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El INSTITUTO DE CIENCIA MARY BAKER EDDY,presenta:

DISOLVIENDO BARRERAS: La Obra Sanadora de la Ciencia Cristianapor John L. Morgan

(traducción libre)

Publicado en Inglés porPublicaciones Elmdon

Elmdon, Saffron Walden, Essex, Inglaterra1989, en Asociación con

La Fundación de la Ciencia Cristiana, Inglaterra

Contenidos:

Introducción

Parte I - La Curación en la Ciencia Cristiana

La Primera Ley

La Segunda Ley

La Tercera Ley

La Cuarta Ley

La Quinta Ley

La Sexta Ley

La Séptima Ley

Resumen

Parte II – Preguntas y Respuestas

Parte III – La Traslación Científica

Parte IV – El Libro de Texto de la Ciencia Cristiana

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Introducción

Este folleto es un reporte editado de una serie de pláticas dadas por JohnL. Morgan en Sudáfrica en el año de 1987. Las pláticas le fueron solicitadaspor Científicos Cristianos interesados en ser más efectivos en su trabajo tantopara ellos mismos como para el mundo. También tenían interés en motivar asus amigos en esta obra sanadora mundial de la Ciencia Cristiana.

La forma que tomaron las pláticas y este folleto, fue:Parte I – La Curación en la Ciencia Cristiana. Esta sección está

enfocada en la razón por la que la curación espiritual es científica y natural, yno tan solo un milagroso acontecimiento ocasional.

Parte II – Preguntas y Respuestas. Básicamente se refiera a lamanera en como la Ciencia Cristiana nos capacita para encarar tales preguntasfundamentales acerca de nuestra aparente separación de Dios. La preguntaálgida actual en Sudáfrica es conocida alrededor del mundo como Apartheid –una separación impuesta por la legislación. Al buscar el punto de vistaespiritual y fundamental sobre estas preguntas, hallamos la verdad queprovoca naturalmente un cambio de actitud. Este cambio inevitable, cuandoestá impulsado por la Verdad, le otorga la razón a la ‘buena esperanza’ para lahumanidad, misma que está expresada en el nombre que los primerospobladores del Cabo le dieron a su ciudad.

Parte III – Traslación Científica. El punto de vista de la CienciaCristiana de comenzar con la perfección, ha sido objeto de burla alconsiderarse irreal. El tal llamado punto de vista real, es aquel en donde tantoel bien como el mal, tienen poder. Esta hipótesis no es ignorada por laCiencia Cristiana, pero no se le toma en cuenta en lo mínimo. Los mediospor lo cuales estos puntos de vista opuestos son resueltos, se conocen en laCiencia Cristiana, como Traslación Científica. La tercera sección de estefolleto está formada por una introducción a este método esencial.

Parte IV - El Libro de Texto de la Ciencia Cristiana. ¿Cómopodría uno aprender más de la Ciencia Cristiana? El libro de texto de laCiencia Cristiana es Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras. Su autor,Mary Baker Eddy, nos dice que el Libro contiene ‘la exposición completa de laChristian Science.’ (Ret.37:2-3) Por lo tanto, un panorama general del flujo de loscapítulos en Ciencia y Salud completa este folleto. Esta última sección puedeser leída al principio por cualquiera que desee comenzar su viaje con un mapadelineado y una vista previa de su destino.

El objetivo de las pláticas fue el de ofrecer una introducción clara y útilde la Ciencia Cristiana; el de ser un estímulo para todos nosotros paraexperimentar el que nuestras vidas están, de hecho, entrelazadas con, y

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gobernadas por, la Vida divina; el de colaborar al descubrimiento de ladisponibilidad inmediata de las leyes de Dios; y el de mostrar que elCristianismo es Ciencia. Es debido a que el Cristianismo es Ciencia, por loque podemos ser eficaces en nuestro trabajo, ‘porque Dios es el que en vosotrosproduce así el querer como el hacer, por su buena voluntad.’ (Fil.2:13) Por consiguiente,esta obra debe tener un efecto sanador tanto en nosotros mismos como en elmundo entero.

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Las pláticas que fueron grabadas en Johannesburgo, fueron ampliadas para incluirseñalamientos importantes hechos en Ciudad del Cabo y en Pretoria. Las siguientespáginas son una fiel transcripción editada de las pláticas, tal como mi esposo las diera.Es mi deseo que este folleto pueda contribuir a disolver las barreras del prejuicio y la falsainterpretación acerca de la Ciencia Cristiana. Dios ha puesto una puerta abierta antenosotros, y la promesa es que ningún hombre puede cerrarla.Elmdon Marjorie F.Essex, Inglaterra, 1989

Parte I - La Curación en la Ciencia CristianaEs un gozo y un privilegio tener esta oportunidad de considerar con

ustedes este tema de la curación porque estamos interesados no sólo ennuestro bienestar, sino porque también sabemos que es vital para lasupervivencia del mundo.

En el momento en que Marjorie (mi esposa) y yo recibimos lainvitación para venir a Sudáfrica, estábamos preparándonos para un seminarioque se titulaba: Cómo podemos ayudar a nuestro mundo Estábamospreguntándonos si nuestro estudio privado de la Ciencia Cristiana, de laBiblia y de las ideas espirituales, era tan sólo para nuestro beneficio, o sidebiéramos darnos cuenta de alguna otra dimensión o propósito. ¿Sería elpropósito el de beneficiarnos ambos, nosotros mismos y el mundo?

Me gustaría comenzar explorando algunos puntos que han surgido ennuestra propia experiencia como Científicos Cristianos en el área de lacuración espiritual. Después podríamos tener preguntas o comentarios acercade la propia Ciencia Cristiana. Luego podría resultar útil considerar la formaen que trabajamos en la Ciencia Cristiana. Finalmente me gustaría ofreceruna exposición del flujo de los capítulos de la Ciencia Cristiana en el Libro deTexto. Este Texto, junto con la Biblia, constituyen nuestros guías.

Justo antes de salir de Inglaterra un amigo nos llamó de América, y enel transcurso de la conversación dijo que había visto una charla por televisióncon alcance nacional, en la cual se había entrevistado a varios médicoseminentes. Todos ellos comentaron que en el curso de su práctica médicahabían visto toda clase de enfermedades incurables, sanadas por medio de la

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oración, en cuyos casos la medicina no había sido eficaz para curar. Dichosmédicos continuaron diciendo que en su pronóstico a futuro, el arte de lacuración estaría basado en la oración. Resulta notable que hombres de esaprofesión salgan y digan eso. Desde luego que todos hemos oído de muchoscasos desahuciados por la profesión médica que de repente comienzan amejorar sin razón aparente. Bien podría ser que la oración los haya ayudado acambiar el rumbo al introducir en su conciencia un factor nuevo de esperanzay expectación, o que el paciente se haya encontrado con la seguridad de quepodía recuperarse, sin importar lo que dijeran los libros de medicina.

La verdadera oración no es una súplica, sino una afirmación de latotalidad de las leyes de Dios, las leyes eternas del ser. La Biblia está llena deafirmaciones de que Dios es una ayuda siempre presente en los problemas.La ley de curación desde la cual Cristo Jesús trabajó, está disponible paranosotros también, ‘porque yo soy Jehová tu sanador.’ (Éx.15:26) El Libro de Textode la Ciencia Cristiana observa que ‘El hecho central presentado por la Biblia es lasuperioridad del poder espiritual sobre el poder físico.’ (131:11-13)

Hay una imagen visual útil que puede ayudar para mostrar la actitud delo que consideraremos juntos. Viene al entrelazar la urdimbre con hilosperpendiculares y horizontales, tejiéndola por fuera y por dentro. Considerenla urdimbre tejida como las leyes divinas del ser, que se encuentran con latrama horizontal de la experiencia humana. La Divinidad y la humanidadcoinciden, están entretejidas. Este es el símbolo de la cruz del Cristianismo;la intersección de las dimensiones perpendicular y horizontal. Todosnosotros, Cristianos o no, hallamos que nuestra experiencia yace en este puntode tratar de traer la vida humana en armonía con los requerimientos divinos.Nuestra experiencia human será armoniosa en la medida en que estemos deacuerdo con estas leyes divinas. Aún cuando pudiéramos creer que tenemosun largo camino que recorrer, las leyes están ahí para bendecirnos a todos.Somos nosotros quienes tenemos que reconocerlas y beneficiarnos de ellas.

La mayoría de la gente sabe instintivamente que no hay solución para elproblema humano en la dimensión horizontal, sin importar cuándiligentemente lo intente. A menos que se incorpore la dimensiónperpendicular de las leyes eternas del ser, no tendremos nada confiable en quéapoyarnos y estaremos tratando de solucionar el problema desde su propiointerior, y de esa manera en verdad que no hay solución permanente alguna.

En el Evangelio de Marcos se cuenta la historia del hombre paralítico aquien sus amigos intentaban traer ante Jesús para que fuera sanado. Ya queno pudieron acercarse al Maestro debido a la presión de la gente, se subieronal techo, lo quitaron y lo bajaron con una cuerda, en medio, delante de Jesús, y

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el hombre fue sanado. Pero aquí el símbolo es el hombre siendo bajado enesta dimensión perpendicular.

Estamos aquí en esta experiencia humana horizontal debido a la graciade Dios; sustentados por esa urdimbre entretejida y no debido a ningúnacontecimiento humano. Estamos entretejidos con la fuente divina deautoridad y poder.

Examinemos entonces algunas de estas leyes fundamentales del ser, lascuales están entretejidas y entrelazadas con las riberas de nuestra experienciade vida; veamos cómo estas leyes están expresadas en la Biblia y registradasahí como sucesos de grandes curaciones históricas, y cómo dichas leyes aúnestán disponibles en lo que llamamos la curación espiritual de nuestro tiempo.

La Primera LeyLa primera ley, o urdimbre tejida, es cuando nuestro pensamiento

parece moverse de lo físico hacia lo mental. En realidad jamás estamostratando con la materia como tal, sino con estados mentales, estados deconciencia. Hace cuarenta años la profesión médica acostumbraba decir quecerca del 20% de las enfermedades humanas eran psicosomáticas, es decir,que eran generadas por un estado emocional o mental, y que a menos que secorrigiera dicho estado, no habría curación permanente. Hoy en día elporcentaje es cercano al 85%. Mirando profundamente dentro de nosotrosmismos, sabemos que nuestros dolores físicos son a menudo la manifestaciónde algún estado mental por el que estamos pasando – estrés, ansiedad,resentimiento, temor.

Cuando la gente consulta algún médico, a menudo se le prescribe unapíldora para aliviar la condición. El paciente cree que hay algún poder en lapíldora que toma, y esta creencia la ayuda para que opere a su favor. Amenudo los doctores hallan que un paciente responde más positivamente anteun placebo que ante un medicamento. El problema es que los medicamentosno sanan al hombre, sólo actúan sobre los síntomas. A menos que seamoscorregidos interiormente, a menos que nuestra actitud, nuestra respuesta antela vida, cambie en cierta medida, no estaremos sanados del todo, aun cuandoestemos agradecidos por lo que los médicos o cirujanos hayan hecho pararestablecer la condición física.

Esta relación de mente y cuerpo, de lo mental y lo físico, es muysemejante a la relación entre las figuras en las matemáticas y los númerosescritos en un papel. Los números en el papel no son símbolos de muchautilidad, mas sabemos perfectamente que lo delineado no es la verdad, no es elpoder. El poder y la disponibilidad están en la idea, en el reino mental, en elprincipio. Así que aunque destruyéramos el papel en el cual se encuentran

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hechas las figuras, no estamos afectando el cálculo en sí mismo. Siempre estádisponible, con poder fresco para ayudarnos a resolver lo que venga. Lomismo ocurre cuando nos volvemos a lo mental.

Es significativo que en el lenguaje humano hablamos de enfermedades,des.órdenes, in.felicidad, o des.contento. Hay muchos términos semejantes,con todo y que el lenguaje humano sabe que dichos estados no son reales en símismos; son situaciones temporalmente negativas. Podríamos decir que laenfermedad es más semejante a un hoyo en la tierra que una verdad. La únicamanera de deshacernos de un hoyo es llenarlo. Lo llenamos con algosustancial. Si la enfermedad es un hoyo mental, un sentido agudo de laausencia de Dios, entonces podemos llenarlo con la conciencia o la sustanciade la Verdad. Como dice en el Evangelio: ‘Conoceréis la verdad, y la verdad oshará libres.’ (Juan 8:32) Entonces estamos en el carril correcto.

El apóstol Pablo nos dice: ‘Tenemos la mente de Cristo.’ (I Cor.2:16) Notenemos que ser dominados por la mente carnal, la cual es ‘enemistad contraDios,’ (Rom.8:7) llena de faltas, de temores y errores; en su lugar podemosponernos la conciencia de la Verdad, es decir, ‘la mente de Cristo.’ Eso es loque nos capacita para ser ‘transformados con la renovación de (nuestra) mente.’(Rom.12:2)

Tenemos una amiga enfermera profesional y trabajó en un hospitaldonde había gran cantidad de casos de parálisis. La visión de pacientesparalizados antes sus ojos mañana, tarde y noche, comenzó a afectar su propiocuerpo; comenzó a agarrotarse. Los especialistas para quienes trabajaba, ledijeron que tenía los síntomas de la parálisis. Ella aceptó este veredicto yfijamente se paralizó más y más, al grado que tuvo que renunciar a laenfermería. Casi en esa misma época su marido cambió de trabajo y fueron avivir a otro lugar. En el nuevo barrio consultaron con un médico general.Este hombre les dijo: ‘Es posible que usted haya sido falsamentediagnosticada. Si viera a otro especialista, seguro que le daba un diagnósticodistinto.’ Ella estuvo de acuerdo. Fue a ver a otro especialista, quien le dijo:‘No creo que tenga lo que piensa; considero que todo está en la mente. Perousted se ha convencido tanto a sí misma que tiene esa enfermedad, que sucuerpo se encuentra físicamente encerrado. La internaremos en un hospitalpor algún tiempo, la anestesiaremos, y liberaremos sus miembrosenérgicamente; estará bien.’ Esto fue lo que ocurrió, y ella estuvo bien; estácompletamente bien y es una mujer físicamente activa, aun dentro del mundode la enfermería.

Obviamente esta no es una curación espiritual, pero podríamos llamarlauna curación mental. Ella dio el paso de lo físico hacia lo mental. Es un

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ejemplo vívido e invaluable para ella en la enfermería, ver el poder de lapropia mente sobre el propio cuerpo, tanto para bien como para mal.

La Primera Ley - La Mente es el poderCuando vemos tales cosas a la luz de la Ciencia Cristiana, nos damos

cuenta que la Mente es el poder, pero no es sólo la mente humana con ‘m’minúscula, no soy yo manteniendo un pensamiento a favor o en contra. LaMente que me gobierna es la Mente de Dios. Aprendemos a comprender queDios es la Mente del universo, Dios es la Mente del hombre. Es como lacorriente eléctrica corriendo por el circuito de nuestra casa: siempre está ahí,pero tenemos que oprimir el contacto para recibir el poder. Así es como actúael poder de la Mente, con autoridad, con ley. Nos da libertad y dominio, abrelas ventanas mentales y nos muestra nuevas posibilidades que jamás habíamossoñado. Al cambiar la mente por la Mente, la Mente que es Dios, deinmediato nos liberamos de los límites de nuestro propio pensamiento y laspuertas se nos abren. Nuestra mente es de hecho, renovada, transformada, yexperimentamos lo que Pablo dijera al afirmar: ‘Tenemos la mente (Mente) deCristo.’ (I Cor.2:16)

Hace muchos años vino a vernos una mujer que tenía los dedos enmartillo, todos encogidos. El cirujano le había dicho que iba a cortarle losligamentos para aplanárselos. Ella pensó: ¿Debo hacerlo? Mientras tantovino a vernos y le dije: ‘Cuénteme sobre usted.’ Ella respondió: ‘¡OH! Setrata de mi madre.’ Le pedí que lo repitiera: ‘Se trata de mi madre.’ Susmanos y dedos se agarrotaron a la mención de su madre, quien dijo ella, eramuy dominante. Si lo era o no, yo no lo sabía, pero esa era su creencia, asíque la afectaba como si fuera cierto. Platicamos sobre cómo, con Dios, cadauno de nosotros es libre para aceptar un impedimento, ya fuera con relación asu madre, o para no aceptarlo. Cada uno de nosotros es un rayo de sol quellega desde el origen divino. No hay dos rayos de sol iguales, ni se cruzanjamás entre sí, ni interfieren el uno con el otro, ni se alejan de su origen.Cada uno de nosotros está gobernado directamente por Dios, informado porDios, dirigido por Dios. En tanto que platicábamos en este tono, ella captó laidea. Regresó a casa y sus dedos se abrieron perfecta y naturalmente y jamásnecesitó de esa operación. Había cambiado la base de su pensamiento,aceptando la Mente que es Dios, así como‘que la Mente gobierna al cuerpo noparcial sino totalmente.’ (C&S 111:30)

La Segunda LeyConsideremos un segundo aspecto en el cuadro de la curación. El

primero fue movernos de lo físico hacia lo mental, para descubrir que en tanto

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que conscientemente nos mantengamos en la Mente que es Dios, en la ley delbien, estaremos participando verdaderamente de ese poder divino.Aprendamos que no estamos solamente fortaleciendo el pensamiento humanoacerca de los asuntos humanos, ni experimentando simplemente un estadomental mejorado. La Biblia está llena de afirmaciones acerca de la realidadabsoluta de Dios como el bien, el poder del bien, y la total impotencia del mal.El mal parece ser terriblemente real pero de hecho no tiene ni origen niprincipio que lo sustente, tal como la oscuridad carece de origen o poder quela sostenga. ‘Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él.’ (I Juan 1:5) Vi a unamujer salir de un impresionante colapso de oscuridad mental y cuando estuvofuera y tranquila, le pregunté qué había sido lo que la había ayudado tanto.Dijo: ‘De repente vi que no hay suficiente oscuridad en todo el mundo comopara apagar la luz de una sola vela, – sobre la base de que la luz tiene unorigen y la oscuridad no lo tiene.’

