controlar el máximo de variables posibles para

reducir los márgenes de error que se presentan en todas las áreas, más cuando se trabaja más con personas que

con máquinas”

Objetivo del proceso de formación en ciclo de proyectos.

Fortalecer a las organizaciones comunitarias de conocimientos para la programación de proyectos mediante el

uso del Enfoque de Marco Lógico, de modo que sirvan de base para propuestas a presentar ante diferentes

financiadores (públicos o privados).

Resultados esperados.

Conocidas las definiciones básicas asociadas al ciclo del proyecto.

Conocidas las etapas del diseño de un proyecto.

Conocido el enfoque de marco lógico como herramienta para el diseño y formulación de proyectos.

Contenidos de la formación en ciclo de proyectos.

La CDPBM, utilizó sus conocimientos y experiencias en el tema de formulación de proyectos bajo el enfoque de

marco lógico como un soporte para adelantar su proceso de capacitación. No obstante, se diseñó un módulo de

formación que recoge todos los elementos integrantes de un proceso de formación en el tema. Considerando que

la población beneficiaria en su mayoría son actores y/o personas de bajas credenciales escolares, según Jair

Pereira, se tuvo especial cuidado a la hora de planificar los contenidos. El proceso de capacitación comprendió tres

jornadas por municipio y se basó en los siguientes temas:

El Análisis de Involucrados

El Análisis de Problemas

El Análisis de Objetivos

El Análisis de Alternativas

La Matriz del Marco Lógico

La propuesta metodológica implementada tuvo las siguientes características:

Participativa, basada en la intervención activa de los asistentes y en el diálogo de saberes ya descrito.

El formador se convirtió en moderador cuya función principal fue propiciar espacios que permitieran aflorar los

conocimientos previos de los participantes.

Trabajo práctico, pues los participantes debían tomar como base un caso real simplificado de su realidad y

analizarlo de acuerdo con los conocimientos adquiridos.

IDENTIFICACION Y CARACTERIZACION DE ORGANIZACIONES PERTENECIENTES AL

PROCESO DE FORMACION EN CICLO DE PROYECTOS

Municipio Organización Tipo de

Organización

Puntaje ICO Nivel ICO

Magangué

J.A.C. JUVENIL Junta de Acción

Comunal

No Aplica

(N/A)

No Aplica (N/A)

ASMUSAUN Campesina 45,23 Medio

ASOPESCAYA Pescadores 52,12 Medio

ASOAPES Pescadores 37,65 Deficiente

Pinillos

ORILLAS DEL RIO Pescadores 44,43 Medio

ASOVIPROPOL Victimas 46,21 Medio

ASOCIACION

AGROPECUARIA

PESQUERA DE

PINILLOS "AAPP"

Agropesquera

40,11

Medio

J.A.C. Junta de Acción

Comunal

No Aplica

(N/A)

No Aplica (N/A)

ASOCAPBOL Campesina 45,23 Medio

ASODEMAN Campesina 32,25 Deficiente

CAMPESINOS EN

ACCION

Campesina 56,34 Medio

AVICOLA EL PALMAR Campesina 47,54 Medio

UMATA Publica No Aplica

(N/A)

No Aplica (N/A)

Mompox

ASOAGROT Campesina 46,42 Medio


Comunal

No Aplica

(N/A)

No Aplica (N/A)

ASADEM Campesina 55,23 Medio

FAIMEB Fundación 50,45 Medio

Pijiño del

Carmen

ASOCUNAL Campesina 32,12 Deficiente


Comunal

No Aplica

(N/A)

No Aplica (N/A)

FUNDESA Fundación 37,75 Deficiente

ASOMUECAHO Campesina 45,46 Medio

ASOCILU Campesina 38,67 Deficiente

El Banco ARTESANAS Artesana 28,63 Deficiente

ASODEBAN Víctimas 36,34 Deficiente

JAC Junta de Acción

Comunal

No Aplica

(N/A)

No Aplica (N/A)


Bajo Magdalena

Fortaleciendo la Democracia en la Región32


Bajo Magdalena


Ya se comentó que en el marco del convenio ISA REGIÓN N°7200000411 se contempló una formación dirigida a

treinta organizaciones de base social. Gracias a un adecuado manejo de los recursos y el interés mostrado por los

participantes se llegó a 44 organizaciones. Estas fueron seleccionadas teniendo en cuenta también que hubieran

sido objeto de aplicación del índice de Capacidad de Organizaciones (ICO) y que poseyeran formulados de

planes de fortalecimiento en el año 2012 entre otros criterios ya enunciados. Las tablas anteriores dan cuenta de

la población beneficiaria distribuida por municipio acompañado.

