ensayos historia del arte español serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«escultura»,...

21

Upload: others

Post on 29-Sep-2020

1 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que
Page 2: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

Ensayos369

Historia del arte españolSerie dirigida por

Fernando de Olaguer-Feliú

Page 3: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que
Page 4: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

ANA MARÍA ARIAS DE COSSÍO

El arte del Renacimientoespañol

Page 5: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

© 2009Ana María Arias de Cossío

yEdiciones Encuentro, S. A., Madrid

Diseño de la cubierta: o3, s.l. - www.o3com.com

Queda prohibida, salvo excepción prevista en la ley, cualquierforma de reproducción, distribución, comunicación públicay transformación de esta obra sin contar con la autorizaciónde los titulares de la propiedad intelectual. La infracción delos derechos mencionados puede ser constitutiva de delitocontra la propiedad intelectual (arts. 270 y ss. del CódigoPenal). El Centro Español de Derechos Reprográficos(www.cedro.org) vela por el respeto de los citados derechos.

Para cualquier información sobre las obras publicadas o en programay para propuestas de nuevas publicaciones, dirigirse a:

Redacción de Ediciones EncuentroRamírez de Arellano, 17-10.a - 28043 Madrid

Tel. 902 999 689www.ediciones-encuentro.es

Page 6: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

En memoria de Antonio

Page 7: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que
Page 8: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

ÍNDICE

PRÓLOGO: Breve historiografía del Renacimiento español . 9

CAPÍTULO I . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15I.1. La cultura del humanismo y el lenguaje del Renacimiento 15I.2. Las artes plásticas: Estados catalano-aragoneses. Castilla

y Nápoles . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25I.2.a. Reinos catalano-aragoneses . . . . . . . . . . . . . . . . . . 27I.2.b. Castilla . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 31I.2.c. La segunda mitad del siglo XV . . . . . . . . . . . . . . . 40

I.3. La época de los Reyes Católicos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 45

CAPÍTULO II . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 65II.1. La crisis castellana: 1504-1517 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 65II.2. El arte entre 1500 y 1526 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 75

II.2.a. La arquitectura . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 78II.2.b. La escultura . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 108II.2.c. La pintura . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 129

CAPÍTULO III . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 153III.1. La época del emperador Carlos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 153III.2. El arte entre 1526 y 1563 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 171

7

Page 9: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

III.2.a. La arquitectura . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 176III.2.b. La escultura . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 225III.2.c. La pintura . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 249

CAPÍTULO IV . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 271IV.1. La época de Felipe II . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 271IV.2. El arte entre 1560 y 1600 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 279

IV.2.a. La arquitectura . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 282IV.2.b. La escultura . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 291IV.2.c. La pintura . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 312

BIBLIOGRAFÍA BÁSICA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 339

Ana María Arias de Cossío

8

Page 10: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

PrólogoBREVE HISTORIOGRAFÍA DEL RENACIMIENTO

ESPAÑOL

No es mi intención al iniciar este libro sobre el Renacimientoespañol hacer un repaso exhaustivo de la abundante y casi inabar-cable bibliografía que existe sobre este tema. Más bien he queridohacer mención de estudios generales, dejando para las notas deltexto las monografías o los estudios específicos de artistas, monu-mentos o períodos determinados.

El punto de partida de estos estudios generales lo constituyenlos historiadores cuyos trabajos inician la historiografía modernadel arte español, que, con variaciones de enfoque y criterio, llegahasta hoy mismo. Esa primera generación procedente, en granmedida, del Centro de Estudios Históricos está formada porManuel Gómez Moreno, Elías Tormo y Vicente Lampérez, entreotros. También autores que tuvieron una menor relación con estainstitución, como el marqués de Lozoya y F.J. Sánchez Cantón,junto a varios autores extranjeros como R.Ch. Post, B.G. Proske,J. Weise y Stapley. Todos ellos redactaron sus trabajos apoyándoseen las fuentes clásicas del arte español, desde los tratadistas anti-guos como Pacheco, Carducho, Palomino, además de las recopila-ciones documentales que se hicieron a principios del siglo XX.

