voces contra el terrorismo 02 - mayo 2005

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    REVISTA TRIMESTRAL DE DIFUSIN GRATUITA MAYO AO 2005 NMERO 2

    Entrevista a D. Javier Gmez BermdezPresidente de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional

    II Congreso Internacionalsobre Vctimas del Terrorismo

    Entrevista a Jos Alcaraz

    Presidente de la AVT

    OPININ: Gracias Sr. Zapatero

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    M del Carmen lvarez Arias de Saavedra

    Edita:AVT Verde Esperanza Apdo. Correos 74 23080 - Janwww.verdeesperanza.org.

    E-mail: [email protected]: M Carmen lvarez. Redaccin: Luis Gmez, Unai Urruela,

    J. A. Gutirrez.Colaboran: Gotzone Mora, Marcos Gonzlez, David Garca, Pablo Lpez,

    Ricardo Ruiz, Pedro VilaFotos: EFE, Fondos AVT Verde Esperanza, Francisco Cuenca,

    Mara Tajadura y Eduardo Benavides, Fondos AVTDepsito Legal: J-608-2004 ISSN n.:

    Imprime y Disea: Chica Industrias Grficas, S. L.Torredelcampo (Jan) - Tfno. 953 567 482

    editorialGotzone Mora, una mujer valiente y honrada,

    est siendo un objetivo a batir por parte de la direc-cin del PSOE en el Pas Vasco, sin que los dirigentesde dicho partido en Madrid muevan un solo dedo ensu defensa ante tan cobarde y vil accin.Creo que resulta necesario recordar quien es Gotzone,no por que no se la conozca, sino para realizar unreconocimiento a su trayectoria encomiable, honraday valiente, en aras de la defensa de la memoria de lasvctimas del terrorismo.

    Esta mujer se est enfrentando a diario al en-

    torno de la banda terrorista ETA en la UniversidadPblica Vasca, al denunciar pblicamente las triqui-uelas que utilizan los terroristas encarcelados pararebajar sus condenas por estudios de dudosa credibi-lidad. Hechos que han quedado sobradamente demos-trados en casos tan flagrantes como el del terroristaDe Juana Chaos, o la de los miembros de ETA que ob-tuvieron excelentes calificaciones acadmicas duran-te el tiempo en que se encontraban en bsqueda ycaptura.

    Pero la cosa no finaliza ah, ya que Gotzone

    es concejal del partido socialista en Getxo, uno de losmunicipios ms castigados por el terrorismo, y se en-frenta con este cargo al entorno de ETA y a los nacio-nalismos ms radicales. En los plenos de su ayunta-miento en ms de una ocasin ha sido ms que mal-tratada por el alcalde de este municipio, quin mien-tras ceda la palabra a Batasuna (recordemos que di-cha formacin est ilegalizada por ser el brazo polti-co de los asesinos) ordenaba a la polica municipal eldesalojo de esta brava mujer nicamente por protes-tar la actitud del mximo responsable del consistorio

    ante estos hechos.Hace muy pocas fechas, yo era testigo de unallamada que Gotzone reciba, en la cual se le comuni-caba que en uno de los principales muros del campusde Lejona de la Universidad Pblica Vasca, haba apa-recido una inmensa pintada en la que se vea una dia-na que contena el siguiente mensaje Gotzone MoraPIN PAN PUN. En aquel momento se vino a mi menteque la misma pintada con el mismo mensaje habasido realizada por los terroristas muy pocos das antesde asesinar al concejal de PP Manuel Zamarreo. Mien-tras todos los que nos encontrbamos a su lado nosdescomponamos, ella con la dulzura que la caracteri-za, incluso anim a alguien que en ese momento sevino abajo. As es Gotzone Mora. Por cierto, la noticia

    de la aparicin de las citadas pintadas fue publicadaen diversos medios de comunicacin, e incluso se pro-cedi a realizar una denuncia en la Audiencia Nacio-nal, a pesar de lo cual no recibi ni una sola llamadapor parte de los dirigentes de su partido.

    Ni entiendo ni entender la postura de mu-chos de sus compaeros, que con la mayor indigni-dad con la que pueda actuar el ser humano, intentandesacreditarla utilizando para ello todo tipo de falaciasy de mentiras. Sin ir ms lejos, el pasado mes de fe-brero, y mientras ella se encontraba en el Congreso

    Internacional de Victimas del Terrorismo celebrado enColombia, miembros del PSE intentaron que la direc-cin del PSOE en Madrid le abriera un expediente pordenunciar las conversaciones de determinados diri-gentes de su partido con miembros de Batasuna. Noha pasado ni un mes desde aquella fecha, cuando unarevista semanal publica dichos contactos y pone nom-bre y apellidos a la persona del PSE que los mantiene.Si esto era falso como esgriman los dirigentes delPSE Por qu en esta ocasin no denuncian a esa re-vista? O es que Gotzone deca la verdad y lo que

    pretendan era acallarla?Desde esta editorial quiero que Gotzone sepaque somos muchos los que la queremos, admiramos yque valoramos la contribucin que est aportando enla lucha contra el terrorismo y por la Memoria de lasvctimas del mismo, y que la sociedad jams tendrsuficientes palabras de agradecimiento por el sacrifi-cio que tanto ella como su familia estn realizando.Y recordarle a estos compaeros que en polt ica notodo vale, que el ser humano est por encima de lassiglas y les aconsejo que hagan examen de concien-

    cia, ya que el enemigo no es Gotzone Mora sino ETA.

    VALENTA Y HONRADEZ

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    aplicar la Ley y de defender las garantas que la Leyotorga, tambin a los terroristas. Y, por lo tanto, notiene que expulsarlo de la Sala porque el acusadolo pida, a no ser que, como marca la Ley, alteregravemente el orden y perturbe el normal desarro-llo del juicio.

    VCT.- Despus de la alarma social que cre lanoticia de la puesta en libertad de De Juana ChaosQu medidas se han tomado con los expedien-tes penitenciarios de terroristas que saldrn a lacalle en prximos aos? Qu seguimiento se esthaciendo?JGB.- Sirvi para que la opinin pblica se dieracuenta de lo que estaba pasando.Las medidas que se han tomado han ido encami-

    nadas a la revisin exhaustiva de los expedientes,evitando, entre otras cosas, los fraudes de ley. Bienentendido que lo que no se puede hacer son mila-gros. Con la legislacin que tenemos, referente alos condenados por el cdigo anterior, con la doc-trina constitucional y despus de tantos aos conuna interpretacin, a mi juicio, errnea del funda-mento de todo beneficio penitenciario, es muy di-fcil asumir los errores, cambiar la tendencia e ircontra corriente.Adems se estn estudiando doctrinas jurdicas al-ternativas que impidan la puesta en libertad, cuandorealmente sta no es merecida. Y, desde luego, yano se estn concediendo redenciones de una for-ma meramente automtica, como se concedanantes.

    VCT.- Esto desde cuando se realiza?

    JGB.- Pues desde que se cre el Juzgado Central deVigilancia dentro de la Audiencia Nacional.

    Si me permite, de manera grfica, la idea motrz esque no tiene sentido que se conceda un beneficiopenitenciario, que supone el acortamiento efecti-vo de la pena y de la estancia en prisin, a quienrechaza el sistema penitenciario, a quien rechazatodo intento de reeducacin y de reinsercin, aquien se niega a pedir perdn expreso a las vcti-mas de sus delitos o no colabora con las autorida-des y, encima, sigue defendiendo el crimen.

    VCT.- Por lo tanto. Quin estaba equivocado?

    JGB.- Todos por omisin. El legislativo que no mo-dificaba la Ley, el Ejecutivo que no impulsaba di-

    cha modificacin y, por supuesto, los Tribunales (in-cluida la AN) y el Ministerio Fiscal que no fuimoscapaces de interpretar la Ley de forma que se apli-cara su espritu y no su literalidad en aras de unasupuesta igualdad inexistente entre terroristas ydems delincuentes. Ahora es muy difcil asumirque se han estado haciendo mal las cosas.

    VCT.- Considera posit iva la medida que se adoptoen su da sobre la dispersin de los presos? Creusted que esa medida debera de mantenerse?

    JGB.- La dispersin de presos es una decisin pol-tica, por lo tanto no voy a realizar ningn comen-tario en este aspecto. Pero tiene una vertiente jur-dica, pues, como usted sabe, la Ley General Peni-tenciaria, como regla, dispone que los presos estnen centros penitenciarios cerca de su lugar de resi-dencia. Esto lo han aprovechado algunos para de-cir que la llamada dispersin es ilegal.No es verdad. Estamos hablando una vez ms de

    gente que rechaza el tratamiento penitenciario. Elcumplimiento cerca de su lugar de residencia slotiene sentido como medida tendente a la reinsercindel delincuente y para evitar el desarraigo; por tanto

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    quienes rechazan el tratamiento no tienen prefe-rencia alguna para ser destinados a prisiones cer-canas a su domicilio.

    VCT.- Pero desde el puesto en el que usted seencuentra ahora mismo, podra decirnos qu leparece la dispersin de presos? En tanto que silos presos se encuentran todos juntos, sin inten-cin de abandonar sus postulados ni ideas - comoacabamos de referir- sera lgico pensar que pue-den tenerlo ms fcil a la hora de reorganizarse y

    seguir atentando o dando rdenes concretas amiembros de su organizacin.

    JGB.- Lo que est claro es que ETA siempre ha uti-lizado a sus presos como moneda de cambio y comochantaje. De camino tambin a sus familias. Por-que las familias de los presos no dejan de ser unasvctimas indirectas, pero cuidado!, -de los delitosde sus familiares; es decir, la culpa de que las fami-lias de los presos tengan determinadas incomodi-

    dades es, en primer y principal trmino, del delin-cuente.Dicho esto, lo que queda claro es que un grupo dedelincuentes que no decae en su comportamiento

    delictivo (entre otras causas porque se les ha dadoesperanza, y cuando se le da esperanza a un terro-rista tenemos veinte aos ms de terrorismo), quepersiste en armar algarabas, en desobedecersistemticamente a los funcionarios, etc., debe es-tar controlado y cuanto menor sea el nmero de

    ellos en cada prisin, ms manejable ser dichogrupo desde el punto de vista del orden pblico yla seguridad en las prisiones. Debe ser una priori-dad proteger a los funcionarios de prisiones, no slosus vidas, sino de la presin que sufren, entre otros,los que estn destinados en crceles del Pas Vascoy prisiones cercanas, como Navarra, Aragn, LaRioja, etc.Que es una medida que afecta a las familias de lospresos que tienen que desplazarse cientos de kil-metros para visitar a sus familiares? S, es cierto,pero el responsable de esto es el delincuente, no elresto de la sociedad.Ya est bien de mirar para otro lado! Por qu cuan-do los que se quejan son unos se les hace caso, ycuando se quejan otros no se les escucha?: La me-dida es legal y, por tanto, los efectos indirectos quetiene son imputables en primer lugar al delincuen-te.Adems, podramos preguntarnos porqu existien-do muchos ms presos vascos que no pertenecen

    al crimen organizado o a la banda terrorista y queestn en crceles lejanas no se les da preferencia aestos. Por qu no les interesan stos? Por qu lospolticos no los mencionan?

    VCT.- La Audiencia Nacional ha sufrido muchosataques, de los gobiernos nacionalistas tanto delvasco como del cataln, Desde su punto de vis-ta considera que es importante que la AudienciaNacional siga cumpliendo las funciones de las

    que se encarga aqu en Madrid?