Estamos dentro de la segunda urdimbre tejida viendo la naturalezaespiritual del bien, de la salud, de la armonía, de la gloria, porque su origen esdivino, tiene autoridad tras de sí; en tanto que la enfermedad, el mal, laaflicción y la discordia carecen de origen divino; de hecho no tienen tras de sí,más que ignorancia. Así que no nos maravillemos que la Biblia dice quedebemos ‘despojarnos del viejo hombre, que está viciado... y renovarnos en el espíritu denuestra mente, y vestirnos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia.’ (Efe.4:22-24)

Ahora debemos hacer una elección consciente entre el viejo hombre, que nosomos nosotros, y el nuevo hombre, que es lo que verdaderamente somos.Todos estamos conscientes del viejo Adán dentro de nosotros: condenaciónpersonal, amor propio, justificación propia, desconfianza personal, y enocasiones hasta odio personal. Más somos agentes libres para darle la espaldaa eso y decir: No, la Biblia me dice que Dios me creó a Su imagen ysemejanza, y soy libre para elegir tal ideal como mi verdadera sustancia,como mi naturaleza real. Comienzo a comprender que lo espiritual es lo realy ese es el verdadero yo.

La palabra espíritu se deriva de spirare, respirar – ‘espíritu hay en elhombre, y el soplo del Omnipotente le hace que entienda.’ (Job32:8) El concepto mortales una concepción falsa de nuestro verdadero ser y valor. A menudo hehallado con un suspiro de alivio, que todo cuanto requiere un individuo es unaprofunda inspiración, fresca desde Dios, permitiendo que esto barra lastelarañas de toda superficialidad y pequeñez de nuestro pensamientoconvencional, y a cambio poder regocijarnos en permitir que el espíritu deDios, ‘el soplo del Omnipotente’ venga a inundarnos.

Las dos fases de la respiración son la inhalación y la exhalación, quehan sido definidas como inspiración y exhalación. Inspirar es inhalar, en

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forma natural, mas lo que estamos inhalando no es sólo aire, sino espíritu.Cuando estamos aliviados de alguna tensión, exhalamos con una visión dealivio y decimos: ¡Qué maravilloso! ¿Cierto? Eso es exhalar, alabar.Tomamos otra inhalación y una sensación nueva de esperanza y gozo nosinvade. Es como si hubiéramos exhalado toda la niebla y el temor, el viejoAdán, y hubiéramos inhalado un sentido nuevo de ser, el hombre de lacreación de Dios.

Tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento, hay muchos casosde curación de lepra. Naamán fue sanado por Elías, y Jesús sanó leprosos envarias ocasiones. Es como si la lepra fuera un símbolo del humanoindividual, considerándose a sí mismo sucio, indigno, incapaz, no tan exitosocomo los demás. Nos hacemos a nosotros mismos leprosos. Pensamos quesomos intocables, fuera del alcance de la gracia de Dios. En una ocasión, unleproso dijo a Jesús: ‘Señor, si quieres, puedes limpiarme.’ Y el relato prosigue:‘Jesús extendió la mano y le tocó,’ - ¡le tocó! ¡Justo lo que la mayoría no haría!‘Quiero; sé limpio.’ (Mat.8:2) Las curaciones en la Biblia a menudo son hechascon una simple orden: ‘¡Sé limpio; extiende tu mano; recibe tu vista; Lázaro,sal fuera!’

Hoy en día, el Espíritu, que es Dios, nos está ordenando a ti, a mí y atoda la humanidad, que seamos limpios, que seamos completos, que seamosgozosos, llenos de esperanza para nosotros y para nuestro mundo. ‘El espíritues el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado sonespíritu y son vida.’ (Juan 6:63) Pero si no alimentamos nuestra conciencia con elespíritu de Dios y con el espíritu de bien, fácilmente haremos lo opuesto –llenaremos nuestra conciencia con el veneno del resentimiento, del temor, laansiedad, la preocupación, la indignación sobre alguna injusticia en el pasadola cual rumiaremos de nuevo. Pervertimos el sistema. La función de losriñones es limpiar el cuerpo de las sustancias inservibles que de otro modo noscontaminarían. Hemos visto males de los riñones sanados cuando algúnindividuo afirma que ama adoptar los nuevos, las grandes verdadesespirituales acerca de sí mismo, y esto verdaderamente limpia el sistema yelimina todos los desechos que hemos estado acumulando.

Esta ley no sólo aplica en el aspecto físico. Podemos elegir lo buenocomo la realidad de nuestro ser en cualquier área de nuestra vida. Conocimosa una encantadora dama que era una gran sanadora espiritual, y que estaba devacaciones. Cuando llegó a la estación del tren, sacó su bolso del equipajepara sacar algunas monedas que estaban en el fondo del mismo, para comprarun periódico. Cuando hubo comprado su periódico, halló que su bolso habíadesaparecido. Su primer impulso fue pensar que había sido robado y quedebía avisar a la policía. Pero después se dijo a sí misma: ¿Cómo puedesdecirle a la policía que has perdido algo cuando toda tu obra de vida se

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resume en declarar que el hombre jamás ha perdido nada de su sustanciadivina y jamás podría perderla?

Así que se dirigió a la sala de espera y se sentó declarandosilenciosamente que en Dios el hombre fue hecho completo, y que ‘sobre aquellono se añadirá, ni de ello se disminuirá.’ (Ecl.3:14) Debido a que Dios hizo al hombrecompleto, ningún hombre puede quitarnos lo que Dios nos ha dado. Al pocotiempo entró un hombre a la sala de espera y acercándose le dijo: Disculpe,¿acaso perdió algo? Casi estuvo a punto de exclamar abruptamente: ¡Mibolso! Pero tan sólo replicó: No, gracias, no he perdido nada, lo queconcordaba con su declaración. El hombre la miró sorprendido y salió.

Ella debió haber pensado: ¿Y ahora qué? Pero se adhirió a su verdady un minuto después el hombre regreso y le preguntó que si estaba segura deno haber perdido algo. De nuevo respondió ella que tenía consigo todocuanto le pertenecía. Y el hombre nuevamente dio la vuelta sobre sus pies ycamino rumbo a la salida, pero inmediatamente regresó y alargándole el bolsole preguntó: ¿Es suyo esto? Sí, le respondió; muchas gracias; y lo tomó. Élcomentó: Usted bien sabe que yo lo robé. No tengo dinero, pero algo no mepermitía quedármelo. Dígame, ¿por qué se lo tuve que devolver? Ella lerespondió: Sí, siéntese por favor. Así que el joven se sentó a su lado y ella lecompartió acerca de esas verdades sanadoras en la Biblia, esas verdadeshechas nuevamente prácticas en la enseñanza de la Ciencia Cristiana. Élestaba verdaderamente interesado. Y luego cada uno siguió su camino.Años después, en una iglesia de la Ciencia Cristiana en Londres, un miércolespor la tarde, cuando en esos servicios tienen reuniones de testimonios, ella selevantó y comentó el suceso. Al final del servicio un hombre se le acercó yle dijo: ¿Me recuerda? El círculo se cerró.

Si en verdad elegimos el bien y nos aferramos a él vigorosamente comoel hecho espiritual de nuestro ser, – de que Dios nos ha dotado con nuestrobien, nuestra sustancia, facultades, salud, relaciones, y de que nada en la tierrapuede privarnos de ellos, – entonces nos sólo nos bendecimos, sino también aaquellos a nuestro alrededor, quienes como en el ejemplo, creen que tienennecesidad de nuestras propiedades. No es nuestra propiedad, sino la de Dios.Es de ustedes y mía, en custodia, y eso es todo. Todo pertenece a Dios, locual es la nota tónica de lo espiritual.

La Ciencia Cristiana enseña que Dios, es Espíritu y que el hombre esespiritual. El hombre nace del Espíritu. Como dice la Biblia: ‘El Espíritumismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios.’ (Rom.8:16)

El Espíritu es nuestra sustancia verdadera, nuestra verdadera naturaleza.Enfoca para nosotros el lado verdadero de nuestra conciencia y carácter. Noslimpia y separa de todo lo indigno, de todo lo que no es espiritual, de todas

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las características indeseables. Nos mantenemos conscientes durante toda lavida, de un montón de cosas indeseables, que han sucedido fuera de nuestrocontrol a menudo sin demasiado esfuerzo consciente. Más Dios es Espíritu, yel Espíritu bautiza, purifica y nos hace nuevos. El Libro de Texto de laCiencia Cristiana está lleno de este término, Espíritu, operando a su manera.Por ejemplo: ‘Debiéramos esforzarnos por alcanzar la altura del Horeb, donde Dios esrevelado; y la piedra angular de toda construcción espiritual es la pureza. El bautismo porel Espíritu, que lava al cuerpo de todas las impurezas de la carne, significa que los delimpio corazón ven a Dios y están acercándose a la Vida espiritual y su demostración...Por medio del arrepentimiento, el bautismo espiritual y la regeneración, los mortales sedespojan de sus creencias materiales y de su falsa individualidad.’ (C&S 241:26-4) Elbautismo es definido, en parte, como: ‘Purificación por el Espíritu; sumersión en elEspíritu.’ (C&S 581:26)

La Tercera Ley

A la tercera urdimbre tejida o ley, me gustaría llamarle Regeneracióndel Ser. Si deseamos curación, debemos llegar en esa dirección. Siqueremos pegar trozos de porcelana china, primero debemos limpiar las piezaspara poder unirlas, - ¿no es acaso esto la segunda ley que consideramos?Después ponemos el pegamento en ambos lados y los juntamos.

Así, si queremos tener las bendiciones de la salud y la totalidad, algodebemos poner de nuestra parte. Quizá nos estamos aferrando a algo quedebiera ser cambiado en nuestro carácter moral. Quizá estamos demasiadosaturados o faltos de nuestra valía divina. A menudo lo que se requiere esuna regeneración del ser a un nivel profundo, para que ya no nosmantengamos aferrados a ofensas, falta de méritos o a un sentido vehementede la injusticia de la vida. En lugar de tales actitudes negativas, la sanaciónrequiere de nosotros gracia, perdón, paciencia, humildad, afecto y de unaactitud paciente hacia los demás. Requerimos alimentar la conciencia conuna estimación verdadera de nuestro ser real como idea de Dios. No somosningún ser decrépito, somos la propia expresión de Dios de Sí mismo. Somosel propio hijo de Dios. La Biblia nos enseña: ‘Amados, ahora somos los hijos deDios.’ (I Juan 3:2) Así que debemos tener un sentido elevado de nuestra valíaverdadera, un sentido espiritual de autoestima, el cual también nos da unreconocimiento por la valía de los demás. Esta actitud renovada comienza asanar una gran parte de las relaciones difíciles que a menudo resultan enconfrontaciones. En Salmos leemos: ‘Mucha paz tienen los que aman tu ley, Y nohay para ellos tropiezo.’ (119:165) ¡Cómo reaccionamos ante las ofensas!, ¿cierto?Las repetimos y las propagamos. ¡Cómo nos han ofendido! ¿Cómopodemos esperar que nos inunde la gracia de Dios, el poder sanador, si hemos

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estado asidos con ambas manos a alguna ofensa que es nada a la luz de laeternidad?

¡Este hermoso divino yo! El ejemplo clásico en la Biblia al respectode reformar al yo y descubrir el divino yo, se halla en la gran historia deJacob. Está fundamentada en el corazón del Antiguo Testamento – Jacobo ysus doce hijos, que se convirtieron en las doce tribus, los hijos de Israel. Sonel equivalente del Antiguo Testamento, a Jesús y sus doce discípulos en elNuevo. Estos doce individuos regenerados se convirtieron en los primerosapóstoles, en los primeros Cristianos. Tanto los hijos de Israel como los doceapóstoles, representan el mismo camino por delante que se requiere quenosotros recorramos.

La historia cuenta que Rebeca, la esposa de Isaac, concibió. Losgemelos en su vientre, ‘los hijos, luchaban dentro de ella; y dijo: Si es así, ¿para quévivo yo?... Y le respondió Jehová: Dos naciones hay en tu seno, Y dos pueblos serándivididos desde tus entrañas; un pueblo será más fuerte que el otro pueblo, y el mayorservirá al menor... Y salió el primero rubio... y llamaron su nombre Esaú. Después saliósu hermano, trabada su mano al calcañal de Esaú; y fue llamado su nombre Jacob.’(Gén.25:22-26)

A pesar de que la promesa fue que ‘el mayor servirá al menor,’ Jacob pensóque requería recurrir al engaño para obtener la primogenitura y la bendición desu padre Isaac. Esaú estaba furioso con su hermano por haberlo engañado yjuró vengarse de Jacob, así que Jacob estaba con toda razón asustado. Sesepararon y vivieron en diferentes partes de la tierra. Tarde o tempranosomos forzados a ponernos en paz con eso dentro de nosotros y por ello sedice que en Peniel (Gén.32:24-30) Jacob se encontró solo luchando con un hombrehasta que rayó el día. Él no luchaba en realidad con ‘un hombre,’ él estabatrabando combate con su propia dualidad y su propio sentido falso depersonalidad. No lo dejaría hasta que amaneciera y rayara el alba. Duranteel curso de esta batalla, al igual que nosotros, Jacob vio que primero estuvoluchando contra su sentido equivocado de sí mismo, y luego tuvo queidentificarse con su ser divino. Ese ser divino era tan abrumadoramente real,que ganó el día. El ángel adversario le dijo: ‘No se dirá más tu nombre Jacob,’que significa impostor, ‘sino Israel,’ que significa príncipe con Dios. (Gén.32:28)

Bien, ¿cuál de ellos querríamos ser? Al final de su lucha, cuando fuerebautizado y el viejo ser-Jacob se hubo ido y el nuevo ser-Israel hubo tomadoel mando, dijo: ‘Vi a Dios cara a cara, y fue librada mi alma.’ (Gén.32:30)

Inmediatamente después, en el siguiente capítulo de Génesis, sale y encuentraa su hermano Esaú, a quien con toda razón temía. Le envía regalos a Esaú ycuando se encuentran, se abrazan y le dice: ‘He visto tu rostro, como si hubiera vistoel rostro de Dios.’ (Gén.33:10) Hubo reconciliación completa y no más conflicto o

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desconfianza entre ellos. Cuando este carácter de Israel sale a escena,transforma a los gemelos.

¡Qué promesa tan extraordinaria, qué modelo de trabajo es ese para lasociedad humana! Ya sea que estemos pensando en nuestros propiosproblemas o en la contienda alrededor del mundo, si podemos tocar estecarácter de Israel, que es la visión de Dios para este hombre, y para el otro ypara todos los demás, todos vistos desde el enfoque celestial, – entoncestendremos relaciones humanas reconciliadas. Esta aparente opuesta dualidadestá resuelta. Eso no amalgama nuestra individualidad, sino que nos capacitaa todos para encontrar nuestro propio valor y nuestro propio lugar dentro delplan divino, y coincidentemente el propio valor y el propio lugar de nuestrohermano el hombre. Nuestro ser real en Dios, nuestra identidad espiritual, esinmutable, completa, satisfecha, tranquila, intacta, intocable por el mundo.Lo exterior no puede darnos nada que no esté ya incorporado en el don de lagracia de Dios, y por lo tanto, lo exterior tampoco puede robarnos o privarnosde nada, porque nuestra identidad, tal como el ser-Israel, es algo permanente ysagrado.

En el trabajo de curación a menudo uno halla que cierto tipo de tumoresno son más que una enorme morbosidad edificada. Alguien pudiera sentirque ha estado privado del amor o de reconocimiento durante toda su vida, yalimenta su pensamiento con este sentido de estar desprovisto. En unaocasión vi a una mujer con un tumor enorme, que en realidad podía unopensar que estaba a punto de parir. Su hermana la convenció que viniera avernos diciéndole: De todas formas te vas a morir con ellos o con los médicos,lo cual resultaba alentador. Vino pues, y me contó sobre esa enorme mentirade que la vida le había robado su felicidad, su sentido de contentamiento; todolo valioso le había sido quitado poco a poco. Alimentando su pensamientocon esa pena, ella había edificado y edificado, hasta formar un ‘niño’ en suvientre, un ‘bulto’ de pena y descontento. Así que cuando estábamosconversando le pregunté: ¿Cómo supo que el contentamiento, el gozo y lasatisfacción eran suyos si jamás los experimentó verdaderamente en la vidahumana? OH, dijo ella, yo supuse que aun así, debieron haber estado ahí.Y entonces preguntó: ¿Quiere decir, que nunca debí haber pasado por esasetapas de pérdida y tristeza para descubrir que mi ser-Dios es completo,satisfecho y contento? Le respondí: Bueno, yo no sé si lo necesitaba o no,pero el hecho es que lo que usted verdaderamente es, está creado desde elprincipio. ¡OH! ¡Qué maravilla!,exclamó, y en seguida dijo: Sé que estoysanada. Se fue a casa y al cabo de uno o dos días, supe que el tumor sedisolvió en agua o en lo que haya sido, y salió por el organismo.Parafraseando el Salmo veintitrés, su alma fue restaurada. Estas cosas pueden

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acontecer debido a que nuestra verdadera identidad, nuestra alma, no esnuestra; se deben a que Dios es Alma. Dios, siendo el Alma del hombre,quiere decir que nosotros, en verdad, somos la incorporación del contento, dela satisfacción, de la tranquilidad y el equilibrio. Igual que la pantalla detelevisión que contiene violencia y aun así dicha violencia jamás se registra ose vuelve parte de la propia pantalla y todo desaparece en un segundo, asínuestra individualidad no puede ser tocada por lo que el mundo arroja. Laregla del Ama es que nuestra divina individualidad está imperturbada,completa en sí misma. Es una individualidad que surge del verdadero ser deDios. Esa es una ley espiritual y todos podemos invocarla.