El Banco


Bajo Magdalena


A continuación la relación de participación por tipo de organizaciones:

Resultados de la formación en ciclo de proyectos.El proceso de formación en ciclo de proyectos, arrojo diversos saldos positivos, los cuales se apreciaron al

interior del acompañamiento por parte del equipo técnico que apoyó dicho proceso, a saber, se cuenta con:

El proceso de capacitación en ciclo de proyectos ha logrado llegar a 44 organizaciones de base social, incluidas

8 Juntas de Acción Comunal.

La población beneficiaria del proceso de capacitación, conoció y comprendió la ficha básica de subproyectos

diseñada por la CDPBM. Esta ficha, la cual será la otorgada en el marco de la convocatoria de proyectos en

cascadas alrededor del Programa Nuevos Territorios de Paz, animó el principio de un proceso de alistamiento y

preparación que deriva la fase de generación de confianza de dicho Programa en la región del Bajo Magdalena.

Se evidenció que el proceso de capacitación en ciclo de proyectos no agota las exigencias y/o necesidades de

formación de toda la población. Se necesita avanzar en capacitaciones relacionadas con metodologías

distintas, por ejemplo la Metodología General Ajustada (MGA), en especial con actores institucionales que

participaron del presente proceso.



Bajo Magdalena

35

Alberto Chávez es un líder innato, como periodista

radial hace parte del colectivo de comunicaciones

de El Banco, Magdalena, y colabora con los actos

cívicos de la parroquia, las Instituciones Educativas,

las Juntas de Acción Comunal y la comunidad en

general. “Apenas me enteré de que iban a formar a

las personas en temas de participación me

entusiasmé mucho y pedí un cupo en la Escuela”,

comenta. Chávez, como cariñosamente lo llaman,

participó en todas las sesiones de la ECI en 2011 y

recibió su certificación en diciembre del mismo año,

luego participó en la profundización en temas de

planeación territorial, contratación estatal y planes

de desarrollo “y se metió de lleno”, como él mismo

lo dice, en el comité de seguimiento al plan de

desarrollo de su municipio.

“Como en muchos municipios, en El Banco también

se acostumbra a darle un contrato a una persona

para que diseñe el plan de desarrollo, el contratista

hace las reuniones con la gente para que la cosa

parezca participativa, pero lo cierto es que muchas

acciones y proyectos quedan amañados; nosotros

los que participamos en la ECI y conformamos el

comité de seguimiento comenzamos a hacer

réplicas con las juntas de acción comunal y a

meternos en el cuento de la formulación del plan,

éramos los que más preguntábamos y los que nos

oponíamos a las acciones o líneas que no quedaban

tan sólidas; logramos principalmente que el plan de

gobierno del candidato que ganó se viera reflejado

en el plan de desarrollo porque uno sabe que a

veces las cosas cambian y el plan no refleja lo que se

prometió en campaña”, comenta Chávez.

A pesar de que al principio no fueron citados por el

alcalde para hacer parte del CTP, al ver que hacían

En El Banco se reajusta el Plan de Desarrollo Municipal.

réplicas con las JAC de su fundamentación en temas

relevantes y de que insistieron para hacer parte del

mismo, el alcalde les solicitó a un grupo de la ECI que

apoyaran la formulación del plan. De hecho el consultor

de la alcaldía aprovechó un escenario de réplica de la

ECI para avanzar en dicha formulación e invitó a los

participantes a que lo acompañaran a los talleres en la

zona rural.

“Hoy el comité de seguimiento se encuentra activo a

pesar de que hay gente que se ha salido, los que

quedan hacen parte principalmente de las juntas de

acción comunal, yo, como me encuentro interesado,

pregunto mucho, pero ahora comenzaré a hacer

consultas escritas. Hemos logrado en el comité que se

revise el cupo de endeudamiento del municipio, se

tengan en cuenta algunas inconsistencias y que se

inicie el ajuste del plan de desarrollo de acuerdo con los

programas y oportunidades del gobierno nacional

pues aunque la ejecución del plan va en un 70%, el

alcalde se ha quedado corto en cuanto a gestión y

estamos desperdiciando la oportunidad de traer obras

más grandes. Como ciudadano tenemos derecho a

saber sobre sobre lo público y el alcalde ya nos

reconoce como comité”.