La siguiente generación ensanchó considerablemente el conoci-miento del arte español del Renacimiento y quizá la figura que más

9

Page 11: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

horas dedicó al estudio de este período en el campo de la pinturafue Diego Angulo, que, entre otros trabajos, redactó el tomocorrespondiente a la «Pintura del siglo XVI» del Ars Hispaniae. Enesa misma colección, José María de Azcárate redactó el correspon-diente a la «Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo deFernando Chueca Goitia, con lo que quedaba estudiado el sigloXVI completo a la altura de los años cincuenta. Cito los tomos deesta obra porque todos incluyen un apartado bibliográfico exhaus-tivo de lo hecho en cada materia hasta ese momento. En todo caso,estos historiadores publicaron muchos trabajos referidos a artistaso a obras determinadas. Otro de los grandes historiadores que espreciso mencionar es Enrique Lafuente Ferrari, en cuya prosa,siempre diáfana, se pueden aclarar cuantas dudas se nos planteen.Pertenecen a esta misma generación, aunque fueran un poco másjóvenes, J.A. Gaya Nuño, J. Hernández Perera, A. Bonet, ElisaBermejo, María Elena Gómez Moreno, M. Estella o Isabel Mateo,entre otros muchos nombres cuya lista se haría interminable y enla que también me gustaría destacar los estudios de cuatro extran-jeros: D. Bayón, E. Rosenthal, G. Kubler y H.E. Wethey. Bien esverdad que prácticamente todos estos estudios abordan los temasdesde dos líneas metodológicas: una, que es el estudio de los artis-tas, y otra, que organiza el tema siguiendo las escuelas regionales,concediendo en ambas mucha importancia a los aspectos formales.

Como para todo hay excepciones, dos estudios son de naturale-za diferente dentro de esta generación. Uno, escrito por Angulo en1952 y titulado La mitología y el arte español del Renacimiento, yotro, un conjunto de estudios de M. Batllori sobre Humanismoy Renacimiento, que primero se publicaron en italiano y catalán a lolargo de la década de los cincuenta y posteriormente se tradujeronal castellano. Ambos abrían nuevos caminos de reflexión y sobretodo evidenciaban que el Renacimiento español no estaba aisladodel resto de Europa y, además, ambos, pero especialmente los de

Ana María Arias de Cossío

10

Page 12: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

Batllori, analizaban el humanismo como una actitud común depensadores que llevaría hasta los lenguajes plásticos del clasicismo.

Sobre la base de todos estos estudios, a partir de la década de losochenta mis compañeros de generación, y muchos de ellos compa-ñeros también en las tareas docentes, pudieron dar nuevos enfo-ques a los estudios del Renacimiento español. Son los trabajos deVíctor Nieto, Pedro Navascués, Francisco Portela, SantiagoSebastián, Fernando Checa, Alfredo Morales, Miguel ÁngelCastillo, Vicente Lleó, Miguel Morán, Fernando Marías y otrosmuchos que, desde puntos de vista muy diferentes, enriquecenconsiderablemente el conocimiento de nuestro arte renacentista.Unas veces analizando el modelo clásico, otras desde conceptos dela tradición y la modernidad, o bien, analizando las obras a travésde un fenómeno cultural para señalar los lenguajes del poder o laescena del príncipe... En 1989 se publica el libro de FernandoMarías El largo siglo XVI, historia intelectual profunda y críticaque esclarece perfectamente el entramado intelectual de la época,libro de un rigor extraordinario que sugiere y abre muchos cami-nos de análisis para el siglo XVI.

Sobre todo este caudal de estudios que nos han proporciona-do un conocimiento muy completo de lo que fue el Renacimientoen España, confieso que siempre he preferido los estudios quesiguen una línea interdisciplinar y abordan la obra artística con-tando con otras actividades de la creación intelectual coetánea, enel convencimiento absoluto de que esos estudios son efectivosdesde el punto de vista docente como medio para combatir la cre-ciente y preocupante especialización que imponen las estructurasacadémicas.

A esta preferencia mía, que ni puedo ni quiero evitar, vinieron asuperponerse dos Exposiciones que me resultaron memorables.Una, Reyes y Mecenas (celebrada en el Museo de Santa Cruz deToledo en 1992), cuyo comisario fue Fernando Checa junto a la

El arte del Renacimiento español

11

Page 13: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

comisaria técnica Rosario Díez del Corral, que planteó un panora-ma riquísimo en el momento de transición entre la Edad Media yla Edad Moderna, en el contexto de las relaciones entre los ReyesCatólicos, Maximiliano I y los inicios de la Casa de Austria enEspaña, como reza el subtítulo de la muestra, es decir, acentuandola dimensión europea de nuestro primer Renacimiento.