    JGB.- Vamos a ver. En este asunto se parte de unaenorme falacia de principio y es decir que a losdelincuentes hay que juzgarlos en Madrid o en otrositio. No, no, no.La Audiencia Nacional existe porque es un rganoespecializado en luchar contra el crimen organiza-do y el peor criminal organizado es el terrorista,cuyos delitos afectan a toda la nacin.

    Cmo la Audiencia Nacional tiene competenciasobre todo el territorio nacional, no es descartarleel hecho de que se celebren juicios fuera de Madridcon nuestros magistrados y con nuestra organiza-

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    cin. De hecho, yo, esa posibilidad, nunca la he re-chazado y peridicamente lo analizo para salvarlos obstculos que se pueda plantear.Por lo tanto, que la Audiencia Nacional tenga susede permanente en Madrid no implica que no sepuedan celebrar juicios fuera de aqu, en Bilbao,Sevilla o Barcelona, por ejemplo.En cuanto a la importancia de la Audiencia, todoslos pases del mundo nos estudian y miran comomodelo judicial para combatir el crimen organiza-do.Lo que dicen los nacionalistas no es real.

    VCT.- En cuanto a la responsabilidad econmicay civil que tienen los terroristas. Cre que se tieneque hacer alguna reforma legislativa para quelos terroristas salden sus deudas bien con el Es-tado, o con las vctimas? Tiene algn conoci-miento sobre si la abogaca del Estado est soli-

    citando las medidas oportunas para que una vezque los terroristas salgan a la calle pidan que sesalden sus deudas?

    JGB.- No tengo datos concretos, pero creo que loprimero que habra que hacer es que los tribunalesordenen a la Agencia Tributaria que haga un se-guimiento peridico de estos individuos y de susbienes y evitar los delitos de alzamiento de bienesy de blanqueo de capitales coetneos a las conde-

    nas. Porque lo que hacen y eso ya est previsto enel Cdigo Penal- es que en cuanto son detenidos(incluso cuando pasan a lo que ellos llaman la clan-destinidad) se dedican a limpiar el patrimonio

    que tienen.Tambin vamos a promover que el terrorista quesalga en libertad tenga que pagar susresponsabilidaces civiles, siga sintiendo el alientodel Estado, porque este tipo de responsabilidad estsujeto a plazos de prescripcin de 15 aos. Pero, sise hace una nueva investigacin patrimonial a los10, 11 12 aos, vuelve a correr un nuevo plazo de15 aos. Y por lo tanto, durante toda la vida labo-ral de estos terroristas que salen en libertad consus condenas cumplidas, estarn sujetos al pago ytendrn que hacer un compromiso de pago. Ade-ms, aunque la cantidad sea muy pequea en rela-cin con la deuda, las familias de las vctimas sen-tirn que la Justicia no se ha olvidado de ellos.

    VCT. En los juicios que se estn celebrando con-tra HAIKA el Gobierno Vasco anunci que envia-ba observadores para garantizar un trato justo a

    los imputados Qu le pareci a usted esa deci-sin?

    JGB.- En el caso de los llamados por algunos polti-cos nacionalistas los chicos de la gasolina, debodecirle que sta se ha puesto carsima, ms o me-nos sobre once aos de prisin.Sobre el observador, esa figura no aparece refle-jada en el Derecho espaol. En nuestro sistema ju-dicial, los juicios son pblicos y por lo tanto los

    observadores son todos aquellos ciudadanos quepasen por la calle y que quieran presenciar el jui-cio.En Espaa hay tantos observadores por juicio como

    En cuanto a laimportancia de la

    Audiencia, todos lospases del mundo

    nos estudian ymiran como

    modelo judicial paracombatir el crimen

    organizado.

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    ciudadanos quieran entrar en la sala de vistas, sinms limitacin que la del espacio disponible y, enla Audiencia Nacional, lo salvamos incluso con laretransmisin en directo (TV, radio) de los juicios.Dicho esto, personalmente no tengo conocimientode que haya ningn observador. A m nadie ha ve-

    nido a presentrseme como representante del go-bierno vasco. De haberlo hecho con mucho gustolo habra recibido, incluso le habramos buscadoun asiento preferente, porque cualquier institucindel Estado es bien recibida en esta casa y es tratadacon la cortesa, decoro y atenciones que merece.Por lo tanto si el gobierno vasco anuncia que va avenir algn representante de esa institucin lo lla-memos como lo llamemos- para asistir a un juicio,que tenga la tranquilidad de que el Presidente de

    la Sala de lo Penal lo recibir y le facilitar acudir alos juicios que desee.

    VCT.- Conoce algn caso en el cual el GobiernoVasco se haya personado en alguna ocasin comoacusacin en algn sumario de un atentado per-petrado en la Comunidad Autnoma Vasca?

    JGB.- En mis seis aos en la Audiencia el GobiernoVasco nunca se ha personado como acusacin enningn caso de terrorismo. S lo ha hecho en pro-cesos donde los denunciantes eran terroristas.

    VCT.- Qu opinin le merece la funcin que hacela AVT en la Audiencia Nacional? Qu ms creeusted que se podra hacer?

    JGB.- En cuanto al papel de la AVT se pueden decirmuchas ms cosas buenas que malas. Pero para sercrtico creo que debera ser mucho ms comedida,sobre todo en los juicios orales. Por qu? Porque

    nosotros, los hombres honrados, los ciudadanosno delincuentes, debemos tener un objetivo: la Jus-ticia. Y debemos cuidar las formas y no pervertir elsentido de esa Justicia que estamos demandandoporque cualquier exceso es deformado por estosenergmenos y les da argumentos .La AVT tiene por lo tanto un gran papel que des-empear, pero sin perder de vista el objetivo final,que es que se haga Justicia, acabando con el terro-rismo.

    Y desde luego, dar satisfaccin a sus asociados queson vctimas de la sinrazn.En cuanto a qu se puede hacer ms, no es a lasvctimas a las que hay que pedir que hagan ms

    sino al resto: Si en la sociedad todos hiciramos lamitad del esfuerzo moral que se les exige a las vc-timas del terrorismo, acabaramos con el terroris-mo en muy breve plazo.

    VCT.- Qu puede decirnos sobre la Oficina de

    las Vctimas, que llevan ofertndonos hace dosaos y que todava no se ha creado?

    JGB.- La creacin de la Oficina de Vctimas esuna decisin del Poder Ejecutivo no del Poder Judi-cial. Todo lo que se pueda hacer por las vctimasest bien, pero siempre que no se convierta en unobstculo burocrtico que perjudique ms que fa-vorezca.

    La Audiencia Nacional

    existe porque es un

    rgano especializado en

    luchar contra el

    crimen organizado

    y el peor criminal

    organizado es el terrorista,cuyos delitos afectan

    a toda la nacin.

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    reportajeVctimas espaolas participaron en el II Congreso Internacional

    sobre Vctimas del Terrorismo celebrado en BogotCOLOM BIA REUNI DURANTE DOS DAS A VCTIM AS DE TODO EL M UNDO

    En enero del 2004 la Fundacin Vctimas

    del Terrorismo y la Universidad San Pablo CEU or-ganizaron en Madrid el I Congreso Internacionalsobre Vctimas del Terrorismo. En su clausura, elGran Canciller de la Universidad San Pablo CEU,Alfonso Coronel de Palma dijo que: nunca ms avuestro olvido, al olvido de las vctimas del terro-rismo, estn donde estn en el mundo.Por eso, larealizacin del II Congreso Internacional Vctimasdel Terrorismo, organizado por la Universidad SergioArboleda de Bogot y celebrado el 23 y 24 defebrero, contribuye a que se cumplan esas pala-bras.

    Colombia fue la sede de este II Congreso.Este pas sufre la lacra del terrorismo de una ma-

    nera atroz. Ms del 50 % de la pobla-cin ha sido vctima directa o indirec-ta de la accin terrorista. Era, por tan-to, un lugar muy adecuado para que lavoz de las vctimas no se apague y re-

    suene fuerte. All se volvieron a con-centrar vctimas del terrorismo de todoel mundo: Estados Unidos, Irlanda, Co-lombia, Indonesia, Rusia, Chile, Israel yEspaa.

    El Acto de inauguracin, don-de estaban presentes autoridades aca-dmicas tanto de la Universidad SergioArboleda como de la Universidad SanPablo CEU, comenz con unas palabras

    de la directora del II Congreso DianaSofa Giraldo de Melo, quien dijo: Haceun ao regres de Madrid con el cora-zn en la mano. En mi vida personalhay un antes y un despus del PrimerCongreso Internacional sobre Vctimasdel Terrorismo, donde tuve el privile-gio de escucharlos. Regres con el f ir-me propsito de sacar adelante el Se-

    Pablo Lpez

    gundo Congreso Internacional y con el deseo in-

    terior, que quiero compartir con ustedes, de seruna mejor persona, de ser corresponsable de loque les pasaba a los dems, de no ser ms indife-rente.De esta forma, este Congreso naca con elfirme propsito de no dejar solas a las vctimas.Ese es el reto de estos dos encuentros y su verda-dera trascendencia.

    El ex Presidente del Gobierno, Jos MaraAznar, que ya haba clausurado el Congreso de Ma-drid, imparti la conferencia inaugural. Su discurso

    comenz con un recuerdo emocionado a todas lasvctimas del terrorismo, para que siempre estnen nuestra memoria y no caigan en el olvido. Des-pus denunci la maldad intrnseca de todas las

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    formas de terrorismo. Reiter que todos los terro-rismos son iguales y que el camino para vencerloses la firmeza y la contundencia de los valores de-mocrticos y del Estado de derecho. Y concluy di-ciendo que cuantos os habis reunido aqu con-tis con mi admiracin y solidaridad. Soy un so-

    breviviente, es verdad, pero soy sobre todo un com-batiente y un luchador contra el terror. Toda mivida he combatido el terror, lo voy a seguir ha-ciendo y tengo especial inters en ratificar y reite-rar ese compromiso.

    La Conferencia inaugural dio paso a los dis-tintos testimonios de vctimas del terrorismo delmundo entero. Por all pasaron vctimas del 11-S.Entre ellas Tony Roger quien perdi un hijo; TonyRose, superviviente del Pentgono; Robert Maclvine

    quien no pudo evitar emocionarse al recordar lamuerte de su hijo; Bruce Wallace cuya hija viajabaen uno de los aviones que se estrellaron contra lastorres gemelas.

    Despus, recogieron el testigo vctimas delterrorismo en otras latitudes como Yully Martani yMahanani Pri Rahayu, vctimas del terrorismo enYakarta; Juan Pablo Letelier, Patricia Verdugo, vc-timas del terrorismo de estado; Stanlye McCombevctima del IRA; Arnold Roth quien record el mal

    que pueden realizar los medios de comunicacincuando no informan con veracidad e intentan jus-tificar a los terroristas. Entre estas vctimas desta-c el testimonio de Azamat Sbanoz quien perdia su padre en la masacre de la Escuela de Besln,Rusia en septiembre del 2004. Su relato result muyemotivo e impactante.

    No podan faltar las vctimas del terrorismoen Colombia, un pas fustigado sin piedad por esteazote. La tarde del 23 de febrero las vctimas del

    terrorismo de Colombia tuvieron la palabra. Por latribuna pasaron vctimas de las ms atroces ma-tanzas; personas mutiladas por las minas anti-per-sona (muchos de ellos jvenes militares y nios);familiares de secuestrados (ms de 3000 secues-trados en la actualidad). Su testimonio servir paraque la sociedad colombiana reaccione y se una con-tra el terror.