Bajo Magdalena

36

“Los alcaldes no están acostumbrados a

rendir cuentas públicas de su gestión y

ejecución, aquí, como en otros municipios, se

hacen las cosas y la gente se acostumbra sólo

a opinar, pero no conoce la manera de exigir

cuentas claras sobre recursos que son de

todos y todas”. Este comentario de Carlos

Caballero, del municipio de Pivijay, da cuenta

de la situación de debilidad institucional por

la que atraviesan varios municipios del país y

que motiva para seguir trabajando por el

fortalecimiento de la democracia.

Pivijay y Salamina, en el Magdalena, fueron

los municipios seleccionados para que en

ellos se llevara a cabo un ejercicio piloto de

rendición púbica de cuentas (en términos

coloquiales del proyecto ya que se trata de un

ejercicio cuya responsabilidad es del

mandatario local); este ejercicio se contempló

como uno de los alcances del CONVENIO ISA

REGIÓN N° 7200000411 (Fase II de la ECI); si

Las dinámicas sociales en torno a la rendición de cuentas.

bien la CDPBM adelantó en compañía de los

participantes de la ECI en dichos municipios una serie

de gestiones preparatorias de esta actividad, entre las

cuales se encuentran visitas a las alcaldías, peticiones

de información y análisis a informes de auditorías y de

informes presupuestales, ésta no pudo realizarse por

dos razones principales: la falta de una voluntad de los

alcaldes para realizarla y la falta de experiencia de los

miembros de la ECI en este tipo de ejercicios. Con el

ánimo de aprovechar los insumos con los que se

contaban y la gestión adelantada, se llegó a un

acuerdo entre la CDPBM e ISA para modificar el

alcance denominado “Diseñar e implementar

participativamente con mínimo 20 líderes de la Escuela

de Ciudadanía Integral Fase I de los municipios de

Pivijay y Salamina, una estrategia de participación

comunitaria en la elaboración de presupuestos

participativos y procesos de rendición publica de

cuentas” por un proceso de fortalecimiento de los

comités de vigilancia en torno al control de la gestión

técnica, administrativa y financiera de los dos

municipios mencionados.



Bajo Magdalena

37

Las actividades fruto de la modificación al alcance del

convenio consistieron en:

- La reactivación de los comités de seguimiento a los

PMD.

- La definición de una hoja de trabajo entre los comités y

la institucionalidad pública para la revisión de los planes,

programas y proyectos contemplados en los PMD y la

revisión técnica del cumplimiento de los planes.

Previa a las acciones anteriormente mencionadas se

habían realizado el diseño de un documento

metodológico de implementación de una estrategia de

participación comunitaria en los presupuestos

participativos y ejercicio de rendición pública de cuentas

en los municipios de Salamina y Pivijay y la identificación

de 10 actores sociales e institucionales representativos

en cada municipio para la construcción de la estrategia.

Los anteriores insumos y gestión constituyen, en

palabras de Carlos Caballero, “un avance para los

diálogos y agendas democráticas y un futuro ejercicio

de rendición pública de cuentas que estamos

necesitando con urgencia”.

Por su parte, Rodolfo Centeno del

Municipio de El Peñón cuenta su

experiencia: “lo más importante que hemos

aprendido con la ECI es que no sabíamos

cómo se participaba en un Plan de

Desarrollo y nosotros en vista de todo lo

que ha hecho la corporación con nosotros

en el 2010 para acá, nos propusimos

aprender y hemos venido aprendiendo

como organización a también ser partícipes

en la formulación y seguimiento a estos

planes”, agrega que su incidencia estuvo

dada por haber asignado en el eje temático

sobre víctimas del desplazamiento unas

acciones concretas en beneficio de esta

población. “Esto fue muy importante si se

tiene en cuenta que a las víctimas del

desplazamiento nos habían dejado por

fuera de la formulación del plan”



Bajo Magdalena

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En el marco de la implementación de los convenios ISA REGION N° 4500037234 y N°7200000411, se han logrado

los siguientes aportes para la región del Bajo Magdalena:

Movilizar actores sociales e institucionales alrededor de procesos de formación, movilización y participación

comunitaria. Es decir, se ha logrado despertar el interés y el accionar de actores sociales sobre los asuntos de la

vida pública de sus municipios, a través de la ECI y los comités de seguimiento a los PMD. Como experiencias de

formación y participación resaltantes en la región.

En la misma línea, este proceso ha permitido la identificación de un Proceso Estratégico Territorial (PET) para el

Bajo Magdalena, EDUCACIÓN PARA UNA CIUDADANÍA DEMOCRÁTICA. Proceso, que se configura a partir de los

saldos positivos que han derivado de la ECI fase I y II.