La Cuarta LeyMiremos ahora a la cuarta urdimbre tejida, la cual yo llamaría el

Principio de las Relaciones Justas. Tomemos por ejemplo manejar en eltráfico. Sé que la mayoría de la gente tiene anécdotas de tráfico horribles yde ocasiones en que se salvaron milagrosamente. Más el milagro es que hayatan pocos accidentes, y no el que seamos tan diestros. ¿Cómo opera eltráfico? Cada uno sabemos lo que es el principio del buen conducir eindividualmente conocemos nuestro propio bienestar. Así, cuanto más loobservamos cada uno en lo individual, tanto más relaciones armoniosastendremos en el camino. De nuevo es como el símbolo de lo vertical y lohorizontal. Si tendemos correctamente la dimensión vertical, entonces ladimensión horizontal también tiende a estar bien.

Somos como los miembros de una orquesta, todos juntos tocandomúsica; cada uno tocando algo ligeramente diferente; un instrumento diferentecon una parte diferente en la partitura, pero cada uno, en tanto escucha supropia parte, al mismo tiempo también tiene que escuchar a los demásmúsicos de la orquesta. Así es como estas dos dimensiones se ponen deacuerdo. Si estamos de acuerdo con la partitura, y estamos siguiendo aldirector, entonces estaremos destinados a estar de acuerdo con nuestroscompañeros músicos.

Si estamos de acuerdo con el Principio del ser, entonces estaremos deacuerdo con todas las demás ideas de ese Principio del ser, porque somos partede un universo coordinado y articulado en el cual todo está gobernado por elmismo Principio divino. Dios es la cabeza y nosotros el cuerpo de esacabeza. Dios es la cabeza-Dios y nosotros somos el cuerpo-Dios. Como loexplica San Pablo: ‘es de la cabeza desde la cual todo el cuerpo, como una estructuraarmoniosa tejida en un todo por las uniones que tiene, crece para el adecuadofuncionamiento de sus partes individuales hacia su madurez completa en el amor.’ (Efe.4:16

Traducción de J. B. Phillips) En esta estructura armoniosa no hay uniones dislocadas,ni fractura alguna en el gran cuerpo del hombre. La palabra armonía viene

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del vocablo griego harmos que significa unión. Así que literalmente,armonía significa: estar flexible y dulcemente unidos. Estar en armonía connuestro Principio es estar en armonía con nuestro prójimo. Esto no dejaespacio alguno para el sentido, la voluntad, ni la ambición personales,actuando a costa de nuestro hermano. Significa pensar de forma másuniversal, en forma más responsable acerca de todos. Jesús declaró esteprincipio claramente cuando dijo: ‘No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino loque ve hacer al Padre; porque todo lo que el Padre hace, también lo hace el Hijoigualmente.’ (Juan 5:19) Él estaba unido a una divina autoridad; actuando bajo laley divina.

Un ejemplo de esto es la curación del siervo del centurión en losEvangelios. El centurión romano le dice a Jesús: No necesitas molestarte envenir a mi casa a sanar a mi siervo, tan sólo necesitas decir la palabra. Yotambién soy un hombre bajo autoridad, por lo que reconozco que tú, Jesús,también estas bajo autoridad. La palabra autoridad es traída aquí, bajo lalínea del mandato. Y así el siervo fue sanado. Requiere que reconozcamosque todo lo bueno es Dios, manifestándolo: la honestidad, la integridad, laarmonía, la bondad, el amor desinteresado, todo lo bueno. No somosnosotros quienes lo hacemos, nosotros no provocamos tales conceptos, sinoque en la medida en que nos hacemos a un lado del camino, hallamos a Diosexpresando dicha cualidad como nosotros mismos.

Todo lo bueno es Dios haciéndolo, pero cuando es Dios haciéndolocomo tú y como yo, eso es una maravilla. Cuando hacemos que tres por tressean nueve, no se trata de nosotros haciendo que sean nueve; el principio esque son nueve, y nosotros estamos permitiendo que ese principio actúe comonosotros.

Así resulta maravilloso sentir que estamos facultado por Dios,autorizados por Dios. ¡Qué liberación de la carga de la responsabilidadpersonal! Conocía a un hombre que tuvo un negocio próspero deconstrucción en Inglaterra, pero había conflictos laborales que envenenabanlas relaciones a tal grado, que todo iba mal. Su esposa, una CientíficaCristiana, le pidió que fuera y platicara con nosotros para ver si podíamosencontrar una solución. En tanto que platicaba, uno podía darse cuenta de unintenso sentido personal de ser el administrador, y un sentido de que susdeseos estaban siendo obstaculizados por las molestas tiendas de autoservicio.Le dije: Supongamos que no estuviera usted ahí; el principio de laadministración hallaría alguien más a través del cual actuar. ¿Por qué nodeja de considerarse como el administrador, y en su lugar comienza a pensaracerca de la administración – la administración que requiere de esto yaquello para la armoniosa operación del negocio? Él vio que lo anteriortenía sentido, que se requería hacer a un lado a la persona, a la responsabilidad

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personal y a la confrontación personal. Lo hizo, y lo hermoso fue que elproblema se calmó gradualmente y la armonía prevaleció. La gente quedeseaba confrontarlo como administrador dejó de hacerlo porque supo que laadministración ya no estaba presente ahí como una persona para serconfrontada. Así que en lugar de una persona, él contaba con el principio dela buena administración y las buenas relaciones laborales. Así fue como sesolucionó.

En ocasiones he observado que las rupturas representan una carga deresponsabilidad. A veces pueden ser relaciones personales resquebrajadas enlas cuales el hombre es apartado de su hermano a través de una pelea, pero lamayoría de las veces es tan sólo un pesado sentido de cargar con más de loque podemos soportar. Recuerdo que en una ocasión estaba leyendo un librode Ciencia Cristiana y estaba muy movido por una maravillosa e inspiradaafirmación. En ese preciso momento entró una amiga a la habitación y dijo:OH, me he fracturado; de nuevo todo se zafó. Yo jamás había sabido que esteindividuo hubiera tenido una fractura. Tan sólo dije: Tan sólo escucha, y leleí lo que había encontrado. Decía: Necesitamos saber que la Mente divinaexalta, mantiene juntos, unifica y prospera. OH, dijo ella, ya se acomodó.¡Tan sólo eso! Fue la primera curación instantánea que atestigüé. Pero quéapropiada. Esas palabras inspiradas fueron la verdad de la curación, justopara esa condición: que la Mente exalta, mantiene juntos, unifica y prospera.La fractura se acomodó en su lugar y los músculos recuperaron su integridad,y ahí acabó la historia. Eso fue todo, porque como la Ciencia Cristianaenseña, Dios es el Principio divino del ser, y este Principio divino actúa comosistema, como armonía, como gobierno, como autoridad. Bajo el Principiodivino, el hombre está de acuerdo con las leyes de Dios y por lo tanto, nada lesale mal.

La Quinta LeyHay otra urdimbre tejida que pudiéramos llamar Vida Abundante, tal

como en el Quinto Día de la Creación, en donde se dice: ‘Produzcan las aguas…abundantes seres vivientes... que se mueven.’ (Gén.1:20,21) Si de algún modo hemoscumplido con las primeras cuatro leyes, estaremos ahora surgiendo delPrincipio que es Vida; ya no estaremos esforzándonos más para llegar ahí,sino que estaremos surgiendo de su fuente libremente. ¡Los límitesdesaparecen! Es como si en lugar de estar sentados aquí diciendo Dios, porfavor, envíame abundancia de bien, halláramos que estamos morando justoen la fuente de la abundancia, más que al final donde es recibida.

Surgimos de la Vida misma. Dios es Vida. La Sra. Eddy, laDescubridora y Fundadora de la Ciencia Cristiana, tuvo un estudiante que

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estaba padeciendo de una enfermedad del hígado, y se cuenta que lo sanócuando le explicó: Dios es la Vida, y tú eres la morada. (En inglés parece unjuego de palabras, puesto que Vida es Life, e hígado es liver) Suena como unjuego de palabras, pero es una verdad espiritual. Dios es Vida y la Vida nosmora; somos la morada de la Vida.

Vemos esto claramente en la vida de Jesús en el Nuevo Testamento.Su secreto de vida abundante fue que estaba dispuesto a deponer todo sentidode vida como siendo de su propia posesión. ‘Yo pongo mi vida, para volverla atomar.’ (Juan10:17)

Él soltó todo sentido del mí, y tomó un sentido ilimitado de vidaabundante. Pareciera natural que nosotros nos la pasemos pensando sobre mivida, mi ingreso, mi esperanza futura, mi casa, mi sustancia, mis amigos, mishabilidades… pero son limitadas cuando las miramos como mías. Sigobernamos esa palabra mi, entonces tengo la vida de la Vida, las habilidadesde la Vida, la abundancia de la Vida; no hay límite alguno. He depuesto mivida para volverla a tomar.

En el Segundo Libro de Reyes, Eliseo resucitó al hijo de la mujersunamita. En la historia, Eliseo se tendió sobre el cuerpo del niño, su bocasobre su boca, y sus manos sobre las manos suyas, – él le estaba dando unbeso espiritual de vida. Se dice que el niño estornudó siete veces, y abrió susojos. Es como si Eliseo estuviera diciendo: Mira, todo lo grande es ciertoacerca de Dios y también acerca del hombre, la idea de Dios. Así estacoincidencia, punto por punto, con la Vida que es Dios, demuestra que elhombre es la morada de la Vida. Nosotros no nos moramos a nosotrosmismos. Pablo dice: ‘Cada día muero.’ (ICor. 15:31) Somos sabios si hacemos lomismo. ‘Vivo,’ dice él, ‘pero no yo, más Cristo vive en mí.’ (Gál.2:20)

Es tan liberador si podemos retirarnos del pensamiento de: mi vida,¿qué voy a hacer hoy? ¿cómo me irá en la semana? ¿tendremos suficientedinero para esto? ¡Cómo nos confunde! Pero si ya no soy yo, sino la Vidamisma, expresada individualmente como ustedes, como yo, como todos, quégozoso y abundante sentido de vida el que tenemos. Este sentido deabundancia capacitó a Jesús para alimentar a cinco mil personas con cincopanes y dos pequeños peces. Los cinco panes representan el que él estabaalimentando el pensamiento de ellos con el pan de la Vida. Igual que lo queestamos haciendo justo ahora – estamos alimentando la conciencia con el pande la Vida. La Vida que es Dios, genera y produce vida. Multiplica la vida,la renueva. Si nos cortamos un dedo, se sana a sí mismo. La razón de ello esque la vida está espontáneamente auto-renovada. No tenemos que decirle aldedo que se cure a sí mismo; deja de crecer cuando ha alcanzado el tamaño

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correcto. La Vida produce sus propias formas, su propia curación, su propiarenovación.

Hubo un libro publicado en la década de los 50’s por la esposa de unministro metodista en Sudáfrica, llamada Elsie Salmon, y se titulaba: Él SanaHoy. Fue una mujer que tenía el don de curación. Su libro contiene muchosincidentes de curaciones de todo tipo de casos impresionantes por medio de laimposición de las manos en nombre de Cristo, y llevando a los pacientes areconocer que sí era posible que la vida de Cristo entrara en su vidas y lasrenovara y las restaurar.

Una curación que ella menciona es la de un niño que nació como unapersonita completa, excepto por uno de sus brazos que terminaba en la

muñeca. Los padres se lo trajeron y le preguntaron si podía sanarlo. Elladijo que por sí misma no podía, pero que para Dios todas las cosas eran

posibles. Ella señaló que cuando el bebé está en el vientre y se forman lasmanos de modo natural en el brazo, no pensamos en ello como un milagro.Tan sólo esperamos que así acontezca. ¿Por qué no podría Dios realizar lomismo cuando el bebé ya tuviera tres años de nacido? ¿Por qué tendría que

ser un milagro? En su relato percibimos como una historia viviente, cómo lospadres y sus amigos, observaron mes tras mes, cómo la pequeña manita se fueabriendo como una flor y luego floreció como una mano completa y perfecta.

‘La vida está por siempre espontáneamente renovada.’La Vida no puede ser limitada; Dios no puede ser limitado. Así que

todo cuanto necesitamos como bien, es nuestro si tan solo abrimos nuestroscorazones y vidas a ello. Es cuestión de estar abierto y expectante al bien, talcomo un niño demanda el amor, el cuidado y la protección de sus padres. Enel niño hay una expectativa total. Seamos el niño de la Vida, que es el Padrey la Madre de todo bien. Hay demasiadas cosas que parecen provenir de unsentido de pobreza y carencia, – tales como desazón, destrucción, la propiapobreza, temor de fallar, etc. No son más que sombras, y no tenemos por quétenerlas ni temerlas, porque son irreales. Si permitimos que la abundancia dela Vida fluya, no padeceremos privaciones ni sufriremos físicamente debido aun sentido de privación. Existe cierto temor en algunos países, de que si seaprueban ciertas decisiones políticas, mucha gente perdería su nivel de vida.Bueno, eso no tiene por qué ser así, puesto que es la Vida quien nos da el nivelde vida y esa misma Vida puede satisfacer y proveer un nivel alto para todos.Todo mundo tiene acceso a la tabla del diez en matemáticas. Todo mundotiene acceso a las letras del alfabeto; ninguno estamos limitado.

Tenemos una amiga norteamericana en esta misma línea de curaciónespiritual, que es un alma hermosa, una persona burbujeante y alegre. Sumarido falleció repentinamente, y de inmediato ella se dio cuenta que marido

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representa una idea divina, al igual que salud, gozo o bien, son una ideadivina, y que ello no podía ser privada de esa idea llamada marido comotampoco de la idea de gozo, vida o abundancia. Al poco tiempo, cuandoestaba platicando con el agente de la funeraria, escuchó la voz de su maridodiciéndole: Chica, lo estás haciendo muy bien. Ella comprendió que él seguíapresente con ella, aunque no pudiera verlo, porque marido es una ideaomnipresente de Dios. Cuando Isaías escribe: ‘Tu marido es tu Hacedor,’ (Isa.54:5)

se está refiriendo a la dimensión vertical, y esta es la fuente del cuidado y elamor que se experimenta en la dimensión horizontal o humana. Nuestraamiga comentó: ¿Saben? Desde que él partió, he estado maravillosamenteenlazada. El mundo se acerca con amistad o con consejos, con ayudaprofesional y apoyo. Todo tipo de ayuda inesperada ha satisfecho susnecesidades día tras día. La abundancia de la Vida no sólo llega en la formaen la que la estamos buscando. La abundancia se vierte en la forma particularde Dios y nuestras necesidades son satisfechas.

Así que, ¿cuál es la ley tras todo esto? En la Ciencia Cristianaaprendemos que Dios no sólo es Mente, Espíritu, Alma, Principio, sino queDios es Vida, y que esa Vida es nuestra vida. Esa es la sangre de vida delhombre; circula desde la fuente que es Vida, y circula hacia esa fuente. LaVida no tiene limitación alguna y está libre del concepto tiempo. Es eterna,inmarcesible, y no depende más de la vida orgánica, de lo que el poder de lasmatemáticas depende de la pieza de papel sobre la cual escribimos lasoperaciones. ¡Esta sensación maravillosa de espontánea auto-renovación!¡Eso es la Vida!

La Sexta LeyLuego tenemos una Sexta urdimbre que es la Totalidad. La palabra

total en el diccionario, tiene la misma raíz que la palabra salud. Saludsignifica totalidad. Hay un caso en la Biblia en donde Jesús dijo al paciente:‘¿Quieres ser sano? Mira, estás sano.’ (Juan 5:6) (En inglés dice: ¿Quieres sercompleto?) La esencia de la sexta urdimbre es el reconocimiento de quesomos completos.

El gran Jan Smuts, famosos por muchas causas, escribió una tesis sobrela filosofía de la totalidad. Fue una contribución maravillosa para elconocimiento de la humanidad. El corazón de su tema es que la totalidad nose hace en partes; la totalidad es mayor que la suma total de sus partes.

A menos que trabajemos desde la conciencia del ser universal, jamáscomprenderemos las partes que incluye. El otro día leíamos un artículo en unperiódico sudafricano, diciendo que la filosofía holística de Smuts es muyimportante para los problemas actuales, porque sólo trabajando desde el ideal

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de la totalidad es que puede originarse la distribución adecuada de las partesdentro del todo. No se trata de tratar de hacer que las partes se unan paraobtener la armonía, sino trabajar desde el todo en conciencia.