    Las vctimas del terrorismo en Espaa fue-ron las encargadas de cerrar los testimonios. La pri-

    mera en hablar fue Irene Villa que puso al audito-rio en pie tras su testimonio lleno de libertad, es-peranza, ilusin y vida. Fue uno de los momentosms emotivos del Congreso. Despus Gabriel Moris

    y su mujer Mara Pilar Crespo relataron como el 11de marzo del pasado ao cort de raz la vida de suhijo Juan Pablo y cambi por completo su vida.Despus Gotzone Mora expuso las dificultades conlas que se encuentra cada da en la Universidad delPas Vasco y los ataques constantes que recibe del

    entorno estudiantil de Batasuna. Carmen GonzlezArmas, gerente de la Asociacin ayuda a las vcti-mas del 11-M habl de la experiencia de esta aso-ciacin en la compresin y auxilio de las vctimas.Por ltimo, Francisco Jos Alcaraz, Presidente de laAVT, alent a los presentes a que se asocien entre sen cada uno de los pases como camino ms ade-cuado para que la memoria y dignidad de las vcti-mas no caiga en el olvido. Fue una mesa redondainolvidable, que estuvo moderada por el periodista

    y Director del Observatorio Internacional de Vcti-mas del Terrorismo de la Universidad San Pablo CEU,Cayetano Gonzlez.

    Antes de esta mesa redonda, la represen-tante enviada por el Gobierno espaol, Dolores dela Fuente, Directora de la Oficina del Alto Comisio-nado para las Vctimas del Terrorismo, tuvo una in-tervencin en la que explic los objetivos de esteorganismo, cuya creacin anunci el Presidente delGobierno, Jos Luis Rodrguez Zapatero, el da que

    la Presidenta de la Asociacin de Afectados por el11-M, Pilar Manjn, compareci ante la comisinde investigacin del Congreso de los Diputados.

    Tras la mesa redonda con las vctimas espa-olas, todas las vctimas asistentes al Congreso su-bieron al escenario y procedieron a leer el Mani-fiesto de Madrid-Bogot. Es el manifiesto del Pri-mer Congreso y que se leer en los sucesivos que secelebren. En l, todas las vctimas del terrorismodel mundo piden ayuda y solidaridad a las Institu-ciones y a la sociedad, alzan su voz contra esa bar-

    barie, demuestran su grandeza moral y su valor in-negable como vehculo para terminar con esta la-cra.

    La trascendencia del Congreso es innega-ble. El valor de las vct imas, su memoria ydignidad no quedan en el olvido. Es emocionantever a tantas vctimas del terror unidas siendofoco que ilumina el camino a toda la sociedadpara que la libertad triunfe sobre el horror. Poreso, el Congreso termin con un llamamiento a

    todos los presentes para que en el ao 2006 todosnos volvamos a unir en Valencia, sede del III Con-greso Internacional sobre Vctimas del terrorismo.Os esperamos.

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    VCT Ustedes, desde su asociacin, no acepta-ron la Medalla de Oro al Mrito en el Traba-

    jo, que el Ministerio de Trabajo y Asuntos So-ciales otorg el pasado 11 de marzo a los co-lectivos de vctimas del terrorismo, cul fue elmotivo?

    JA . El 24 de abril de 2004, el Consejo de Minis-tros a propuesta del Ministro de Trabajo y Asun-tos Sociales, concedi la Medalla de Oro al M-rito en el Trabajo a las vctimas fallecidas en elatentado perpetrado en Madrid el pasado 11 de

    marzo. Estas medallas fueron entregadas en unacto institucional con presencia de sus Majesta-des los Reyes de Espaa. Al conocerse la noticiafueron muchas las llamadas que recibimos en lasede de la AVT por parte de nuestros asociados,quienes nos sealaban con mucho dolor como sesentan desplazadas ante tal concesin. La JuntaDirectiva de la AVT decidi ponerlo en conoci-miento del Ministro Don Jess Caldera, a quiense le solicit una entrevista con el fin de trasla-

    darle el malestar generalizado en nuestro colec-tivo, por la marginacin de que haban sido obje-to las vctimas anteriores al atentado del 11-M.Dicha reunin se concret por nuestra parte el

    pasado mes de agosto sin que, hasta la fecha, noshaya recibido para tratar el tema de forma oficial.

    En la primera semana del mes de marzo recibimosuna llamada del Ministerio en la cual se nos comu-nicaba que el Ministro haba pensado conceder laMedalla a la AVT, y que esta decisin se aprobaraen el Consejo de Ministros del 11 de marzo. Comoresulta lgico, la Asociacin de Vctimas del Terro-rismo se neg a dicha concesin, ya que nuestraorganizacin trabaja por y para las vctimas, y laactual Junta Directiva tiene muy claro que las si-glas no estn por encima de las personas. As que le

    contestamos con una carta en la que le propusi-mos que esa medalla fuese entregada a todos losfallecidos por atentados terroristas anteriores al 11-M, solicitud a la cual tampoco nos ha respondidoel Sr. Caldera.

    VCT- Ustedes anunciaron su ruptura con el AltoComisionado para las vctimas del terrorismo DonGregorio Peces Barba qu ha ocurrido para quetomen esta determinacin?

    JA.Resulta paradjico, pero comohemos denun-ciado en mltiples ocasiones el Alto Comisionado,una figura que se supone que deba ayudar a las

    entrevistaEntrevista a Jos Alcaraz

    Francisco Jos Alcaraz se ha caracterizadopor ser una persona profundamente com-prometida con los valores que caracteri-zan a un humanista integral. Es decir, hon-radez, empata, dedicacin plena y desin-teresada, defensa incondicional de la li-bertad y de la vida, etc. Desde que haceapenas un ao ocupase el cargo como Pre-

    sidente de la AVT, Alcaraz ha tenido quehacer frente a determinadas polmicassuscitadas por las controvertidas decisio-

    nes que han sido tomadas por parte del Gobierno, tanto en materia antiterrorista comoen iniciativas en favor de las vctimas. Dice el refrn que a ro revuelto ganancia depescadores. Esperemos que los pescadores no vuelvan a ser una vez ms los terroristas.

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    vctimas del terrorismo, ha conseguido en tres me-ses lo que nadie haba logrado en 25 aos, la divi-sin y el enfrentamiento entre colectivos de vcti-mas del terrorismo.En primer lugar el propio nombramiento fue vistocon escepticismo desde esta asociacin, ya que en-

    tendemos que dicha oficina era suprflua y no so-luciona ninguna de las dificultades a las que tie-nen que hacer frente las vctimas, como por ejem-plo que estas se vean sometidas a acudir ventanillatras ventanilla para solucionar los problemas deri-vados de un atentado. Nosotros somos partidariosde una oficina nica donde se gestionen todas lasdemandas de las vctimas. Ya que se ha creado estecargo, pensamos que la f igura requiere alguien queconozca perfectamente la problemtica de las vc-

    timas del terrorismo, y que dedique todo su t iempoa tan importante labor. As que tras el nombramien-to por parte del Sr. Presidente del Gobierno, nosencontramos como Alto Comisionado a un granRector de Universidad, que entre clase y clase, ycasi en el pasillo, est intentando impartir cte-dra de forma dictatorial de una materia quedesconoce.Ese desconocimiento, esa falta de sensibilidad ha-cia el colectivo, le llev, por ejemplo a no partici-par en la manifestacin del 22 de enero, a no asis-tir al II Congreso Internacional de Vctimas del Te-rrorismo que se celebr el pasado mes de febreroen Colombia, o a justificar las posibles ayudas delGobierno Vasco a las familias de los etarras.

    VCT Qu pas en la ltima reunin que mantu-vieron con el Alto Comisionado?

    JA. Pocos das despus de la manifestacin que reco-rri las calles de Madrid bajo el lema Memoria,

    Dignidad y Justicia, y dada la polmica que se sus-cit, la Junta Directiva junto con el gerente de laasociacin mantuvimos una reunin con el AltoComisionado. La AVT acudi a la cita con las mejo-res intenciones, pero cual fue nuestra sorpresa cuan-do en el transcurso de la conversacin, el Sr. Peces

    Barba nos sugiri que en el caso de que se produje-se una hipottica tregua o alto el fuego por partede la banda terrorista ETA, tendramos que debatirsobre las hipotticas concesiones que deberan rea-lizarse por parte de los poderes pblicos, a favor delos etarras que no estuviesen implicados en delitosde sangre. A quin pretenda defender con seme- jante propuesta? A las vctimas seguro que no.Cuando dicha conversacin se hizo pblica, el AltoComisionado nos acus a los miembros de la Junta

    Directiva de la AVT de mentirosos. Si revisamos lashemerotecas, podemos comprobar como el mismoPeces Barba se desdice en varias ocasiones y termi-na por reconocer la veracidad y la existencia de lacitada conversacin.La gravedad del asunto nos llev a mantener unareunin con el Presidente del Gobierno, donde so-licitamos la destitucin de Don Gregorio Peces Bar-ba. El Sr. Zapatero no accedi a nuestra peticin,esgrimiendo para ello la trayectoria profesional,

    docente y democrtica del Alto Comisionado, cosaque no ponemos en duda, pero que no le avala paraque tenga carta blanca para decir o hacer cuantose le antoje en una materia tan delicada como lade las vctimas del terrorismo.

    VCT . El da 11 de abril vimos al Alto Comisionadoen la Audiencia Nacional, y algunos medios re-flejaron dicha visita como un posible acercamien-to, qu tiene que decir sobre este tema?

    JA. Este ha sido el ltimo de sus despropsitos, ymuestra bien a las claras cual es su forma de ac-tuar y de proceder. Algunos medios de comunica-cin, de forma interesada, recogan la noticia deque se haba producido un encuentro entre algu-nos miembros de la AVT con el Alto Comisionadode las Vctimas, y que esto supona un acercamien-to con nuestra asociacin, cosa que resulta absolu-tamente falsa. Lo que este seor intent con este

    encuentro con dos ex-dirigentes de la AVT, es seguirsembrando la duda sobre la representatividad de la

    Junta Directiva de la asociacin, ya que de lo con-

    trario la visita se hubiera realizado sin publicidad

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    meditica.Ahora bien, desde mi modesta opinin, le aconsejoal Alto Comisionado que si de verdad quiere soli-darizarse con las vctimas del terrorismo, dondemejor puede mostrar su cercana es en las vistasorales en las que se juzgan los atentados con falle-

    cidos o heridos, y en donde se encuentran presen-tes las viudas, hurfanos, padres o incluso la propiavctima que sobrevivi al atentado. El Sr. Peces Barbahizo presencia en la Audiencia Nacional para losmedios de comunicacin (ya que su visita apenasdur 20 minutos) en la causa contra Jarrai-Haika-Segi, por presunta colaboracin con ETA, las mis-mas personas para las que nos anunci, como hesealado anteriormente, una serie de beneficios yconcesiones al no tener delitos de sangre.

    VCT. Entonces si el Alto Comisionado no dimitequ van ha hacer ustedes?

    JA. Eso lo tendremos que decidir una vez se hayarecogido la opinin de nuestros socios. Lo que estclaro es que el Alto Comisionado tiene la obliga-cin, le gustemos como asociacin o no, de infor-marnos acerca de todas las iniciativas que puedansurgir desde su oficina en beneficio de las vctimas,para que nosotros se las traslademos a nuestros aso-ciados, ya que todos nuestros afiliados son vcti-mas del terrorismo reconocidas por el Ministeriodel Interior, y por lo tanto tienen los mismos dere-chos.