La otra Exposición se llamó El Renacimiento mediterráneo ytuvo lugar en el Museo Thyssen de Madrid en 2001. Fue su comi-sario Mauro Natale, que contó con la comisaria técnica MarBorobia. Recorrido extraordinario por itinerarios de Francia,Países Bajos, Italia o España de la mano de obras que ponen derelieve la conexión con rutas comerciales, intercambios de obras dearte, o manuscritos que fueron creando un lenguaje común cuyonexo eran las riberas del mar de la Antigüedad.

Desde estas dos «experiencias visuales» siempre pensé que elestudio del Renacimiento había que hacerlo siguiendo estas pautasy teniendo muy presente que el humanismo es, por lo que tiene demirada a la Antigüedad, previo a la formulación de un lenguaje quepueda definirse como la aceptación plena de un modelo clásico o,dicho de otro modo, que el proceso intelectual en la España de laBaja Edad Media y de los inicios de los tiempos modernos es pre-ciso considerarlo mediante la incidencia del humanismo, conside-rado como fenómeno cultural, en un panorama artístico muy com-plejo en el que se mezclan, precisamente por la circulación de ideas,operaciones comerciales o intercambios artísticos de procedenciasmuy diversas y muy activas, por lo menos hasta 1530, dibujandoasí un muy particular camino hacia lo que puede considerarsepleno Renacimiento.

El libro está organizado en cuatro grandes capítulos. El prime-ro analiza cómo el lenguaje del humanismo va llegando a la cortede Castilla y a la de Aragón preparando el terreno para poderdesembocar en la plástica renacentista, y cómo ese lenguaje se va

Ana María Arias de Cossío

12

Page 14: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

asimilando tanto en Castilla como en los territorios de la Coronade Aragón. El último epígrafe de este capítulo corresponde a laépoca de los Reyes Católicos.

El capítulo II se inicia con la crisis castellana que se plantea a lamuerte de la reina Isabel y continúa con la regencia del cardenalCisneros, para ver en ese contexto el desarrollo del arte entre 1500y 1526 (arquitectura, escultura y pintura).

El capítulo III corresponde enteramente al reinado de Carlos I,explicando el carácter universal de esta monarquía y su incidenciaen el arte. Una vez más sobre el mismo esquema de arquitectura,escultura y pintura.

El capítulo IV corresponde al reinado de Felipe II que, en con-traposición a su padre, representa una mirada hacia el interior, unaapuesta decidida por la defensa de la fe y una aceptación del mode-lo clásico que queda ejemplarizado en el monasterio de El Escorial.

A cada uno de los capítulos precede una introducción de carác-ter histórico-cultural para ver cómo el arte de cada una de las épo-cas se relaciona con los otros campos de la creación humanística,como la literatura o el pensamiento.

Ediciones Encuentro me ha dado la oportunidad con este librode explicarme a mí misma y a los potenciales interesados en estetema, sean alumnos universitarios o simples aficionados al arte,todo este proceso histórico-artístico desde el punto de vista que,sobre mi formación, me suscitaron las dos Exposiciones mencio-nadas. Oportunidad que obviamente agradezco muy sinceramente.

El arte del Renacimiento español

13

Page 15: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que
Page 16: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

CAPÍTULO I

I.1. La cultura del humanismo y el lenguaje del Renacimiento

A finales del siglo XIII y sobre todo a lo largo del XIV se encuen-tran en Occidente los síntomas y los presentimientos orgánicos deuna cultura nueva a la que es legítimo llamar laica, porque se apartamás que se antepone a la cultura preexistente que es cristiana y ecle-siástica: «Hubo, sí, cierta fractura entre la Edad Media y el Rena ci -miento hispánico aunque menos marcada que en Italia y tambiénmás tardía si se excluyen los Estados catalano-aragoneses»1.

Lo cierto es que esos síntomas de esa nueva cultura generan unmovimiento cultural de extraordinarias posibilidades que, por fac-tores diversos, marca en la historia de Occidente el comienzo delos tiempos modernos. Movimiento que encuentra su conforma-ción y su definición en Italia antes que en ningún sitio, pero que,gracias a las circunstancias políticas, sociales y comerciales, ademásde la circulación de personas e ideas que esas circunstancias impli-can, se extendió rápidamente a otras cortes europeas, cada una delas cuales aportó a esta nueva cultura sus propias particularidades.Aun así, y desde el primer momento, independientemente del paísque se estudie, la nueva cultura tiene dos características fundamenta-les: 1. La exaltación de la «dignitas homini», y 2. El convencimiento