Cuando violamos la ley y somos llevados ante la corte, juramos decir laverdad, toda la verdad y nada más que la verdad. Es como si la ley humanareconociera que tan sólo decir la verdad no basta, tiene que ser total, y no tieneque ser más que la verdad. ‘Yo haré venir sanidad para ti… dice Jehová.’ (Jer 30:17)

Yo haré venir sanidad, totalidad, compleción. En esa totalidad de la Verdad,nuestros cuerpos, nuestros asuntos, ya no son pequeñas partes. Nuestrocuerpo, por ejemplo, es un compuesto coordinado y armonizado todo, en elcual todo cumple el propósito para el cual fue pensado dentro de la totalidadcolectiva. Siempre es un todo integrado.

En una ocasión cuando estábamos en California, tuvimos unaexperiencia dramática en relación con este punto. Al salir un niño rumbo a laescuela, azotó la puerta dejando su dedo dentro y se le arrancó. Su madrecogió al niño y al dedo y corrió al médico para que se lo uniera de nuevo,porque en ocasiones, si se hace de inmediato, se une. La madre del muchachono era Científica Cristiana, más la abuela sí, y me llamó pidiendo que laayudara para mantener su pensamiento en el nivel de paz espiritual duranteesta experiencia. Me platicó lo ocurrido, y yo comenté: Bueno, vienen a mipensamiento las palabras de Jesús: ‘Eres sano (completo).’ ¡OH! dijo ella,completo, desde luego… somos completos si estamos hechos a imagen ysemejanza de Dios. Tanto la abuela como yo, permanecimos en esa idea.Mientras tanto, el doctor cosió el dedo, y día tras día la madre llevaba al niño acuración, y el dedo se fue poniendo cada vez más negro, y al final de lasemana, la punta se cayó junto con la curación. Todo mundo tenía el corazóndeshecho porque ni la destreza del médico ni la Ciencia Cristiana de la abuelahabían dado resultados en este caso. Pero ese fin de semana toda la familiaestuvo reunida y se maravillaron de ver, bajo sus propios ojos, cómo crecía unnuevo dedo. Primero vieron lo blanco del hueso, luego la carne formada yfinalmente la uña. Resulta muy alentador tener curaciones como ésa, pero loque verdaderamente fue interesante y aleccionador para todos nosotros, fuecomprender cómo y por qué, la curación tuvo lugar. Al tratar de unir dospedazos separados no hubo curación. Pero al trabajar desde la conciencia dela totalidad de la Verdad que declara al hombre: ‘Eres sano (completo),’ esque la curación pudo tener lugar. Seguramente que este es el mismo principiosobre el cual Jesús sanó al hombre cuando le dijo: ‘¿Quieres ser sano? Mira, estássano.’ (Juan 5:6) (En inglés dice: ¿Quieres ser completo? Mira, eres completo.)

Así que cuán importante es trabajar desde la totalidad. Cualquiera quesea la propuesta frente a nosotros, ya sea que se trate de un asunto de

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negocios, o que estemos buscando la salud, o queriendo resolver algunarelación desagradable, a menudo pensamos: Me pregunto cómo puedotrabajar esto. ¿Debiera llamar a este hombre para decirle tal o cual cosa?Estamos tratando de manipular las partes. Eso pudiera parecer legítimo, perotrabajemos primero desde la Verdad y enfoquémonos en la verdadera imagende que en Dios todo esfuerzo ya es completo y perfecto, todo desde siempre estotal. La Verdad ya es verdad; pero debemos alinearnos con ella.

La ley que yace tras estos ejemplos es que Dios es la Verdad. LaVerdad es totalidad integrada. Debido a que el hombre es la imagen ysemejanza de la Verdad, es este estado el que le proporciona su conciencia delo que verdaderamente es – un hombre completo, un hombre nuevo. LaVerdad hace una nueva criatura, ‘las cosas viejas pasaron; he aquí, todo es hechonuevo.’ (2Cor.5:17)

La Séptima LeyPude que encuentren útil pensar acerca de estas urdimbres, como los

pasos que se dan para armar un rompecabezas. Comenzamos por tomar latapa de la caja y no hacemos trampa mirando la imagen en la tapa, sino lavolteamos. Lo primero es diseminar las piezas – que sean las ideas, que seanlos pensamientos. Lo segundo es voltearlos hacia arriba. Es como obtenersu imagen espiritual, de modo que ninguno esté más boca abajo. Lo terceroes que comencemos a identificar las piezas de las orillas o las piezas del cieloo las cafés; comenzamos a reunirlas en grupos apropiados y comenzamos asentir a dónde pertenecen.

En cuarto lugar ocurre que nos damos cuenta que hay un principio quedebemos obedecer, y que no podemos forzar las piezas donde queremos,porque tan sólo distorsionaría la integridad del todo. Así es comoaprendemos a obedecer al principio. En cuanto obedecemos el principio, secomienza a mover hacia la vida, un quinto paso; acontece un sentido nuevode acción, libertad y movimiento. En sexto lugar se acomoda la última piezay el trabajo termina. Esta perfectamente completo. Pero hay un séptimopaso y es cuando tomamos la tapa de la caja y la volteamos diciendo: Claro, laimagen siempre estuvo completa. Nos regocijamos en el hecho de quesiempre hubo una meta de perfección que hizo posible para nosotros llevar acabo esos pasos que conducen a la perfección. A menos que la perfecciónhubiera estado ahí, jamás habríamos ido a buscarla.

La séptima ley en la curación espiritual es Amar la Perfección, acunarnuestra divinidad. Así, la mayoría de nuestros problemas humanos surgeporque no ejercitamos el acunar, el nutrir. Amamos este impulso de lacondición paterna; tenemos rumbo y energía, ambición y creatividad, pero no

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siempre nos detenemos para tener la paciencia de llevar su ingenio hasta suplenitud. Así que necesitamos tener este sentido de acunar y nutrir nuestradivinidad, de acunar nuestro verdadero ser como Dios nos acuna.

Aunque en la Biblia el énfasis principal está en Dios como Padre, en elAntiguo Testamento hebreo (donde tenían un número diferente de nombrespara Dios), uno de los nombres es El Shaddai. De acuerdo a las Referenciasde la Biblia de Scofield, ‘El’ significa fuerte, y ‘Shaddai’ significa el depechos, el nutriente o satisfactor, el que da la fecundidad. Eso enfatiza aDios como Madre. La primera aparición en la Biblia de este nombre paraDios, traducida en nuestra versión como el Dios Todopoderoso, está enGénesis, donde a Abraham se le promete: ‘te he puesto por padre de muchedumbrede gentes.’ (17:6)

Puesto que Dios es Madre y nosotros reflejamos a Dios, entoncesnecesitamos ser madres, concebir y dar nacimiento a nuestra divinidad.Necesitamos nutrir el sentido de nuestro verdadero ser, ayudarle a crecer, serpacientes con él, tal como una madre lo es. A menudo pareciera haber un serdesafortunado dentro del individuo.

Algunas personas se consideran a sí mismas como poco valiosas, o queson inadecuadas para amarse a sí mismas. Por supuesto que nadie quiereamar a un simple ser mortal, pero ¿por qué no amamos a nuestro ser divino?Somos como un bebé, llorando porque nos alcen y nos amen. En lugar deacunar pensamientos morbosos acercad de nuestras fallas, o de acunar algúnresentimiento acerca de algo que nos decepcionara o acerca de algo que saliómal, – que tan sólo edifica un estado de pensamiento rebelde y célulasrebeldes en el cuerpo, – acunemos y amemos nuestro verdadero ser. Sitenemos un perro o un gato que se porta mal, no siempre le pegamos. Lehablamos amorosa, pero firmemente. ¿Por qué no hacemos lo mismo connosotros mismos? Curioso, no lo hacemos; cometemos un error y nosdecimos: ¡Carambas, soy un tonto! De nada sirve. Acostumbrémonos aamar nuestro valor único como la idea de Dios. Entonces tendremos unsentido de serenidad de que el amor de Dios está brillando sobre nosotros, yasea que llueva sobre justos o injustos. (Mat.5:45) El Amor nos amaincondicionalmente. Ésa es la palabra clave – amor incondicional. Entonceshallaremos que toda célula, toda fibra de nuestro ser, está viva con Dios yflorece bajo el amor de Dios. Eso es El Shaddai, Dios como Madre.‘¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina junta sus polluelos debajo de lasalas.’ (Mat.23:37) ‘Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en lastribulaciones.’ (Sal.46:1)

Con las curaciones de Jesús, a menudo él se dirigía a la persona:‘Hombre, tus pecados te son perdonados,’ o ‘Mujer, tus fe te ha sanado’ (te ha hecho

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completa), pero hay muchos casos en donde el individuo es mencionado comoHijo o Hija. Hay diferencia entre decir hombre o decir hijo, o entre decirmujer o decir hija. En la historia de la mujer con la hemorragia, se dirigió aella como Hija. Mujer indica al individuo femenino, pero hija enfoca laatención en la relación con padre y madre.

Así al dirigirse a esta mujer como Hija, él está poniendo todas suscualidades femeninas y sus funciones femeninas, de nuevo dentro de lanaturaleza de madre de Dios, de la cual proviene, y así es sanada.

Hubo una joven mujer que conocimos, la cual creció en un hogar en elcual su hermano atrajo todo el amor y la atención de sus padres. Le parecíacomo si virtualmente la ignoraran y creció con un estado emocional, con unaactitud en contra de los hombres. De hecho estaba casada, pero elmatrimonio no se había consumado, porque con su helada actitud emocional,no podía unirse. Había ido con un médico y con un siquiatra, y no laayudaron demasiado. Así que nos vino a ver, puesto que había escuchado dela curación en la Ciencia Cristiana. Platicamos con ella un poco, acerca deamar su propia valía divina por ser la hija del Padre-Madre Dios. Así pudotener un maravilloso sentido relajado de respeto y valor propios. Aceptó loanterior y se volvió una nueva persona en muchos sentidos. Por ejemplo, sucabello, que había estado cubriendo su rostro por completo – y la hacía lucircomo un perro ovejero – se veía brillante y peinado hacia atrás, con lo cualella lucía de frente y no oculta tras el cabello. Poco después escuchamos quese había embarazado y hoy en día tiene dos hermosas nenas, y es una personacompletamente distinta, porque aprendió a amar su valía divina.

Hace poco supimos de otro ejemplo feliz de una mujer en otro país quetiene cerca de cien años. Tenía fuertes dolores debido al herpes (inflamaciónde las terminales nerviosas) alrededor de la cintura. Un amigo de ella quehablaba inglés nos telefoneó solicitando ayuda. En tanto nos platicaba deella, tuve un sentido preciso de que el Amor la abarcaba, abrazada en divinoAmor. Cada uno de nosotros es preciado para Dios, y el amor de Dios nosenvuelve. Conforme pensaba en eso, no me había dado cuenta que la palabraherpes, en inglés, deriva de banda, cintura, cinturón. Significa estarrodeado, ceñido. Lo que había percibido acerca del divino Amorabrazándola, fue absolutamente la verdad sanadora, precisamente la verdadque se requería. En uno o dos días se sanó de herpes y al mismo tiempo lamuñeca de su brazo que estaba fracturada y le provocaba mucho dolor,también sanó. Pero nadie había mencionado lo de la muñeca. Ambosproblemas fueron atendidos por este divino Amor circundante. En sufracturado y bello inglés, le solicitó a su amigo que la próxima vez que mellamara, me dijera: Por favor dile a ese hombre que me estoy sintiendo mejor

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de lo que jamás me había sentido. ¡Por cierto que hay esperanza para todosnosotros!

Es algo maravilloso este Amor que nos circunda. Nos da tal sensaciónde paz… ‘Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en persevera.’(Isa.26:3) Con ese sentimiento de paz perfecta, el corazón tiene una oportunidadde fortalecerse a sí mismo y recuperarse. No tenemos por qué sufrir ningunaforma de un corazón débil, de un corazón irregular, de un corazón temeroso, ode un corazón ansioso, sino que nos volvemos fuertes de corazón, seguros,confiados, elásticos. El corazón está a prueba de ataques, porque el corazónya no es más un órgano; el corazón es el Principio divino, el Amor.

El gran Principio del ser es el Amor, nuestro Principio divino es elAmor. Es Principio porque es poder, porque es rítmico, porque es fuerte,confiable, y de ningún modo podemos sobrecargarlo. Es Amor porque estierno y compasivo.

Recientemente vimos un hermoso ejemplo con un querido amigonuestro quien en sus ochentas, sufrió un ataque cardiaco. En un lapso deveinticuatro horas se recuperó; recuperó su fuerza y actividad normalescuando ambos vimos que el corazón del ser del hombre es el Principio divino,el Amor. Si nos estresamos y tememos, es sólo debido a que creemos quetenemos un ser separado de Dios. Pero no tenemos tal ser separado; Dios esnuestro ser. Su Ser es nuestro ser. Porque Él vive, yo vivo. El sol y subrillo son uno. No hay brillo sin sol, y el sol no está expresado sin brillo.Así es con Dios y el hombre; verdaderamente son uno.

Así que, ¿cuál es la ley que yace tras esto? La Ciencia Cristiana enseñaque el séptimo gran término para Dios es Amor. El Amor es omnipresente, elAmor es la divina Madre, el Amor es lo que da consuelo, el Amor es paz, elAmor es seguridad, el Amor es perfección, manteniéndonos en el nivel de laperfección. En el Amor no hay contiendas, ni colisiones, odio ni temor. Enel plan universal del Amor todos tenemos nuestro lugar, tal como los hijos enuna gran familia. En el Amor hay un destino y plan en el universo. El Amortiene un propósito para la raza humana, el cual es llevarnos a solucionarnuestros problemas. Fundamentalmente, hay un solo problema que nosocupa: nuestra aparente separación de Dios, y por lo tanto, de los demás.Sólo en esta respuesta yace la salvación de la raza.

Resumen de estas LeyesEn la primera urdimbre o ley, está implícito el paso de lo físico a lo

mental, debido a que Dios es Mente, y demanda que nos pongamos la Mentede Cristo para que pensemos creativa e inteligentemente.

En la segunda urdimbre o ley, se contempla que este estado mental esun hecho espiritual. Hallamos que algo mayor a nosotros mismos se hace

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cargo de todo. Esto se debe a que Dios es Espíritu, y comenzamos adiferenciar entre nuestro concepto mortal de nosotros mismos y lo queverdaderamente somos en Dios.

En la tercera urdimbre o ley se encuentra la regeneración de nuestrosentido del ser. Hallamos una nueva identidad surgiendo a expresión, talcomo Jacob y Esaú hallaron que la identidad de Israel trascendía el antiguosentido particular de ser que cada uno de ellos mantenía. Eso se debe a queDios es Alma, el origen de nuestra identidad real.

En la cuarta urdimbre o ley, está el principio de las relaciones rectas,donde el Principio divino que es Dios, se halla en nosotros y es nuestro YO oego, así que si se lo permitimos, toma la responsabilidad en nuestras vidas – laresponsabilidad para lo recto, la autoridad y la voluntad.

La quinta urdimbre o ley dice que debido a que Dios es Vida, la vida esabundante, sin principio ni fin. Somos lo viviente de esta fuente inextinguibley por lo tanto, somos constantemente renovados.

La sexta urdimbre o ley es la totalidad. ‘Mira, eres sano. (completo, eninglés)’ Dios es Verdad y el hombre es la imagen y semejanza de Dios, por loque el hombre experimenta esto en salud y restauración.

Finalmente la séptima urdimbre o ley, es amar el hecho de que laperfección está presente. Aprendemos a aceptar nuestra valía divina y aexperimentar totalidad, compleción y satisfacción del divino Amor siemprepresente.

La operación de estas leyes es la expresión natural de Dios. Como lasemejanza de Dios, reflejamos todas las cualidades de Dios. Así que, si poralguna razón nos hemos volteado del rostro de Dios y pareciera queexperimentamos enfermedades o situaciones infelices, podemos volvernos conseguridad y naturalidad, tal como la tierra vuelve su rostro al sol. Porquecomo el sol que siempre está brillando, estas leyes siempre están disponibles.Es el reconocimiento que hacemos de ellas lo que hace que lasexperimentemos. Esto nos capacita para decir en las palabras del Salmista:‘En cuanto a mí, veré tu rostro en justicia; estaré satisfecho cuando despierte a tusemejanza.’ (17:15)

Deseo terminar con una pequeña historia acerca de un hombre que eraministro de una iglesia. Estaba ocupado preparando su sermón dominicalcuando llegó su hijita y le dijo: Papi, dame algo qué hacer. Él dijo: Ahorano, querida, estoy muy ocupado. Como toda niña pequeña, persistió, por loque el ministro se dirigió a su estante y extrajo un enorme pliego de papel quetenía impreso un mapa del mundo; lo rompió en pedacitos y los revolvió,diciendo: Ahí tienes, ¡únelo! Y continuó con su sermón. Al poco tiempo laniñita volvió diciendo que había terminado. Increíble, dijo el ministro,

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¿quieres decir que corregiste el mundo en unos cuantos minutos, mientras quenosotros llevamos intentándolo más de dos mil años? ¿Cómo lo hiciste?OH, dijo la pequeña, fue fácil. Tras el mapa había una imagen de un hombre,así que supe que si ponía correctamente al hombre, el mundo se corregiría.

De lo que hemos estado hablando es de tratar de corregir al hombre. Sien un pequeño grado podemos trabajar desde el enfoque divino del hombre,viéndolo como la verdadera identidad de Dios en expresión viviente, entoncescon seguridad nuestro mundo responderá.

II Parte – Preguntas y RespuestasPREGUNTA – Nos ha dado una visión nueva de la curación en la

Ciencia Cristiana. ¿Podría decirnos cómo y cuando vino la Ciencia Cristianaal mundo?