    VCT Cul es su valoracin de los resultados delas ltimas elecciones vascas?

    J A. Resulta desolador ver, como hemos tenido laoportunidad, de contar con un Parlamento Vasco

    sin la presencia de Batasuna-ETA, y sin embargo

    vamos a tener que soportar la insultante presenciadel Partido Comunista de las Tierras Vascas enVitoria. Bajo mi punto de vista, el Gobierno no hahecho lo suficiente para impedir que el PCTV sepresente a las elecciones. A pesar de que el Sr. Za-patero argumente que no se poseen suficientespruebas para ilegalizar al PCTV, creo que despusde ver el informe que le remiti la Guardia Civilenunciando las claras conexiones entre Batasuna yel PCTV, comprobar como los interventores del ci-tado part ido eran de Batasuna, de que estos no con-denan expresamente los atentados de ETA, de ad-vertir como han asumido el compromiso Electoralde AG despus de su ilegalizacin considero que enestos momentos se deberan de articular todas lasmedidas necesarias para que estos nueve diputa-dos no tomen posesin de sus cargos.

    VCT. Ante la situacin que estn viviendo Cmose siente una vctima del terrorismo como es us-ted?

    JA.Estamos viviendo un retroceso en todos los sen-tidos. Vemos como a los terroristas se les est dan-do esperanza, y esto resulta sin duda alguna ungrave error. Los avances que se han realizado en losltimos cuatro aos en materia antiterrorista es-tn cayendo como un castillo de naipes. El pactoantiterrorista est a punto de desaparecer, los pre-

    sos de ETA en Francia se matriculan en la UPV, losamigos de los terroristas tienen nueve diputadosen el Parlamento Vasco, y a las vctimas que nosresistimos a que todo lo conseguido se tire por laborda, se nos intenta desacreditar y se orquestancampaas mediticas contra nosotros para taparnuestras voces. Voy a animar a Isabel San Sebastina que escriba la segunda parte del libro Los Aosde Plomo, (tributado a las vctimas annimas y ol-vidadas de los aos 70/ 80) y lo titule El Ao de losPlomillazos y lo dedique a los tristes acontecimien-

    tos que estamos viviendo.

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    La Universidad del PasVasco ha decidido matricular demotu propio y obviando porcompleto la actual legislacin vi-gente, a 57 presos de la banda

    terrorista ETA que se hallan re-cluidos en diversas prisiones enFrancia, entre los que se encuen-tran el supuesto ltimo jefe deETA, Mikel Albizu, alias MikelAntza y su compaera sentimen-tal, Soledad Iparraguirre, ms co-nocida como Anboto. A pesarde que tras el ltimo cambio le-gislativo incluido en la Ley Ge-neral Penitenciaria, los presos tan

    slo pueden realizar sus estudiosuniversitarios en la Universidada Distancia (UNED), con el fin deimpedir que se repitan las fla-grantes irregularidades que se es-taban produciendo con losmiembros de la banda terrorista,la UPV ha decidido matricular alos citados miembros de la ban-da asesina ETA en la universidad,

    colocndose de nuevo del lado delos verdugos e insultando de estaforma la memoria de las vctimasdel terrorismo.

    Esta no es la primera oca-sin en que los mximos dirigen-tes de la Universidad Pblica Vas-ca demuestran un desaforado ysospechoso inters por integrar

    en dicha institucin acadmica alos detenidos por formar parte dela banda terrorista ETA. Probable-mente, si el equipo rectoral de la

    UPV pusiese el mismo empeo enlograr el acceso a la formacinsuperior de todos los colectivossociales, la tasa de universitariosalcanzara el 100% de la pobla-

    cin. Hace varios meses, dicha ins-titucin fue objeto de un contro-vertido debate, tras publicar di-versos medios de comunicacinlos excelentes expedientes de al-gunos de los miembros de ETA,repletos de sobresalientes. Poste-riormente se descubri que dichosalumnos pagaban por matricu-larse una cantidad mucho menorque el resto de los estudiantes,

    obtenan de forma gratuita todoel material didctico (libros, etc..),y no realizaban examen algunopara obtener dichas calificacio-nes, llegndose a detectar algu-nos casos tan vergonzosos comoel de Beln Gonzlez Pealva, Ele-na Beloki, etc. quienes obtuvie-ron impresionantes calificacionesacadmicas al alcance tan slo de

    los estudiantes ms brillantes,mientras se encontraban huidosen situacin de bsqueda y cap-tura por parte de las Fuerzas yCuerpos de Seguridad del Estado.

    Otra de las situaciones queindign a la opinin pblica, fuela obtencin de la condicin deprofesor titular por parte de

    Joseba Mikel Garmendia, tras serdetenido acusado de formar par-te del entramado financiero deETA. Ante semejante escndalo, el

    actualidadUPV: UNIVERSIDAD DE LOS PRESOS VASCOS

    La Universidad del Pas Vasco regresa por sus fueros. Tras la polmica suscitada con losbrillantes expedientes acadmicos de los miembros de ETA, la UPV ha decidido matri-cular a 57 presos de la banda terrorista recluidos en Francia.

    FOTOGRAFAS DE LOSPRESOS DE ETA DECORAN

    LOS PASILLOS DE LA UPV

    Unai Urruela

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    Gobierno decidi modif icar la Ley General Peniten-ciaria, en virtud de la cual los presos tan slo po-dan realizar sus estudios en la UNED, institucin

    que cuenta con los mecanismos necesarios para evi-tar que se produzcan semejantes irregularidades.

    Sin embargo, el actual rector de la UPV, de-sea fervientemente que los terroristas vuelvan a ma-tricularse en la universidad que dirige, por lo que noha dudado en solicitar a Iaki Goiricelaya, actualvicerrector de ordenacin acadmica, que realicetodas las gestiones oportunas para llevar a buen puer-to tal f in. De esta forma, el hermano de la parlamen-

    taria de Batasuna Jone Goiricelaya, se reuni hacepocas fechas con cada uno de los centros docentesde la universidad vasca en los que estn matricula-dos de facto los presos etarras, con el fin de infor-

    marles que, pese a la polmica y al anuncio del Go-bierno del recurso de dichas matrculas, los profeso-res deben seguir actuando con ellos como con cual-quier otro alumno, ya que la Junta de Gobierno dela UPV haba acordado que los presos que estuvie-ran recluidos en crceles francesas pudieran estu-

    diar en la Universidad del Pas Vasco. Es decir, que apesar de las irregularidades detectadas hasta el mo-mento, la UPV contina decidida a matricular a losasesinos de ETA, aunque, como se ha demostrado,dicha institucin no cuenta con los mecanismos ne-cesarios para controlar que no se produzcan dichasirregularidades.

    La actitud de la UPV resulta absolutamentecensurable mxime siendo consciente de las graves

    irregularidades llevadas a cabo en dicha institucinen el pasado en relacin con los presos de la bandaterrorista ETA, as como de las investigaciones rea-lizadas por la fiscala en relacin con el particular.El argumento del rector y de su equipo de Gobier-no en este punto resulta falaz, puesto que el dere-cho a la educacin de los presos etarras se garanti-za de manera plena a travs de la UNED, institu-cin que por otro lado permite asegurar una abso-luta limpieza de todo el proceso. Por el contrario,las evidencias demuestran que la UPV no se en-cuentra capacitada para impartir la enseanza adistancia, y que resulta ms que presumible que depermitirse la vuelta de los presos de ETA a la UPVlos tratos de favor en forma de obtencin ilegtimade ttulos acadmicos y de concesin indebida deayudas al estudio se sigan produciendo en el futu-ro.

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    Sorprendido me qued cuando, cubrien-do una rueda de prensa en el palacete habilitadopara el Alto Comisionado para las Vctimas delTerrorismo y tras una espera de media hora, o asus escuderos decir, entre asustados y triunfales:Que viene el Rector!, Ya baja el Rector!.

    Baj el nclito Rector con andar titu-beante. Camina encorvado por el peso de loslustros que apoya con dificultad en un bastn yadesgastado por el uso. Su mirada, incrementadapor unas gafas de cristal blin-dado y vieja pasta, inspiradas enel revival de la serie Cunta-me, semeja ya la del fiero mas-tn, que antes defenda a lasovejas, pero ahora se dedica apincharlas y darles mordiscos

    por diversin y malicia. La den-tadura, harta ya de exquisitosbocados, encuentra ahora sumejor acomodo en la mesilla,por las noches.

    Toma!, me dije yo alor aquello de Rector y obser-var de cerca el personaje, degolpe y porrazo he vuelto a mistiempos universitarios. Corrien-

    do busqu un espejo, para ver si de repente mehaba vuelto a crecer el pelo y anduve unos mi-nutos buscando una cafetera donde jugar un mus,pero, oye, que ni una ni otra.

    El caso es que mi desorientacin me hizoponerme a pensar en los cometidos que a D.Gregorio han sido encomendados por elexcelentsimo Seor Presidente del Gobierno, y siest todava en edad de cumplirlos.

    Alto Comisionado Para las Vctimas del Te-

    rrorismo. Suena genial, eh!Es de suponer, que un hombre que ocupaese puesto se tiene que encargar de recoger lasdemandas de las vctimas y hacerlas cumplir con

    mano de hierro. Ni ms ni menos. De todas las vc-timas.

    Adems, debe lograr la unidad entre ellas,en su dolor, y hacerles sentir el calor de las institu-ciones que es en realidad la solidaridad de todoslos espaoles de bien.

    Pero hete aqu los logros de D. Gregorio:Empez el anciano padre de la Constitu-cin su cometido plantando a la AVT cuando exi-ga que no se negociase con la sangre de sus falle-

    cidos. Quiz no le gustase la rei-vindicacin. Por algo sera ya queal final, y a mi humilde modo dever, ETA est ya en el Parlamentovasco en forma de Comunismo,cojones tiene la cosa, con laaquiescencia tcita de un Gobier-

    no sospechosamente inactivo.Minti para dejar por mendaz aJos Alcaraz, presidente de la AVT,y a toda la junta directiva del co-lectivo, al decir que l no habahablado de ser permisivos con losetarras sin delitos de sangre en unhipottico escenario de tregua.Imparable.

    Prosigui mostrndose

    comprensivo con las ayudas con las que Ibarrecheconsuela a los familiares de sus gudaris, encar-celados por el represivo Estado espaol invasor.

    Suma y sigue. Hizo pblicamente culpablesa los que le critican de cualquier cosa que me pue-da suceder a m o a mi familia. (que nooooo, queusted no es la vctima, Sr. Peces-Barbaaaa!).Las ayudas que las Cajas de Ahorros destinaron alas personas que sufrieron el 11-M, esos 11 millo-nes que no han visto todava las vctimas, tambin

    le sirvieron para favorecer a una de las asociacio-nes, la de Pilar Manjn (la prefe) en detrimento dela AVT y la Asociacin de Ayuda al 11-M.

    Un superclase. La ltima, el intento (ms

    opininRECOM ENDACIONES AL RECTOR PECES- BARBA

    Marcos S. Gonzlez

    Es de suponer, unhombre que ocupa ese

    puesto se tiene queencargar de

    recoger las demandasde las vctimas y

    hacerlas cumplir conmano de hierro.Ni ms ni menos.

    De todas las vctimas.