15

Page 17: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

de revivir una época histórica que se había convertido en mode-lo a seguir. Dos características que responden respectivamente ados conceptos: el de «humanismo» y el de «Renacimiento». Con -ceptos que, como señala Batllori, no hay que entenderlos desdeun tiempo de límites fijos: «[...] los términos humanismo y rena-cimiento no hay que entenderlos como referidos a un períodocronológicamente fijo, sino como una actitud común de pensa-dores que desde comienzos del siglo XIV hasta finales del XVI entodos los campos de la especulación intelectual asumen posicio-nes acordes con la mutación del hombre en el paso del medioevoal mundo moderno»2.

El término «humanismo» se ha aplicado siempre con plena liber-tad a toda variedad de creencias, métodos y filosofías que colocansu interés central en el campo humano. Sin embargo, el término seutiliza con más frecuencia referido al sistema de educación que sedesarrolló en el norte de Italia durante todo el siglo XIV; un tipode enseñanza llevado a cabo por educadores conocidos como«umanisti», que enseñaban literatura clásica y que provenían de la«studia humanitatis», un curso de estudios clásicos que consistía engramática, poesía, retórica, historia y filosofía moral, en definitivaunos estudios más o menos equivalentes a la «paideia» griega.

Para ver el cambio que suponía este tipo de enseñanza que seempezaba a difundir por toda Europa, en relación con la ense-ñanza medieval alojada en monasterios y universidades, bastafijarse atentamente en la mutación que sufrieron las bibliotecasmonásticas, cuyo ejemplo más significativo es la del monasteriode Clairvaux. El iniciador de este cambio es el monje Étienne deLexington, que llegó a su gobierno en 1245. Había estudiado enOxford y en París y era particularmente sensible al reproche deignorancia que se les hacía por doquier; además, estaba convencidode que la cultura monástica fundada en la «lectio divina» no satis-facía ya las nuevas necesidades intelectuales. Fue él mismo el que

Ana María Arias de Cossío

16

Page 18: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

con todos los permisos del Capítulo de la Orden inició la reformaque estaba culminada pocos años después: «Esta nueva orientaciónse percibe ya en los catálogos de 1399 que señalan la apertura deClairvaux a la literatura humanística [...]. La nueva biblioteca esta-ba acabada en 1503, se construyó en estilo flamígero, una gran salade grandes ventanales, pupitres, en fin, una verdadera sala de lectu-ra colectiva conforme al nuevo tipo de biblioteca inaugurada aprincipios del siglo XV en el Colegio Sorbonne y que se extendiópor toda Europa. Así de san Bernardo a Erasmo, las bibliotecasfueron pasando sucesivamente de la literatura monástica a la esco-lástica y después al humanismo. Pocos establecimientos han refle-jado mejor las etapas de la cultura occidental entre el siglo XIII yel XVI»3.

A este tipo de enseñanzas humanísticas responden las fundacio-nes de Colegios en Francia primero, en Inglaterra después y mástarde en España. Su influencia fue enorme en el nuevo orden devalores en toda Europa y ésa es otra de las razones, entre algunasmás, por las cuales el Renacimiento se considera un período histó-rico nuevo.

Todo ello se concreta cuando el pensamiento grecolatino, dis-ponible en un constante flujo de manuscritos redescubiertos o tra-ducidos de nuevo (muchos de los cuales procedían de las bibliote-cas monásticas), empiezan a proporcionar un enorme caudal deinformación que, comparada con la que había proporcionado lacristiandad medieval, resultaba fresca y muy cercana a la realidad.A pesar de esta novedad, nunca insistiremos bastante en que elnuevo período histórico que ahora se empezaba a gestar no iba asignificar en ningún caso una ruptura total con la Edad Media,sino, más bien, una superación sobre los nuevos postulados que lacultura clásica ofrecía. Esta nueva cultura es un extraordinariovehículo de difusión europea en las relaciones de unos países conotros, relaciones que eran al mismo tiempo comerciales, políticas o