RESPUESTA – Lo que he presentado viene de la evidencia de nuestraexperiencia de que la curación que practicara Jesús y los primeros Cristianosestuvo basada en leyes divinas. El des.cubrimiento de dichas leyes divinasfue hecho por Mary Baker Eddy, quien vivió en Nueva Inglaterra, en losEstados Unidos de América, en el siglo diecinueve.

Estuvo inválida por muchos años y eso la condujo a buscar un métodoseguro de curación. En sus experimentos con homeopatía se dio cuenta queno es la propia droga lo que cura la enfermedad. Esto la condujo a investigarla causa mental sobre los efectos físicos.

En 1866 sufrió una caída en el hielo y su condición fue diagnosticadacomo fatal. Después de tres días pidió su Biblia y mientras leía una curaciónen los Evangelios, también ella quedó totalmente sanada. El impacto de estacuración sobre su pensamiento fue tal, que durante los siguientes tres años sededicó totalmente a investigar las Escrituras para aprender cómo había sidosanada. En su autobiografía, Retrospección e Introspección, dice que elresultado de su búsqueda fue que: ‘comprendí por primera vez en su significadoespiritual la enseñanza de Jesús y su demostración, y el Principio y la regla de la Cienciaespiritual y de la curación metafísica – en una palabra, la Ciencia Cristiana.’ (25:6-10)

Después de esto, comenzó a escribir el libro de texto Ciencia y Salud,publicado por vez primera en 1875.

PREGUNTA – ¿Cuál diría usted que es la mayor diferencia entre laCiencia Cristiana y otras denominaciones?

RESPUESTA - La mayor diferencia es que en la Ciencia Cristiana unodebe trabajar desde Dios hacia el hombre. La mayoría de las interpretacionesCristianas tienden a llegar hacia Dios desde una base humana, comenzandocon la proposición de que el hombre es un mortal y que debe luchar por mediode reglas y formas de oración para alcanzar a Dios.

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La Ciencia Cristiana comienza a enseñar la naturaleza de Dios, así quepodemos trabajar conscientemente desde lo que Dios es. Con elconocimiento de que Él es la Mente divina, Espíritu, Alma, Principio, Vida,Verdad y Amor, ha puesto en nuestras manos herramientas espirituales parauna Ciencia del Cristianismo o una ciencia de verdadera humanidad. Esta esla principal diferencia – en su actitud de enfoque.

PREGUNTA – Pero, ¿es básicamente lo mismo?RESPUESTA - La Ciencia Cristiana está basada en la gran enseñanza

del Antiguo Testamento hebreo, la raíz de la Cristiandad, y en nuestro NuevoTestamento, tal como toda verdadera enseñanza Cristiana. Pero enfatiza quedichas enseñanzas son científicas. No tenemos que trabajar por prueba yerror, porque se nos han enseñado las leyes espirituales. ‘Jesús enseñó a susseguidores que su religión tenía un Principio divino que podía expulsar al error y sanartanto al enfermo como al pecador.’ (C&S 136:1-4)

Desde su descubrimiento, la Ciencia Cristiana siempre ha tenido quetratar con la actitud de sus compañeros Cristianos que sostienen que no es másque otra secta diciendo: Síganme, yo tengo la verdad. En tiempos de la Sra.Eddy, la prensa la llamó: La secta de Boston. Tiene una iglesia y forma deadoración para aquellos que así lo quieran, pero esencialmente es la Cienciadel Cristianismo, y debido a que es una ciencia, no puede ser sectaria.

La Sra. Eddy habla a menudo de la unidad de la Ciencia y delCristianismo. ‘Se ha dicho, y con razón, que el cristianismo tiene que ser Ciencia y quela Ciencia tiene que ser cristianismo, de lo contrario uno de los dos es falso e inútil; peroninguno de los dos carece de importancia o de verdad y son iguales en demostración. Esoprueba que el uno es idéntico al otro.’ (C&S 135:20-24)

Generalmente se acuerda que los hijos de Israel del AntiguoTestamento ejemplifican a toda la humanidad. En el Nuevo Testamento,conforme los hijos de Israel reconocieron el advenimiento del Cristo, fueronconocidos como Cristianos. En la medida en que otras razas y fereconocieron al Cristo, también fueron clasificados como Cristianos.Conforme la humanidad hoy en día reconoce la Ciencia del Cristianismo,somos renombrados como Científicos Cristianos.

Estos cambios de nombre indican un cambio de mentalidad, un cambioen la naturaleza y actitud, y no son etiquetas superficiales.

En uno de sus primeros escritos llamado No y Sí, la Sra. Eddy declara:‘La Ciencia no es la contraseña de una denominación religiosa… Definida divinamente, laCiencia es la atmósfera de Dios; explicada humanamente y según Webster, es “elconocimiento debidamente clasificado que se refiere a las verdades y los principiosgenerales sobre los cuales se funda, y de los cuales se deriva.” Empleo tanto el sentidodivino como en el sentido humano;… pero insisto en que la Ciencia Cristiana es tan

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demostrablemente cierta, en lo que se refiere a las verdades invisibles del ser, comocualquier prueba que pueda darse de la integridad de la Ciencia.’ (9:22-7)

PREGUNTA – ¿Hay algún choque con alguna denominación Cristiana?RESPUESTA - No, estoy seguro de ello. Comúnmente es el área de los

términos o palabras – de las doctrinas y credos hechos por el hombre – en losque la gente tiende a pensar que hay diferencias que conducen a choques.Resulta interesante que en los (más) de cien años desde que la CienciaCristiana fue descubierta, muchas iglesias Cristianas han revivido la prácticade la curación en formas diferentes, en tanto que hace más de cien años, eseaspecto se negaba.

PREGUNTA – ¿No fue la curación parte de la iglesia primitiva, y luegoolvidada por cientos de años?

RESPUESTA - Pienso que en general, esto es cierto. La curaciónespiritual fue una parte natural de la iglesia Cristiana durante sus primerostrescientos años, y luego se enterró en controversia en las doctrinas, yconfundida con la superstición. El Principio divino de esta curación fuere.des.cubierto en la Ciencia Cristiana en el siglo diecinueve.

Anteriormente ya se me ha preguntado acerca de esta afirmación, deque la curación espiritual fue re.des.cubierta en la Ciencia Cristiana. La Sra.Eddy dice en Ciencia y Salud: ‘En el año 1866 descubrí la Ciencia del Cristo o lasleyes divinas de la Vida, la Verdad y el Amor, y nombré mi descubrimiento ChristianScience. (Es la) revelación final del Principio divino absoluto de la curación mentalcientífica.’ (C&S 107:1-7) Palabras tales como ‘leyes divinas’ y ‘el Principio divinoabsoluto de la curación mental científica,’ nos indican el por qué la nombró ellaCiencia. Pienso que esta es la gran diferencia entre la indudable curación queha ocurrido milagrosa pero intermitentemente durante la era Cristiana, y loque ha ocurrido desde el advenimiento de la Ciencia Cristiana. Hasta el siglodiecinueve, nadie parece haber investigado o des.cubierto el por qué ocurría.

PREGUNTA – Pero, ¿qué hay de Lourdes y lugares como ése?RESPUESTA - Comúnmente son lugares especiales donde alguien tuvo

una visión. La gente que acude ahí siente una atmósfera de fe y amorintensos. En ocasiones aquéllos que están buscando una curación, respondena ello y son sanados.

PREGUNTA – ¿Oran con esperanza, y dan la impresión de que oran conconocimiento?

RESPUESTA - De hecho sí, es cierto. Tratamos de obrar desde elprincipio y no desde el problema.

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PREGUNTA – Lo que nos ha estado diciendo no suena extraño. ¿No esmás que sentido común todo cuanto hay acerca del Cristianismo?

RESPUESTA - Sí, pero sentido común espiritual, el cual se extiendebastante más allá de lo que se conoce como sentido común práctico. El llanosentido común implica que yo lo manifiesto, el sentido común espiritual es elreconocimiento de que Dios lo está haciendo como yo.

PREGUNTA – Usted dijo en su plática que realmente hay un soloproblema que encaramos – que creemos estar separados de Dios. ¿Es eso loque está tras este problema particular en nuestro país – el apartheid – y nos daeso una señal de cómo debemos trabajarlo?

RESPUESTA - Así es. La separación del hombre, de Dios y de nuestroprójimo, parece a nuestros sentidos, ser el estado de nuestros asuntos; lasseparaciones y divisiones toman diferentes formas en nuestra experiencia,tanto individual como colectivamente. No es sólo en Sudáfrica. Lo quequizá es único en Sudáfrica, es que el problema haya sido aprobado por lalegislación. Aunque la legislación fuera cambiada, se requiere un cambio deactitud en la mayoría que legisla. Para ser verdaderamente efectivo – para seruniversalmente efectivo – este cambio debe ser algo más que una decisiónmayoritaria. Debe ser más que un cambio que afecte a Sudáfrica. A menosque haya una clara demostración de un punto de vista reorientado, no mostrarácómo el problema mundial puede ser solucionado. Pudiera ser que Sudáfricaesté en la atención mundial debido a que al resolver este problema para símisma, puede demostrar que hay una solución real; todo el mundo podría seranimado entonces a ver que hay un problema básico y no sólo un asunto local.Por lo tanto, debe y puede, ser resuelto sin batallas de poder y violencia; lassoluciones que se basan en estos métodos sólo alientan a los espectadores acreer en su eficacia y nada fundamental cambia. Así que, ¿de qué sirven?

En la Ciencia Cristiana tomamos nuestro punto de vista desde el primerrecuento de la creación en la Biblia donde dice: ‘Creó Dios al hombre a suimagen.’ (Gén.1:27) En el siguiente recuento de la creación donde Adán esformado del polvo de la tierra y Eva de la costilla de Adán, lo que tenemos esuna visión material de la creación, el opuesto exacto del primer recuento. Elprimer recuento está basado en la inseparabilidad – tal como un reflejo en elespejo no está separado del objeto ante el espejo – y el segundo recuento estábasado en la separación. Debido a que la mayoría de la gente elige ignorar elprimer recuento porque el segundo parece estar más cercano a la ‘realidad’, loanterior no invalida la verdad del primero. Como dijera al responder a unapregunta anterior, en la Ciencia Cristiana aprendemos a trabajar desde Dios,

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desde la perfección y la totalidad. Por lo tanto, respondiendo esta preguntaespecífica de cómo debiéramos trabajar espiritualmente este asunto delapartheid, con seguridad que debiera ser desde Dios, desde la perfección y latotalidad.

PREGUNTA – Uno de los temores mayores al resolver problemasraciales, es que la integración se convertirá en amalgamación. ¿No esesto una pérdida de la identidad?RESPUESTA - El significado verdadero de la integridad es hacer

completamente total, y esta compleción es diversidad en unidad, todo-en-unoasí como uno-en-todo. No es una mezcla.

La historia de Jacob/Esaú/Israel es el ejemplo clásico de separación,temor y des.confianza resuelto en el aprecio verdadero y la reconciliación ointegración. Comienza con cada uno de nosotros al apreciar nuestra propiavalía divina y adoptándola como nuestra perspectiva. Este verdadero sentidode individualidad, de ser indivisibles de nuestro origen divino, remueveentonces los temores humanos. Los rayos del sol jamás abandonan su origenni se traspasan unos a otros; la naturaleza que expresan es la de su origencomún.

Pienso que el último verso de un poema llamado El Siglo Nuevo (Po.22)

escrito por la Sra. Eddy, resulta muy pertinente aquí:‘Escrito sobre la tierra, sobre pétalos y flores:El Amor tiene una raza, un reino, un poder.

Querido Dios, cuán grande, cuán bueno Tú eresPara sanar el corazón dolorido de la humanidad;

Para probar la herida, para luego verter el bálsamo –Una vida perfeccionada, fuerte y tranquila.

El oscuro reino del dolor y el pecadoSe entrega – el Amor penetra

Y la paz se gana, y perdido está el vicio:El derecho reina, y la sangre no fue su precio.’

¡‘El Amor tiene una raza’! En sus escritos, la Sra. Eddy jamás dice razas,sólo raza, la raza, o la única raza, la cual es la raza humana. La mayoría delas veces comparamos la raza humana con la mortalidad – la raza de Adán –pero ‘sanar el corazón dolorido de la humanidad’ se experimenta cuandoaprendemos a adoptar lo divino, tanto como el origen como la conclusión de lahumanidad.

Puesto que hemos estado pensando concretamente acerca de Sudáfrica,me gustaría dejarlos con una pequeña observación. Hay dos palabrascortadas dentro de la mampostería en lo alto de la embajada de Sudáfrica enLondres. Estas palabras son Buena Esperanza. La primera vez que lasvimos nos preguntamos por qué las habían escogido para representar todo el

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país. Debe ser espiritualmente cierto que la solución de sus problemas no essólo para su propio beneficio y supervivencia, sino que debe ser un ejemplo ymotivación para el mundo entero. Debe representar la buena esperanza paratoda la humanidad.

PREGUNTA – Eso suena alentador, pero ¿no cree que es demasiadoideal para ser práctico?

RESPUESTA - Comprendo que es muy fácil hablar. Comenzar desdelo ideal es el punto de partida al trabajar desde Dios. Es esencial paracualquier solución eventual.

En el Sermón del Monte, Jesús fue radical en su instrucción: ‘Sed puesvosotros perfectos, así como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.’ Cuandoles dijo a sus seguidores: ‘amaos los unos a los otros,’ dijo que eso era unmandamiento. Pablo dijo en su carta a los Efesios: ‘os ruego que andéis como esdigno de la vocación con que fuisteis llamados, con toda humildad y mansedumbre,soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor, solícitos en guardar la unidad delEspíritu en el vínculo de la paz; un cuerpo, y un Espíritu, como fuisteis también llamadosen una misma esperanza de vuestra vocación; un Señor, una fe, un bautismo, un Dios yPadre de todos, el cual es sobre todos, y por todos, y en todos.’ (4:1-6) A menos queestemos dispuestos a adoptar esta actitud de seguridad y también de humildad,estaremos contribuyendo con muy poco de verdadero valor a la atmósfera delpensamiento del mundo – no estaremos siendo dignos de nuestra vocación.

COMENTARIO – ¡Nos dio mucho en qué pensar!RESPUESTA - Estoy seguro que estas ideas no son especiales de una

persona que da charlas. Todos las hallamos activas en nuestra propiaexperiencia de vida. ¿No es maravilloso de que cuando exploramos juntos lasverdades, el orador jamás dice nada que no supiéramos desde antes? Laexpresión pudiera diferir, pero él sólo nos llama a que recordemos algo queestaba en lo profundo de nosotros, desde antes que el tiempo fuera. Loreconocemos como sentido común, como sentido espiritual común.

III Parte - Traslación CientíficaAl considerar este tema de la curación, hemos visto que lo que

considerábamos como acontecimientos milagrosos son de hecho laexperiencia de las leyes de Dios en acción. Si esto es así, entonces ¿cómo nosexplicamos la evidencia ante nuestros ojos que dice que somos materiales ypor lo tanto sujetos a las leyes de la materia? Las leyes de Dios y las leyesmateriales son opuestas, y esto pareciera presentarse como un dilema. Laforma de resolverlo en la Ciencia Cristiana se llama: Traslación Científica.

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Nuestro método tiene que ser claramente científico porque toda solucióndebe estar de acuerdo a principios o leyes. Pero, ¿qué es traslación? Una desus aplicaciones se refiere al lenguaje en donde el significado es llevado deuna lengua a otra. Si yo estoy hablando en inglés y ustedes sólo entiendenfrancés, entonces lo que yo diga será incomprensible para ustedes. Necesitotraducir para que me comprendan. La Sra. Eddy dice: ‘La gran dificultad es darla idea justa al retraducir los términos materiales a la lengua espiritual original.’ Ycontinúa: ‘El lenguaje esencial de Dios se menciona en el último capítulo del Evangeliosegún San Marcos como la nueva lengua, cuyo significado espiritual se logra mediante “lasseñales que la siguen”.’ (C&S 115:9-11, 117:10-13) La práctica de la curación es la señalque la sigue y es una parte importante en la Ciencia Cristiana. Otraaplicación de la palabra la hallamos en la Biblia cuando ‘Enoc fue trasladado ycaminó con Dios’ – no experimentó la transición llamada muerte. Hallamos queambos sentidos de la palabra son esenciales en la Ciencia Cristiana. En unartículo llamado Una Sola Causa y Un Solo Efecto, la Sra. Eddy hace dosafirmaciones que abarcan estos usos de la palabra: ‘La Ciencia Cristiana traduce laMente, Dios, a los mortales,’ y ‘La Ciencia, comprendida, traslada la materia en Mente.’(Misc. 22:10-11 y 25:12)

Cuando una curación tiene lugar, se ve como si la materia enfermahubiera sido cambiada en materia saludable, o una situación discordante sehubiera hecho armoniosa. Todo mundo busca y espera naturalmente estassituaciones cambiadas, porque tanto la salud como la armonía, es lo normal.Salud significa incólume, total. Este estado normal es aquel donde todotrabaja en equilibrio, ya sea en el cuerpo o en las relaciones, física, social opolíticamente. Producir el cambio de lo discordante a la armonía, al balanceo equilibrio, tiene que ser re.des.cubierto o re.establecido.

Una palabra que describe el verdadero estado de equilibrio o salud queestamos buscando, es: coincidencia. Coincidir es corresponder con exactitud.Lo que buscamos es la coincidencia de lo humano con lo divino.