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    bien burdo) de dividir esa molesta asociacin, querepresenta a la gran mayora de las vctimas y hapedido su dimisin, con una visita a la AudienciaNacional.

    En fin seor Alto Comisionado, perdn, se-or Rector. Que desde su nombramiento el balance

    no ha podido ser ms positivo. Ha dividido a lasasociaciones. Ha logrado que AVT, Foro Ermua, ForoEl Salvador, Profesores Para la Libertad, BastaYa!pidan su dimisin y se ha granjeado ustedslo la animadversin de la mayora de las vcti-mas. En su haber, cuenta el iluminado Rector conhaber recibido a la Delegacin de Indonesia paraexplicar las medidas que toma el Gobierno en ma-teria antiterrorista y de apoyo a las vctimas e im-pulsar algn acuerdo en materia de educacin para

    vctimas del 11-M.Pues no parece un balance muy positivo,no. Pero como parece que no escucha bien las pe-ticiones de dimisin -quiz sea la edad- le dedicoestas recomendaciones de cosas ms saludables quepuede hacer un hombre que ha alcanzado ya lasenectud en lugar de pinchar y dividir a las vcti-mas:

    1Horticultura: Las excelencias del huertopueden servirle, Sr. Rector, para sosegar su esprituy encontrar el equilibrio que falta en su espritu.

    Como s que tiene usted una casa grande con jar-dn, porque usted mismo se encarg de comentar-lo en rueda de prensa, no ha de serle difcil dedi-carse a las bondades de pepinos, calabacines y co-liflores.

    2Hacer maquetas: La paciencia y habili-

    dades necesarias para realizarlas ha de incremen-tar su sosiego y comprobar que las piezas encajandonde usted quiere, sino donde tienen que encajar.

    3Pesca: Noble arte este, al que hastaHemingway dedic un libro que sera de aplicacinal caso, el viejo y el mar. Quiz entre peces y olasencuentre un sitio mejor en el que emplear su tiem-po que entre las vctimas del terrorismo, que en sumayora han rechazado su gestin por sectaria yestril.

    4Lectura: Como no dudo que es ya con-tumaz lector, le conmino a que dedique sus horas aesto, en lugar de manchar el buen nombre de es-paoles que, se lo recuerdo, han sufrido en carnepropia la barbarie del terrorismo.

    5Escritura: Como es usted prohombre, deindudable trayectoria profesional, sus memorias hande venderse como churros en libreras y mercadillos.

    Seguro que en esto encuentra satisfaccinde su inflado ego sin tener que ofender a nadie niganarse antipatas.

    A todo esto podra dedicarse el seor Co-misionado (Uy!) quiero decir Rector, en lugar deestar en un sitio en el que apenas un 15 por cientode la gente a la que tiene que proteger y dar cui-dados falta por pedir su dimisin.

    Pero claro, segn ha expresado ya, la exi-gencia de la mayora de las vctimas a que deje us-ted el puesto no le resulta importante, y es parausted una mera desavenencia. Claro, lo impor-tante, lo resume como siempre el refranero caste-

    llano: el que paga manda. Pues le respondo yocon otro: El tiempo siempre pone las cosas en susitio.

    Ha logrado que AVT,Foro Ermua, Foro El Salvador,

    Profesores Para laLibertad, Basta Ya!

    pidan su dimisin

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    GRACIAS SR. ZAPATEROGRACIAS SR. ZAPATERO

    Estimado Sr. Zapatero:

    No quiero dejar pasar la oportunidad deagradecerle pblicamente la labor que ha reali-zado en las ltimas fechas, para que la paz y lalibertad vuelvan a Euskadi tras tantos aos de do-lor. Usted decidi, a pesar de los informes que leenviaron tanto la Guardia Civil como los serviciosde inteligencia en los que quedaba patente la co-

    nexin entre Batasuna y el Partido Comunista delas Tierras Vascas, que los asesinos de ETA se pre-sentasen de nuevo a las elecciones autonmicasvascas bajo el pretexto, y como argument de for-ma contundente su Ministro de Justicia, Juan Fer-nando Lpez Aguilar, de que no se puede dejar sinvoz a 150.000 personas. Por lo tanto, todos aque-llos vascos que festejaban con alborozo cada aten-tado, aquellos que brindaban con champn mien-tras se celebraban los funerales, quienes pidieroncaviar mientras toda Espaa sollozaba por el asesi-

    nato de Miguel ngel Blanco, los cientos de perso-nas que ayudaban pasando informacin y marcan-do objetivos con el fin de que los asesinos cum-plieran con su objetivo de atentar, han podido vo-tar libremente a un partido que est dirigido por

    una banda terrorista que ha asesinado a 812 per-sonas y herido a miles de ellas.

    Quienes lamentablemente no hemos podi-do ejercer libremente nuestro derecho al voto he-mos sido quienes da a da luchamos por la paz ypor la libertad. Y para que entienda a qu me refie-ro, le voy a dar un par de ejemplos que muestranbien a las claras la situacin de normalidad quese vive en Euskadi. A primera hora de la maana

    del domingo de elecciones acompa a mi novia aun colegio electoral de un conocido barriodonostiarra. Cuando llegamos al instituto habilita-do a tal efecto, nos encontramos con la desagra-dable sorpresa de que tan slo haba una cabina endonde los ciudadanos podan coger su papeleta sinque nadie pudiese observar cual era su opcin elec-toral. Como resulta lgico, la cola de personas queesperaban pacientemente para poder coger su votoen la intimidad era enorme, por lo que muchos ciu-dadanos optaron por hacerlo en la mesa que se

    encontraba al aire libre. Dicha mesa se hallaba cus-todiada por dos miembros de Partido Comunistade las Tierras Vacas-Batasuna-ETA, quienes con sumirada chulesca y sus gestos altaneros orienta-ban claramente cual era la papeleta por la que se

    UNAI URRUELA MORA

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    deba de optar. Tras contem-plar la libertad con la que sevota en San Sebastin, me des-plac a mi pueblo en Vizcayapara poder ejercer mi derechoal voto. Como soy de los que

    pienso que la democracia con-siste en poder expresar misideas en pblico sin temor a re-presalias, no tuve ningn re-paro en coger, ante la atentamirada del interventor delPartido Comunista de las Tie-rras Vacas-Batasuna-ETA mipapeleta, a lo que ste respon-di de manera chulesca y al-tanera espetndome a ti qucojones te pasa?. Evidente-mente, la voluntad delproetarra con dicha afirmacinera la de amedrentarme, comoseguramente haba hecho a lo

    del Estado, usted ha vuelto a dar aire a los terroris-tas y a sus cmplices.

    Por desgracia Sr. Zapatero, usted es el ni-co responsable de que el miedo, el chantaje y laextorsin retornen al Pas Vasco. Lamentablemen-te, gracias a su poltica de buen talante vienentiempos oscuros para todos los espaoles. Espero ydeseo que haya medido correctamente el paso queha dado, y que no tengamos que llorar ms muer-tes ante el reforzamiento y el soplo de aire frescoque ha supuesto para los asesinos su presencia enlas elecciones vascas y por ende en el Parlamentode Vitoria.

    largo de todo el da con numerosos ciudadanos. Noobstante, y lejos de quedar intimidado por seme-jante afirmacin, decid responderle evidenciandomi derecho democrtico a ejercer libremente elvoto. Mi respuesta origin una discusin entre

    ambos que finaliz cuando el Presidente de la Mesanos pidi calma a los dos. Increble pero cierto, anteuna descalificacin por parte de un interventorhacia un votante, ante una coaccin de este tipo,el Presidente tan slo se atrevi a solicitarnos cal-ma, y a pedirnos tranquilidad a ambos. Y es que lasociedad vasca est enferma. Enferma de miedo,como consecuencia del terror al que nos hemos vis-to sometidos desde hace muchos aos. Por ello re-sulta necesario que el Gobierno articule todas las

    medidas que sean necesarias para garantizar la li-bertad, en el nico territorio de Europa en el quetoda la oposicin t iene que ir protegida por un ser-vicio de guardaespaldas. Y esto, Sr. Zapatero, es pre-cisamente lo contrario de lo que usted ha realiza-do.

    Cuando por fin todos los espaoles pens-bamos que por primera vez ETA no iba a estar pre-sente en el Parlamento Vasco, usted ha permitidoque el miedo y el terror vuelvan a esta tierra. Cuando

    la banda terrorista se encontraba en el peor mo-mento de su historia, cuando los asesinos llevanms de un ao sin cometer atentados merced algran trabajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad

    Quienes lamentablementeno hemos podido ejercer

    libremente nuestroderecho al voto hemossido quienes da a da

    luchamos por lapaz y por la libertad.

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    Tuve la gransuerte de ser invitadapor la Universidad SanPablo CEU, una de lasorganizadoras de este

    evento, al Congreso In-ternacional de Vctimasdel Terrorismo en Co-lombia. Form parte dela Mesa Redonda queexplic al resto delmundo la situacincreada por el terrorismoen Espaa. En mi parti-

    llevaban extendiendo desde la dcada de los se-senta hasta nuestros das en nuestro Pas.

    Expliqu cmo contra esos miedos y paramantener viva la memoria de las vctimas, en de-

    fensa de las libertades y del Estado de Derecho,fueron surgiendo distintos Movimientos Socialesque trataban de representar la voz de la ciudada-na y me centr. en el mbito universitario y msconcretamente en la Universidad Pblica Vascadonde tambin potenciamos un tipo de respues-ta a la barbarie terrorista. Nosotros apostbamospor el respeto a la vida y a la dignidad, dignidadque la banda asesina ETA nos haba quebrantadodurante dcadas. No queramos seguir expresan-do con susurros nuestros problemas de concien-cia como docentes; no podamos permitir quenadie nos desplazara de nuestros puestos de tra-bajo y de nuestra tierra. Muy por encima, les hiceun poco de historia y les cont algunas pequeasnotas de nuestro intenso recorrido en la luchacontra ETA.

    Les expuse cmo la Universidad PblicaVasca era una de las instituciones que la organi-zacin terrorista ETA haba querido controlar para

    su beneficio. Primero, y a travs de sectores na-cionalistas, emple el claustro para impulsar unaserie de medidas que beneficiasen a determina-dos colectivos de la banda asesina como eran suspresos. Adems, y lo mismo que en otras institu-ciones pblicas vascas, la UPV les sirvi como ya-cimiento de empleo. Era una estrategia que, des-de mi punto de vista, haba diseado muypensadamente la organizacin terrorista para quesus reclusos aguantaran en las crceles y no les

    crearan problemas. A su vez, las organizacionesjuveniles del entorno terrorista fueron tomandopuestos de representatividad en diferentes luga-res estratgicos de la institucin universitaria, ello

    El Congreso Internacional de Vctimas del Terrorismo en Colombia.Testimonio desde el Pas Vasco.

    Gotzone Mora

    testimonio

    cipacin, trat de exponer la situacin tan proble-mtica que vivimos en el Pas Vasco, una parte de

    nuestra nacin donde, a consecuencia de la bandaterrorista ETA, periodistas, jueces, profesores uni-versitarios, polticos, y miembros de las Fuerzas deSeguridad del Estado nos encontramos amenaza-dos de muerte por el simple hecho de oponernospblicamente en nuestra vida cotidiana a lapervivencia de la banda asesina y de quienes les danoxgeno.