La significancia de este proceso está dada de igual forma por el apoyo de la cooperación internacional,

especialmente de la Unión Europea y del Gobierno de Colombia a través del DPS. En este sentido, la relación

empresa (ISA S.A), Gobierno (DPS), Cooperación Internacional (DelCol) y Academia (ESAP) será la principal

herramienta de alianza en pro del PET anteriormente señalado, debido a que la ECI ha trascendido su carácter

informal de talleres municipales de capacitación a constituirse para el año 2014, con la ayuda económica de la

DelCol y DPS, en un diplomado para 330 líderes de la región, que será acompañado por la Escuela Superior de

Administración Pública (ESAP).

Se ha fortalecido el rol de las organizaciones de base mediante un proceso formativo en ciclo de proyectos, con el

consecuente acompañamiento a las mismas para la gestión de recursos que permitan su sostenibilidad.

Finalmente, este proceso en toda su integralidad ha permitido el diseño de bases de confianzas entre los actores

en asuntos de formación y participación, ambos como expresión de una movilización integradora de actores

territoriales.

Conclusiones.



Bajo Magdalena

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Las recomendaciones que surgen, nacen de los aprendizajes jalonados por la ECI:

Se debe avanzar en el análisis de arreglos insterinstitucionales que permitan a la CDPBM, revisar la herramienta de

contratación, en especial con los tiempos de los desembolsos de los recursos. Podría pensarse en desembolsos

únicos, en el marco de convenios específicos o marcos de colaboración, los cuales permitan a sus aliados no dejar

espacios y/o momentos de insolvencias para el desarrollo de sus acciones y compromisos contractuales máxime

cuando dichos desembolsos están supeditados a la entrega de informes. En este sentido la CDPBM debe alinear

sus acciones estratégicas, operativas y financieras a fin de poder cumplir con los plazos pactados y poder así

acceder a los recursos a tiempo cuando los arreglos interinstitucionales no sean acogidos.

Se le debe reforzar a los participantes de la ECI y a la ciudadanía en general a través de los medios corporativos de

comunicación de la CDPBM que los alcaldes han contraído la responsabilidad de rendir públicamente cuentas de

su gestión y ejecución de los recursos por ellos administrados de acuerdo con el marco definido en la Ley 498 de

1998, la contempla una estructura para su definición y organización y que este ejercicio se constituye además en

una obligación ética del gobernante hacia los ciudadanos; lo anterior con el fin de evitar dilaciones por falta de

voluntad de los mandatarios locales.

Es un sentir general entre los encuestados el hecho de que la ECI aumente su cobertura numérica y geográfica, si

bien esto es un indicador del impacto causado por la Escuela, se constituye a su vez en un reto y una

recomendación.

Se deben reforzar los canales de comunicación entre los comités de seguimiento, las veedurías y los demás

miembros de la ECI con la CDPBM a fin de facilitar el seguimiento, en este sentido jugarían un papel importante los

líderes naturales del proceso y otros identificados durante el mismo.

El tiempo realmente expuesto según el plan de actividades hizo notar una apretada agenda de trabajo para la

consecución del producto. No obstante, las acciones se desarrollaron con el apoyo del equipo de profesionales

operativos en acompañamiento y seguimiento de la Corporación de Desarrollo y Paz del Bajo Magdalena. Esto

permitió lograr en tiempo real la realización de las actividades expuestas.

Es pertinente que la CDPBM, avance en la profundización del proceso de formación en ciclo de proyectos. Pero

más importante aún es que los diversos instrumentos de cooperación nacional permitan abrir las posibilidades de

proyectos a las organizaciones de base del territorio. Todo esto está ligado a la necesidad que tienen las

organizaciones de ganar en experiencias de proyectos y no únicamente en satisfacer necesidades inmediatas.

Dentro del seguimiento a las instancias de incidencia y participación de la ECI, debería tenerse en cuenta la

identificación y caracterización de las experiencias exitosas que vayan surgiendo a lo largo del tiempo, a fin de que

se nutra el proceso y se muestren como evidencias susceptibles de réplica, tal es el caso de los logros obtenidos

por las veedurías de Plato o el comité de seguimiento de Salamina.

Recomendaciones:



Bajo Magdalena

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Recomendaciones desde la perspectiva de las dificultades encontradas. Entre las dificultades presentadas en el desarrollo del proceso De la ECI en el Bajo Magdalena y que se

corresponden con nuevas recomendaciones (ésta vez no como fruto de aprendizajes, sino a manera de posibles

correctivos) se encuentran:

sistematización escuela de ciudadanía integral bajo magdalena

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