Se necesitan dos cosas para que se experimente esta coincidencia:primero debemos comprender algo de lo divino, es decir, de Dios, y segundo,debemos re.evaluar lo humano, lo cual comúnmente es equiparado con lomoral. Los mortales parecieran tener mentes propias, en tanto que Dios es laúnica Mente que hay, y esta Mente es inmortal.

Antes de volvernos hacia Ciencia y Salud para hablar más acerca de latraslación científica, resulta útil ver dónde es que viene en el Libro. Se hallaen las páginas 115 y 116, en el sexto Capítulo: La Ciencia, la Teología y laMedicina. En dichas páginas hay dos tablas: La Traducción Científica de laMente Inmortal y la Traslación Científica de la Mente Mortal. Ya hemossido conducidos y preparados en los cinco capítulos previos, a comenzar acuestionar a esta persona que llamamos yo, un mortal con voluntad propia.

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Esa voluntad a menudo está en conflicto con el profundo deseo del corazón deestar de acuerdo con su origen divino. Ahora la Ciencia nos muestra cómoresolver este conflicto, aclarando nuestro punto de partida.

Cerca del comienzo de este sexto capítulo, la Sra. Eddy pregunta:‘¿Existe más de una escuela de Christian Science? La Christian Science es demostrable.’Su respuesta no es sí o no, sino: ‘La Ciencia Cristiana es demostrable.’ Ellacontinúa: ‘Del infinito Uno en la Christian Science, procede un solo Principio y su ideainfinita, y con esa infinitud vienen reglas y leyes espirituales y su demostración, que, comoel gran Dador, son las mismas “ayer, y hoy, y por los siglos”.’ (C&S 112:3-4, 17-21) Y denuevo: ‘En la Ciencia, la Mente es una e incluye noúmeno y fenómenos, Dios y Suspensamientos.’ (C&S 114:11-12) Este enfoque sobre el ‘infinito Uno’ es esencial,porque de ninguna otra manera podremos resolver lo que aparece como unconflicto de opuestos.

TRADUCCIÓN CIENTÍFICA DE LA MENTE INMORTAL_________________________________________________________________________

Sinónimos divinosDIOS: Principio, Vida, Verdad, Amor, Alma, Espíritu, Mente, divinos.

Imagen divinaHOMBRE: La idea espiritual de Dios, individual, perfecta, eterna.

Reflejo divinoIDEA: Una imagen en la Mente; el objeto inmediato de la comprensión. —

Webster.

_________________________________________________________________________

TRASLACIÓN CIENTÍFICA DE LA MENTE MORTAL

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Primer Grado: Depravación.

IrrealidadFÍSICO. Creencias malas, pasiones y apetitos, temor, voluntad depravada, justificaciónpropia, orgullo, envidia, engaño, odio, venganza, pecado, enfermedad, malestar, muerte.

Segundo Grado: Las creencias malas en vías de desaparecer.

Cualidades de transiciónMORAL. Humanidad, honradez, afecto, compasión, esperanza, fe, mansedumbre,templanza.

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Tercer Grado: Comprensión.

RealidadESPIRITUAL. Sabiduría, pureza, comprensión espiritual, poder espiritual, amor, salud,santidad. (C&S 115:12-3)

Ambas tablas están relacionadas con la Mente; – la Mente, comprendidacomo Dios, es inmortal; percibidas como separada de Dios, es mortal. Losiguiente que observamos es que ambas tablas contienen tres elementos. Enla primera, DIOS, HOMBRE, IDEA. En la segunda, hay tres GRADOS.Pero miremos a las notas marginales en la primera: sinónimos divinos, imagendivina, reflejo divino. Hay un claro denominador común: lo divino. Lo divinoes Dios, y está explicado por medio de sinónimos; Dios tiene una imagen, elhombre; y la forma de la imagen es el reflejo. Las notas marginales para latraslación de la mente mortal son: irrealidad, cualidades de transición, y realidad.De nuevo, no son realmente tres, sino una – esta una es la realidad, y aparececomo cualidades de transición, o si no es comprendida, aparece como irreal.

Cada una de las dos tablas está reducida a un elemento: lo divino y larealidad. De esto se deduce que las dos tablas en sí mismas son en realidaduna sola, revelando que lo divino es la única realidad.

Siguiendo inmediatamente a este párrafo, hay un párrafo titulado:Universo espiritual. Universo significa literalmente, convertirse en uno, uno yvertere, donde todo se concentra de nuevo en lo que verdaderamente es enDios. Este párrafo dice: ‘Universo espiritual En el tercer grado la mente mortaldesaparece, y aparece el hombre a imagen de Dios. La Ciencia invierte de tal manera laevidencia ante los sentidos humanos corporales que confirma en nuestro corazón estadeclaración de las Escrituras: “Los primeros serán postreros, y los postreros, primeros”,para que Dios y Su idea puedan ser para nosotros lo que la divinidad realmente es ynecesariamente tiene que ser —omnímoda.’ (C&S 116:4-11)

Nuestro punto de partida es Dios, y Dios es definido por medio de sietesinónimos, como ‘Principio divino, Vida, Verdad, Amor, Alma, Espíritu, Mente.’ (C&S

115:13-14) Al comienzo de este capítulo en Ciencia y Salud se nos dijo que eldescubrimiento de la Ciencia Cristiana era el descubrimiento de ‘las leyesdivinas de la Vida, la Verdad y el Amor,’ fue la ‘revelación final del Principio divinoabsoluto de la curación mental científica.’ (C&S 107:1-2, 6-7) Este Principio divino de lacuración mental científica con leyes de Vida, Verdad y Amor, se traslada a símismo por medio del Alma o sentido espiritual, y así viene al pensamientocomo la realidad espiritual, como Espíritu, y es manifestado como la únicaMente que hay.

Con esta visión de los sinónimos divinos podemos comenzar a ver alhombre como el trabajo de estos sinónimos, la imagen divina: él es ‘la idea

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espiritual de Dios’ de Sí mismo, ‘individual,’ – indivisible desde Dios, ‘perfecto,’ –no que va a serlo, sino ya lo es, y por lo tanto, ‘eterno.’

Así que la propia idea, como está definida en Webster, es primero: ‘unaimagen en la Mente’ con ‘M’ mayúscula, ¡Mente! ¿Qué tan a menudo hacemosuna pausa para recordarnos que nosotros somos verdaderamente, el hombre,una idea en la Mente de Dios? Estamos mucho más propensos a pensar queestamos sentados aquí ‘afuera’ en la tierra, con mentes propias ‘separadas’, yque de algún modo Dios tiene que venir hacia nosotros y hacer algo, o quedependemos solamente de nosotros mismos. Luego la definición de ideacontinúa: ‘el objeto inmediato de la comprensión.’ Inmediato, no en medio, nointermedio, sino sin brecha alguna de tiempo o espacio. El objeto inmediatode la propia comprensión de Dios. Por tanto, esta imagen es verdaderamenteel reflejo divino, la imagen en la Mente.

Desde dicha premisa de la traducción de la Mente inmortal, en elsegundo que inmediatamente le sigue, – la traslación de la mente mortal –comienza a actuar. Sabemos cómo en un farallón el tranvía, en el momentoen que uno de los vagones comienza a descender, el otro comienza a ascender.Trabajan completamente como un solo movimiento, porque están en el mismocable. Lo mismo sucede aquí; lo divino desciende a la conciencia, y laconciencia humana responde a lo divino, pues están en el mismo cable.

20 Primer Grado: Depravación.

IrrealidadFÍSICO. Creencias malas, pasiones y apetitos, temor, voluntad depravada, justificaciónpropia, orgullo, envidia, engaño, odio, venganza, pecado, enfermedad, malestar, muerte.

La traducción de la Mente inmortal viniendo a la conciencia tiene esteefecto inmediato de mostrarnos que lo que llamamos lo físico, en realidad noes físico. Los términos dados en el Primer Grado son pensamientos o estadosnegativos, más que pertenecientes al cuerpo físico. El título es: Depravación.Esta palabra se deriva de de, completamente; y de pravus, distorsionado,torcido. Tenemos una visión distorsionada o torcida de la realidad. ¿No esesto lo que ‘Creencias malas, pasiones y apetitos, temor, voluntad depravada,’etc.verdaderamente es?

Notamos también que los términos dados se definen como irrealidad.En nuestros juicios humanos tenemos el bien y el mal, lo bueno y lo malo, lajusticia y la injusticia, etc., y al hacer dichas evaluaciones hemos producidodos realidades opuestas. Pero aquí el problema se re.define: dice que noestamos tratando con dos cosas, con el bien y el mal, sino sólo con una, la cuales real, y nada más es irreal. Este punto trascendente nos da una enorme

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sensación de poder sobre nuestras circunstancias y sobre nuestros pequeñospecadillos.

Conocía a un hombre que era un volcán de furia, y como a menudosucede, la descargaba en su sufriente mujer. Esta furia desenfrenada eracomo una enfermedad, muy destructiva. Cuando trabajamos juntos,comenzamos a trasladar la furia, y a ver que es un tipo de amor de la verdad;en realidad era fuerza espiritual, pero tan distorsionada, tan mal comprendidaque parecía como algo distinto, llamado furia destructiva. Pero al mirarladesde el punto de vista divino, transformó ese horrible rasgo humano, y dio ungiro total y volvió a su relación humana normal. Incidentalmente, el hombretambién era alcohólico. Yo no sé si eso produjo la ira, o la ira lo hizoalcohólico, pero cuando se sanó también del alcoholismo, le pregunté qué eralo que verdaderamente lo había regenerado. OH, dijo él, tan sólo vi que noera inteligente. ¡Tan sencillo como eso! Él había estado aceptando unavisión distorsionada de su propia valía y de su propio lugar en la familia comoun hombre no inteligente, y la visión distorsionada no era la realidad.

Cada día es un hecho más aceptado, y en verdad la profesión médicaestá conciente de ello, que las emociones y características como éstas,construyen los problemas físicos. Es importante que sean des.cubiertos,vistos, y mostrados como una visión distorsionada de la realidad, y finalmentedestruidos.

Recordemos siempre que no estamos trabajando desde lo físico, desdela depravación, sino que lo que siempre está ocurriendo es el impulso delCristo llegando desde lo alto. Si queremos limpiar una botella, la ponemosbajo el chorro y a medida que el agua limpia cae de lo alto, el agua sucia subey sale por arriba, hasta que sólo queda agua limpia. Eso es lo que estáocurriendo aquí. Tenemos esa botella sucia del concepto mortal de lahumanidad, y estamos dejando que el agua limpia del Cristo la llene y saque elagua sucia, haciendo que la traslación de la mente mortal parezca como sifuera un énfasis ascendente. Es como la ignición del auto, el elevarse es sóloen respuesta al descenso divino. En realidad no hay arriba ni abajo, sino quees una forma de expresión.

Nuestra propia divinidad, nuestro propio maravilloso ser-Cristo como laidea de Dios, es totalmente irresistible. Destruye estas creencias físicas, ysuelta su dominio absoluto sobre nosotros y nos muestra que son irreales, conlo que podemos dejar que el Cristo las elimine.

Así en el segundo grado:Segundo Grado: Las creencias malas en vías de desaparecer.

Cualidades de transición

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MORAL. Humanidad, honradez, afecto, compasión, esperanza, fe, mansedumbre,templanza.

Algo está sucediendo, – las creencias malas están desapareciendo. Noestamos paralizados en este estado de lo físico, nos estamos moviendo. ¿Espor lo tanto, este segundo grado, una mejoría del primero? ¿Qué sucede enuna oscura noche sin luna cuando amanece? ¿Se está haciendo la nochemenos negra o se está haciendo más luminosa? No viene al caso, porque hayun solo factor actuando, y esto es la luz. Así que el segundo grado no es enrealidad una mejoría del primero; no es que los mortales se estén haciendomejor, sino que están discerniendo una nueva luz.

Este tercer grado se llama: ‘Moral’ Lo moral no había estado muy demoda en los últimos años. Los valores y el comportamiento morales, seconsideran por algunos, como algo pasado de moda y arbitrario. Tal vez esnuestro sentido de lo que verdaderamente significa, lo que está pasado demoda. Si lo moral es algo en sí mismo, pareciera que tenemos la elección deaceptarlo o rechazarlo. Pero si lo moral es verdaderamente el Cristotrasladando y transformando la conciencia, entonces es algo no sóloextremadamente deseable, sino irresistible, y se convierte en la evidencia deque el progreso espiritual se está dando.

Si deseamos ser cínicos acerca de las cualidades morales aquí listadas,podríamos decir: bueno, la humanidad ya está siendo gentil con su prójimo, yla honestidad es simplemente no mentir, no robar. Esto sería considerarlas ensu nivel inferior. Pero también tienen un sentido muy exaltado; son fuerzaespiritual y no tan solo buenas obras sobre una base humana. Así con todasestas cualidades necesitamos expresar templanza – la última de las palabras eneste grado. Por ejemplo, necesitamos tener templanza en nuestro sentido decompasión, de manera que no sea sólo piedad por el que sufre, sino un deseode manifestar lo divino para remover el sufrimiento. Lo moral tiene que estartemplado para que por un lado, no estemos agobiados, y por otro lado, noseamos fríos, sino cálidos, con un sentido equilibrado de las cualidadesmorales. Estas cualidades no son un fin en sí mismas, sino manifestacionesde un cambio y de progreso.

Una referencia que confirma eso, está en Escritos Misceláneos, donde laSra. Eddy está hablando de cualidades tales como la humanidad y la fe: ‘Lahumanidad pura, la amistad, el hogar y el amor recíproco, traen a la tierra un goceanticipado de cielo. Unen alegrías terrenales y celestiales, coronándolas con bendicionesinfinitas.’ Entonces prosigue: ‘¿Quién recuerda que la paciencia, el perdón, la feinquebrantable, y el afecto son las señales por medio de las cuales nuestro Padre indica lasdistintas fases de la redención del hombre del pecado y su entrada en la Ciencia?’ (100:23-26,

29-33) Los síntomas son transitorios, no son cosas en sí mismos, sino

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absolutamente necesarios como indicaciones de que la traslación estáocurriendo. La nota marginal confirma esto, las llama: Cualidades deTransición.

Estamos haciendo la transición, estamos cruzando, transitando hacia.Estamos pasando de la irrealidad hacia la realidad. Glorioso, y no estáocurriendo debido a que estemos haciendo nuestro trabajo, sino debido alpoder irresistible del Cristo viniendo a la conciencia humana a hacer su trabajomaravilloso y poderoso de transformar nuestros juicios acerca de lo que lahumanidad verdaderamente es. Trabajar desde lo divino, desde Dios, eso eslo que amamos hacer.

Tercer Grado: Comprensión.

RealidadESPIRITUAL. Sabiduría, pureza, comprensión espiritual, poder espiritual, amor, salud,santidad.

Observamos que hay siete palabras aquí. ¿Pudiera ser posibleidentificarlas con los siete sinónimos para Dios?

¿No es la Mente quien se relaciona con la sabiduría?La pureza pertenece claramente al Espíritu.La comprensión espiritual define al Alma.

El poder espiritual es Principio.Y el amor, con ‘a’ minúscula, el amor que ama dar,

que ama deponer el sentido mortal, es Vida.Salud describe al sinónimo de Verdad.

Santidad es seguramente Amor.Así, en el tercer gado, comprensión, hemos vuelto a la naturaleza de

Dios, y fue desde Dios desde donde surgimos primero. Comprensión, estarbajo de. (En inglés = understanding; under = por debajo, stand = estar parado) Otrapalabra que tiene la misma derivación es sustancia, sub = por debajo, stand = estarparado. Lo que aquí estamos comprendiendo es la verdadera sustancia del serdel hombre y las palabras no son más que características completamenteespirituales. Son la realidad del hombre. Pero siempre recordemos que noestamos llegando a esta comprensión sólo al final de nuestras jornadas; dehecho hemos surgido de ese estado como la propia idea espiritual de Dios, ‘elobjeto inmediato de la comprensión’ que hemos sido siempre antes que el tiempofuera.

Jesús utilizó esta afirmación cíclica: ‘Salí del Padre, y he venido al mundo;otra vez dejo el mundo, y voy al Padre.’ (Juan 16:28) Salí de la realidad, y he venido al

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aparente mundo dual, pero al seguir saliendo de la realidad estoy trasladandoel dualismo en grados y voy de nuevo a esta realidad inviolable del ser.

Es lo que verdaderamente hacemos todo el tiempo, ya sea que estemoscorrigiendo un error recalcitrante como con significado de vida, o que estemoscorrigiendo una pequeña falta en un cálculo en el anverso de una envoltura;hemos venido del perfecto Principio infinito del bien, justo al punto dondeparece haber un error, y entonces el Principio resuelve el error y de nuevovamos al Principio del bien. En realidad jamás hemos dejado ese círculo; esla propia comprensión de Dios actuando como nosotros.

Esta es la coincidencia de la divinidad y la humanidad. Estamosprobando para nosotros que la humanidad no es mortal, sino la experienciaviviente de la divinidad. ‘La divinidad del Cristo se manifestó en la humanidad deJesús.’ (C&S 25:34-35) ‘Juan vio la coincidencia de lo humano y lo divino, manifestada en elhombre Jesús, como la divinidad abrazando a la humanidad en la Vida y su demostración—reduciendo a la percepción y comprensión humanas la Vida que es Dios.’ (C&S 561:18-22)

Me agrada pensar que no fue un hombre llamado Jesús quiendemostrara al Cristo, sino más bien fue la verdad-Cristo quien trajo a Jesús ala expresión humana. De igual modo, no fue alguien llamado Mary BakerEddy quien descubriera y fundara la Ciencia Cristiana, sino fue la propiaCiencia Cristiana de Dios quien produjera el portento llamado Mary BakerEddy. Ocurre lo mismo con nosotros. No es cada uno de nosotros tratandofielmente de ser Cristianos y de alcanzar la santidad, sino más bien es el hechode la individualidad del Cristo lo que nos está produciendo, lo que estáperfilando nuestras vidas y espiritualizando nuestra conciencia; es el poder deDios produciendo la transformación en el carácter humano.