    Mis reflexiones se iniciaron a partir de un

    hecho histrico. Al finalizar la 2 Guerra Mundial yante una Europa totalmente destrozada, AlbertCamus, escribi una sentencia que se ha quedadocorta en el tiempo. Nos deca en la misma el sigloXX es el siglo del miedo. Hoy, adentrados en el si-guiente siglo y con terrorismos que amenazan eirrumpen en nuestras vidas el siglo XXI sigue sien-do otro siglo del miedo.

    Miedo a perder la vida, la dignidad; miedo a

    expresar opiniones, adhesiones e incluso afectos;miedo a la corrupcin moral; miedo a riesgos queno se controlan y que los porteadores del equipajedel miedo como son los terroristas y su entorno,

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    M AN IFESTACIN C ON TRA ELPLAN IBA RRETXE 13 -12 -2 0 0 3

    les fue permitiendo estar presentes con su voto en la toma de decisio-nes, a la vez que contar con una infraestructura en la propia Universi-dad desde la que se encargaban de forzar la voluntad de aquellos a losque nos consideraban los enemigos del pueblo vasco. Con todo elloETA se hizo presente en nuestra Universidad y comenzaron las presio-nes.

    Les cont que en diciembre del ao 2000 la banda asesina nosdej una bomba en el ascensor de nuestra Facultad; en mayo de 2001coloc otra bomba-lapa adosada a los bajos de un coche en el aparca-miento del mismo centro, artefactos que felizmente no explosionaron(bombas que si hubiesen explotado hubieran ocasionado una masacrede gran magnitud y que psicolgicamente haban tenido graves con-secuencias). Y continu mostrndoles, mediante un conjunto dediapositivas, los hechos que venimos soportando en los ltimos 15 aosdonde se han venido desarrollando continuos actos vandlicos.

    Narr cmo en nuestra Universidad, un grupo de profesoressomos objetivos de ETA y objeto de la violencia de persecucin ejercidapor todo su entorno. Ello haba provocado que muchos de mis compa-

    eros hubiesen optado por de-jar temporal o indefinidamen-

    te la Universidad, buscandootros espacios donde les fueraposible vivir y trabajar sin per-der la dignidad, la libertad o lavida. Precis que quienes noshabamos quedado all, sufra-mos la indiferencia cuando noel desprecio y la presin, vivien-do tambin permanentementecon la amenaza de muerte pen-

    diendo en nuestras espaldas. Elacoso, llevado a cabo funda-mentalmente por alumnos yalumnas del entorno radical.,los seguimientos continuoscuando nos trasladamos por elCampus, los sealamientos yabucheos al entrar en clase omientras permanecemos den-tro, se haban convertido la-

    mentablemente en actos coti-dianos en nuestra Universidad.

    Les trat de explicar que

    Presentacin

    PlataformaProfesores por la Libertad

    Foto Santo Cirilo

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    en este ambiente, la normalidad acadmica ape-nas existe, que la Universidad Pblica Vasca no cons-titua ese marco de libertad que todas y todos de-searamos. Que una mezcla de miedo y de temor sehaba adueado de los comportamientos y actua-ciones de muchos sectores de la comunidad uni-

    versitaria que se vean, sin duda, mediatizados ensus conductas por las amenazas, en unos casos di-rectas y en otros veladas, que continuamente lle-vaba a cabo el mundo de la banda terrorista ETA ysu entorno.

    Y tambin pas a describirles cmo en esecontexto de falta de libertades, es cuando haceaproximadamente cuatro aos un grupo de profe-sores de la Universidad del Pas Vasco presentamos

    la Plataforma Profesores por la Libertad, una ini-ciativa que trataba de constituir la respuesta al cli-ma de tensionamiento que se viva la UniversidadPblica Vasca. Desde dicho Movimiento Cvico con-siderbamos que slo se terminara con ETA cuan-do nos quitsemos el miedo y los complejos, cuan-do logrramos que ese entorno que constituye suoxgeno ideolgico desapareciera, cuando con nues-tra voz y nuestra presencia ocupramos los espa-cios pblicos. A ello, les coment, se oponansistemticamente los partidos que gobernaban enel Pas Vasco y los que les apoyan, quienes no pare-ca o no queran entender que ETA no es simple-mente el asesino que aprieta el gatillo o coloca el

    do atnitos, nadie poda pensar que en un peque-o lugar de la vieja Europa podan pasar los cosasque les estaba mostrando en diapositivas y les des-criba con mis palabras. Muchos representantes dedistintos pases me vinieron a mostrar su solidari-dad. Muchos me siguen escribiendo e invitndome

    a visitar sus naciones. Muchos me solicitan que locuente porque es la nica manera de que la gentetome conciencia y no se vuelva a vivir otra pocacomo la de la Alemania nazi.

    Finalic mi exposicin recordando las pala-bras de Charles Pguy cuando deca que las con-ciencias acostumbradas son peores que las malasconciencias. Les dije que queramos seguir afirman-do nuestros derechos como ciudadanos libres. Quebamos a seguir peleando en esta batalla incruentade la pedagoga de la libertad. Que queramos le-vantar nuestras voces en favor de la libertad y dela democracia en Espaa.

    Hoy martes, da 19 de abril y despus de loocurrido en las elecciones del pasado domingo enel Pas Vasco, creo ms que nunca en la necesidadde nuestra implicacin para terminar con la barba-rie de una banda terrorista como ETA. Pero no conconcesiones, como ahora pretenden hacer algunos,sino utilizando todos los instrumentos que nos pro-

    porciona el Estado de Derecho. Este es mi empeoy compromiso con las vctimas del terrorismo y es-pero que entre todos los ciudadanos de bien poda-mos conseguirlo.

    coche bomba, sino todo un entramadoprofundamente arraigado en la estruc-tura poltica, social, meditica, econ-mica y educativa del Pas Vasco, desti-nado a crear un caldo de cultivo para ladifusin de las ideas que legitiman elterrorismo.

    Desde nuestra Plataforma Pro-fesores por la Libertad se haba dadoun paso hacia delante denunciando irre-gularidades y privilegios con la bandaterrorista ETA. Esto lo tenamos muy cla-ro, fundamentalmente porque nos ha-bamos hecho conscientes de lo que hoyestbamos sufriendo era consecuenciade muchas dcadas de tibieza, indife-

    rencia ante el fenmeno etarra y su en-torno.

    Las asistentes se haban queda-

    Delegacin espaola asistente al Congreso de Colombia

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    Isaas, 56, 5.

    Hay en nuestra culturauna tendencia fatal a olvidar eldolor ajeno. Cerramos los ojos

    ante los que sufren y viven tris-tes; enterramos dos veces a losmuertos: les damos un sitio enla tierra y se lo quitamos denuestro recuerdo. Este es el pri-mer paso que nos lleva al abis-mo; as las vctimas pueden serhumilladas, ultrajadas, heridasen cuanto tales vctimasy heaqu la gran culpa colectiva denuestro tiempo. Todos somosculpables de un crimen de esamemoria. Algunos pocos, sinembargo, luchan a la vez con-tra la injusticia y contra laamnesia. Las vct imas los heri-dos del alma y del cuerpo, lossecuestrados, los muertos- se re-sisten a dejarse enterrar otravez.

    Y ah los tenemos, po-

    quitos en un pas de cuarentamillones de habitantes, aparta-dos por todos; alumbrandocomo un fueguito en la noche yla tiniebla. Agrupados en aso-ciaciones, en plataformas,exiliados, hurfanos de nombrey de justicia, sin lugar entre to-dos nosotros, dndose el calorque a veces les negamos y lu-

    chando por la dignidad. Porqueeso s que les sobra: dignidad,como para hacer transfusin ydonaciones, mire usted.

    En esa lucha hay un armaque est casi olvidada, casi oxi-dada la tenemos de poco usarla:el delito del artculo 578 del C-digo Penal. Este delito castiga, a

    quienes exaltan o justifican porcualquier medio de expresin p-blica o difusin los delitos de te-rrorismo (arts. 571-577 del mis-mo Cdigo) o a quienes han par-ticipado en su ejecucin, as comoa quien desacredite, menosprecieo humille a las vctimas de esosdelitos o a sus familiares. El tipopenal parece claro en la teora,pero en la prctica no lo es tan-to, as que no se confen.

    En efecto, la libertad deexpresin y de creacin se tomanen ocasiones como pretexto parahacer exactamente lo contrariode lo que dice el Cdigo Penal, yse hace necesario entonces de-mostrar que el delito menciona-do es precisamente un lmite a esalibertad, y que no hay derechos

    absolutos. Sin embargo, es difcildemostrar que ha habido unaexaltacin o justificacin de losdelitos mencionados o un descr-dito, menosprecio o humillacinde las vctimas o sus familiares.La ambigedad de las manifesta-ciones y las interpretaciones quepueden hacerse de lo que unapersona dice o hace son barreras

    para hacer efectivo ese derechoque tienen las vctimas a la dig-nidad y a la memoria. Por eso, aveces, quien hace que las vcti-

    por ellosUN LUGAR Y UN NOM BRE:

    EL DELITO DE HUM ILLACIN A LAS VCTIM ASRicardo Ruiz de la Serna

    [email protected]

    mas se sientan humilladas y ofen-didas queda pese a eso sin casti-go. Por eso, hay grupos musica-les que cantan lo que quieren,

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    Por ellos. Por ellos siemprecomo principio y final, se unen encrculo las palabras de este art-culo tratando de dibujar en el aireun homenaje sentido que brotedesde el alma solidaria. Porque conel alma solidaria permanecemospor todos aquellos a los que la cri-minal violencia terrorista arreba-t o hiri su vida. Porque su vidacontina perenne cuando logra-mos grabar en letras de oro y deforma perpetua el inmenso amorde su recuerdo. Porque su recuer-do habita en nuestros corazones

    sintiendo que sus miradas y sussonrisas robadas sern por siem-pre eternas. Porque siempre eter-nas deberan extenderse las ma-nos con las que ofrecer un abrazode apoyo a sus familias tratandode explicarles que su sangre esnuestra sangre derramada. Porqueesa sangre derramada ha sido untributo tan elevado a la causa de

    la libertad, que nada ni nadie pue-de paliar el sentimiento de vacointerior que nos inunda por la tris-teza de su ausencia. Porque la tris-

    polticos que dicen lo que se lesantoja, y seores que publicancuanto les viene en gana a cos-ta del dolor de los sufrientes.

    Pues yo iba a escribir hoysobre el delito del artculo 578 de

    Cdigo Penal y sus problemas deaplicacin, pero la verdad es queno puedo. Cmo explicarles a losque confiaron en la Ley y el Dere-cho para conseguir justicia queste es tan pobre? Cmo mostrar-sin parecer cmplice de la des-memoria y la desvergenza- quelas vctimas luchan con una mano

    teza de su ausencia debera des-pertar y mantener el dolor ennuestra a veces aletargada hipo-cresa de sociedad no slo duran-te el limitado tiempo inicial en elque golpea nuestra conciencia.Porque nuestra conciencia lucha-r por evitar que los gritos del si-lencio se difuminen sin haber lo-grado para ellos la verdadera jus-ticia. Porque la verdadera justiciaes el fin hacia el que navega la pazde las personas a las que el maldi-to destino puso triste fecha departida. Porque la triste fecha de

    partida debe ser imborrable msan mientras los asesinos y suscmplices no paguen en su totali-dad la culpa. Porque la culpa, tan-to de los que la cometen como delos cobardes que los apoyan serel compromiso que les acompaeen nuestro desprecio hacia el con-junto de esos miserables. Porqueel conjunto de esos miserables no

    impedirn que sepamos levantarsin miedo nuestras voces con lasque reivindicar la dignidad de losque ya consideramos como nues-

    atada a la espalda? No hay indem-nizacin, ni pena de prisin ni de-cisin humana que pueda paliar eldolor de las vctimas; no hay Juezque pueda llenar el vaco de la vidaarrebatada, de la salud perdida, de

    la libertad robada por los terroris-tas. Yo no puedo decirles queno hay esperanza porque la lu-cha de las vctimas es la pruebaviva de que s la hay, ni puedotratar de justificar con argumen-tos de tcnica jurdica una si-tuacin que por su injusticiamanifiesta clama al cielo y es una

    mancha en nuestra democracia ynuestra civilizacin.