El arte del Renacimiento español

17

Page 19: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

artísticas, de manera que circulan por los mismos itinerarios lasideas de los políticos o de los intelectuales humanistas, los objetosque llevaban los mercaderes que eran libros, obras de arte u obje-tos de colección... Todo ello recorre dobles caminos de norte a suro de este a oeste, unas veces por mar, otras por tierra y otras utili-zando vías fluviales. En ese ir y venir se va conformando un mapade relaciones en el que pueden señalarse las ciudades que jugaronun papel relevante en la difusión de esta nueva cultura humanísticay del gusto estético del Renacimiento que a ella correspondía. Enel norte de Europa ese papel lo ostenta Brujas, punto clave en estared de relaciones a través de la Liga hanseática, empujando lasnovedades hacia el Báltico por el norte y por el sur y a través delcorredor del Rin, hacia puertos italianos como Génova o Mesina,en la isla de Sicilia. Además, por la ruta marítima llegarían a lospuertos del norte de la península Ibérica y desde ellos a Castilla enun intenso intercambio comercial y cultural de gran importancia.

En los territorios de la Corona de Aragón las ciudades másimportantes fueron Valencia, Barcelona y, desde mediados del sigloXV, Nápoles. Todas iban recibiendo las novedades que indicabanel cambio cultural, las asimilaban y, a veces, las transformaban diri-giéndolas por un lado a Castilla que, como ha quedado ya indica-do, tenía intensos contactos con Brujas y, por tanto, con los esta-dos de Borgoña, y por otro lado al Mediterráneo oriental. En elcentro de toda esta circulación hay una ciudad de relevancia en esteproceso cultural, se trata de Aviñón, corte papal, que se relacionómuy intensamente con todo este tránsito y que, en muchos casos,sirvió de crisol de las distintas influencias que allí llegaban.

En el caso concreto de España la difusión de la cultura huma-nística sigue las leyes de la historia y de la geografía: de Italia pasaprimero a los Estados catalano-aragoneses y después al reino deCastilla. Como ha señalado Batllori: «El humanismo catalano-ara-gonés de los antiguos estados de lengua catalana (Cataluña,

Ana María Arias de Cossío

18

Page 20: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

Valencia y Baleares) y el del reino aragonés tienen un mismo ori-gen histórico: los contactos políticos y literarios con Sicilia yNápoles desde los tiempos de Pedro el Grande (II de Cataluña yIII de Aragón) a finales del siglo XIII, hasta los de Alfonso elMagnánimo y Fernando el Católico, a finales del XV; además lasconquistas en el Oriente bizantino en tiempos de Jaime II, en losprimeros años del siglo XIV, que se consolidan en los ducados deAtenas y Neopatria. Finalmente los frecuentes contactos con lasnuevas corrientes culturales que se entrelazaban en la corte ponti-ficia de Aviñón y que desde allí se expandían a distintos puntos.Estos antecedentes junto a la frecuencia con que se sucedían losgrandes maestros de Rodas procedentes de Cataluña y Aragón,explican por qué en cierto sentido el humanismo catalano-aragonéshaya sido antes helenista que latino»4.

Efectivamente se sabe que ya a mediados del siglo XIV Pedro elCeremonioso recomendaba a sus oficiales la conservación y el cui-dado de la Acrópolis de Atenas, «siendo el antedicho castillo la máspreciada joya del mundo». Juan Fernández Heredia, gran maestrede Rodas, estuvo en Oriente y también en Aviñón; allí estuvo ro -deado de sabios griegos y se hizo traducir a Tucídides y a Plutarco,a quien él mismo en sus obras históricas imita. Desde esos momen-tos las bibliotecas regias y las de altos dignatarios de la Corte, y porsupuesto las de los eclesiásticos, se van enriqueciendo con obrasclásicas griegas y latinas y asimismo con las de los humanistas ita-lianos, de ahí que en Cataluña ya en estos momentos iniciales seconocía perfectamente a Virgilio; durante el siglo XV se conociótambién a Ovidio y, en cambio, Cicerón y Séneca interesan máscomo moralistas que como literatos.

Por otra parte, la influencia de Dante es indiscutible en la lite-ratura alegórica durante todo el siglo XV y, además, no puede pasarinadvertido que la primera traducción completa de la DivinaComedia en toda Europa es la catalana de Andreu Febrer, fechada

El arte del Renacimiento español

19

Page 21: Ensayos Historia del arte español Serie dirigida por · 2020. 6. 9. · diente a la«Escultura», y el de la «Arquitectura» corrió a cargo de Fernando Chueca Goitia, con lo que

Sobre todo el caudal de estudios que nos han proporcionado un conocimiento muy completo de lo que fue el