A pesar de que hemos tan sólo mirado sobre la superficie de latraslación científica, aún así tiene profundidades maravillosas, y maravillosaimportancia para nosotros. Es una vislumbre del método por el cual andamospara redimir o cambiar cualquier situación desagradable. Elevamos nuestroconcepto de lo humano, para que sea redimido de un ser mortal y en su lugarse halle la experiencia viviente de lo divino. Aún parecemos un humano, aúnactuamos y nos comportamos como humanos, pero la manera como lohacemos es completamente diferente. ¿Es blanca o negra la nube? Si lavemos desde abajo pudiera parecer negra, pero si la vemos desde arriba, esblanca. Lo mismo pasa con la humanidad; si la vemos desde abajo parece sermortal, pero si la vemos desde arriba, se ve como divina, es inmortal.

El mundo está lleno de leyendas acerca del hijo del rey que es raptado yllevado a un país lejano. Por medio de sufrimiento y aventuras, finalmenteregresa a casa de su padre. Pareciera como si todos los pueblos tuvieranhistorias semejantes a ésta. Si la humanidad se considera a sí misma comosimples mortales, en realidad se hallará en un estado de rapto. El hijo ha sido

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robado de la casa de su padre. Pero en tanto que buscamos nuestro camino deregreso, hallamos la urdimbre dorada con la cual poder regresar, porque algoen nosotros sabe que pertenecemos al reino del Padre. Algo dentro denosotros sabe que no somos mortales. Así que cuando tocamos las grandesverdades de nuestro ser, algo dentro de nosotros dice: sí, sé que es cierto, quees lo que yo soy. Es el reconocimiento de lo que eternamente somos.¡Reclamamos nuestra herencia verdadera y original!

IV Sección – EL LIBRO DE TEXTO DE

LA CIENCIA CRISTIANA

Todo lo que sabemos y comprendemos que la Ciencia Cristiana vienedirecto de Dios. Como estudiantes del Verbo de Dios, la Biblia y Ciencia ySalud con Clave de las Escrituras, por Mary Baker Eddy, son nuestra guía.La Sra. Eddy dice que el Libro de Texto ‘contiene la exposición completa de laChristian Science, o sea, la Ciencia de la curación por la Mente.’ (465:29-31)

Por muchos años hemos escuchado a la gente decir cosas tales como:Ciencia y Salud es demasiado difícil y abstracta, denme algo más simple yrelevante; o preguntan: ¿Cuál es la base para su actitud de que este libro tieneautoridad divina, santidad espiritual, y un efecto sanador?

La Ciencia Cristiana enseña que la curación es tan posible hoy en díacomo en los tiempos de Jesús. Jesús sanaba conociendo el Principio divinode totalidad; y este conocimiento no era algo exclusivo de Jesús y de susseguidores inmediatos. Cuando uno investiga esta barrera que tanta gentecree que está entre ellos y el mensaje de Ciencia y Salud, uno halla que ellibro no está contemplado, como un Libro de Texto para ser leído de principioa fin antes de ser utilizado como un libro de referencia. La Biblia también escomúnmente utilizada de este modo fragmentado. El poder de estos librosyace en su totalidad coherentemente integrada. Sólo por medio del punto devista de la totalidad es que un detalle permanece válido y poderoso y no, autocontradictorio o auto destructivo.

En la Ciencia Cristiana nos referimos a la Biblia y a Ciencia y Saludcomo nuestro par de Libros de Texto. Este último nos muestra por qué elprimero es verdaderamente el ‘libro de la vida.’ Cuando la Sra. Eddydescontinuó a los pastores personales (incluida ella misma) en las iglesias, ellaordenó la Biblia y Ciencia y Salud, para que ocuparan su lugar, llamándolos:‘Vuestro pastor dual e impersonal.’ (Misc.322:10-11) En un artículo llamado Ciencia yFilosofía, ella dice: ‘Preveo y predigo que cada época más avanzada de la Verdad serácaracterizada por una comprensión más espiritual de las Escrituras, la cual mostrará su

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marcada consonancia con el libro de texto de la curación por la Mente en la CienciaCristiana, Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras.’ (Misc.363:30-3) En otra ocasión, enuna carta a un periódico de Nueva York, la Sra. Eddy dijo: ‘La Ciencia Cristianapresenta el Principio divino demostrable y las reglas de la Biblia, hasta ahora nodescubiertas en las traducciones de la Biblia y faltantes en los credos.’ (My.299:13) Enningún lugar de sus escritos indica ella que Ciencia y Salud suprime a laBiblia, la suplementa o la reemplaza. De hecho su título completo, Ciencia ySalud con Clave de las Escrituras, denota su relación con toda claridad.

Si estamos verdaderamente interesados en algún tema, estemospreparados para avanzar, en lugar de tan sólo escuchar conferencias o hacerpreguntas, para que en forma natural nos volvamos a los Libros de Texto paraaclararnos los elementos del tema. Así que, ¿de qué trata el Libro de Textode la Ciencia Cristiana? No hay camino más rápido para llegar al corazón delo que trata un libro, que escudriñar su Índice. De esta forma también uno veel cuadro completo de un vistazo. Así que miremos al mismo Índice.

Índice

PrefacioI. La oración

II. Reconciliación y eucaristíaIII. El matrimonioIV. La Ciencia Cristiana en contraste con el espiritismoV. El magnetismo animal desenmascarado

VI. La ciencia, la teología, la medicinaVII. La fisiologíaVIII. Los pasos de la VerdadIX. La creaciónX. La Ciencia del serXI. Respuesta a algunas objecionesXII. La práctica de la Ciencia CristianaXIII. Enseñanza de la Ciencia CristianaXIV. Recapitulación

CLAVE DE LAS ESCRITURAS

XV. Génesis

XVI. EL Apocalipsis

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XVII. Glosario

XVIII. Los frutos de la Ciencia Cristiana

¿Qué podemos aprender de nuestro primer vistazo de este índice?Notamos que hay dieciocho capítulos y que los últimos cuatro estánencabezados como Clave de las Escrituras. (También son setecientaspáginas, por lo que es un libro grande.) Primero hay un Prefacio que nosintroduce al doble aspecto que domina al libro: el hecho de que Dios puede sercorrectamente comprendido, y que el poder sanador surge de estacomprensión.

El primer capítulo es LA ORACIÓN. Todo nuestro trabajo en las cosasespirituales comienza con la oración. Es el hambre del corazón humano porDios, – es el profundo deseo de conocer lo que es la realidad, lo que es lasustancia. Pero, en realidad ¿por qué estamos orando? La oración es enocasiones un requisito sincero para sanar o una bendición por bien-estar.Pero cuando vemos más adelante dentro de la pregunta, nos damos cuenta quepor lo que estamos orando fundamentalmente es por algo más profundo;verdaderamente es por la unión consciente con Dios, con nuestra fuentedivina. ¿No es esta nuestra añoranza básica? La Oración del Señor, [elPadre Nuestro] común a todos nosotros, comienza con estas palabras: PadreNuestro, palabras que tanto reconfortan, como expresan la naturaleza de loque estamos buscando. Orar es nuestro reconocimiento de este deseo de seruno con lo divino, con nuestro origen-Padre.

El Segundo capítulo es RECONCILIACIÓN Y EUCRISTÍA. La palabrareconciliación [‘atonement’, en inglés, at-one-ment=en una sola mente] comose usa en teología, significa unidad, reconciliación, y su derivación esliteralmente, en una. En una sola mente, por lo tanto, no es sólo un juego depalabras. Algunos diccionarios aun incluyen las palabras de la Sra. Eddy: ‘Lareconciliación es la ejemplificación de la unidad del hombre con Dios, por la cual elhombre refleja la Verdad, la Vida y el Amor divinos.’ (C&S18:1) Mas el capítulo esllamado Reconciliación y Eucaristía, y en este contexto, eucaristía se enfocaen el precio que debemos pagar para experimentar esta unidad de mente. Esteprecio implica que tenemos que deponer todo sentido personal de un yoseparado. La impecabilidad de la vida de Jesús representa la renuncia delsentido mortal de la vida de uno mismo; él no tuvo ningún sentido de símismo como una persona separada de Dios, llamada Jesús. Su divinaidentidad como el Cristo fue su ser total; demostró al hombre reunido con, oreconciliado con, Dios.

Nuestra oración por una unidad de mente de la humanidad con ladivinidad, nos conduce al Tercer capítulo, EL MATRIMONIO. ‘Lo que Dios ha

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unido’, es el verdadero humano con lo divino – la condición de hombre y lacondición de mujer (condición de cualidades masculinas y condición decualidades femeninas) de Dios. Nuestra humanidad se halla en estadomatrimonial con nuestra divinidad. Todo lo que está comprometido en ti y enmí en nuestras actividades correctas, es lo divino operando como tú y comoyo. Así que ahí hay un hermoso estado de matrimonio cuando lo divino estáoperando no por medio de nosotros, sino como nosotros.

El Cuarto Capítulo es LA CIENCIA CRISTIANA EN CONTRASTE CON ELESPIRITISMO y maneja la creencia del espiritismo en cualquiera de sus formas.Si se piensa de Dios obrando por medio de una persona, Él requeriría de unmédium; pero al pensar de Dios obrando como lo que llamamos tú o yo, eso eslo que significa el término Ciencia Cristiana. NO somos personas que tienenque tomar las ideas de Dios y hacer algo con ellas, más bien somos laoperación directa de estas ideas de Dios. Es como cuando somos honestos, ointeligentes, o amorosos, esas cualidades operan como tú y yo, y no por mediode nosotros como personas. Un Cristiano NO es alguien con una voluntadpersonal; sino es un Científico espiritual. En realidad NO hay persona algunaen el cuadro; tan sólo la operación directa de Dios. Esto es lo que des.cubre odes.enmascara la mentira o influencia errónea.

El Quinto Capítulo es EL MAGNETISMO ANIMAL DESENMASCARADO.Magnetismo animal es el término que se utiliza en la Ciencia Cristiana paradenotar todo error, pero esencialmente, el error del sentido personal y lavoluntad personal. Esto es lo que mantiene a la humanidad en servidumbre yesclavitud. La Ciencia Cristiana des.enmascara esta pretensión de controlpersonal despótico del hombre y muestra que el magnetismo animal no tienepoder en sí mismo ni autoridad alguna. Des.enmascarar a este error, revela almismo tiempo la verdad en nuestros corazones y vidas de que ‘el hombre segobierna a sí mismo debidamente sólo cuando está dirigido correctamente y gobernado porsu Hacedor, la Verdad y el Amor divinos.’ (C&S106:10-13) Este es el hombre de Dios.Este es el verdadero Científico Cristiano.

El Capítulo Sexto, LA CIENCIA, LA TEOLOGÍA Y LA MEDICINA, es unaconfirmación alentadora de este punto, porque principia: ‘En el año 1866 descubríla Ciencia del Cristo o las leyes divinas de la Vida, la Verdad y el Amor.’ (C&S107:1-2) FueMary Baker Eddy quien, al hacer este descubrimiento, lo nombró ChristianScience (Ciencia Cristiana) y escribió el Libro de Texto. Pero jamáspodremos actuar con convicción si meramente aceptamos algo que se nosdice, por lo que el ‘yo’ que hizo el des.cubrimiento de las leyes divinas nosólo es Mary Baker Eddy, sino también cualquier estudiante que ha sidopreparado a través de los pasos de los cinco capítulos previos. A menos quenosotros hagamos también el des.cubrimiento, en realidad no habremoscomprendido.

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Los primeros cinco capítulos capacitan al estudiante a participar demodo ordenado en lo que la Sra. Eddy describe como la ‘amorosa preparaciónde Dios’ de vida, mente y corazón antes del des.cubrimiento de la realidadespiritual que hace que tenga sentido para nosotros. Lo que verdaderamentetiene sentido es el hecho de que Dios opera por medio de leyes divinas y nofortuitamente.

El método por el cual lo falso de la evidencia material es cambiado porla realidad espiritual, como ya hemos visto, es la traslación.

A esta altura el libro muestra que las leyes divinas se están comenzandoa verter dentro de nuestra conciencia, leudando, trasladando y transformandotodo. La Ciencia de Dios y del hombre viene a nosotros como verdaderateología – ‘yo y el Padre uno somos’ (Juan10:30) como Jesús lo definió – y esaconvicción medicina o sana la condición humana de aparente separación denuestro Padre. La Ciencia nos da la visión del Cristo, la cual sana, cambia yresucita todo en lo humano. Veremos evidencia de esto en el siguientecapítulo.

El Capítulo Siete, LA FISIOLOGÍA, trata primero con el sentidofisiológico del cuerpo, el cual consideramos que es el trabajo de los órganos,estando sujeto a enfermedad y muerte. Mas a medida que permitimos que latraslación del Cristo llegue a nuestra conciencia y derroque nuestros falsosconceptos, experimentamos al cuerpo, no como orgánico o fisiológico, sinocomo la incorporación de las actividades, facultades y poder de Dios.

Este capítulo nos muestra un estado de transición de los cinco sentidosfísicos cediendo hacia Dios; aprendemos que es la Mente, no el cerebro, quiencontrola el cuerpo. Al famoso pianista Ashkenazy se le preguntó en unaocasión cómo es que había alcanzado esa maestría para tocar música con tantaexcelencia. Su respuesta fue: ‘Practico y practico y practico, hasta que ya nosoy yo mismo quien toca la música, sino la música tocándome a mí.’ Asípodríamos decir que la fisiología de Ashkenazy es transformada; ya no es élmismo sentado ahí, diciendo conscientemente a sus dedos cómo hacer esto oaquello, sino la música fluyendo por medio de él, como él, trasladando elsentido físico personal de sí mismo. Todos hemos experimentado esto detiempo en tiempo en cierto grado.

El Capítulo Ocho es, LOS PASOS DE LA VERDAD. Ahora nos damoscuenta que estos anhelados pasos de la Verdad que estamos tratando fielmentede llevar a cabo, sólo son posibles de cumplir debido a que de hecho son pasosque nos están conduciendo desde la Verdad. Es un ciclo. La perfecciónpudiera parecer ser una meta absoluta, un ideal imposible, pero las demandasde la Verdad sobre nosotros pueden ser cumplidas porque nuestros pasos sonverdaderamente los pasos de la propia Verdad. Al final de este capítulo se

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nos dice: ‘El mandato divino: Sed, pues, vosotros perfectos, es científico, y los pasoshumanos que conducen a la perfección son indispensables.’ (C&S253:34-2)

El Capítulo Nueve es, LA CREACIÓN. Nuestra visión es abierta a unavista totalmente nueva del sentido de creación. El concepto del hombrealejado de Dios y llevando el peso de tratar de crear, es destruido. Comovimos en el Sexto Capítulo, estamos des.cubriendo lo que Dios ha creado.‘No puede haber sino un solo creador, que lo ha creado todo. Cualquier cosa que parezcaser una nueva creación, no es sino el descubrimiento de alguna idea distante de la Verdad.’(263:21-24) Dios NO ha creado un universo material. El universo material es lasombra de la realidad. Dios está infinitamente expresado como ideasespirituales. Todo lo que realmente existe es Dios en expresión de Sí mismo,y nuestra nueva visión de la creación es simplemente ‘los innumerables objetos dela creación,’ que repentinamente ‘se harán visibles.’ (264:16-18) Debido a quenuestra visión es más clara, es por lo que vemos mejor. Comenzamos a ver lacreación plena, completa y realizada, ahora.

El Capítulo Diez es LA CIENCIA DEL sER. La frase Ciencia del ser,siempre se escribe con C mayúscula para ‘Ciencia,’ puesto que es la Cienciade Dios, y con s minúscula para ‘ser,’ porque como diríamos, se refiere anuestro ser. (El Libro de Texto siempre se reserva las letras mayúsculas paraDios, y las minúsculas para hombre como la actividad de Dios.) Si la Cienciaes la verdad de nuestro ser y todo viene de Dios, esta es la Ciencia de nuestroser, el Ser de Dios. El Ser de Dios es nuestro verdadero ser.

Este es un Capítulo largo lleno de hermosos detalles de cómo lo divinollega con el poder del Cristo a iluminar, transformar y redimir todos losdetalles de nuestro sentido humano de ser. Termina con treinta y dossecciones numeradas llamadas ‘la plataforma.’ La Sra. Eddy las presentadiciendo: ‘Cuando se comprenda la siguiente declaración de principio, y la letra y elespíritu aporten sus testimonios, se demostrará la infalibilidad de la metafísica divina.’(330:9-11) La palabra plataforma se deriva de dos palabras: plato y forma, yplato es: un enlace. Así la plataforma nos ofrece un enlace de preceptosespirituales acerca de la naturaleza de Dios, la naturaleza del Cristo, lanaturaleza de lo humano, y la solución del problema del mal. Sin lugar adudas que sobre esto podemos pararnos con seguridad.

El Capítulo Once es RESPUESTA A ALGUNAS OBJECIONES. ¿Cuántasveces comenzamos lo que decimos con un ‘pero...’ o con un ‘qué tal si esto oaquello’? Este Capítulo dice que sólo objetamos cuando consideramos lascosas fuera de su contexto y las mantenemos como algo separado. Alconsiderar las ideas alejadas de la totalidad de Dios, fuera de su contexto real,pierden su relación con el todo.