    Las vctimas ponen sobrenosotros la obligacin de que sudolor no sea en vano. Su hambrey su sed de Justicia no pueden ser

    un motivo de desaliento, sino unavoz de nimo. Por eso, porque ellasno ceden en su empeo de no de-jarse matar dos veces, seguiremosluchando por la memoria, por ladignidad y por la justicia: para queen el mundo de nuestros hijos-ellas tengan entre todos nosotrosun lugar y un nombre.

    POR ELLOS

    David Garca Garca

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    tros. Porque los que ya consideramos como nues-tros merecen que transmitamos sin fin el carioque atene la fra soledad que no hemos sabidopaliar con las familias de las vctimas. Porque conlas familias de las vctimas tenemos absolutamen-te todos una deuda pendiente en nombre de

    lanuestra libre y preciada constitucin y la demo-cracia. Porque nuestra libre y preciada democraciacon los aos ha corregido slo parcialmente losabandonoserrores del pasado reconociendo comose debe su impagable sacrificio. Porque suimpagable sacrificio de sueos rotos nunca serborrado de cada nuevo amanecer con su presenciasentida. Porque su presencia sentida es el vuelohacia el horizonte de los que a nuestro lado son losque siempre viven. Porque los que siempre viven

    consiguen ser nuestro aliento de un maanasin sentimientos vacos y en el que el tiempo jamssea el olvido. Porque el tiempo jams sea el olvido;por memoria, dignidad y justicia, todos juntos de-bemos mantenernos unidos siempre por ellos.Por ellos.

    Porque nuestra conciencia luchar por evitar que losgritos del silencio se difuminen sin haber logrado para ellos

    la VERDADERA JUSTICIA

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    tribunales

    La mayora de las personas que comien-zan un proceso se preguntan qu es un Procura-dor, voy a intentar clarificarlo, ya que podramosdecir que es una profesin desconocida y queen ocasiones crea multitud de confusiones.

    Nombre y apellido identifican a una per-sona. El nombre de Procurador, al tener como

    apellido de los Tribunales, complementa auna figura jurdica del derecho que va unidade una manera ntima al desarrollo y vivir dia-rio no solo del proceso judicial, sino del dere-cho mismo.

    La primera referencia la tenemos en elDerecho Romano en un texto de Cicern, al re-ferirse al Cognitor: Il qui legitimae procuratordicitur omnium rerum eius qui in Italia non sitabsitve republicae causa , quasi quisdam paene

    dominus , hoc est alieni iuris (aquel que esnombrado legt imamente para todas las cosas deaquel, que por causa de la Repblica , no se en-contraba en Roma). El Cognitor sigue en su evo-lucin hasta la de Procurator, que en su espe-cializacin ad litem y por ende como represen-tante procesal de una de las partes en el proce-so, se consolida como tal hasta llegar al derechovisigodo.

    Es en el derecho visigodo, donde, frente

    a la gratuidad de la actuacin profesional delProcurator, surgir la del Personero(denomina-cin del Fuero Juzgo), Prosecutor mandatariusdel juicio, donde comienza a recibir una retri-bucin como contraprestacin al trabajo reali-zado.

    Ser un encargo, el que recibe elPersonero, remunerado, pero antes de poner enpractica ese encargo existir la obligacin deponerse de acuerdo sobre el quantum que va a

    recibir el mismo. Dato ya relevante, porquepor primera vez, nos encontramos con unaremuneracin. Esta remuneracin, tiene la sin-

    gularidad de ser pactada, marcada, limitada,aventurndonos a decir que es el comienzo delArancel. Concepto y trmino que ya ir ligado alProcurador hasta llegar a nuestros das, comofrmula de percepcin de sus honorarios.

    El Procurador de los Tribunales, nace, paradefender los intereses del justiciable, pero a di-

    ferencia del abogado que les defiende dentro yfuera de los Tribunales. El Procurador al hacerloespecficamente ante ellos, terminar siendoun colaborador de la Justicia, atribuyendo, en de-finitiva la funcin de apoderamiento a los Pro-curadores y la de auxilio a los Abogados.

    La complejidad de los asuntos litigiosos yel carcter tcnico del proceso, hacen que losactos procesales sigan reafirmando con el pasardel tiempo, la necesidad de la postulacin a tra-

    vs del Procurador de los Tribunales , y la defen-sa asistencia por el letrado.

    En los procesos actuales, el Procuradorde los Tribunales, tiene la obligacin de contro-lar, seguir y vigilar el proceso judicial, tiene laresponsabilidad de seguir todos los tramites delprocedimiento (firmando todas las comunicacio-nes judiciales que se vayan produciendo), asis-tiendo, asimismo, a todas las diligencias y actosque se produzcan en el proceso. Tiene la obliga-

    cin de pagar todos los gastos que genere elproceso, y por ltimo la obligacin de colaborarprofesionalmente con los rganos jurisdiccio-nales de la administracin de justicia.

    Espero que todo lo expuesto, sirva paraasentar ms, si cabe, en la figura actual del Pro-curador de los Tribunales que conjuntamente conel Huissier y Avou franceses, el Procuratore ita-liano, el Sollicitor ingles, y el Solicitador portu-gus que en su caminar diario sigan siendo

    ayudadores de la justicia y armadura para loslitigantes en la defensa de sus intereses proce-sales.

    EL PROCURADOR DE LOS TRIBUNALES

    Pedro Vila

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    amenazados

    Ni violencia, ni chantaje, ni perse-cucin: libertad, para que mis hijos puedandisfrutarla en su sentido pleno. Son palabrasde Javier, concejal del Partido Popular en unpueblo del Pas Vasco que est expuesto cadada a una de las enfermedades que, pese a es-tar prcticamente erradicada de la Europa de-

    sarrollada, en este lugar ataca con cruel viru-lencia gracias al fanatismo de ETA y su entor-no: el tiro en la nuca o el coche bomba.

    En la era de las libertades hay quien tie-ne su vida diaria secuestrada. Llevar escolta esuna aventura diaria, un drama. Supone per-der tu intimidad y la de quienes te rodean, so-bretodo en aquellas acciones cotidianas comoir a trabajar, a la tienda de la esquina a com-

    prar el pan o a la Universidad a estudiar, ex-plica.

    Escuchando a Javier el ciudadano dea pie puede elaborar un pequeo esbozodel coste personal que conlleva ser en Eus-kadi concejal y no ser nacionalista. A pri-mera hora de la maana los escoltas yanos esperan en mi portal. Bajo primero auno de mis dos hijos y despus vuelvo a

    por el otro. A continuacin, y siempre acom-paado de la escolta, me marcho a laUniversidad. Su da a da parece el de unapersona obligada a vivir en la clandestini-dad, como en otros tiempos.

    Militar en una opcin poltica situadaa las antpodas de la forma estril de estrujar-se las neuronas del entorno terrorista es el co-mienzo de una vida llena de peligros y proble-

    mas. Desde la toma de posesin de mi cargo,en 2003, comenzaron los insultos y las amena-zas. Pese a esta situacin, Javier decidiarriesgarse porque no poda cerrar los ojos

    ante una sociedad en la que no se dan lasmnimas condiciones democrticas para la rea-lizacin de elecciones libres y la vida en liber-tad. Vivimos una ficcin democrtica, con au-sencia de libertad para una parte de los repre-sentantes pblicos de nuestra sociedad.La ingenuidad hecha pregunta de sus hijos le hizo

    toparse con la cruda realidad. Pap dos hombresnos siguen durante toda el da, quines son?. Ja-vier tuvo que contarles una verdad que, aunque losprimeros da se digiri bien, con el paso del t iempotrajo nervios, ansiedad e incomodidades. Mis hi-

    jos me ven llegar con la tensin del da colgada a laespalda, aunque lo que ms echamos de menos son

    Jose A. Gutirrez Bonilla

    EL DA A DA DE UN ESCOLTADO

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    esos largos paseos en bicicleta o las horas muertasjugando en el parque.

    Si existe un rasgo de su personalidadque sobresalga sobre cualquier otro, se es sucapacidad de amar. Javier trabaja mucho, pero

    ama mucho ms. Por amor a los dems cam-bi su vida, aparcando sus visitas al gimnasio,sus salidas con su mujer a cenar o al cine...;me he visto obligado a cambiar totalmente mivida, los horarios, llevo dos aos sin ir con mimujer a cenar, los fines de semana me quedoen casa por miedo y ya no s qu se siente al ira comprar pan sin la compaa de mis dos escol-tas. Durante su vida ha forjado una fuerte perso-nalidad fundamentada en frreos principios.

    Su familia es una de sus mayores pasionesy el ncleo fundamental donde encuentro la fuentede energa necesaria para seguir adelante. Estoy con-vencido de la fuerza de la libertad y mientras quehaya compaeros en esta situacin o mis hijos nopuedan salir a la calle sin escolta no abandonar.

    En estos tiempos que corren en los que losideales y la poltica aparecen devaluados, el testi-monio de Javier tiene un doble valor. Su experien-cia vital en Euskadi le llev a cambiar su actividadprofesional (polica) por la de poltico. He tenidola oportunidad de vivir el problema desde dos ver-

    tientes diferentes y tengo claro que no es lo mis-mo escoltar que ser escoltado. Ahora admiro mu-cho ms el trabajo de unas personas que en micaso se han convertido en dos familiares ms.

    Su vida es un ejemplo ntido de esfuerzopor expresarse segn sus principios, aunque estosuponga ir contra corriente y supeditar tu vida ano poder dejar nada a la improvisacin. No puedosalir sin mi escolta y todo debe estar perfectamente

    programado y atado previamente. Tremenda pa-radoja la de un amante de la libertad que no pue-de saborearla.

    Pese a todo, Javier se esfuerza por peda-lear cada da defendiendo los derechos de losotros, comprometindose sin lmites con la demo-cracia, viviendo un idilio amoroso con la justicia,promoviendo la paz y sobre todo construyendo sufamilia en el amor. Estamos ante una persona

    creativa que se esfuerza en dejar el mundo algomejor de como lo encontr, comprometida con laintegridad del ser humano e interesada por apren-der continuamente.

    Lo negativo de esta historia es que la faltade libertad para pensar diferente no sea un cuen-to de hadas ni una leyenda del siglo pasado. Enpleno siglo veintiuno, el testimonio de Javier esuna realidad vivida hoy y ahora. Algo tremenda-

    mente sugestivo que debera hacer reflexionar alconjunto de la sociedad.

    Ni violencia,ni chantaje, ni

    persecucin: libertad,para que mishijos puedan

    disfrutarla en susentido pleno.