Renacimiento en España, el libro de Ana María Arias de Cossío sigue una línea interdisciplinar que aborda la obra

artística contando con otras actividades de la creación intelectual coetánea. Desde esta perspectiva, el humanismo

es, por lo que tiene de mirada a la Antigüedad, previo a la formulación de un lenguaje que pueda defi nirse como la aceptación plena de un modelo clásico. Dicho de otro

modo, el proceso intelectual en la España de la Baja Edad Media y en los inicios de los tiempos modernos es preciso

considerarlo mediante la incidencia del humanismo, entendido como fenómeno cultural, en un panorama

artístico muy complejo en el que se mezclan, precisamente por la circulación de ideas, operaciones comerciales o

intercambios artísticos de procedencias muy diversas y muy activas por lo menos hasta 1530, dibujando así un muy

particular camino hacia lo que se puede considerar pleno Renacimiento.

El libro está organizado en cuatro grandes capítulos. El primero de ellos analiza cómo el lenguaje del humanismo

va llegando a la corte de Castilla y a la de Aragón preparando el terreno para poder desembocar en la

plástica renacentista, e incluye referencia a la época de los Reyes católicos. El segundo capítulo se inicia con la crisis

castellana que se plantea a la muerte de la reina Isabel y la Regencia del cardenal Cisneros para ver en ese contexto

el desarrollo del arte entre 1500 y 1526 (arquitectura, escultura y pintura). El capítulo tercero corresponde

enteramente al reinado de Carlos I, explicando el carácter universal de esta monarquía y su incidencia en el arte. El

último capítulo corresponde al reinado de Felipe II, quien, en contraposición a su padre, representa una mirada hacia el interior, una apuesta decidida por la defensa

de la fe y una aceptación del modelo clásico que queda ejemplarizado en el monasterio de El Escorial.

A cada uno de los capítulos precede una introducción de carácter histórico-cultural para ver cómo el arte de cada

una de las épocas se relaciona con los otros campos de la creación humanística, como la literatura o el pensamiento.

Ana María Arias de Cossío nació en La Laguna (Tenerife) en 1946. Se licenció

y doctoró en Historia por la Universidad de La Laguna, donde también impartió

clases durante tres años. Desde 1975 es profesora titular de Historia del Arte en la Universidad Complutense de Madrid,

donde hoy es catedrática. Ha sido directora del departamento de Arte III de esa misma universidad desde 1997 hasta 2005. Ha publicado 10 libros individuales,

así como numerosas colaboraciones en libros colectivos y artículos en revistas

académicas.

EL ARTE DELRENACIMIENTO ESPAÑOL

ANA MARÍA ARIAS DE COSSÍO

ISBN: 978-84-7490-909-8

���������������

Visite el foro de este libro enwww.ediciones-encuentro.es

ar

te

ar

te

ar

te

AN

A M

AR

ÍA A

RIA

S D

E C

OSS

ÍOEL

ART

E D

EL R

ENAC

IMIE

NTO

ESP

OL

369

Iconografía e Iconología (1)La Historia del Arte como Historia cultural

Rafael García Mahíques

Reivindicar la iconología como estrategia alternativa e integradora de las diferentes funciones que ejerce la Historia del Arte es

el objetivo central que plantea esta obra, estructurada en dos volúmenes. En este

primero se atiende a la confi guración histórica del pensamiento iconológico, desde Warburg,

pasando por Panofsky, hasta las revisiones de Gombrich y de sus discípulos.

El arte hispanomusulmánAntonio E. Momplet Míguez

Este libro se centra en el arte producido en Al-Andalus y, aunque esté orientado hacia el ámbito universitario, pretende ser fuente de

información sobre el arte hispanomusulmán para todos aquellos cuyo interés se incline

hacia su conocimiento, incluyendo hipótesis, ideas y conclusiones que en algunos casos se

publican por primera vez.

El barroco iberoamericanoSantiago Sebastián

«Libro fascinante que nos lleva a un mundo desconocido: el mundo del pensamiento y

los sentimientos, explicados plásticamente mediante signos que se organizan a través de

la emblemática, el jeroglífi co y la alegoría». (Teresa Gisbert)

El arte barroco españolRosario Anguita Herrador

Este libro, en contra de lo que tradicionalmente se alude como arte

asimétrico, atectónico, irregular y a veces desorbitado, nos permite hablar del barroco

como una cultura y un espíritu más profundo (...) con personalidad propia que nace en un

periodo convulso para Europa.

Otros títulos en Encuentro:

af_arte_renacimiento.indd 1 22/1/09 09:55:06