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Las objeciones son contestadas si las vemos siempre como parte deltodo, desde dentro del rango de referencia del divino todo en sí mismo. Así, amenudo en la vida cuando encontramos cosas que objetamos, es debido a quelas hemos separado del propósito y del plan del universo.

Este propósito debe ser la expresión de Dios de Sí mismo como hombre,no un hombre teniendo sus propias ideas sin relación alguna con Dios. Mas sipodemos reintegrarnos a nosotros mismos con el sentido del propósito ytotalidad divinos – viendo todo, enlazado con todo lo demás, – aquello queobjetamos, o que es objetivo, será visto como parte del todo. Será respondidodesde dentro, desde el punto de vista subjetivo.

El Capítulo Doce es LA PRÁCTICA DE LA CIENCIA CRISTIANA. Alresponder las objeciones, poniendo todo de retorno a Dios y reconociendo quehay un plan divino donde todo se relaciona con todo lo demás, estamos dehecho, practicando la Ciencia Cristiana. Estamos removiendo las objecionesde la mente humana al trabajar dentro de la intacta totalidad del ser, viendotodo de nuevo encajado dentro de su propio lugar y valor en el plan ypropósito divinos.

‘La Práctica de la Ciencia Cristiana’ es un largo y muy prácticocapítulo de curación, el cual termina con un recuento alegórico de un casolegal. El prisionero juzgado es acusado de transgredir las leyes de la materia.Fue encontrado al lado de un amigo enfermo en cama, mas al hacer estorompió las leyes de la salud que pretenden gobernar al cuerpo material. Estees su crimen y es condenado a la muerte. Pero después se obtiene licenciapara celebrar el juicio ante el Tribunal del Espíritu. La Ciencia Cristiana,compareciendo como abogado defensor, alega la libertad del hombre bajo laley de Dios. La ley de Dios lo libera de las espurias leyes de la mortalidad.El caso juzgado termina con la frase de la sentencia: ‘Científicos Cristianos, seduna ley para vosotros mismos que la mala práctica no puede dañaros, ni dormidos nidespiertos.’ (442:33-35) ¡’Sed una ley para vosotros mismos’!

El Capítulo Trece, LA ENSEÑANZA DE LA CIENCIA CRISTIANA, nos dicea dónde volvernos para nuestra enseñanza, cómo ser enseñados por Dios, ycómo no depender del hombre para la instrucción. Trata de la ética de cómorelacionarnos con los demás; no como una persona diciéndole a otra personalo que debe saber, creer o hacer. Más bien los alentamos a ser enseñados porDios, a volvernos a los Libros. Es un hermoso y delicado capítulo. Laenseñanza se relaciona con la educación, y la palabra educación viene del latíneducare, que significa conducir, deducir. Toda buena educación es extraída oconcluida de la individualidad que Dios ya ha sentado. Por lo tanto estamosocupados con darnos a nosotros mismos a nacimiento, desde la verdaderanaturaleza de Dios. Así que no es de sorprenderse encontrarnos cerca del

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final del capítulo, ese maravilloso párrafo con la nota marginal: ‘Obstetriciacientífica.’ (463:7-8)

El Capítulo Catorce es RECAPITULACIÓN. ¿Qué es lo que se está dandoa luz? ¿Cuál es esta naturaleza de Dios? Este capítulo está constituido deuna serie de preguntas y respuestas. La primera dice: ¿Qué es Dios? (C&S465:9)

El capítulo completo es una elaboración de la respuesta, porque eso,básicamente, es la primera, la última y la única verdadera pregunta. Así queRecapitulación permite que Dios revele para nosotros lo que Él es. Con lasrespuestas a estas preguntas somos enseñados acerca de Dios. La respuesta ala primera pregunta es: ‘Dios es incorpórea, divina, suprema, infinita Mente, Espíritu,Alma, Principio, Vida, Verdad, Amor.’ (C&S465:10-12)

Toda idea que requiramos en la totalidad del ser, puede ser hallada endichos sinónimos. Pero, ¿al estar en mayúsculas, los siete sinónimos paraDios, no corremos el riesgo de tener siete dioses? De ahí que la segundapregunta sea: ‘¿Son sinónimos esos términos?’ (C&S465:13) La respuesta, en parte,dice: ‘Lo son. Se refieren a un Dios único y absoluto.’ (C&S465:14-15) (Es por esto porlo que notarán cuán a menudo nos referimos a los sinónimos para Dios.)Pero debemos avanzar. La siguiente pregunta dice: ‘¿Hay más de un Dios oPrincipio?’ Y la respuesta es: ‘No lo hay. El Principio y su idea es uno, y ese uno esDios, el Ser omnipotente, omnisciente y omnipresente, y Su reflejo es el hombre y eluniverso.’ (C&S465:19-1) Ahí es donde encontramos esta declaración sobre la cualfundamos nuestra seguridad de lo inseparable de Dios y el hombre, comonuestra base de operación: ‘El Principio y su idea es uno.’

Con seguridad llegamos a la culminación en el Libro, y se abre unanueva sección que consiste de cuatro capítulos, conformando LA LLAVE DELAS ESCRITURAS. Los siguientes dos capítulos tienen títulos del primer y delúltimo libros de la Biblia.

El Capítulo Quince, GÉNESIS, comienza con la historia de los Siete Díasde la Creación, mostrando que la naturaleza séptupla de Dios, de hechosiempre ha sido presentada a la humanidad a través de las Escrituras. LosSiete Días son los símbolos Bíblicos de lo que llamamos los Siete Sinónimospara Dios. Estos días muestran cómo los siete sinónimos que son Dios,generan dentro de nosotros, una comprensión de lo que ellos significan. Escomo un maestro en un salón de clases, enseñando a los niños lo que son losnúmeros y diciéndoles que posteriormente les mostrará lo que representan,cómo usarlos, y qué hacer con ellos. Así el Capítulo del GÉNESIS nosmuestra cómo la séptupla naturaleza divina de Dios se despliega a sí misma enla vida humana, regenerando nuestro concepto de nosotros mismos, para queya no creamos más que procedemos de Adán y Eva, o de la Teoría de laEvolución de Darwin, sino que estemos realmente conscientes que nacimos deDios, ahí donde la evolución material parece estar. La séptupla naturaleza

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generativa de Dios expone la irrealidad de la historia de Adán, en la cual losmortales parecen tener su origen.

El Capítulo Dieciséis, EL APOCALIPSIS, transforma ahora nuestrosentido del final, tal como Génesis transformara nuestro sentido del origen.Desde el Libro de la Revelación (Apocalipsis) en la Biblia, el Libro de Textoextrae unos cuantos versículos. Presentan al ángel con el librito, a la mujercoronada por Dios, simbolizando al hombre genérico, y muestra cómo elproblema del mal o el gran dragón rojo, es finalmente resuelto cuandopermitimos que la santa ciudad descienda de Dios a nuestra conciencia. Estecapítulo llega a su culminación con la ciudad en cuadro, llamada en ellenguaje del Libro: el Verbo, el Cristo, el Cristianismo y la Ciencia. LaBiblia comienza con ‘En el principio creo Dios los cielos y la tierra’. Y la mismaBiblia termina con el Revelador, diciendo: ‘Vi un cielo nuevo y una tierra nueva;porque el primer cielo y la primera tierra pasaron... Y yo Juan vi la santa ciudad, la nuevaJerusalén, descender del cielo, de Dios...’ (Apoc.21:1-2) Este Capítulo Dieciséis terminacon el Salmo No. 23, el cual declara el estado de la conciencia divina que Juanfinalmente describe. La Sra. Eddy sustituye la palabra Amor por las palabrasde la Biblia para El Señor, sustituyendo ‘el concepto corpóreo con el conceptoincorpóreo o espiritual respecto a la Deidad.’ (C&S578:2-3)

Luego ahí están los Dieciséis principales Capítulos del Índice. Puedenser considerados en grupos de cuatro: En el Primero oramos por nuestraunidad con lo divino. Cuando comenzamos a abandonar el sentido deseparación del ser, comenzamos a experimentar la reconciliación (unidad enuna sola mente). Enseguida hallamos que estamos enlazados con lo divino yque lo divino opera como lo humano, pero no a través de una persona. Enestos primeros cuatro capítulos, nuestra búsqueda da principio para revelar launidad de Dios y el hombre.

En el Segundo grupo, el sentido personal o magnetismo animal, esdes.enmascarado como el problema del mal, y simultáneamente des.cubrimoslas leyes de Cristo que trasladan o transforman todo en lo humano. Elverdadero humano es visto como el ser-Cristo que fue ejemplificado comoCristo Jesús. No se nos deja con un concepto fisiológico de persona como‘cuerpo’, sino como la verdadera ‘incorporación’ de Dios, y hallamos quenuestros pasos son los de la propia Verdad. En este grupo, debido a quehemos comenzado a des.cubrir la nada del mal, empezamos a trasladar nuestravisión del mundo.

Un Tercer grupo se abre nuestra visión a un nuevo sentido de creación yvemos que Dios es de hecho, nuestro verdadero ser. Esta totalidad entretejidaresponde nuestras objeciones. La Ciencia Cristiana está practicándonos. Eneste tercer grupo estamos viendo ahora que somos la verdadera demostraciónde Dios.

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El Cuarto grupo nos da la Ciencia que subyace dentro de los primerosdoce capítulos – aquello que hace que sean. ‘La Enseñanza de la CienciaCristiana’ explica que Dios, no la persona, es nuestro maestro.

‘Recapitulación’ extrae de nosotros, por medio de preguntas y respuestas,lo que Dios es y cómo es que Dios actúa.

Luego los dos últimos capítulos de ‘La Llave de las Escrituras,’ nosmuestra esta misma historia en la Biblia. En ‘Génesis’ los Siete Días de laCreación simbolizan lo que Dios es, y en ‘El Apocalipsis,’ la Ciudad enCuadro simboliza a Dios en acción.

Finalmente vienen dos últimos capítulos – que son parte de La Llave delas Escrituras.

El Capítulo Diecisiete es El GLOSARIO. La luz de los capítulos previosnos ha mostrado que ‘al sustituir la definición material por la definición espiritual...[obtenemos] el sentido espiritual,... que es también el significado original.’ (C&S579:1-8) ‘ElGlosario’ nos muestra cómo esta actividad divina ha estado por siempretransformando a la gente, los eventos y la historia, trasladándolos de la materiay el tiempo, hacia la idea; de la mortalidad a la inmortalidad.

Este capítulo, por medio de los caracteres Bíblicos tales como Abel yAbraham, o como los conceptos de: río y viento, etc., ilustran la operación dela idea espiritual. La mayoría de las definiciones están dichas en forma tantopositiva como negativa, mostrándonos cómo es que la idea espiritual trabaja –permitimos que lo divino sea vertido dentro de la conciencia, permitimos quemore ahí, que haga su trabajo de leudar, y así resuelva la apariencia negativade las cosas. Así, todo el ‘Glosario’ está edificado alrededor de este conceptode cómo las grandes verdades espirituales del ser, cuando estamos concientesde ellas y las aceptamos, trasladan nuestro sentido erróneo en dichas verdades.

Completando este Libro está el Capítulo Dieciocho, LOS FRUTOS DELA CIENCIA CRISTIANA. En esto es en lo que todos estamos interesados,porque ‘por sus frutos los conoceréis.’ (Mat.7:20) El capítulo contiene cartas deindividuos que han sido sanados de toda clase de males, la mayoría físicos,por medio de la lectura del Libro. Retornamos aquí al punto inicial de latotalidad: experimentamos la restauración de la salud cuando aceptamos elLibro como un todo. El Libro concluye, por lo tanto, con la evidencia delhecho de que es un Libro que da fruto por sí mismo, que es un Libro que sedemuestra a sí mismo.

De principio a fin, Ciencia y Salud está transformando nuestro sentidode ‘persona’, ya sea que se le llame yo u otra gente. Si hemos comido dellibrito, como nos lo mandara el ángel en la Revelación (Apocalipsis), si lo

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comimos y hemos digeridos sus enseñanzas, da fruto. ¡Qué historia la que losdieciocho Capítulos despliegan, y qué promesa la que nos ofrecen!

Antes de concluir deseo llamar la atención a ciertos factores dinámicosdel Libro. PRIMERO esta la idea de traslación, el método de trabajo en laCiencia Cristiana, que viene en el capítulo de ‘La Ciencia, la Teología y laMedicina.’ SEGUNDO, en el capítulo de ‘Recapitulación,’ está la respuesta ala pregunta: ‘¿Qué es Dios?’ Aquí se nos dan siete sinónimos para Dios.Luego dichos sinónimos son presentados y desarrollados por medio de losSiete Días de la Creación en el capítulo de ‘Génesis’. TERCERO, finalmenteen ‘El Apocalipsis’ tenemos ‘la ciudad en cuadro.’ Estos elementos básicos– la traslación, los siete sinónimos para Dios, la ciudad en cuadro – se vencomo los fundamentos de la Ciencia Cristiana, cuando es debidamenteestudiada, en su Ciencia y en su sistema.

Algunos de nosotros hemos leído Ciencia y Salud durante años, y lahemos amado y hemos sido inspirados y sanados por ella, sin siquiera darnoscuenta que contiene las traslaciones, o los sinónimos para Dios, o la ciudad encuadro, porque por todo el contenido del libro el poder fue inherente, tal ycomo el poder ha sido inherente en el Cristianismo. En esta época lanecesidad es comprender científicamente, lo que estas grandes leyes de Diosson, para que podamos captarlas con mayor seguridad y verlas operando conmayor precisión.

Donde quiera que haya un grupo de leyes interrelacionadas o deprincipios, eso se define como sistema. En el Prefacio de Ciencia y Salud, laSra. Eddy habla de su ‘descubrimiento del sistema que denominó Christian Science.’(C&Sviii:28-29) Con la Ciencia y el sistema, al continuo desarrollo de la Verdadse le da un ímpetu creciente y claridad a ‘la Verdad (que) no puede ser clisada; (que)se desarrolla indefinidamente’ (No 45:30-31)

Fue a finales de 1930 que un maestro y practicista de la CienciaCristiana en Inglaterra, John W. Doorly, en el transcurso de su profundodiscernimiento del Libro de Texto, comenzó a vislumbrar cuáles eran loselementos o fundamentos de este sistema, y empezó a compartir con susalumnos los resultados de su investigación. Su estudio reveló la naturalezaprofunda y fundamental de la respuesta a la pregunta: ‘¿Qué es Dios?’ Estarespuesta proporciona el primer orden de los siete sinónimos para Dios, eilumina ‘los numerales de la infinidad.’ (C&S520:10) Luego vio que dichosnumerales operan como ‘el cálculo infinito y divino.’ (C&S520:115-16) Pronto se hizoevidente que esos numerales y cálculo, están enlazados para formar un todointegral, ‘la matriz de la inmortalidad.’ (C&S250:6) Esta matriz de la inmortalidad esidéntica a la santa ciudad madre de Apocalipsis 21. En el transcurso de su

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exitosa práctica de curación, él había aprendido que esta traslación científicaes el método esencial y confiable de trabajo en la Ciencia Cristiana.

Así que si somos Cristianos, necesitamos conocer estos fundamentos dela Ciencia. Sin embargo, este énfasis en la Ciencia no nos previene lo que serequiere de nosotros como Cristianos o de lo que se entiende por Cristianismo.La belleza, el espíritu, el vivir y el arte de ser un Cristiano, son vitales. Si seexcluyeran, simplemente estaríamos consintiendo con meros ejerciciosacadémicos, recluyéndonos en una torre de marfil, y volviéndonos cada vezmás ajenos al mundo. Nuestro estudio de estos fundamentos es, por tanto, lallave que nos capacita para ser Cristianos más activos y amorosos, porque nosestaremos volviendo Científicos más efectivos y seguros.

El título completo de Ciencia y Salud, el libro de texto de la CienciaCristiana, es Ciencia y Salud con Clave de las Escrituras. La Clave son losúltimos cuatro capítulos. Aquí es donde se nos muestra que estosfundamentos deben ser hallados en la Biblia. Los Siete Días están en‘Génesis’, y La Ciudad en Cuadro están en ‘Revelación, el Apocalipsis.’ Enel Glosarios estas herramientas son utilizadas para trasladar o sustituir elsentido material con el sentido espiritual de los conceptos de la Biblia. ‘LosFrutos’ entonces, nos dan evidencia del resultado de utilizar esta Clave.

‘La Clave de las Escrituras’ inicia con una cita de Apocalipsis. Elversículo proviene del mensaje a la iglesia de Filadelfia, conocida como ‘laciudad del amor fraterno,’ – seguramente un símbolo de la humanidadcompleta. ‘Eso dice el Santo, el Verdadero. El que tiene la llave de David. El que abrey ninguno cierra, y cierra y ninguno abre: Yo conozco tus obras; he aquí, he puesto delantede ti una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar.’ (Apoc.3:7,8)

La visión final mostrada a Juan el Revelador, y registrada en el últimocapítulo de la Biblia, es que el ángel mensajero ‘me mostró un río limpio de aguade vida, resplandeciente como cristal,... y a uno y otro lado del río, estaba el árbol de lavida,... y las hojas del árbol eran para la sanidad de las naciones.’ (Apoc.22:1,2) Esta visiónes la posibilidad presente del hombre, es la ‘puerta abierta, la cual nadie puedecerrar.’

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