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    recortes de prensaPOR ELLOS

    El pasado 11 de marzo Espaa vivi unade las jornadas ms tristes de su historia. Se cum-pla el primer aniversario del mayor atentado te-rrorista perpetrado en nuestro pas, e igualmentese conmemoraba el Da Europeo en recuerdo ymemoria de las vctimas del terrorismo. Por estemotivo, la Asociacin de Vctimas del Terrorismorealiz numerosos actos en diversas provincias enhomenaje tanto a las vctimas de los atentadosde Madrid como al resto de los asesinados pordistintas bandas terroristas a lo largo de la histo-ria. El madrileo Parque del Retiro fue el escena-rio escogido por la Junta Directiva de la Asocia-cin para celebrar el acto central. Dicho acto, enel que se congregaron alrededor de 300 perso-nas, y que cont con la presencia de la Presiden-ta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre,

    y del Vicepresidente Segundo, Alfredo Prada, ascomo del Presidente de Ifema y ex alcalde de lacapital, Jos Mara lvarez del Manzano, comen-z con la lectura de un manifiesto por parte deFrancisco Jos Alcaraz, quin visiblemente con-movido y con la voz entrecortada por las emo-ciones vividas a lo largo de la jornada, no duden rememorar los atentados perpetrados en Ma-drid hace un ao como una de las pesadillas mshorribles vividas en Espaa y apost por que la

    nica respuesta frente a los que nos arrebatarona nuestros familiares y amigos sea un homenajeconstante a su memoria, y una lucha sin cuartelen aras a la consecucin de una verdadera justi-cia. Asimismo, el actual presidente de la AVT nodud en sealar que el recuerdo del 11-M debeconstituir como un medio para la unin entrelas vctimas del terrorismo sin fronteras de nin-gn tipo, pues igual de global que es el mal quenos amenaza lo es el status de la vctima que ha

    de ser objeto de proteccin all donde se encuen-tre. De esta forma, Francisco Jos Alcaraz sealque en un da como hoy, nos sentimos espe-

    cialmente cercanos a las vctimas del terrorismode pases como Colombia, Francia, Argentina, In-glaterra, etc., con las que nos unen sentimientosde proximidad y de solidaridad verdadera. Unavez concluida la lectura de este manifiesto, y tras

    guardar un emotivo minuto de silencio, la Aso-ciacin de Vctimas del Terrorismo realiz unaofrenda floral. Los asistentes guardaron largascolas para escribir en el suelo con claveles blan-cos el lema Por ellos. Igualmente, centenaresde ciudadanos aguardaron su turno para poderplasmar en un libro de firmas sus mensajes desolidaridad, afecto y cario hacia las vctimas delterrorismo.

    Asimismo, las distintas delegaciones con

    que la AVT cuenta a lo largo de la geografa na-cional, tambin quisieron celebrar una fecha tansealada. De esta forma, en Asturias, Badajoz,Galicia, Granada, Huelva, Ciudad Real, Salamanca,Sevilla, Tarragona y Logroo se procedi a un actoconmemorativo consistente en lanzar 1204 glo-bos blancos en recuerdo de cada una de las vcti-mas del terrorismo que ha habido en Espaa.Igualmente en Cceres, Alhama, Cartagena y enla Universidad Catlica de Murcia se realiz unamisa en memoria de las vctimas del terrorismo yla Catedral de Valladolid acogi un emotivo con-cierto.

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    reco

    rtesde prensa

    A las doce de la maana del pasado da 11de marzo y ante las puertas del Ayuntamiento dela capital jienense, tuvo lugar el homenaje y actoen conmemoracin del Dia Europeo de lasVictimas del Terrorismo. Al mismo acudieron tan-to el Presidente de la Diputacin Provincial, comoresponsables de la Junta de Andaluca y los edilesy concejales del Ayuntamiento del Santo Rostro

    La junta directiva de la AVT Verde Espe-

    ranza, estuvo presente, mientras se guardaba va-

    Sobre su libro primer libro que escribe-coment que pretenda con el mismo demostrara la gente que se puden superar todos los proble-mas que la vida plantea, Slo hace falta propo-

    nrselo, dijo al respecto.Al trmino del acto, Irene Villa recibi unolivo de palta en nombre del Ayuntamiento deJan, que le fue entregado de las manos de Cris-tina Nestares, y de parte la AVT Verde Esperan-za, un cachorro de Pomerarian, que la hizo es-pecialmente feliz.

    Los asistentes al acto pudieron adquirir ellibro Saber que se puede siendo dedicado porla autora a todo aquel que lo dese.

    LA AVT VERDE ESPERANZA ESTUVO PRESENTE ENEL ACTO MUNICIPAL DEL DA EUROPEO DE LAS

    VCTIMAS DEL TERRORISMO.

    rios minutos de silencio. Acto seguido, el Alcaldede la capital D. Miguel Snchez de Alczar, leyun comunicado ante el numeroso pblico asis-tente que llenaba la Plaza de Santa Mara. Al actoacudieron representantes de todos los grupospolticos de la capital que estuvieron presentesen la ceremonia. Al trmino de la misma se liberuna paloma como smbolo de la paz, conclu-yndose as las actividades programadas para

    ese da.

    El mes de marzo estuvo en Jan Irene Vi-lla, que se haba acercado a la capital para pre-sentar su libro Saber que se puede editado porMR Testimonio. El acto de presentacin se reali-

    z en los salones del Hotel Infanta Cristina de lacapital ante un numeroso pblico asistente, queescuch con inters y atencin las palabras deIrene Villa. La presentacin corri a cargo de Maradel Crmen lvarez, presidenta de la AVTVerdeEsperanza y de Cristina Nestares, Conejala deCultura del Ayuntamiento de Jan. Durante lapresentacin del libro, Mara del Carmen hizo unesbozo de la valenta y entereza vital tanto deIrene Villa como de su madre Mara Jess, quesentada entre el pblico asistente, no pudo con-tener las lgrimas por la emocin.

    Por su parte Irene disert sobre el terro-rismo, dando muestras a todos los presentes desuperacin personal ante las adversidades. Acu-s al Gobierno Vasco de no ayudar a las vctimasque los asesinos provocan y s de ayudar a lospresos etarras. Aunque durante toda la presen-tacin la autora del libro prest especial intersen el hecho de vencer el odio y el rencor parasuperar las adversidadesEl rencor, la ira y el de-

    seo de venganza no son buenos, ni para las vc-timas ni para nadiecoment Irene Villa.

    IRENE VILLA PRESENT SU LIBRO SABER QUE SE PUEDE

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    carta de los lectores15 de Febrero de 2004.

    Estimado seor Peces Barba:

    Con relacin a la ltima reunin que man-tuvo con la AVT: Les pidi que nos transmitiera laposibilidad de hacer ciertas concesiones a los te-rroristas de ETA, y para suavizar los odos nuestrosdgase colaboradores de la organizacin asesina.

    Sabe usted que est negociando con la ban-da de asesinos el Gobierno, a cambio el Gobiernoser muy generoso con los presos (sentenciadospor los jueces por asesinato) y los que estninmersos en sendos procesos judiciales por asesi-nato, a cambio de no s qu.

    Quiero hacerle llegar a usted mi rechazo acualquier tipo de negociacin o pacto con asesi-nos por las razones que le expongo a continua-cin.

    1 Los llamados colaboradores tienen tan-to delito como el que aprieta el gatillo por lo si-guiente: si dichos seores no vigilan a las vctimas,y no informan de las horas de la salida de su domi-cilio, horas de entrada itinerario, domicilio en elque viven etc... el que aprieta el gatillo no lopuede hacer , por lo tanto hay una vctima menosa la que llorar.

    Tambin son asesinos y tienen igual delitoque el ejecutor aquel o aquellos que dan orden yestos suelen ser la direccin y recapacitemos sindireccin no hay orden y sin orden no hay asesi-nato.

    2 Seor Peces Barba estoy a favor del ma-nifiesto de la AVT, porque en su da se dieron dosamnistas, en las cuales salieron todos los presosde ETA, tanto los que tenan las manos manchadas

    de sangre como los que no (sus colaboradores) yqu ha pasado? dnde nos encont ramos ahora?.Fue el asesinato de mi padre como el de otros tan-tos asesinatos despus de esas amnistas para qu

    sirvieron? vamos a caer en el mismo error? Me

    parece que ya somos mayorcitos para andar ju-gando de la forma que juegan con la Memoria delas vctimas y con sus familias.

    3 Mucha gente ha sufrido mucho y en si-lencio en el Pas Vasco o Euskadi como usted quierallamarlo, para que usted y el Gobierno borren deun plumazo la memoria de las vctimas y la digni-dad y el sufrimiento en soledad de las familias que,se ve aumentada en las familias que por desgra-cia, no han podido marcharse del Pas Vasco trasel asesinato de su padre, a muchos de la bandaterrorista, por no tener donde ir a trabajar, ni dondepoder vivir fuera del Pas Vasco, han tenido queestar trabajando al lado de etarras juzgados y en-carcelados, como ha sido mi caso, y es ms estarviendo a los padres y hermanos de los asesinoscon pancartas pidiendo su vuelta a casa, manifes-taciones de todo tipo a favor de los asesinos, losayuntamientos y otros organismos oficiales a fa-vor de ellos, ayudndoles econmicamente y

    acompandolos a la Audiencia Nacional, dndo-les nimos y despreciando a los familiares de lasvctimas presentes en los juicios y preocupndosepor ellos, y mientras: nuestras familias calladas yacalladas, como siempre, desamparadas, escondi-das y repudiadas, como tantas familias de vcti-mas.

    Seor Peces Barba: a mi familia, el Ayun-tamiento, cuando ocurri el atentado de mi padre

    le dio el nicho en propiedad, esa es la orden quedio el alcalde por escrito, la cual conservo, pero alpasar 10 aos concretamente nos lo quitaron ypara hacernos un favor nos los cedieron por 50aos contando a partir del atentado. Seor PecesBarba, Sabe cunto tiempo estuvo mi madre sincobrar pensin de viudedad? Casi un ao sin reci-bir dinero alguno para sustento, sabe qu ayudatuvimos del Gobierno Vasco o instituciones Vas-cas? Ninguna, ni econmicas, ni psicolgicas, ni

    afecto, slo olvido y olvido, hasta hace poco, gra-cias a la AVT que sac adelante procesos contralos asesinos de mi padre y de otros muchos asesi-nados por ETA.

  • 8/6/2019 Voces Contra El Terrorismo 02 - Mayo 2005

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    4 Dnde estaban ustedes, seor Peces Bar-ba y todos los polticos? ya se acordaron de noso-tros? acaso tuvieron dignidad poltica y moral paracon nosotros? Me dir que s, pero yo le digo queno, y le doy mi razonamiento. Ustedes estuvieronausentes hasta que no empezaron a producirse aten-

    tados contra polticos. Acuerdese del asesinato delsenador Seor Casas (crendose una fundacin paraperpetuar su memoria) de Gregorio Ordez (consu fundacin), Miguel ngel Blanco (con su funda-cin), el de Fernando Buesa (con su fundacin), etc,etc, etc. Ahora el 11M, con usted a la cabeza nom-brado a dedo. Seor Peces Barba, a esto se llamallanamente OLVIDO, DESPRECIO A LA DIGNIDAD EINJUSTICIA.

    Por eso quiero seor Peces Barba RECUER-DO, DIGNIDA Y JUSTICIA, para las vctimas del te-rrorismo, solo pido eso, por favor: es tan difcil?

    Rogando tenga a bien negarse a dicho di-logo con los asesinos, ya que es el sentir unnime detodas las vctimas del terrorismo y el mo en pa